Manjar Sabático
05-06-2021
Romanos 8
1 Ahora, pues, ninguna condenación [hay] para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.
2 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.
3 Porque lo que era imposible para la ley, por cuanto era débil por la carne, Dios, enviando a su Hijo en semejanza de carne de pecado y a causa del pecado, condenó al pecado en la carne;
4 para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.
5 Porque los que son de la carne, en las cosas de la carne piensan; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu.
6 Porque la mente carnal es muerte, pero la mente espiritual, vida y paz:
7 Porque la mente carnal [es] enemistad contra Dios; porque no se sujeta a la ley de Dios, ni tampoco puede.
8 Así que, los que están en la carne no pueden agradar a Dios.
9 Mas vosotros no estáis en la carne, sino en el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, el tal no es de Él.
10 Y si Cristo [está] en vosotros, el cuerpo a la verdad [está] muerto a causa del pecado, pero el Espíritu vive a causa de la justicia.
11 Y si el Espíritu de Aquél que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros, el que levantó a Cristo de entre los muertos, vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.
12 Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne.
13 Porque si vivís conforme a la carne, moriréis, mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis.
14 Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, los tales son hijos de Dios.
15 Porque no habéis recibido el espíritu de servidumbre para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el Espíritu de adopción, por el cual clamamos: Abba Padre.
16 El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu que somos hijos de Dios.
17 Y si hijos, también herederos; herederos de Dios, y coherederos con Cristo; si es que padecemos juntamente [con Él], para que juntamente [con Él] seamos también glorificados.
18 Pues tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no [son] dignas de comparar con la gloria que en nosotros ha de ser manifestada.
19 Porque el anhelo ardiente de las criaturas, espera la manifestación de los hijos de Dios.
20 Porque las criaturas fueron sujetadas a vanidad, no voluntariamente, sino por causa de Aquél que las sujetó en esperanza,
21 porque las mismas criaturas serán libradas de la servidumbre de corrupción, en la libertad gloriosa de los hijos de Dios.
22 Porque sabemos que toda la creación gime a una, y está en dolores de parto hasta ahora;
23 y no sólo [ella], sino que también nosotros que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, [esto es], la redención de nuestro cuerpo.
24 Porque en esperanza somos salvos; mas la esperanza que se ve no es esperanza, pues lo que uno ve ¿por qué esperarlo aún?
25 Mas si lo que no vemos esperamos, con paciencia lo esperamos.
26 Y de la misma manera, también el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos; pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.
27 Y el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos.
28 Y sabemos que todas las cosas ayudan a bien, a los que aman a Dios, a los que conforme a [su] propósito son llamados.
29 Porque a los que antes conoció, también los predestinó [para que fuesen] hechos conforme a la imagen de su Hijo, para que Él sea el primogénito entre muchos hermanos.
30 Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó.
31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios por nosotros, ¿quién contra nosotros?
32 El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con Él todas las cosas?
33 ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios [es el] que justifica.
34 ¿Quién [es] el que condenará? Cristo es el que murió, y más aun, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.
35 ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?
36 Como está escrito: Por causa de ti somos muertos todo el tiempo; somos contados como ovejas de matadero.
37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de Aquél que nos amó.
38 Por lo cual estoy seguro que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra criatura nos podrá separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
Deseado de Todas las Gentes, capítulo 22: “Encarcelamiento y muerte de Juan”
Este capítulo está basado en Mateo 11:1-11; 14:1-11; Marcos 6:17-28; Lucas 7:19-28.
Juan El Bautista había sido el primero en proclamar el reino de Cristo, y fué también el primero en sufrir. Desde el aire libre del desierto y las vastas muchedumbres que habían estado suspensas de sus palabras, pasó a quedar encerrado entre las murallas de una mazmorra, encarcelado en la fortaleza de Herodes Antipas. En el territorio que estaba al este del Jordán, que se hallaba bajo el dominio de Antipas, había transcurrido gran parte del ministerio de Juan. Herodes mismo había escuchado la predicación del Bautista. El rey disoluto había temblado al oír el llamamiento a arrepentirse. “Herodes temía a Juan, sabiendo que era varón justo y santo, … y oyéndole, hacía muchas cosas; y le oía de buena gana.” Juan obró fielmente con él, denunciando su unión inicua con Herodías, la esposa de su hermano. Durante un tiempo, Herodes trató débilmente de romper la cadena de concupiscencia que le ligaba; pero Herodías le sujetó más firmemente en sus redes y se vengó del Bautista, induciendo a Herodes a echarlo en la cárcel. {DTG 185.1}
La vida de Juan había sido de labor activa, y la lobreguez e inactividad de la cárcel le abrumaban enormemente. Mientras pasaba semana tras semana sin traer cambio alguno, el abatimiento y la duda fueron apoderándose de él. Sus discípulos no le abandonaron. Se les permitía tener acceso a la cárcel, y le traían noticias de las obras de Jesús y de cómo la gente acudía a él. Pero preguntaban por qué, si ese nuevo maestro era el Mesías, no hacía algo para conseguir la liberación de Juan. ¿Cómo podía permitir que su fiel heraldo perdiese la libertad y tal vez la vida? {DTG 185.2}
Estas preguntas no quedaron sin efecto. Sugirieron a Juan dudas que de otra manera nunca se le habrían presentado. Satanás se regocijaba al oír las palabras de esos discípulos, y al ver cómo lastimaban el alma del mensajero del Señor. ¡Oh, con cuánta frecuencia los que se creen amigos de un hombre bueno y desean mostrarle su fidelidad, resultan ser sus más peligrosos enemigos! ¡Con cuánta frecuencia, en vez de fortalecer su fe, sus palabras le deprimen y desalientan! {DTG 185.3}
Como los discípulos del Salvador, Juan el Bautista no comprendía la naturaleza del reino de Cristo. Esperaba que Jesús ocupase el trono de David; y como pasaba el tiempo y el Salvador no asumía la autoridad real, Juan quedaba perplejo y perturbado. Había declarado a la gente que a fin de que el camino estuviese preparado delante del Señor, la profecía de Isaías debía cumplirse; las montañas y colinas debían ser allanadas, lo torcido enderezado y los lugares escabrosos alisados. Había esperado que las alturas del orgullo y el poder humano fuesen derribadas. Había señalado al Mesías como Aquel cuyo aventador estaba en su mano, y que limpiaría cabalmente su era, que recogería el trigo en su alfolí y quemaría el tamo con fuego inextinguible. Como el profeta Elías, en cuyo espíritu y poder había venido a Israel, esperaba que el Señor se revelase como Dios que contesta por fuego. {DTG 186.1}
En su misión, el Bautista se había destacado como intrépido reprensor de la iniquidad, tanto entre los encumbrados como entre los humildes. Había osado hacer frente al rey Herodes y reprocharle claramente su pecado. No había estimado preciosa su vida con tal de cumplir la obra que le había sido encomendada. Y ahora, desde su mazmorra, esperaba ver al León de la tribu de Judá derribar el orgullo del opresor y librar a los pobres y al que clamaba. Pero Jesús parecía conformarse con reunir discípulos en derredor suyo, y sanar y enseñar a la gente. Comía en la mesa de los publicanos, mientras que cada día el yugo romano pesaba siempre más sobre Israel; el rey Herodes y su vil amante realizaban su voluntad, y los clamores de los pobres y dolientes ascendían al cielo. {DTG 186.2}
Todo esto le parecía un misterio insondable al profeta del desierto. Había horas en que los susurros de los demonios atormentaban su espíritu y la sombra de un miedo terrible se apoderaba de él. ¿Podría ser que el tan esperado Libertador no hubiese aparecido todavía? ¿Qué significaba entonces el mensaje que él había sido impulsado a dar? Juan había quedado acerbamente chasqueado del resultado de su misión. Había esperado que el mensaje de Dios tuviese el mismo efecto que cuando la ley fué leída en los días de Josías y Esdras;1 que seguiría una profunda obra de arrepentimiento y regreso al Señor. Había sacrificado toda su vida al éxito de su misión. ¿Habría sido en vano? {DTG 186.3}
Perturbaba a Juan el ver que por amor a él sus propios discípulos albergaban incredulidad para con Jesús. ¿Habría sido vana su obra para ellos? ¿Habría sido él infiel en su misión, y habría de ser separado de ella? Si el Libertador prometido había aparecido, y Juan había sido hallado fiel a su misión, ¿no derribaría Jesús el poder del opresor, dejando en libertad a su heraldo? {DTG 187.1}
Pero el Bautista no renunció a su fe en Cristo. El recuerdo de la voz del cielo y de la paloma que había descendido sobre él, la inmaculada pureza de Jesús, el poder del Espíritu Santo que había descansado sobre Juan cuando estuvo en la presencia del Salvador, y el testimonio de las escrituras proféticas, todo atestiguaba que Jesús de Nazaret era el Prometido. {DTG 187.2}
Juan no quería discutir sus dudas y ansiedades con sus compañeros. Resolvió mandar un mensaje de averiguación a Jesús. Lo confió a dos de sus discípulos, esperando que una entrevista con el Salvador confirmaría su fe, e impartiría seguridad a sus hermanos. Anhelaba alguna palabra de Cristo, pronunciada directamente para él. {DTG 187.3}
Los discípulos acudieron a Jesús con la interrogación: “¿Eres tú aquel que había de venir, o esperaremos a otro?” {DTG 187.4}
¡Cuán poco tiempo había transcurrido desde que el Bautista había proclamado, señalando a Jesús: “He aquí el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo.” “Este es el que ha de venir tras mí, el cual es antes de mí.”2 Y ahora pregunta: “¿Eres tú aquel que había de venir?” Era una intensa amargura y desilusión para la naturaleza humana. Si Juan, el precursor fiel, no discernía la misión de Cristo, ¿qué podía esperarse de la multitud egoísta? {DTG 187.5}
El Salvador no respondió inmediatamente a la pregunta de los discípulos. Mientras ellos estaban allí de pie, extrañados por su silencio, los enfermos y afligidos acudían a él para ser sanados. Los ciegos se abrían paso a tientas a través de la muchedumbre; los aquejados de todas clases de enfermedades, algunos abriéndose paso por su cuenta, otros llevados por sus amigos, se agolpaban ávidamente en la presencia de Jesús. La voz del poderoso Médico penetraba en los oídos de los sordos. Una palabra, un toque de su mano, abría los ojos ciegos para que contemplasen la luz del día, las escenas de la naturaleza, los rostros de sus amigos y la faz del Libertador. Jesús reprendía a la enfermedad y desterraba la fiebre. Su voz alcanzaba los oídos de los moribundos, quienes se levantaban llenos de salud y vigor. Los endemoniados paralíticos obedecían su palabra, su locura los abandonaba, y le adoraban. Mientras sanaba sus enfermedades, enseñaba a la gente. Los pobres campesinos y trabajadores, a quienes rehuían los rabinos como inmundos, se reunían cerca de él, y él les hablaba palabras de vida eterna. {DTG 187.6}
Así iba transcurriendo el día, viéndolo y oyéndolo todo los discípulos de Juan. Por fin, Jesús los llamó a sí y los invitó a ir y contar a Juan lo que habían presenciado, añadiendo: “Bienaventurado es el que no fuere escandalizado en mí.” La evidencia de su divinidad se veía en su adaptación a las necesidades de la humanidad doliente. Su gloria se revelaba en su condescendencia con nuestro bajo estado. {DTG 188.1}
Los discípulos llevaron el mensaje, y bastó. Juan recordó la profecía concerniente al Mesías: “Me ungió Jehová; hame enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos abertura de la cárcel; a promulgar año de la buena voluntad de Jehová.”3 Las palabras de Cristo no sólo le declaraban el Mesías, sino que demostraban de qué manera había de establecerse su reino. A Juan fué revelada la misma verdad que fuera presentada a Elías en el desierto, cuando sintió “un grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová: mas Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto: mas Jehová no estaba en el terremoto. Y tras el terremoto un fuego: mas Jehová no estaba en el fuego.”4 Y después del fuego, Dios habló al profeta mediante una queda vocecita. Así había de hacer Jesús su obra, no con el fragor de las armas y el derrocamiento de tronos y reinos, sino hablando a los corazones de los hombres por una vida de misericordia y sacrificio. {DTG 188.2}
El principio que rigió la vida abnegada del Bautista era también el que regía el reino del Mesías. Juan sabía muy bien cuán ajeno era todo esto a los principios y esperanzas de los dirigentes de Israel. Lo que para él era evidencia convincente de la divinidad de Cristo, no sería evidencia para ellos, pues esperaban a un Mesías que no había sido prometido. Juan vió que la misión del Salvador no podía granjear de ellos sino odio y condenación. El, que era el precursor, estaba tan sólo bebiendo de la copa que Cristo mismo debía agotar hasta las heces. {DTG 189.1}
Las palabras del Salvador: “Bienaventurado es el que no fuere escandalizado en mí,” eran una suave reprensión para Juan. Y no dejó de percibirla. Comprendiendo más claramente ahora la naturaleza de la misión de Cristo, se entregó a Dios para la vida o la muerte, según sirviese mejor a los intereses de la causa que amaba. {DTG 189.2}
Después que los mensajeros se hubieron alejado, Jesús habló a la gente acerca de Juan. El corazón del Salvador sentía profunda simpatía por el testigo fiel ahora sepultado en la mazmorra de Herodes. No quería que la gente dedujese que Dios había abandonado a Juan, o que su fe había faltado en el día de la prueba. “¿Qué salisteis a ver al desierto?”—dijo.—“¿Una caña que es meneada del viento?” {DTG 189.3}
Los altos juncos que crecían al lado del Jordán, inclinándose al empuje de la brisa, eran adecuados símbolos de los rabinos que se habían erigido en críticos y jueces de la misión del Bautista. Eran agitados a uno y otro lado por los vientos de la opinión popular. No querían humillarse para recibir el mensaje escrutador del Bautista, y sin embargo, por temor a la gente, no se atrevían a oponerse abiertamente a su obra. Pero el mensajero de Dios no tenía tal espíritu pusilánime. Las multitudes que se reunían alrededor de Cristo habían presenciado las obras de Juan. Le habían oído reprender intrépidamente el pecado. A los fariseos que se creían justos, a los sacerdotales saduceos, al rey Herodes y su corte, príncipes y soldados, publicanos y campesinos, Juan había hablado con igual llaneza. No era una caña temblorosa, agitada por los vientos de la alabanza o el prejuicio humanos. Era en la cárcel el mismo en su lealtad a Dios y celo por la justicia, que cuando predicaba el mensaje de Dios en el desierto. Era tan firme como una roca en su fidelidad a los buenos principios. {DTG 189.4}
Jesús continuó: “Mas ¿qué salisteis a ver? ¿un hombre cubierto de delicados vestidos? He aquí, los que traen vestidos delicados, en las casas de los reyes están.” Juan había sido llamado a reprender los pecados y excesos de su tiempo, y su sencilla vestimenta y vida abnegada estaban en armonía con el carácter de su misión. Los ricos atavíos y los lujos de esta vida no son la porción de los siervos de Dios, sino de aquellos que viven “en las casas de los reyes,” los gobernantes de este mundo, a quienes pertenecen su poder y sus riquezas. Jesús deseaba dirigir la atención al contraste que había entre la vestimenta de Juan y la que llevaban los sacerdotes y gobernantes. Estos se ataviaban con ricos mantos y costosos ornamentos. Amaban la ostentación y esperaban deslumbrar a la gente, para alcanzar mayor consideración. Ansiaban más granjearse la admiración de los hombres, que obtener la pureza del corazón que les ganaría la aprobación de Dios. Así revelaban que no reconocían a Dios, sino al reino de este mundo. {DTG 190.1}
“Mas, ¿qué—dijo Jesús,—salisteis a ver? ¿un profeta? También os digo, y más que profeta. Porque éste es de quien está escrito: He aquí, yo envío mi mensajero delante de tu faz, que aparejará tu camino delante de ti. {DTG 190.2}
“De cierto os digo, que no se levantó entre los que nacen de mujeres otro mayor que Juan el Bautista.” En el anunció hecho a Zacarías antes del nacimiento de Juan, el ángel había declarado: “Será grande delante de Dios.”5 En la estima del cielo, ¿qué constituye la grandeza? No lo que el mundo tiene por tal; ni la riqueza, la jerarquía, el linaje noble, o las dotes intelectuales, consideradas en sí mismas. Si la grandeza intelectual, fuera de cualquier consideración superior, es digna de honor, entonces debemos rendir homenaje a Satanás, cuyo poder intelectual no ha sido nunca igualado por hombre alguno. Pero si el don está pervertido para servir al yo, cuanto mayor sea, mayor maldición resulta. Lo que Dios aprecia es el valor moral. El amor y la pureza son los atributos que más estima. Juan era grande a la vista del Señor cuando, delante de los mensajeros del Sanedrín, delante de la gente y de sus propios discípulos, no buscó honra para sí mismo sino que a todos indicó a Jesús como el Prometido. Su abnegado gozo en el ministerio de Cristo presenta el más alto tipo de nobleza que se haya revelado en el hombre. {DTG 190.3}
El testimonio dado acerca de él después de su muerte, por aquellos que le oyeron testificar acerca de Jesús, fué: “Juan, a la verdad, ninguna señal hizo; mas todo lo que Juan dijo de éste, era verdad.”6 No le fué dado a Juan hacer bajar fuego del cielo, ni resucitar muertos, como Elías lo había hecho, ni manejar la vara del poder en el nombre de Dios como Moisés. Fué enviado a pregonar el advenimiento del Salvador, y a invitar a la gente a prepararse para su venida. Tan fielmente cumplió su misión, que al recordar la gente lo que había enseñado acerca de Jesús, podía decir: “Todo lo que Juan dijo de éste, era verdad.” Cada discípulo del Maestro está llamado a dar semejante testimonio de Cristo. {DTG 191.1}
Como heraldo del Mesías, Juan fué “más que profeta.” Porque mientras que los profetas habían visto desde lejos el advenimiento de Cristo, le fué dado a Juan contemplarle, oír el testimonio del cielo en cuanto a su carácter de Mesías, y presentarle a Israel como el Enviado de Dios. Sin embargo, Jesús dijo: “El que es muy más pequeño en el reino de los cielos, mayor es que él.” {DTG 191.2}
El profeta Juan era el eslabón que unía las dos dispensaciones. Como representante de Dios, se dedicaba a mostrar la relación de la ley y los profetas con la dispensación cristiana. Era la luz menor, que había de ser seguida por otra mayor. La mente de Juan era iluminada por el Espíritu Santo, a fin de que pudiese derramar luz sobre su pueblo; pero ninguna luz brilló ni brillará jamás tan claramente sobre el hombre caído, como la que emanó de la enseñanza y el ejemplo de Jesús. Cristo y su misión habían sido tan sólo obscuramente comprendidos bajo los símbolos y las figuras de los sacrificios. Ni Juan mismo había comprendido plenamente la vida futura e inmortal a la cual nos da acceso el Salvador. {DTG 191.3}
Aparte del gozo que Juan hallaba en su misión, su vida había sido llena de pesar. Su voz se había oído rara vez fuera del desierto. Tuvo el destino de un solitario. No se le permitió ver los resultados de sus propios trabajos. No tuvo el privilegio de estar con Cristo, ni de presenciar la manifestación del poder divino que acompañó a la luz mayor. No le tocó ver a los ciegos recobrar la vista, a los enfermos sanar y a los muertos resucitar. No contempló la luz que resplandecía a través de cada palabra de Cristo, derramando gloria sobre las promesas de la profecía. El menor de los discípulos que contempló las poderosas obras de Cristo y oyó sus palabras, era en este sentido más privilegiado que Juan el Bautista, y por lo tanto se dice que es mayor que él. {DTG 191.4}
Por medio de las vastas muchedumbres que habían escuchado la predicación de Juan, su fama cundió por todo el país. Había un profundo interés por el resultado de su encarcelamiento. Sin embargo, su vida inmaculada y el fuerte sentimiento público en su favor, inducían a creer que no se tomarían medidas violentas contra él. {DTG 192.1}
Herodes creía que Juan era profeta de Dios y tenía la plena intención de devolverle la libertad. Pero lo iba postergando por temor a Herodías. {DTG 192.2}
Esta sabía que por las medidas directas no podría nunca obtener que Herodes consintiese en la muerte de Juan, y resolvió lograr su propósito por una estratagema. En el día del cumpleaños del rey, debía ofrecerse una fiesta a los oficiales del estado y los nobles de la corte. Habría banquete y borrachera. Herodes no estaría en guardia, y ella podría influir en él a voluntad. {DTG 192.3}
Cuando llegó el gran día, y el rey estaba comiendo y bebiendo con sus señores, Herodías mandó a su hija a la sala del banquete, para que bailase a fin de entretener a los invitados. Salomé estaba en su primer florecimiento como mujer; y su voluptuosa belleza cautivó los sentidos de los señores entregados a la orgía. No era costumbre que las damas de la corte apareciesen en estas fiestas, y se tributó un cumplido halagador a Herodes cuando esta hija de los sacerdotes y príncipes de Israel bailó para divertir a sus huéspedes. El rey estaba embotado por el vino. La pasión lo dominaba y la razón estaba destronada. Veía solamente la sala del placer, sus invitados entregados a la orgía, la mesa del banquete, el vino centelleante, las luces deslumbrantes y la joven que bailaba delante de él. En la temeridad del momento, deseó hacer algún acto de ostentación que le exaltase delante de los grandes de su reino. Con juramentos prometió a la hija de Herodías cualquier cosa que pidiese, aunque fuese la mitad de su reino. {DTG 192.4}
Salomé se apresuró a consultar a su madre, para saber lo que debía pedir. La respuesta estaba lista: la cabeza de Juan el Bautista. Salomé no conocía la sed de venganza que había en el corazón de su madre y primero se negó a presentar la petición; pero la resolución de Herodías prevaleció. La joven volvió para formular esta horrible exigencia: “Quiero que ahora mismo me des en un trinchero la cabeza de Juan el Bautista.”7 {DTG 193.1}
Herodes quedó asombrado y confundido. Cesó la ruidosa alegría y un silencio penoso cayó sobre la escena de orgía. El rey quedó horrorizado al pensar en quitar la vida a Juan. Sin embargo, había empeñado su palabra y no quería parecer voluble o temerario. El juramento había sido hecho en honor de sus huéspedes, y si uno de ellos hubiese pronunciado una palabra contra el cumplimiento de su promesa, habría salvado gustosamente al profeta. Les dió oportunidad de hablar en favor del preso. Habían recorrido largas distancias para oír la predicación de Juan y sabían que era un hombre sin culpa, y un siervo de Dios. Pero aunque disgustados por la petición de la joven, estaban demasiado entontecidos para intervenir con una protesta. Ninguna voz se alzó para salvar la vida del mensajero del cielo. Esos hombres ocupaban altos puestos de confianza en la nación y sobre ellos descansaban graves responsabilidades; sin embargo, se habían entregado al banqueteo y la borrachera hasta que sus sentidos estaban embotados. Tenían la cabeza mareada por la vertiginosa escena de música y baile, y su conciencia dormía. Con su silencio, pronunciaron la sentencia de muerte sobre el profeta de Dios para satisfacer la venganza de una mujer relajada. {DTG 193.2}
Herodes esperó en vano ser dispensado de su juramento; luego ordenó, de mala gana, la ejecución del profeta. Pronto fué traída la cabeza de Juan a la presencia del rey y sus huéspedes. Sellados para siempre estaban aquellos labios que habían amonestado fielmente a Herodes a que se apartase de su vida de pecado. Nunca más se oiría esa voz llamando a los hombres al arrepentimiento. La orgía de una noche había costado la vida de uno de los mayores profetas. {DTG 193.3}
¡Cuán a menudo ha sido sacrificada la vida de los inocentes por la intemperancia de los que debieran haber sido guardianes de la justicia! El que lleva a sus labios la copa embriagante se hace responsable de toda la injusticia que pueda cometer bajo su poder embotador. Al adormecer sus sentidos, se incapacita para juzgar serenamente o para tener una clara percepción de lo bueno y de lo malo. Prepara el terreno para que por su medio Satanás oprima y destruya al inocente. “El vino es escarnecedor, la cerveza alborotadora; y cualquiera que por ello errare, no será sabio.” Por esta causa “la justicia se puso lejos; … y el que se apartó del mal, fué puesto en presa.”8 Los que tienen jurisdicción sobre la vida de sus semejantes deberían ser tenidos por culpables de un crimen cuando se entregan a la intemperancia. Todos los que aplican las leyes deben ser observadores de ellas. Deben ser hombres que ejerzan dominio propio. Necesitan tener pleno goce de sus facultades físicas, mentales y morales, a fin de poseer vigor intelectual y un alto sentido de la justicia. {DTG 194.1}
La cabeza de Juan el Bautista fué llevada a Herodías, quien la recibió con feroz satisfacción. Se regocijaba en su venganza y se lisonjeaba de que la conciencia de Herodes ya no le perturbaría. Pero su pecado no le dió felicidad. Su nombre se hizo notorio y aborrecido, mientras que Herodes estuvo más atormentado por el remordimiento que antes por las amonestaciones del profeta. La influencia de las enseñanzas de Juan no se hundió en el silencio; había de extenderse a toda generación hasta el fin de los tiempos. {DTG 194.2}
El pecado de Herodes estaba siempre delante de él. Constantemente procuraba hallar alivio de las acusaciones de su conciencia culpable. Su confianza en Juan era inconmovible. Cuando recordaba su vida de abnegación, sus súplicas fervientes y solemnes, su sano criterio en los consejos, y luego recordaba cómo había hallado la muerte, Herodes no podía encontrar descanso. Mientras atendía los asuntos del Estado, recibiendo honores de los hombres, mostraba un rostro sonriente y un porte digno, pero ocultaba un corazón ansioso, siempre temeroso de que una maldición pesara sobre él. {DTG 194.3}
Herodes había quedado profundamente impresionado por las palabras de Juan, de que nada puede ocultarse de Dios. Estaba convencido de que Dios estaba presente en todo lugar, que había presenciado la orgía de la sala del banquete, que había oído la orden de decapitar a Juan, y había visto la alegría de Herodías y el insulto que infligió a la cercenada cabeza del que la había reprendido. Y muchas cosas que Herodes había oído de los labios del profeta hablaban ahora a su conciencia más distintamente de lo que lo hiciera su predicación en el desierto. {DTG 195.1}
Cuando Herodes oyó hablar de las obras de Cristo, se perturbó en gran manera. Pensó que Dios había resucitado a Juan de los muertos, y lo había enviado con poder aun mayor para condenar el pecado. Temía constantemente que Juan vengase su muerte condenándole a él y a su casa. Herodes estaba cosechando lo que Dios había declarado resultado de una conducta pecaminosa: “Corazón tembloroso, y caimiento de ojos, y tristeza de alma: y tendrás tu vida como colgada delante de ti, y estarás temeroso de noche y de día, y no confiarás de tu vida. Por la mañana dirás: ¡Quién diera fuese la tarde! y a la tarde dirás: ¡Quién diera fuese la mañana! por el miedo de tu corazón con que estarás amedrentado, y por lo que verán tus ojos.”9 Los pensamientos del pecador son sus acusadores; no podría sufrir tortura más intensa que los aguijones de una conciencia culpable, que no le deja descansar ni de día ni de noche. {DTG 195.2}
Para muchos, un profundo misterio rodea la suerte de Juan el Bautista. Se preguntan por qué se le debía dejar languidecer y morir en la cárcel. Nuestra visión humana no puede penetrar el misterio de esta sombría providencia; pero ésta no puede conmover nuestra confianza en Dios cuando recordamos que Juan no era sino partícipe de los sufrimientos de Cristo. Todos los que sigan a Cristo llevarán la corona del sacrificio. Serán por cierto mal comprendidos por los hombres egoístas, y blanco de los feroces asaltos de Satanás. El reino de éste se estableció para destruir ese principio de la abnegación, y peleará contra él dondequiera que se manifieste. {DTG 195.3}
La niñez, juventud y edad adulta de Juan se caracterizaron por la firmeza y la fuerza moral. Cuando su voz se oyó en el desierto diciendo: “Aparejad el camino del Señor, enderezad sus veredas,”10 Satanás temió por la seguridad de su reino. El carácter pecaminoso del pecado se reveló de tal manera que los hombres temblaron. Quedó quebrantado el poder que Satanás había ejercido sobre muchos que habían estado bajo su dominio. Había sido incansable en sus esfuerzos para apartar al Bautista de una vida de entrega a Dios sin reserva; pero había fracasado. No había logrado vencer a Jesús. En la tentación del desierto, Satanás había sido derrotado, y su ira era grande. Resolvió causar pesar a Cristo hiriendo a Juan. Iba a hacer sufrir a Aquel a quien no podía inducir a pecar. {DTG 195.4}
Jesús no se interpuso para librar a su siervo. Sabía que Juan soportaría la prueba. Gozosamente habría ido el Salvador a Juan, para alegrar la lobreguez de la mazmorra con su presencia. Pero no debía colocarse en las manos de sus enemigos, ni hacer peligrar su propia misión. Gustosamente habría librado a su siervo fiel. Pero por causa de los millares que en años ulteriores debían pasar de la cárcel a la muerte, Juan había de beber la copa del martirio. Mientras los discípulos de Jesús languideciesen en solitarias celdas, o pereciesen por la espada, el potro o la hoguera, aparentemente abandonados de Dios y de los hombres, ¡qué apoyo iba a ser para su corazón el pensamiento de que Juan el Bautista, cuya fidelidad Cristo mismo había atestiguado, había experimentado algo similar! {DTG 196.1}
Se le permitió a Satanás abreviar la vida terrenal del mensajero de Dios; pero el destructor no podía alcanzar esa vida que “está escondida con Cristo en Dios.”11 Se regocijó por haber causado pesar a Cristo; pero no había logrado vencer a Juan. La misma muerte le puso para siempre fuera del alcance de la tentación. En su guerra, Satanás estaba revelando su carácter. Puso de manifiesto, delante del universo que la presenciaba, su enemistad hacia Dios y el hombre. {DTG 196.2}
Aunque ninguna liberación milagrosa fué concedida a Juan, no fué abandonado. Siempre tuvo la compañía de los ángeles celestiales, que le hacían comprender las profecías concernientes a Cristo y las preciosas promesas de la Escritura. Estas eran su sostén, como iban a ser el sostén del pueblo de Dios a través de los siglos venideros. A Juan el Bautista, como a aquellos que vinieron después de él, se aseguró: “He aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.”12 {DTG 196.3}
Dios no conduce nunca a sus hijos de otra manera que la que ellos elegirían si pudiesen ver el fin desde el principio, y discernir la gloria del propósito que están cumpliendo como colaboradores suyos. Ni Enoc, que fué trasladado al cielo, ni Elías, que ascendió en un carro de fuego, fueron mayores o más honrados que Juan el Bautista, que pereció solo en la mazmorra, “A vosotros es concedido por Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él.”13 Y de todos los dones que el Cielo puede conceder a los hombres, la comunión con Cristo en sus sufrimientos es el más grave cometido y el más alto honor. {DTG 197.1}
Testimonio: 19-08-2017 #01
Amados, el 19 de agosto del 2017, tuve otro sueño. Fui llevada a este lugar donde estaba habiendo un seminario de la iglesia, en la Asociación Adventista del Este, aquí, en Puerto Rico. Allí, al llegar, vi cómo tenían todo listo como para un sorteo. Entonces yo me senté en una mesa y una hermana me preguntó por mis testimonios, antes expuestos, y me urgía que los contara en público. Pero en ese momento, mientras ella me urgía para que yo los contara en público, el presidente de dicha asociación me llamó fuera para hablar conmigo. Y me dijo que él había cometido un error al dejarme entrar pues ahora todos se habían ido porque ellos declaraban que yo era una hereje. {Daisy Escalante: 19-08-2017 #01, es.p1}
Entonces me hizo una pregunta: “¿por qué dices tantas cosas feas de la iglesia?” A lo que yo le contesté, en el sueño: “yo nunca pedí que esto ocurriera, pero ocurrió. El Rey del universo, nuestro Salvador, no está contento con lo que pasa en la organización de la iglesia. Se detiene su Palabra de verdad, se predica la mentira. ¿Cómo pueden hacer tal cosa?” —yo le decía—, “¿y crucificar al Rey de reyes y al Señor de señores, y pensar que son siervos de Dios?”, le decía yo a él. Entonces le seguía diciendo: “¡son siervos de Lucifer!” Entonces, en ese momento, él se levantó y me dijo: “¡vete!, tu suerte está echada. Nunca más deseo verte”. {Daisy Escalante: 19-08-2017 #01, es.p2}
Entonces yo salí de allí, muy triste. Pasé por el salón donde debía haberse llevado aquel seminario, pero estaba vacío, así que salí por el pasillo y sólo una persona aguardaba allí con mi familia. A al llegar donde ellos, yo les decía a ellos: “pero, ¿qué pasa? Por más que trato de decirles no me hacen caso, yo no sé qué voy a hacer”. Entonces, la persona que estaba allí con mi familia, que era una dama, me dijo: “no te preocupes, yo te creo, yo sé que Jesús compondrá las cosas. ¡Vámonos, vámonos de aquí!” Entonces, yo comencé a llorar, porque salí de aquel lugar sintiéndome vencida. Porque no me habían podido escuchar, ¡porque nadie quiso!, y todos se fueron. {Daisy Escalante: 19-08-2017 #01, es.p3}
Entonces, pues, ya nos dirigíamos a la casa de esta hermana para llevarla. Fuimos a un barrio, que era donde ella vivía, y todas las casas de aquel lugar, a excepción de la de ella y dos más, estaban deshabitadas; todo era desolación, ruina y desastre. Entonces le pregunté a la hermana: “¿por qué usted está viviendo aquí?” Entonces ella, en el sueño, me contestó: “es que el tiempo pasó y yo no obedecí; debí haber salido, más ahora estoy atrapada”. Entonces yo le dije: “pero usted no tiene por qué estar aquí, venga con nosotros, ¡vámonos!”. Pero cuando yo le dije eso, ella entró rápido a su casa, cerró las rejas de su entrada, entonces, la llave con que ella cerró las rejas, se la tragó. Y me dijo llorando: “¡vete, mi suerte está echada!” {Daisy Escalante: 19-08-2017 #01, es.p4}
Entonces, cuando yo vi eso, ¡me desesperé tanto! ¡tanto! ¡Porque yo veía la desolación llegando a su casa! Entonces, yo comencé a luchar con la puerta, con aquellas rejas, para poder abrirla, pero no podía abrirla. Entonces, en ese momento de mi desesperación, que estaba tratando de abrir las rejas porque la desolación ya llegaba, casi, a la casa de la hermana, en eso, apareció mi acompañante y me dijo: “es hora, vámonos. Ella sabía, el Espíritu Santo le advirtió apelando a su corazón, más ella hizo caso a hombres antes que a Dios. Ella reconoce su error, más ahora es muy tarde”. Entonces comencé a llorar, estaba desesperada porque yo conocía a esa hermana, la pude reconocer en el sueño. {Daisy Escalante: 19-08-2017 #01, es.p5}
Entonces fui llevada a un lugar, estaba alto el lugar, allí me sentía segura, pero yo veía la desolación que venía y arropaba en diferentes lugares. Entonces mi acompañante me dijo: “este es el reino que quería satanás: desolación. Y muchos, aún a sabiendas, tomaron su lado y ahora, ya, para ellos es muy tarde”. Entonces, en ese momento comencé a llorar, ya no podía más, caí al suelo, estaba exhausta y decía: “¡Señor!, ¿para qué? ¿para qué me muestras esto si no les puedo ayudar?” Entonces, en este momento, mi acompañante puso su mano sobre mi hombro y me dijo: “levántate, ten ánimo, no temas. Ve y dile a los que deseen escuchar, que el tiempo es hoy, pues mañana es tarde. Que todo está dispuesto, que se alisten, porque la redención está cerca”. {Daisy Escalante: 19-08-2017 #01, es.p6}
Entonces amados, ahí desperté. Comencé a orar, y a pedirle al Señor que nos prepare, y que nosotros nos dejemos preparar, para esos momentos tan difíciles que se nos avecinan. Ojalá podamos escuchar la voz de nuestro Dios antes de que sea demasiado tarde. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 19-08-2017 #01, es.p7}
Testimonio: 28-07-2018
Amados, 28 de julio 2018, en sueños fui llevada a un gran monte. Allí, mi acompañante me indicó que mirara al cielo. Miré y vi las estrellas, la luna, ¡era una noche hermosa! Repentinamente, la luna se enrojeció y gotas rojas caían de ella. Entonces fui elevada más arriba del mundo y vi cómo estas gotas rojas caían en todo lugar, sin parar, con gran intensidad. Donde caían las gotas rojas la calamidad era de esperar. Vi gran confusión, había miedo, había terror. Mi acompañante me dijo: observa, y me señaló la luna”. Miré y vi cómo la velocidad de las gotas rojas aumentaba y, mientras más caían en la tierra, más intensa era la calamidad. Aumentaron las calamidades alrededor de toda la tierra; la tierra temblaba como las hojas cuando son sopladas por el viento y el mar ya no se mantenía en su asiento. El aire, el aire estaba contaminado con el fuego, con azufre que destilaba de los volcanes. Vi cómo manos humanas dirigidas por el Destructor quebraban la tierra y despertaban estos destructores malignos. En ese momento exclamé, y dije: “¡Oh Señor, no lo permitas, detenlos!” {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p1}
Entonces mi acompañante contestó: “es su hora, el permiso está concedido y ya nada lo detiene; sólo el gran Yo Soy, al final del tiempo”. Entonces vi cómo, muchos, corrían despavoridos por la gran destrucción, era como si la naturaleza ya no fuera digna de confianza pues el terror se apoderaba de todos. Entonces, de repente, de repente surgió un gran temblor, un rugido, una llamarada, vi cómo todos gritaban ante tal evento: desolación, catástrofe y muerte por doquier. El sol ya no brillaba con su gran luz, pues su luz se opacó. Las aguas se volvieron amargas y el aire que se respiraba era muy asfixiante. En el recorrido por la tierra vi: gran mortandad, peste, dolor; también vi hambre y gran confusión. Todos clamaban a su dios, más éste no les respondía; y su agonía iba creciendo. Mis ojos se abrieron aún más y vi cómo los aires estaban llenos de ángeles malignos; todos con permiso de herir, saquear y matar. No había escapatoria en sus garras. Vi, entonces, uno más grande y autoritario decir: “es nuestra hora y podremos atacar con gran ira; cosechemos antes de que sea tarde”. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p2}
La muerte comenzó a cubrir la tierra y, [en] todo tipo de gente y lugar, había calamidad. Mis pies me dejaron y yo caí desmayada, y mi acompañante me levantó y me dijo: “ánimo, ya casi el tiempo es cumplido y todo acabará. Haced esto y viviréis”. Entonces me dio dos versículos: “Efesios 4:2-6 y Habacuc 2:4”. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p3}
Entonces dije: “¡Señor mío, mira a tu pueblo y cúbrelo!” Entonces me contestó: “Miqueas 2. No temas, los del recogimiento están seguros porque la cabeza de ellos es Cristo Jesús”, me dijo. Y, entonces, me fue mostrado cómo la mayoría del pueblo SDA [Seven Day Adventist], muchos en número, eran caídos presa del terror, dolor y muerte. Vi cómo muchos iban a sus líderes, muchos de ellos grandes en nombre y exaltados por muchos; iban a buscar consuelo y refugio más, éstos, padecían su misma situación. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p4}
Este caos no cesó y un viento recio recorrió la tierra; el hambre lo siguió. Vi un ser grande descender del cielo. Este brillaba y todos estaban atónitos. Lo comenzaron a observar y éste bajó a la tierra y proclamó paz. Vi un hombre salir a su encuentro y lo entró en sus grandes y costosos aposentos. Este hombre recibió instrucciones de este ser y salió proclamando. Y decía en alta voz: “sé cómo parar esto, todo acabará si respetamos y adoramos todos juntos en el día del señor, como él os lo ha venido a anunciar”. Entonces vi cómo la grande multitud le contestó: “amén”. Entonces yo preguntaba: “¿qué día?” Entonces, él contestó: “domingo”. Entonces mis ojos se abrieron, el ser vestido de luz, en su real condición, junto al hombre de pecado. Y me dijo mi acompañante: “lee”. Entonces vi un escrito, decía: “Apocalipsis 14:9”. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p5}
Entonces mi ser tembló y dije: “¡Señor, el tiempo es cumplido y el pueblo no escuchó tus ruegos y ahora ¿qué pasará con ellos?!” Y Él me contestó: “Mi pueblo escuchó y actuó, pues los entendidos entendieron, prefirieron aflicción en vez de pasarla bien. Entonces, ahora, serán guardados en la hora de prueba que viene al mundo entero. Mis hijos son fieles a costa de todo, aun de su propia vida. Mis señales os di y todos las vieron; marqué el tiempo en los cielos, como en Jerusalén, más sólo los entendidos se salvaron de la masiva destrucción. Asimismo, y aún más, es ahora. No hay palabra para un sordo ni señales para un ciego porque Laodicea no escuchó y durmió en tiempo de preparación. Ahora, el tiempo es cumplido y, ¿cómo escapará?” —preguntó. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p6}
Entonces vi, otra vez, el mundo agitado como una caña al viento y sus moradores, en su mayoría, adoraron al ángel del mal, instigados por la bestia, la imagen, y el falso profeta. Oí una voz que circundó los cielos y recorrió la tierra diciendo: “¡humillaos, humillaos, oh hijos del Dios altísimo y seréis protegidos de la ira venidera! Y adorad a Aquel que hizo el cielo, la tierra y todo lo que en él habita y no toquéis lo inmundo, y seréis preservados de la ira venidera”. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p7}
Entonces, escuché un gran estruendo, muchas explosiones, y vi cómo en la tierra una gran guerra afloraba, instigados por el ángel maligno, para exterminar todo a su paso. Entonces mi acompañante me dijo: “es su hora. Alistaos con la armadura del príncipe Emanuel: ayunad, orad, rogad para que vuestras ropas sean libres sin manchas, pues sólo así seréis vindicados”. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p8}
Entonces me dijo: “Romanos 8:23. Apartaos de lo inmundo”, me siguió diciendo, “y cuidad con celo mis sábados pues, el que livianamente (así no) hiciere, de cierto morirá”. Entonces me dijo: “Deuteronomio 6:1-3, Éxodo 20:9-11, Éxodo 23:1-3, Éxodo 23:20-25, Éxodo 15:26”. Me dijo: “exhorta en toda justicia y no desmayes, pues el tiempo es casi cumplido; sólo los entendidos entenderán y, si bien hicieren, recibirán la corona de la vida”. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p9}
En ese momento, ahí, desperté. Desperté con una sensación tan terrible de todas las cosas que ya, casi, tenemos aquí encima. Hemos pasado, anoche, una luna de sangre acá donde estamos, en Puerto Rico. No, no se vio; no se vio en Estados Unidos tampoco, pero pudimos apreciar por los medios cómo se veía en otros lugares. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p10}
Amados, el Señor nos está dando señales de todas las maneras posibles, ¡por favor, alistémonos bajo la bandera de Cristo Jesús! ¡No hay escapatoria en este mundo a lo que se nos viene encima, solamente Cristo Jesús, su poder, su gracia es la única que nos puede extender la mano de salvación! Yo espero que cada uno de nosotros aprovechemos esa oportunidad. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 28-07-2018, es.p11}
Efesios 4:2-6
2 con toda humildad y mansedumbre, con paciencia soportándoos los unos a los otros en amor,
3 solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz.
4 Un cuerpo, y un Espíritu, como sois también llamados en una misma esperanza de vuestro llamamiento.
5 Un Señor, una fe, un bautismo,
6 un Dios y Padre de todos, el cual [es] sobre todo, y por todo, y en todos vosotros.
Habacuc 2:4
4 He aquí se enorgullece aquel cuya alma no es recta en él; mas el justo por su fe vivirá.
Miqueas 2
1 ¡Ay de los que piensan iniquidad, y de los que fabrican el mal en sus camas! Cuando viene la mañana lo ponen en obra, porque tienen en su mano el poder.
2 Y codiciaron las heredades, y [las] robaron; y casas, y [las] tomaron; oprimieron al hombre y a su casa, al hombre y a su heredad.
3 Por tanto, así dice Jehová: He aquí, yo pienso sobre esta familia un mal del cual no sacaréis vuestros cuellos, ni andaréis erguidos; porque el tiempo [será] malo.
4 En aquel tiempo se levantará sobre vosotros refrán, y se endechará una amarga lamentación, diciendo: Del todo fuimos destruidos; Él ha cambiado la porción de mi pueblo. ¡Cómo nos quitó nuestros campos! Los dio y los repartió a otros.
5 Por tanto, no tendrás quien eche cordel para suerte en la congregación de Jehová.
6 No profeticéis, [dicen a los que] profetizan; no les profetizarán, para no llevar la vergüenza
7 Tú que te dices casa de Jacob, ¿se ha acortado el Espíritu de Jehová? ¿[Son] éstas sus obras? ¿Mis palabras no hacen bien al que camina rectamente?
8 El que ayer era mi pueblo, se ha levantado como enemigo; tras las vestiduras quitasteis las capas atrevidamente a los que pasaban, como los que vuelven de la guerra.
9 A las mujeres de mi pueblo echasteis fuera de las casas de sus delicias; a sus niños quitasteis mi perpetua alabanza.
10 Levantaos, y andad, pues éste no [es vuestro] reposo; y porque está contaminado, [os] destruirá con grande destrucción.
11 Si alguno que anda en el espíritu de falsedad mintiere, [diciendo]: Yo te profetizaré de vino y de sidra; este tal será profeta a este pueblo.
12 De cierto te reuniré todo, oh Jacob; ciertamente recogeré el remanente de Israel; los reuniré como ovejas de Bosra, como rebaño en medio de su aprisco; harán estruendo por [la multitud] de hombres.
13 Subirá rompedor delante de ellos; romperán y pasarán la puerta, y saldrán por ella: y su rey pasará delante de ellos, y a la cabeza de ellos Jehová.
Apocalipsis 14:9
9 Y el tercer ángel los siguió, diciendo en alta voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente, o en su mano,
Romanos 8:23
23 y no sólo [ella], sino que también nosotros que tenemos las primicias del Espíritu, nosotros también gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción, [esto es], la redención de nuestro cuerpo.
Deuteronomio 6:1-3
1 Éstos, pues, son los mandamientos, estatutos y decretos que Jehová vuestro Dios mandó que os enseñase, para que los pongáis por obra en la tierra a la cual pasáis vosotros para poseerla:
2 Para que temas a Jehová tu Dios, guardando todos sus estatutos y sus mandamientos que yo te mando, tú, y tu hijo, y el hijo de tu hijo, todos los días de tu vida, y que tus días sean prolongados.
3 Oye pues, oh Israel, y cuida de ponerlos por obra, para que te vaya bien, y seáis multiplicados, como te ha prometido Jehová el Dios de tus padres, en la tierra que fluye leche y miel.
Éxodo 20:9-11
9 Seis días trabajarás, y harás toda tu obra;
10 pero el séptimo día [es] el sábado de Jehová tu Dios: no harás en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu sierva, ni tu ganado, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas.
11 Porque [en] seis días hizo Jehová el cielo y la tierra, y el mar y todas las cosas que en ellos [hay], y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el día sábado y lo santificó.
Éxodo 23:1-3
1 No admitirás falso rumor. No te concertarás con el impío para ser testigo falso.
2 No seguirás a los muchos para mal hacer; ni responderás en litigio inclinándote a los más para hacer agravios;
3 ni al pobre distinguirás en su causa.
Éxodo 23:20-25
20 He aquí yo envío el Ángel delante de ti para que te guarde en el camino, y te introduzca en el lugar que yo he preparado.
21 Guárdate delante de Él, y oye su voz; no le seas rebelde; porque Él no perdonará vuestra rebelión: porque mi nombre está en Él.
22 Pero si en verdad oyeres su voz, e hicieres todo lo que yo te dijere, seré enemigo a tus enemigos, y afligiré a los que te afligieren.
23 Porque mi Ángel irá delante de ti, y te introducirá al amorreo, y al heteo, y al ferezeo, y al cananeo, y al heveo, y al jebuseo, a los cuales yo destruiré.
24 No te inclinarás a sus dioses, ni los servirás, ni harás como ellos hacen; antes los destruirás del todo, y quebrarás enteramente sus estatuas.
25 Mas a Jehová vuestro Dios serviréis, y Él bendecirá tu pan y tus aguas; y yo quitaré toda enfermedad de en medio de ti.
Éxodo 15:26
26 y dijo: Si oyeres atentamente la voz de Jehová tu Dios, e hicieres lo recto delante de sus ojos, y dieres oído a sus mandamientos, y guardares todos sus estatutos, ninguna enfermedad de las que envié a los egipcios te enviaré a ti; porque yo soy Jehová tu Sanador.
Testimonio: 01-11-2018
Amados, noviembre 1, 2018. En sueños he sido testigo de cómo el mal se entreteje dentro de nuestra mente y, si no luchamos, agarrados del Señor, contra esto, éste nos va a adormecer y nos va a vencer. {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p1}
En sueños, yo veía una escuela con muchos salones de clase, cada uno de ellos con su profesor y alumnos. Vi cómo, estos alumnos eran enseñados, por estos profesores, con los principios morales más bajos que nunca hubo antes en nuestra sociedad. Vi que estos profesores no eran cristianos, pues su hablar lo demostraba. Y yo observé los estudiantes y, éstos, se gozaban de sus conversaciones. Y vi salir estos estudiantes del salón, estos vivían depravando sus vidas entre ellos mismos, en todos los sentidos. {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p2}
Entonces fui en ese momento llevada a otra escuela, esta era adventista. Vi los salones, también con alumnos y maestros. Vi cómo, estos maestros, no vivían la norma alta de la verdad, y sus vidas no reflejaban al Cristo crucificado. Entonces vi, luego, los alumnos, que, sin freno alguno, eran practicantes de las mismas abominaciones antes descritas. Más vi que algo los diferenciaba. Estos, los últimos, tenían un manto de piedad en donde envolvían sus abominaciones para que los demás no lo notaran. Mi acompañante me dijo: vamos”. {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p3}
Fui entonces, amados, a un lugar, era una casa grande con dos pisos, muchas habitaciones yo veía allí. Entonces, entré a una de ellas, y vi padres y madres de rodillas, orando y clamando a Dios por sus hijos, y por dirección divina. Luego, éstos, puestos de pie comenzaban, con mucho temor y temblor, a caminar hasta sus hijos; y éstos, los hijos, se veían felices y podían escudriñar la Palabra de Dios con mucho interés. Vi cómo, en cada cuarto de aquella casa, muchas familias abrían la Palabra de Dios como regla de fe ante sus hijos. Mi corazón se regocijó ante aquellas escenas, y mi acompañante me dijo: “observa”. Mis ojos se abrieron y pude ver ángeles ministradores alrededor de estas familias. Vi cómo uno de ellos hablaba al oído del padre educador, y éste hablaba transmitiendo a sus hijos la Palabra de Verdad. Vi ángeles sentados, también, al lado de los niños que, con alegría, recibían el evangelio de salvación. ¡Yo estaba feliz, amados, de ver tal escena! Entonces, mi acompañante pronto me dijo: “es hora, ¡vámonos!” {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p4}
La escena cambió y vi cómo este mundo se envolvía en densa oscuridad y gran confusión. Vi muchas personas desesperadas por alimento, por saqueos, matanzas, y la tierra temblaba como un borracho por todos lados. El caos, amados, reinaba por todo lugar, yo veía. Y vi muchos jóvenes, adolescentes y niños correr junto a sus padres y profesores; éstos, estaban con mucho miedo, con mucha desesperación. Mientras esto pasaba ante mí, yo pude observar algo que llamó mucho mi atención. Vi los padres que habían desplegado la Palabra de Verdad, y sus hijos, que estaban [siendo] custodiados por ángeles de luz. Éstos, caminaban entre las montañas sin ningún temor. Los escuchaba cantar, repetir salmos, y paraban para orar, la paz de ellos era grande y sus rostros estaban tranquilos. Entonces, yo los vi llegar a chozas muy pequeñas, pero allí se gozaban de haber obedecido el mensaje de verdad, y allí tenían todo lo necesario para vivir. Y, aunque el caos reinaba por todos lados, ellos alababan a Dios por sus cuidados. {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p5}
Entonces, mi acompañante me dijo: “muy pronto, todos se desquiciará, aún más de lo que ves hoy, y solo una estricta obediencia salvará al real pueblo de Dios. ¡No hay tiempo que perder! ¡Apresuraos, pues la hora es casi venida! ¿Acaso podrá un jugador ganar sin entrenamiento? ¿acaso un corredor llegaría a tiempo a la meta sin haberse ejercitado antes?” Entonces, hizo una pausa, y dijo: “nadie que no se ejercite ahora en obediencia y práctica, podrá subsistir. La prueba será muy grande y severa. Sólo los que estén realmente preparados, sólo, solamente ellos, podrán subsistir”. Entonces, en ese momento, hizo una pregunta: “¿qué, pues, necesita el mortal para subsistir?” Me dijo cuatro cosas: “alimento, agua, techo y abrigo”. {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p6}
Entonces, en ese momento, mientras escuché estas cuatro cosas que se me mencionaron, vinieron muchas cosas a mi mente, instrucciones que se me habían dado antes, como: {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p7}
– que debía ser una casa pequeña, un terreno amplio donde pudiéramos sembrar, trabajar, en la agricultura;
– que tuviese agua abundante para nuestro aseo personal, para lo que necesitamos de tomar y para la siembra allí;
– que podamos tener nuestro huerto,
– sitio donde nadie quiere estar para que no seamos privados de adorar a nuestro Dios;
– que estén en familia, que no sea una sola familia, sino que sean varias familias, para que una a las otras se apoyen y puedan estar caminando juntos en fe.
Y todas estas cosas se me venían a la mente mientras se me citaron estas tres cosas que necesita el hombre mortal para subsistir. Entonces me siguió diciendo: “estad prestos, pues la hora es casi venida. Buscad al Señor, nuestro Dios grande y poderoso, mientras éste pueda ser hallado. Apartaos de los que adormecen vuestro entendimiento. Haced sacrificios ante Jehová y sed leales a Su Palabra, esto es lo único que garantizará vuestra salvación. La vacilación y el letargo serán una condena para el que lo practique.” {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p8}
Yo meditaba en todo esto, amados, cuando, de repente, hice una pregunta: “¿quién nos salva?” Y contestó: “¿no es Cristo Jesús? No prestéis oído a espíritus seductores de demonios, pues estos saben que morirán para siempre. ¡Apartaos, apartaos, apartaos!” — dijo—, “¡Id a las montañas! ¡preparaos! El tiempo es casi venido y la preparación ardua. ¿Cómo pretendéis estar preparados para la apretura cuando ésta venga? Prestad oído al que murió por vosotros y vuestra felicidad será sólo en Él. Apartaos del que dice: ‘aún no es tiempo de tal preparación’, pues para perdición de ambos es dicho esto. ¡Apartaos de las ciudades! ¡Apartaos de la apostasía, que es abominación a Dios y mutila vuestras almas! ¡Apartaos de todo mal proceder en vuestras vidas! Vivid en sacrificio de vuestras vidas ante el Eterno, y Él os sostendrá.” {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p9}
Entonces, me dijo: “recordad a Enoc, Moisés y Elías, recordad a Juan el Bautista y recordad a vuestro Maestro aquí en la tierra. Seguid su ejemplo y no toquéis lo inmundo. Sólo así podréis ser salvos en la hora de prueba que sobrecogerá al mundo entero. Despertaos de vuestra liviandad y letargo” —decía. “Dad frutos dignos de arrepentimiento y, sólo así, obtendréis la vida eterna. Ayunad, orad y clamad por vuestra santidad. Magullad vuestro cuerpo y ponedlo en servidumbre ante el Eterno. Pedid, con ruego y súplica, que el yo muera en vuestras vidas pues, de otra manera, no habrá salvación para lo que [se] os avecina. Haced esto y viviréis”. {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p10}
Amados, quedé con mi corazón muy emocionado y, a la misma vez apretado al escuchar estas palabras y ver esto que el Señor me mostró, en este sueño. Vale la pena, amados hermanos, creerle a Dios. Vale la pena, amados hermanos, seguir las instrucciones de Dios. Quiera Dios que no haya nada en este mundo que nos ataje, que nos impida, que nos cohíba, de hacer la voluntad de Dios. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 01-11-2018, es.p11}
Testimonio: 09-11-2018
Amados, noviembre 9, 2018. Estaba yo meditando en todas las cosas que están pasando en el mundo, que son una evidencia contundente de lo que estamos viviendo: estamos viviendo en tiempos apocalípticos, muy ciertamente. Hemos visto cómo, todo este desenlace, está llevándonos al fin de lo que la Palabra de Dios ya nos había estipulado, el Conflicto de los Siglos, Eventos de los Últimos Días, todos ellos. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p1}
Estaba yo meditando acerca del paralelismo del Conflicto de los Siglos, el capítulo 1, pues muchas personas dirán: ¿por qué estás aplicando los 1260 días?” No, no estoy aplicando nada, sencillamente no podemos ser ciegos y no darnos cuenta de que allí existen tres años y medio. Eso es lo que estamos hablando, quien quiera decir otra cosa, pues, está poniendo palabras que no son las que estamos diciendo. Otra de las cosas que también estaba pensando en ese momento era: “Señor, ¡qué tremendo que las personas no puedan darse cuenta que dentro de esta encíclica está la ley dominical! ¡qué tremendo esto, que no se dan cuenta!” Y bueno, la sierva de Dios ya había hablado acerca de esto, que van a ser muy pocos los que se van a estar dando cuenta, porque esta ley dominical iba a venir escondida. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p2}
Así que yo pensaba todo esto, amados hermanos, y muchas personas —aunque las evidencias están sobre la mesa, aunque vieron que todo esto, desde la visita del papa el 23 de septiembre del 2015 a EEUU y todas estas cosas—, pues, todo esto como que no le están prestando atención, no le dan importancia. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p3}
Más hay un pueblo que realmente se está dando cuenta, y se está dando cuenta del año de la misericordia, del fin del protestantismo y todas estas cosas. “¿Cómo que no pueden darse cuenta?”, decía yo al Señor. “Señor, ¿cómo puede ser que el pueblo no se esté dando cuenta que estamos caminando a una ley dominical inminente? ¡Está al frente! ¡ya está firmada, ya está aprobada! Lo que no está es ejecutada en todo el sentido, en todos los lugares, pero, ¡ya la tenemos! ¿Cómo puede ser que el pueblo, que es guardador de tus verdades, que Tú le has conferido tanto, no se pueda dar cuenta? Y, cuando algunos se comienzan a dar cuenta, cómo comienzan, los hombres de renombre, a callar todas estas cosas para que el pueblo siga durmiendo”. Decía yo: “Señor, realmente esto es un plan satánico, es un plan que tiene a tu pueblo adormecido, ¡por favor que tú real pueblo despierte!”. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p4}
Yo meditaba en todas estas cosas, amados hermanos, cuando de repente, mientras estaba leyendo la Palabra de Dios, y todo esto pasaba por mi mente, escuché palabra del Señor, que me dijo: “no hay tiempo. No hay ninguno que sin una entrega total podrá ser salvo. Hombres grandes, de grandes puestos, acallan la conciencia de los que buscan excusa para seguir sus tendencias de dilación, siguiendo sus caprichos. Escapa por tu vida, pues el que, teniendo evidencia, prefiere permanecer en sus deleites, no tendrá aceite en la prueba final. No os engañéis, Dios no puede ser burlado. Aquellos que sus caminos son en sus deseos, su corazón no es para conmigo, pues, son amadores de deleites más que de Dios. No os preocupéis por ellos. ¡Avanzad! pues los entendidos entenderán. Vuestras oraciones [estén] con ellos, más no vuestras fuerzas, éstas deben concentrarse en el deber de avanzar. Procurad estar puros ante Mí con temor y temblor. Procurad ser fieles en lo sumo. ¡Avanzad, avanzad, avanzad!”, me dijo. “El último drama, que ya ha comenzado, seguirá su curso, pues muchos ni lo han sabido, y seguirán siendo, sus oídos, sordos. Altos magnates”, me dijo, “cierran sus labios a sabiendas, por resguardar su renombre, más Yo os digo que, aunque hablen, son perros mudos y los que alienten su corazón con esto y detengan la marcha, perecerán”. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p5}
Amados, cuando yo escuché estas últimas palabras, mi corazón se llenó de gran tristeza: “altos magnates cierran sus labios a sabiendas, por resguardar su renombre, más Yo os digo que, aunque hablen, son perros mudos y los que alienten su corazón con esto y detengan la marcha, perecerán”. ¿Por qué estoy repitiendo esto nuevamente, amados hermanos, algo que no acostumbro hacer? Porque es, realmente [lo que está pasando]. El pueblo que escuche esto, y tenga un poquito de amor por la verdad, se va a poder dar cuenta que realmente no podemos acallar lo que está frente a nosotros, las evidencias hablan por sí solas. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p6}
Amados, en ese momento, mi Señor hizo una pausa y prosiguió: “muchos esperan la ley dominical y no desean creer que ya está. Muchos alientan su corazón con expectativas de un tiempo no existente. ¡Ay de ti Betsaida! ¡Ay de ti Corazín! Vivo Yo, dice El Eterno, que tus hermanas tendrán más compasión que tú, pues ellas sin saber hacen, más tú en conocimientos rebosas. No hay luz para el que no quiere ver, y no existe camino para el que no lo quiere ver”. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p7}
Hay una vida, amados hermanos, que tenemos que recorrer, una vida de santidad delante de Dios sin la cual ninguno verá al Señor. Hay muchas personas que dicen que no vamos a llegar a ser santos en este mundo, porque eso no es alcanzable en este mundo, más la Palabra de Dios eso no es lo que dice, dice que: “sin santidad ninguno verá al Señor”. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p8}
Quiero exhortarles, amados hermanos, [a] que pongamos mucha atención a las palabras de Dios, porque no se trata de mí, no se trata del que lo diga, se trata de lo que se está diciendo, a eso es a lo que hay que ponerle atención. Imaginemos que el Conflicto de los Siglos no nos haya marcado, a nosotros, ningunos tres años y medio, imaginemos que esto sea así, es solamente un ejemplo que les estoy dando. Imaginémonos que desde el año 66, desde la Fiesta de los Tabernáculos hasta la primavera del año 70, en la Fiesta de la Pascua, imaginémonos que eso no existiera, que no hubiera quedado marcado en la historia. Entonces, eso quiere decir que, sacando eso a un lado, aun lo que estamos viendo nos sigue indicando que vamos aproximándonos a una ley dominical, [estamos] en los primeros principios de ésta. Porque sabemos, amados, que la ley dominical, no va a venir ya, de pronto, así, y ya; ya va a venir opresión constante y sonante. No, esto va a ser paulatino, poco a poco va a ir apretando; pero no es que va a pasar mucho tiempo en ese apretón. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p9}
Así que, amados hermanos, hay mucho que hacer cuando uno se está preparando según los requerimientos de Dios. ¿Qué estamos haciendo? —es mi pregunta para ustedes. ¿Qué estamos haciendo? No podemos ser ciegos, Dios nos dijo que la misma señal que le dio a Jerusalén nos es dada a nosotros. Los entendidos van a entender, estamos ante una ley dominical ya. Y a existe, ya está firmada, ya está aprobada. Porque Estados Unidos no esté ya, ahora, en este momento en el Tratado de París, no quiere decir que no va a estar. Así que, pongamos atención a lo que Dios está diciendo antes [que a] los hombres de renombre, que son muchos; que se llenan la boca diciendo que estas cosas no van a pasar. Porque, amados hermanos, sí van a pasar. Dios lo dejó, ya, escrito, y sí va a pasar. Aunque se revuelquen los demonios y todo el infierno, esto va a pasar. Y todo aquel que se atreva a levantar la voz, claro, va a recibir persecución, esto es claro, no estamos ajenos a nada de esto, y muchos ya lo están experimentando. Más no podemos dejar de decir lo que es la verdad: estamos ante una ley dominical, que pronto, muy pronto, vamos a ver, cómo esto se va a comenzar a apretar. Entonces, como dice el Señor, va empezar a haber un corre, corre, un llorar, un crujir de dientes, no porque no lo sabían, sino porque prefirieron escuchar a aquellos que acallaban su conciencia diciendo: “paz, paz”, cuando Dios no ha declarado paz. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p10}
Muchas personas también dicen: “¿pero por qué se están poniendo fechas? Luego de 1844 no hay fechas, la sierva de Dios lo dijo”. Más, si leen el contexto, allí lo que se está hablando es de no poner fechas para la venida de Cristo Jesús, y eso nadie lo está haciendo. Así que, amados hermanos, no nos dejemos engañar, busquemos, vayamos directamente a la fuente, vayamos directamente a lo que Dios tiene escrito, no agarremos un párrafo del Espíritu de Profecía, no agarramos un texto de la Biblia para buscar un pretexto, leamos el contexto completo. Si nos dejamos engañar, sí va a ser culpa de nosotros, y no del que nos engañó, porque Dios dice que cada uno de nosotros debemos ser como bereanos. Así que, si nos engañan, es solamente culpa de nosotros, porque Dios nos ha dejado demasiadas, demasiadas, evidencias para darnos cuenta de lo que está pasando. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p11}
Quiera Dios que cada uno de nosotros podamos entender, es mi ruego, es mi oración, y podamos darnos cuenta de los acontecimientos que están pasando alrededor del mundo. Miren lo que ha pasado en California. ¡Oh, amados hermanos, realmente hay un pueblo que está ciego, y es mi oración que despierte, es mi oración y ruego a Dios por ellos! Más no puedo detenerme por ninguno. El mandato del Señor es que todos aquellos que estén despiertos, las oraciones de ellos sean para los que no están despiertos, pero, que avancen, ¡deben avanzar! Quiera Dios que sean muchos los que avancen, quiera Dios que tengamos más lealtad a Dios que a cualquier persona, a cualquier familiar, a cualquier cosa en este mundo, porque vale la pena creerle a Dios, vale la pena tener la salvación en Cristo Jesús. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 09-11-2018, es.p12}
Testimonio: 22-05-2019
Amados, 22 de mayo 2019. En sueños, yo estaba con una familia que tenía tres hijos, y mi estadía ahí era para la prédica de la palabra, para muchos que allí llegaban con ellos. {Daisy Escalante: 22-05-2019 , es.p1}
Terminaron los días de estas prédicas y salí a caminar al campo de aquellas personas que habían recibido la Palabra de Verdad. Ese día era sábado y los caminos llenos de flores y la suave brisa abrazaba las montañas y colinas. Pronto mis ojos se fijaron en un grupo de personas que trabajaban la tierra, ellos estaban muy afanados en esto. Llegué cerca de ellos y al verles de cerca pude reconocer que aquellos que allí estaban eran adventistas. Les exhorté a dejar esas labores en el día sagrado, más uno de ellos, un varón me miró y dijo: “la hambruna llega y no podemos darnos el lujo de no trabajar la tierra ni un día, si queremos tener segura nuestra comida”. Yo les dije: “recordad, seis días trabajaréis y haréis todas vuestras obras, más el séptimo, sábado, es día para Jehová tu Dios, y no debemos, en sábado, hacer ninguna obra regular como las que hacemos en los siguientes seis días, de domingo a viernes”. Estas me miraron y uno, sonriendo burlonamente, dijo: “en el cielo, la comida está segura pero acá, no. Si usted no desea alimento, no lo haga, pero nosotros, lo haremos”. Otro, con gran enojo, me miró y dijo: “¡váyase, no moleste, haga usted como quiera más nosotros sembraremos para nosotros y nuestros hijos!” Quise exhortarles, aún más, pero éstos se pusieron violentos. Dijo mi acompañante: “vámonos, su suerte está echada, cualquiera que deliberadamente viole el santo sábado del Señor, haciendo en él sus propios deseos, este será condenado por la ley para destrucción. Hacer del sábado un día común, entre el pueblo que conoce, es el pecado capital que abunda y sobrepasa a todos los demás pecados en demasía. La liviandad con la que muchos observan el sábado los hará culpables de muerte ante el universo que contempla este mundo que se atreve deliberadamente a violar el pacto sempiterno. Cuidaos de la levadura. Procurad la santidad en humillación, oración y ruego y será enviado el refrigerio final sobre vosotros, y podréis resistir en la prueba final al ser valerosos en la última amonestación”. {Daisy Escalante: 22-05-2019 , es.p2}
Amados, con estas palabras, ahí, desperté. Quiera Dios que cada uno de nosotros tomemos muy en serio el día del Señor, porque realmente para Él es muy importante, y todo lo que sea importante para el Señor, debe ser también importante para nosotros, el sábado es el pacto entre Dios y su pueblo. Quiera Dios que cada uno de nosotros podamos, cada vez más, acercarnos a ese ideal de guardar el sábado de Dios como Él se lo merece. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 22-05-2019 , es.p3}
Testimonio: 23-05-2019 #01
Amados, 23 de mayo del 2019. A las 10:44 de la mañana estaba en mi huerto, sembrando, cuando escuché palabra del Señor que me dijo: “es necesario someternos a todo tipo de caracteres humanos para, así, estar listos ante lo que se nos avecina. No debemos murmurar ni desanimarnos frente a esto; sólo no debemos someternos a un carácter de alguien que no está luchando por hacer la voluntad de Dios, pues el que así haga, su carácter es piedra de tropiezo y agente de satanás para la perdición de nuestra alma. Más, si el alma de ese carácter es penitente en buscar al Señor este carácter humano, que está en el proceso de santificación, será también de ayuda en el proceso de otros en busca de la santificación. {Daisy Escalante: 23-05-2019 #01, es.p1}
Luego de estas palabras, amados, se me recordó que el Pentecostés está cercano. Se me dejó saber esto, y que recordemos que el Espíritu Santo vino a los discípulos en este tiempo, y recordemos las instrucciones de Jesús referente a cómo estar frente a este solemne evento. No se me dejó saber cuándo será este evento del derramamiento del Espíritu Santo, sólo se me dejó saber que velemos, estemos apercibidos, porque nadie podrá dar de su aceite a nadie pues esto es sólo un don de Dios. Humillémonos, amados, al Señor mientras éste pueda ser hallado y en tanto está cercano. Bendiciones para todos. {Daisy Escalante: 23-05-2019 #01, es.p2}
Testimonio: 23-05-2019 #02
Amados, 23 de mayo del 2019. A las 10:56 de la mañana, mientras seguía trabajando en la huerta, vino otra vez palabra del Señor a mí diciendo: “no enviaré lluvia sobre aquellas plantaciones que no estén, ya, sembradas. Violar un precepto de su ley, hacer caso omiso a las advertencias, ignorar las reprensiones y denigrar sus mensajes de amor son un insulto al Creador. Y éste será culpable de homicidio voluntario hacia su persona. La constricción contra el Espíritu Santo, en todas sus facetas de amonestación al pueblo que conoce, está en la última fase; y así el que estaba limpiándose será limpio, y el que se ensucia seguirá ensuciándose”. {Daisy Escalante: 23-05-2019 #02, es.p1}
“Una norma elevada está ante nosotros, totalmente alcanzable con el poder de Cristo Jesús. El rechazo voluntario a ésta, o negar la eficacia de ella, es mortal. El fin está ante nosotros, si titubeamos o bajamos la guardia ahora, perderemos la vida eterna, se me dejó saber. {Daisy Escalante: 23-05-2019 #02, es.p2}
Amados, oro por todos, que el Señor nuestro Dios, grande y poderoso nos sostenga ante la gran tempestad. Bendiciones. {Daisy Escalante: 23-05-2019 #02, es.p3}
Testimonio: 14-07-2019
14 de julio 2019. En sueños, yo estaba parada frente a una casa multipisos, y tenía que subir unas cosas. Le pedí ayuda a unos jóvenes y éstos cogieron algunas cosas pero, al llegar al lugar, dejaron las cosas y se sentaron. Les animé a continuar y vi a uno que estaba más cerca de mí y le dije: “deja ese celular, ¿no ves que te está adormeciendo?” {Daisy Escalante: 14-07-2019 , es.p1}
Más el joven no lo soltaba. Yo le decía que él estaba acariciando algo malo, pero él decía que no, que era algo inofensivo. Yo le insistía, pero no podía hacerle razonar. Me acerqué para ver más de cerca y ver a sus ojos, para ver si podía hacerle entrar en razón para que lo soltara. En ese momento vi cómo el celular se convirtió en una serpiente con unos dientes muy grandes y afilados. Esta se le enrolló en el cuello y le mordió. Ya se estaba cayendo el joven al piso, con el veneno, y yo agarré la serpiente por la cola, la halé y la quité de encima de él. Comencé a asistirle, pero no reaccionaba. Clamé: “¡Oh Dios, ayúdalo!” Entonces, escuché una voz fuerte, tan fuerte que mi ser tembló, que dijo: “si no suelta la serpiente, ésta está a punto de morderle y ya no habrá más oportunidad, y habrá traspasado el límite de la misericordia y su fin ciertamente llegará”. Entonces la voz siguió diciendo: “¡quitad, quitad el anatema de en medio de vosotros, y buscad los ministros silenciosos con ahínco, y procurad la fortaleza para así vencer. Todo monte será removido y toda colina desecha ante la venida del Todopoderoso. El juicio es casi completado, y, ¿quién podrá permanecer en pie? Permitid la ayuda de lo Alto para, así, vencer; pues ya no hay tiempo de vacilar. Si así hicieres, venceréis; más, si desechas estas palabras, pereceréis”. {Daisy Escalante: 14-07-2019 , es.p2}
Entonces mi acompañante apareció y me dijo, mientras estaba tratando de asistirle: “está a punto de traspasar la misericordia de Dios”.
Ahí desperté amados, quiera Dios que cada uno de nosotros podamos sacar todo anatema de en medio de nosotros y podamos decidirnos por un: “así dice Jehová”. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 14-07-2019 , es.p3}
Testimonio: 18-07-2019
Julio, 18, 2019. En sueños, yo estaba en una ciudad donde las personas estaban poniendo sus cosas en carros para trasladarse a los campos. Llegaron a un lugar donde otros también, así, llegaron. Y veía cómo cada uno, de ellos, llevaba las cosas a su lugar, en dicho campo. Pronto, vi un matrimonio, el esposo se regresaba a la ciudad porque, según él, tenía que predicar; más, yo le urgía que no lo hiciera aún pues él no estaba fortalecido, según me dejaron saber. Hablé con su esposa, y ésta estaba ciega en referencia al estado espiritual de su esposo; para ella no había problema de que él saliera a la ciudad. Él salió preparado, según [dijo,] para la prédica que iba a dar, y ella quedó tranquila. Fui transportada a donde él iba a predicar, y (le) vi que no era cierto; él puso una grabación de su voz, de una predicación ya pregrabada, para que su esposa lo escuchara tranquilamente, y él se fue a la vida efímera del mundo. {Daisy Escalante: 18-07-2019 , es.p1}
En ese momento mi acompañante me dijo: “Dios no puede ser burlado, Él pesa los motivos y los llama por su nombre. Todo aquel que actúe por miedo o conveniencia, en vano será su movimiento, porque donde está su mente allí está su corazón, y éste será el recibidor de las siete postreras plagas. Muchos engañarán, pero ellos también recibirán un gran engaño. El que no tome su salvación con alta seriedad, éste perecerá. Pedid a Dios por el don del discernimiento”. {Daisy Escalante: 18-07-2019 , es.p2}
En ese momento desperté. Quiera Dios que cada uno de nosotros podamos pedirle al Señor de todo corazón que nos dé el don del discernimiento, para que así podamos en su nombre, caminar a suelo seguro. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 18-07-2019 , es.p3}
Testimonio: 14-08-2020 #01
Agosto 14, 2020. El SEÑOR me dejó saber que a todo lugar llegarán dificultades. Más, los que han obedecido al SEÑOR, y han ido a los lugares que Él ha estipulado para esta hora, estas dificultades llegarán muy lentamente, tanto así que habrá tiempo, aún, para lo más importante en nuestra vida: nuestra comunión con Él. En ese momento, el SEÑOR me recordó un sueño que había tenido mi esposo el día antes, agosto 13, 2020. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #01, es.p1}
Él vio que, cerca de donde nosotros vivimos, en la montaña, arriba, venía bajando un movimiento de tierra, pero venía muy lento. Pasaron semanas, meses, y el movimiento de tierra era muy lento, muy lento, muy lento. Él no se percató, ya hasta se le había olvidado, pues era tan lento que casi no se veía que se moví. Pero, en un momento dado, llegaron dos damas y un caballero a darle voces, que saliera porque había un peligro. Una dama y un caballero se quedaron a lo lejos; pero una dama se acercó bastante a la casa para decirle que saliera. En ese momento, cuando él salió y miró, vio que estaba mucho más cerca este desliz de tierra, pero aún venía lento. Y él entró, dentro de la casa, a buscar algunas cosas. Salió. En ese momento, detrás de la casa, cayó un poco de tierra y salpicó, porque traía como agua. Y cayó, este lodo todo mojado, encima de la hermana que se había parado frente a la casa. Así que, mi esposo le dice: “hermana, quítese de ahí”. Y la hermana, en ese momento, reaccionó porque se había quedado así, como parada. No creía lo que estaba pasando. Entonces, se movió. Ella avanzó, pero sus pies se hundían en la tierra que bajó. Mi esposo brincó por encima del desliz de tierra que hubo. Pudo pasar, no se hundió, fue firme la tierra, así que pudo pasar. La tierra llegó hasta ahí, no hubo más movimiento, y ahí, entonces, él despertó. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #01, es.p2}
Y el SEÑOR me refirió esto otra vez. Y me dejó saber que todo aquel que ande en dos aguas, que su mente y corazón esté dividido, aunque esté en el lugar correcto, las dificultades le caerán encima. Y, al tratar de salir, por alerta de otros, hacia ella, ésta no tendrá mucha fuerza, por haber tenido un corazón dividido, y se hundirá en el problema. Más, aquellos que su corazón está centrado en un: “así dice Jehová”, y sacan de lado las siete formas de caídas, se les dotará de sabiduría y discernimiento celestial, y podrán caminar seguros sin hundirse, ni resbalar, encima de las dificultades. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #01, es.p3}
Estos, con una codependencia absoluta de Dios, no temerán, sino que su vida fue habituada a dar cada paso tras las huellas del Maestro, y su oído fue agudo a sus mandatos, sus ojos fueron abiertos para discernir el camino real. Sus manos trabajaban diligentemente y sus pies no vacilaban, su vida no importaba, sólo el honor de Dios. Y así, ejerciendo su libre albedrío, se entregaron sin reservas en las manos del Príncipe Emmanuel. Estos, se me dejó saber, son los que vencerán. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #01, es.p4}
Muchos, se me dijo, corren a hacer grandes hazañas para que otros sepan o les vean, y éstos no saben que esta actitud los hace estar reprobados para el reino sempiterno. Vi que en esta categoría había muchos, y ninguno echaba a ver su gran peligro, pues la confianza en sí mismos, y lo que podían hacer, era tan grande que se desconectaron del real camino, perdiendo la pista de cómo llegar otra vez a Él. Vi a otros que sólo hablaban si Dios se los ordenaba, y si no, éstos callaban. Si Dios los mandaba, iban, y si no, se quedaban quedos. Se me dijo: “así será el que vencerá en esta hora”. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #01, es.p5}
Se me refirió, entonces, muchos campamentos de las montañas. Unos, trabajando perfectamente organizados bajo un Escrito Está. Y otros, en total desunión: cada uno haciendo con sus propias fuerzas. Estos, su mente estaba dividida, sólo pensando en lo que dejaron atrás y no echaban a ver la importancia de lo que tenían delante. Aunque Dios les ha dado herencia, no renunciaban a la herencia pasada, y vivían agobiados por ella sin pensar que, pronto, el que realmente desee ser fiel, lo perderá todo. Se me dijo: “un corazón y una mente dividida nunca podrá vencer”. En ese momento, entonces, se me refirió: “Isaías 52, 53 y 54”. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #01, es.p6}
Desperté, leí estos capítulos, y dije: “¡gloria a Dios! ¡aleluya! ¡Bendito sea tu nombre SEÑOR, porque tus verdaderos hijos vivimos confiados en ti, y queremos seguir confiados en ti! ¡No nos sueltes, SEÑOR! ¡Ayúdanos a seguir agarrados de ti! En ese momento me puse a orar y [a] pedirle al SEÑOR que, así como Él nos está diciendo esto, que no tengamos un corazón y una mente divididos, que así pueda ser en su pueblo en la ancha faz de la tierra. Clamo al SEÑOR día y noche para que así sea, para que cada uno de nosotros podamos ser hallados más que vencedores en Él. Que el SEÑOR nos bendiga. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #01, es.p7}
Isaías 52
1 Despierta, despierta, vístete tu fortaleza, oh Sión; vístete tu ropa de hermosura, oh Jerusalén, ciudad santa; porque nunca más vendrá a ti incircunciso ni inmundo.
2 Sacúdete del polvo; levántate y siéntate, Jerusalén; suéltate de las ataduras de tu cuello, oh cautiva hija de Sión.
3 Porque así dice Jehová: De balde fuisteis vendidos; por tanto, sin dinero seréis rescatados.
4 Porque así dice el Señor Jehová: Mi pueblo descendió a Egipto en tiempo pasado, para peregrinar allá; y el asirio lo oprimió sin razón.
5 Y ahora ¿qué tengo yo aquí, dice Jehová, ya que mi pueblo es llevado sin un por qué? Y los que en él se enseñorean, lo hacen aullar, dice Jehová, y continuamente es blasfemado mi nombre todo el día.
6 Por tanto, mi pueblo sabrá mi nombre por esta causa en aquel día; porque yo mismo que hablo, he aquí estaré presente.
7 ¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas, del que publica la paz, del que trae buenas nuevas del bien, del que publica salvación, del que dice a Sión: Tu Dios reina!
8 ¡Voz de tus atalayas! alzarán la voz, juntamente darán voces de júbilo; porque ojo a ojo verán cuando Jehová vuelva a traer a Sión.
9 Prorrumpid de gozo, cantad juntamente, lugares desolados de Jerusalén; porque Jehová ha consolado a su pueblo, a Jerusalén ha redimido.
10 Jehová desnudó su santo brazo ante los ojos de todas las naciones; y todos los términos de la tierra verán la salvación de nuestro Dios.
11 Apartaos, apartaos, salid de ahí, no toquéis cosa inmunda; salid de en medio de ella; limpiaos los que lleváis los vasos de Jehová.
12 Porque no saldréis apresurados, ni iréis huyendo; porque Jehová irá delante de vosotros, y [será] vuestra retaguardia el Dios de Israel.
13 He aquí que mi siervo será prosperado, será engrandecido y exaltado, y será muy enaltecido.
14 Como se asombraron de ti muchos, de tal manera fue desfigurado de los hombres su parecer; y su hermosura más que la de los hijos de los hombres,
15 así Él rociará muchas naciones; los reyes cerrarán ante Él la boca; porque verán lo que nunca les fue contado, y entenderán lo que jamás habían oído.
Isaías 53
1 ¿Quién ha creído a nuestro anuncio? ¿Y sobre quién se ha manifestado el brazo de Jehová?
2 Subirá cual renuevo delante de Él, y como raíz de tierra seca; no hay parecer en Él, ni hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le deseemos.
3 Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de Él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos.
4 Ciertamente llevó Él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido.
5 Mas Él herido [fue] por nuestras transgresiones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz [fue] sobre Él, y por su llaga fuimos nosotros curados.
6 Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en Él el pecado de todos nosotros.
7 Angustiado Él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.
8 De la cárcel y del juicio fue quitado; y su generación ¿quién la contará? Porque cortado fue de la tierra de los vivientes; por la rebelión de mi pueblo fue herido.
9 Y se dispuso con los impíos su sepultura, mas con los ricos fue en su muerte; aunque Él nunca hizo maldad, ni [hubo] engaño en su boca.
10 Con todo eso, Jehová quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando hubiere puesto su alma en expiación por el pecado, verá [su] linaje, prolongará [sus] días, y la voluntad de Jehová será en su mano prosperada.
11 Del trabajo de su alma verá y será saciado. Por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y Él llevará las iniquidades de ellos.
12 Por tanto, yo le daré [parte] con los grandes, y con los fuertes repartirá despojos; por cuanto derramó su alma hasta la muerte, y fue contado con los transgresores; Y llevó Él el pecado de muchos e hizo intercesión por los transgresores.
Isaías 54
1 Alégrate, oh estéril, la que no daba a luz; levanta canción, y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto; porque más son los hijos de la dejada que los de la casada, dice Jehová.
2 Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas.
3 Porque a la mano derecha y a la mano izquierda has de crecer; y tu simiente heredará a los gentiles, y habitarán las ciudades asoladas.
4 No temas, pues no serás avergonzada; y no te avergüences, que no serás afrentada; porque te olvidarás de la vergüenza de tu juventud, y de la afrenta de tu viudez no tendrás más memoria.
5 Porque tu marido [es] tu Hacedor; Jehová de los ejércitos es su nombre; y tu Redentor, el Santo de Israel; Dios de toda la tierra será llamado.
6 Porque como a mujer abandonada y triste de espíritu te llamó Jehová, y como a la esposa de la juventud que es repudiada, dice el Dios tuyo.
7 Por un breve momento te dejé; mas te recogeré con grandes misericordias.
8 Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un momento; mas con misericordia eterna tendré compasión de ti, dice tu Redentor Jehová.
9 Porque esto me [será como] las aguas de Noé; que juré que nunca más las aguas de Noé pasarían sobre la tierra; así he jurado que no me enojaré contra ti, ni te reprenderé.
10 Porque los montes se moverán, y los collados temblarán; mas no se apartará de ti mi misericordia, ni el pacto de mi paz será removido, dice Jehová, el que tiene misericordia de ti.
11 Pobrecita, fatigada con tempestad, sin consuelo; he aquí que yo cimentaré tus piedras sobre carbunclo, y sobre zafiros te fundaré.
12 Tus ventanas pondré de piedras preciosas, tus puertas de piedras de carbunclo, y toda tu muralla de piedras preciosas.
13 Y todos tus hijos [serán] enseñados de Jehová; y multiplicará la paz de tus hijos.
14 Con justicia serás adornada; estarás lejos de opresión, porque no temerás; y del terror, porque no se acercará a ti.
15 Si alguno conspirare contra ti, [lo hará] sin mí; el que contra ti conspirare, delante de ti caerá.
16 He aquí que yo he creado al herrero que sopla las ascuas en el fuego, y que saca la herramienta para su obra; y yo he creado al destruidor para destruir.
17 Ninguna arma forjada contra ti, prosperará; y tú condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Ésta es la herencia de los siervos de Jehová, y su justicia [viene] de mí, dice Jehová.
Testimonio: 14-08-2020 #02
Agosto 14 del 2020. Tuve un segundo sueño, y vi que estaba en una ciudad, y yo veía a las personas muy preocupadas. Escuché una voz que me dijo: “diles que salgan, pues ninguna ciudad es ahora segura; y pronto, todo empeorará”. Así lo hice, comencé a dar voces a todos, más éstos me miraban con gran desprecio y se reían de mis advertencias. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #02, es.p1}
Pronto, me vi frente a un edificio de tres pisos. Y, detrás de él, una montaña enorme se levantaba. Vi que ésta tiró una leve explosión de fuego, y dije a todos: “miren, esa montaña tiró fuego, hay que salir, ¡por favor, apúrense!” Pero todos veían la montaña tan distante que no le ponían importancia. Volví mi vista a la montaña nuevamente y vi que ésta se expandía y, pronto, explotó, creando así una avalancha de lava ardiente y fuego por todo lugar. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #02, es.p2}
Fui, luego, suspendida en los aires, y veía todo el panorama. Y pude observar la lava ardiente ir por toda calle de aquella enorme ciudad, y devorar lo que había frente a ella. Mientras esta lava corría, y explosión tras explosión seguía detrás de ella, aquella enorme ciudad —junto a sus habitantes—, desapareció bajo aquel mar de lava. Mi corazón latía fuertemente, no tenía miedo por mí, sino por la gran desobediencia de aquella rebelde ciudad. Pronto, escuché una voz de lo alto decir: “MENE, MENE, TEKEL, UPARSIN”. Ahí desperté. Y me refirieron: “Joel 1”. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #02, es.p3}
¡Oh, amados, que tristeza! ¡que por nuestra culpa, por nuestra rebeldía, perdamos no solamente la vida en este mundo, sino la vida eterna! ¡Oh, amados! Humillémonos delante del SEÑOR, pidamos con ruego y oración perdón a nuestro Creador, pongámonos a cuentas con Él, seamos obedientes, seamos fieles a sus mandamientos, a sus estatutos, sus leyes, sus preceptos, para que, así, podamos alcanzar su misericordia y su salvación. Que el SEÑOR nos bendiga. {Daisy Escalante: 14-08-2020 #02, es.p4}
Joel 1
1 Palabra de Jehová que vino a Joel hijo de Petuel.
2 Oíd esto, ancianos, y escuchad, todos los moradores de la tierra. ¿Ha acontecido esto en vuestros días, o en los días de vuestros padres?
3 De esto contaréis a vuestros hijos, y vuestros hijos a sus hijos, y sus hijos a la otra generación.
4 Lo que quedó de la oruga comió la langosta, y lo que quedó de la langosta comió el pulgón; y el revoltón comió lo que del pulgón había quedado.
5 Despertad, borrachos, y llorad; aullad todos los que bebéis vino, a causa del mosto, porque os es quitado de vuestra boca.
6 Porque nación fuerte y sin número subió a mi tierra; sus dientes, dientes de león, y sus muelas, de león.
7 Asoló mi vid, y descortezó mi higuera; del todo la desnudó y derribó: sus ramas quedaron blancas.
8 Llora tú como virgen vestida de cilicio por el marido de su juventud.
9 La ofrenda y la libación han desaparecido de la casa de Jehová; los sacerdotes ministros de Jehová están de duelo.
10 El campo fue destruido, se enlutó la tierra; porque el trigo fue destruido, se secó el mosto, languideció el aceite.
11 Confundíos, labradores, aullad, viñeros, por el trigo y la cebada; porque se perdió la mies del campo.
12 Se secó la vid, se marchitó la higuera, el granado también, la palmera y el manzano; se secaron todos los árboles del campo; por lo cual se secó el gozo de los hijos de los hombres.
13 Ceñíos y lamentad, sacerdotes; aullad, ministros del altar; venid, dormid en cilicio, ministros de mi Dios; porque quitada es de la casa de vuestro Dios la ofrenda y la libación.
14 Pregonad ayuno, convocad a asamblea; congregad a los ancianos y a todos los moradores de la tierra en la casa de Jehová vuestro Dios, y clamad a Jehová.
15 ¡Ay del día! porque cercano [está] el día de Jehová, y vendrá como destrucción por el Todopoderoso.
16 ¿No fue quitado el alimento de delante de nuestros ojos, la alegría y el placer de la casa de nuestro Dios?
17 El grano se pudrió debajo de los terrones, los graneros fueron asolados, los alfolíes destruidos; porque se secó el trigo.
18 ¡Cómo gimieron las bestias! ¡Cuán turbados anduvieron los hatos de los bueyes, porque no tuvieron pastos! también fueron asolados los rebaños de las ovejas.
19 A ti, oh Jehová, clamaré: porque fuego consumió los pastos del desierto, y llama abrasó todos los árboles del campo.
20 Las bestias del campo braman también a ti; porque se secaron los arroyos de las aguas, y fuego consumió las praderías del desierto.
Testimonio: 15-08-2020 #01
Agosto 15, 2020; 10:53 de la mañana. Mientras estaba en el lugar de adoración, rodeada de los árboles, mirando las flores, escuchando los pajaritos, el SEÑOR llamó mi atención a una mariposa. Ésta se posaba encima de una flor. Y me dijo: “obsérvala. Mientras ésta está posando en la flor, chupa pasivamente el néctar, más, terminando el proceso, vuela enérgicamente a otra flor. Y así trabaja, polinizando a la vez que busca su alimento. Su tiempo de vida es muy corto, más, sin embargo, no retiene su esfuerzo: lucha, persevera y alcanza. Su proceso es lento, y paciente, para llegar a ser lo que es, más, cuando lo logra, sin ella darse cuenta, vive una vida plena, libremente, en el bosque. Ella no se da cuenta de su testimonio, y de la felicidad que brinda a otros, pero es así. Ella testifica mi grandeza y da fe de que, todo aquel que se allega a Mí, es completa y plenamente feliz, porque hace la labor por la cual fue creada. Asimismo, el que así hiciere, morirá al yo y podrá ser feliz plenamente, sin preconceptos, sin amalgamas, sin teorías vanas, sin tradiciones, sin sus diferentes pensares, solo buscando unidad de pensamiento en Mí y mis dichos. El que así hiciere vencerá y será plantado junto a corrientes de aguas y no tendrá sed jamás”. {Daisy Escalante: 15-08-2020 #01, es.p1}
Entonces, hizo una pregunta: “¿por qué teme el que dice ser mi pueblo?” Y Él mismo contestó: “porque, aunque proclama conocerme, no me conoce”. Luego, volvió a preguntar: “¿y por qué no me conoce?” Y Él mismo contestó: “porque sus razonamientos propios solo les traerán inseguridad, y, mientras más se aferren a ellos, les traerán la muerte espiritual. Cualquiera que declare, por su boca, que sus razonamientos son correctos, es fatuo; porque sólo en Mí hay discernimiento y sabiduría de las circunstancias, y de los espíritus. Cualquiera que se crea entendido en mi Palabra y menosprecia a su prójimo, mi sabiduría no está en él. Carece de entendimiento y no ha comprendido mis palabras. Yo aborrezco el pecado, pero amo al pecador. Yo conozco su fin desde el principio, por eso tendré misericordia con el que tendré misericordia. Por tanto, buscad mi consejo, para saber, así, cuál es mi voluntad entre vosotros porque, de cierto de cierto os digo, que los habitantes de la tierra serán diezmados. Las familias serán diezmadas, y habrá mucho dolor y sufrimiento a causa de esto. Más agarrad mi mano y Yo os fortaleceré, porque la hora es llegada. Llorad por vuestros hijos, y Yo se los di. Llorad por vuestros cónyuges, y Yo se los di. Llorad por vuestros prójimos, y Yo les di la vida a todos. Soy Padre de todos, pero no todos me reconocen. Les di libre albedrío, para que me amaran libremente. Morí por ellos, para asegurarles la salvación. Si me aceptan, y cumplen mis mandatos, van a ser salvos. Pero viven para sí, haciendo planes de [un] futuro que no tienen, olvidando mis cuidados en el pasado, ignorando mis mandatos en el presente. Y, ¿qué, pues, haré? Iré y miraré su corazón, y pesaré sus pensamientos y sabré si van al granero o al lagar. La obra está en marcha, más sólo los entendidos entenderán, los que están escritos en el Libro de la Vida. Estad apercibidos, porque vuestra redención está cerca”. Y me citó un texto: “1 Tesalonicenses 4”. {Daisy Escalante: 15-08-2020 #01, es.p2}
Dejo aquí con ustedes, amados, las palabras fieles y verdaderas del SEÑOR, esperando que seamos entendidos y que podamos seguir tras las huellas del Maestro, hasta llegar a la Patria Celestial con Él. Que el SEÑOR nos bendiga. {Daisy Escalante: 15-08-2020 #01, es.p3}
1 Tesalonicenses 4
1 Además os rogamos hermanos y exhortamos en el Señor Jesús, que de la manera que fuisteis enseñados de nosotros de cómo debéis de conduciros y agradar a Dios, así abundéis más y más.
2 Porque ya sabéis qué mandamientos os dimos por el Señor Jesús.
3 Porque ésta es la voluntad de Dios, vuestra santificación; que os abstengáis de fornicación;
4 que cada uno de vosotros sepa tener su vaso en santificación y honor;
5 no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios.
6 Que ninguno agravie ni tome ventaja de su hermano, en nada; porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y protestado.
7 Porque no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación.
8 Así que, el que menosprecia, no menosprecia a hombre, sino a Dios, el cual también nos dio su Espíritu Santo.
9 Pero acerca del amor fraternal no tenéis necesidad de que os escriba; porque vosotros mismos habéis aprendido de Dios que os améis unos a otros;
10 y a la verdad lo hacéis así con todos los hermanos que están por toda Macedonia. Pero os rogamos, hermanos, que abundéis [en ello] más y más;
11 y que procuréis tener quietud, y ocuparos en vuestros propios negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado;
12 a fin de que andéis honestamente para con los de afuera, y no tengáis necesidad de nada.
13 Mas no quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.
14 Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Él a los que durmieron en Jesús.
15 Por lo cual, os decimos esto por palabra del Señor; que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.
16 Porque el Señor mismo con aclamación, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, juntamente con ellos seremos arrebatados en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.
18 Por tanto, consolaos unos a otros con estas palabras.
Testimonio: 15-08-2020 #02
Agosto 15, 2020. El SEÑOR me dijo nuevamente: “prepárense para comer hojas, en especial las hojas amargas”.
Me puse a pensar en esto. Cada lugar tiene sus diferentes hojas amargas. Aquí, en el caribe tenemos el neen, la moringa, la hoja de noni, que también se come, la ortiga, la verdolaga, el cundeamor, la espinaca de árbol. También tenemos algunas que son más babositas, pero también entran dentro de las amargas, que son: la sábila, la tuna, la espinaca, tanto la blanca como la morada. {Daisy Escalante: 15-08-2020 #02, es.p1}
Amados hermanos, el SEÑOR nos está dictando qué debemos aprender, si aún no lo hemos hecho: el comer estas plantas. Porque no nada más nos van a servir de sustento, sino que también van a servir para limpiar nuestro sistema, nuestra sangre. Por ende, así podremos tener una mejor mente, más clara, para poder así tener una mejor percepción de su Palabra. Sabemos que, en los Tabernáculos de este año, el SEÑOR ha pedido que sus Leyes, sus Estatutos, sus Mandamientos, los Fundamentos de la fe, estén ante el pueblo. Y es bien importante que tengamos una mente clara para que podamos entender cada precepto, cada estatuto que el SEÑOR quiere plasmar en la vida de aquellos que nos estamos preparando para dar el toque certero en este mundo y morar con Él en la Patria Celestial. Es mi ruego y oración que así sea en la vida de cada uno de nosotros. {Daisy Escalante: 15-08-2020 #02, es.p2}
Llévennos en sus oraciones. Nosotros clamamos y oramos al SEÑOR por ustedes día y noche, sabiendo que la prueba que tenemos delante no es fácil, y que amerita —esta prueba—, que hagamos cambios, cambios rápidos, cambios profundos en nuestra vida, para que así podamos ser aceptados en Cristo Jesús. Es mi ruego y es mi oración en esta hora. Que así sea. Que el SEÑOR nos bendiga. {Daisy Escalante: 15-08-2020 #02, es.p3}
Testimonio: 16-08-2020 #01
Agosto 16, 2020. Mientras hacía las cosas del diario, el SEÑOR me habló nuevamente y me dijo: “siembren. Siembren raíces, en diferentes partes, mi pueblo puede hacer de esta manera”. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p1}
Sabemos que entre las raíces tenemos la papa, la yuca, la batata, el ñame y muchas otras. Miren cuál es la que se da en su área, y, por favor, obedezcan la ordenanza del Todopoderoso. También me dijo: “consigan sorgo, que este cereal no necesita mucho mantenimiento y abunda”. Puso en mi mente la alcachofa de Jerusalén [heliantus tuberosus], es una flor con una raíz, un bulbo, comestible. Se da en abundancia y tampoco necesita mucho mantenimiento. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p2}
Me llamó la atención a que debíamos tener bastante carbón, éste es el de tomar. Barro, para cualquier situación de salud. La sal, que también ha hecho, y hemos visto, cómo ha podido salvar tantas vidas ante esta pandemia actual, que estuvo en todo su apogeo en la época del tiempo de fresco, a final de año, a principio de año. Muchas personas, pues, se afectaron, y, aunque sabemos que no todo lo que le achacaron al coronavirus era coronavirus, era otro tipo de situaciones, pero a pesar de eso hemos podido ayudar [a] muchas personas. Y el SEÑOR me llamó mi atención a que debíamos tener bastante sal. Recordemos que es la sal que le dan a los animales, es una sal entera, para que, así, podamos gozar de este maravilloso mineral. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p3}
También me habló acerca de plantas medicinales, que tuviéramos secas en nuestra casa, pero también sembradas. Yo quiero contarles un testimonio. Más adelante se los contaré, acerca de esto, de las plantas, cuando uno siembra. Y cómo, cuando nosotros oramos en el momento en que las estamos sembrando, día tras día pasamos por los lugares de siembra y nos arrodillamos y oramos, cómo el SEÑOR pone su mano poderosa cuidando todas estas plántulas que son tiernas, para beneficio de sus hijos. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p4}
Otra de las cosas que el SEÑOR llamó mi atención, fue a los sulfuros. Sabemos que el ajo, la cebolla, los cebollines, o en el caso donde estemos, que estos tres no estén, o algunos otros; podemos utilizar la planta de anamú [petiveria alliacea], que también es alta en sulfuros. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p5}
El SEÑOR me siguió hablando, me dijo: “has tenido algunas experiencias en el campo. Has visto algunas cosas, háblale a mi pueblo, instrúyelo. Porque, de las cosas que has aprendido, ellos pueden buscar un equivalente de lo que se da en su lugar, y pueden hacerlo. Por ejemplo, aquí en Puerto Rico hay algo que le dicen chícharo, es una leguminosa, es enredadera. Esta enredadera, usted siembra una, y ella comienza a los dos, tres, meses a dar sus chícharos, sus habichuelitas. Y usted, si no cogiese, si no cosechase esas habichuelas, [si] usted las dejara ahí que ellas cayeran al piso, a usted se le hace un monte y usted no tiene que hacer nada. Es muy invasiva eso sí, por ser enredadera, así que hay que acomodarla en un lugar donde ella pueda desarrollar sin subirse a otras plantas, que, pues, vaya entonces a confligir [entrar en conflicto] con algún otro fruto que dé esa planta. Así que es bien importante que usted vea qué es lo que se da con facilidad, de leguminosa, en su lugar. Eso es bien importante, amados hermanos. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p6}
Otra de las cosas [a las] que el SEÑOR llamó mi atención es que tengamos plantas medicinales. Y que no solamente aprendamos cómo hacerlas crecer, cuidarlas —el que las hace crecer es Él, pero nosotros cuidarlas durante ese crecimiento—, sino que dediquemos tiempo a aprender cómo se usan. Todavía, en algunos lugares hay acceso al internet. Hemos recopilado también nosotros algunos beneficios de plantas, [lo] hemos pasado por el telegram, vaya ahí, vaya [a] hacer la búsqueda. Sabemos que, pronto, no vamos a tener medios [electrónicos], al paso que esto va, [es] lo que el SEÑOR ha dejado saber. Así que, yo le aconsejo que, por favor, cada pdf importante, cada información importante que se ha pasado o llegue a usted, por favor sáquelo, trate de sacarlo en papel, trate de imprimirlo para que usted lo tenga. Porque es bien importante, si yo tengo una planta y yo tengo alguna situación, pero yo no sé cómo usarla, no me va a servir, y el SEÑOR quiere que su pueblo se dedique y aprenda estas cosas. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p7}
Es bien importante que limpiemos nuestro cuerpo de arenillas y de piedras, ésta fue otra de las cosas que el SEÑOR llamó mi atención. Hemos pasado la receta muy sencilla pero muy eficaz de la limpieza de la vesícula, pero que también, aunque se le dice así, limpia lo que son arenillas y piedras en el sistema. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p8}
También, otra de las cosas que el SEÑOR llamó mi atención, porque hemos visto personas que están casi al punto de la muerte, porque tienen un colon constipado, sucio. Y esto ensucia la sangre. Esto hace que las personas —cuando el colon ya está en su máxima capacidad de estas heces fecales dentro de él, pues—, no deja que la persona pueda comer. Padece de unos dolores fuertes de estómago, de intestino. Comienza a vomitar, se comienzan a acalambrar las manos y las piernas, unos dolores de cabeza bien fuertes. Comienzan a marearse. Todo esto son síntomas de que el cuerpo está intoxicado. ¿Por qué está intoxicado de esa manera? Porque no le hemos dado a este cuerpo el combustible que el cuerpo necesita, para lo cual realmente fue hecho. Así que, el SEÑOR llamó mi atención a plantas que pueden ayudar a limpiar nuestro colon, para que quede limpio, para que así podamos tener una nueva oportunidad de darle a este cuerpo lo que realmente necesita, y así poder tener un buen funcionamiento de nuestro organismo. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p9}
También, el SEÑOR llamó mi atención a tomar té de plantas. Me habló de los de las hojas de cítricos, de las hojas de neen, de las hojas de guanábana, de las hojas de cranberries [arándano, nombre botánico: vaccinium oxycoccus], varias hojas. Yo caminaba ese día por el huerto, y veía las hojas y el SEÑOR me decía: “de esta puedes tomar té, de ésta, también”. Y por eso les estoy compartiendo esto, porque no quiero que esta información quede solamente para acá, para los que estamos aquí, sino para todos. Porque así se me dejó saber, que debe ser para todos. Y siempre que el SEÑOR nos da algo, queremos compartirlo. El SEÑOR quiere que su pueblo sea un pueblo sano, sea un pueblo que conozca el arte y la ciencia de curar su sistema, de cuidarlo, de darle mantenimiento a través de su naturaleza. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p10}
Otra de las cosas que el SEÑOR llamó mi atención fue acerca de mantener el nivel de glucosa nivelado en nuestra sangre a través de las hojas de guanábana [graviola, annona muricata], de las hojas de cundeamor [momordica charantia], la hoja de la pana [artocarpus altilis], siendo esta última la más efectiva. Podemos coger la hoja de pana y la desmenuzamos, cogemos un litro de agua, lo hervimos, echamos esta hoja cuando hierve, luego tapamos y dejamos, ahí, reposar. Y podemos tomar a diario, si la persona es diabética. Si no, puede tomarlo 2 ó 3 veces por semana, para, así, mantener fuera de su sangre cualquier exceso de azúcar. Si la persona usa, ya, insulina, ya sea en pastillas o inyectables, debe tomar la decisión de hacer el cambio, pero no puede entonces utilizar la hoja de pana y la insulina a la vez, porque entonces puede bajar mucho el azúcar y es un grave peligro. Más, las personas que padecen de problemas de alza de azúcar, de diabetes, tienen una maquinita que pueden monitorear y de acuerdo a esto pueden saber si se aplican el té o no se lo aplican, todo depende, si la ven alta, pues, pueden aplicar el té, si la tienen normal o baja pues no apliquen este remedio. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p11}
Para la presión arterial, el SEÑOR llamó mi atención a algo que hemos utilizado muchísimo y ha sido de gran bendición, ha sido la pimienta de cayena. Hemos estado aquí con la ayuda del SEÑOR, ha sido muy difícil, luego del huracán, sembrar algunas cosas. Sabemos, y entendemos, que el huracán llamado María, en el 2017 —que azotó la isla de Puerto Rico y también otras islas en el caribe—, no solamente traía, dentro del sistema, agua, sino que traía muchas otras cosas más que implementaron para poner [la] tierra más árida, las plantas más susceptibles a enfermedades. Y muchas de ellas, ya, no quisieron crecer luego de esto. Pero el SEÑOR nos ha ido enseñando cómo hacer para curar la tierra. Lo hemos compartido anteriormente con ustedes. Y, una de las cosas que el SEÑOR nos ha dado, es la oportunidad de sembrar la planta de cayenne, la pimienta de cayena. Esta pimienta, cuando está en polvo, o está fresca, la machacamos bien, pero una porción, cuando es fresca, bien pequeña, al igual que en polvo, también; pero en fresca es mucho más fuerte. La mezclamos con un poco de agua, por ejemplo, nada más con la uña arranco un pedacito bien pequeño de lo que es el pimiento fresco, y lo pongo en un mortero, lo machaco bien y le echo 8 onzas de agua, lo tomo y esto me ayuda a bajar la presión arterial; y también el jugo de cerely [apio – apium] nos ha resultado muchísimo, [ha hecho] mucho bien para las personas. Así que, el SEÑOR nos ha enseñado esto. Hoy, en esta hora, Él me estaba llamando la atención a esto para que el pueblo se prepare ante lo que se nos avecina. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p12}
También, para eliminar triglicéridos y colesterol, ésta alza de triglicéridos y colesterol en nuestro sistema, el SEÑOR llamó mi atención a un remedio que hemos utilizado por años: dos rodajas de piña fresca, dos cucharadas de linaza molida, dos cucharadas de afrecho o la pajita de la avena o el trigo (lo que es la fibra), dos cucharadas de avena, una taza de agua, siete granos de garbanzo cocinados, puede germinarlos y luego los puede cocinar un poquito, nada más medios ablandados, o si tienen bastantes días de germinación y están bastante, ya, blandos, usted los puede echar así, sin cocinar, dentro del batido; esto se va a licuar todo. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p13}
Otra de las cosas que el SEÑOR llamó mi atención —cuando Él habló acerca de que teníamos que prepararnos con cosas manuales, tanto para agricultura como para costura, como para cocina—, fue conseguir una licuadora manual. Pueden conseguirla, el nombre de ella es boltex blender, usted hace su búsqueda y ahí le va aparecer esta licuadora manual. Recordemos que vamos a estar —ya mismo, próximamente—, caminando al tiempo de no poder comprar y vender, ser privados de todo apoyo terrenal. Entonces, debemos tener cosas que podamos nosotros, si no tenemos luz [electricidad], pues, podamos hacerlo, ¿verdad? Entonces, vamos a licuar todo esto, dos o tres veces al día, lo vamos a tomar por 21 días, para aquellas personas que solamente quieren darse mantenimiento. Pero, si son personas que saben que tienen este padecimiento [desde hace] tiempo, va a requerir un poco más de tiempo hasta que sus niveles lleguen [hasta lo que] normalmente debe ser. Esto, va limpiando venas y arterias en el sistema; y tenemos que entrar en esto, ya que el SEÑOR nos ha llamado la atención a esto. Todos debemos comenzar a limpiar nuestro sistema. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p14}
Traten de, todo, lo más posible —yo sé que hay algunos lugares, y por eso digo traten, porque por ejemplo me han llegado mensajes de personas que, en su lugar donde están, solamente, lo único que tienen para comer es puro arroz blanco, y no vamos a decirles que no lo hagan. Ya, que lo junten con otras cosas, con vegetales, con hojas, para que, ya, la fibra que no contiene sea, verdad, complementada. Pero no podemos quitarlo si es lo único que tienen, y el SEÑOR sabe cuál es la situación de cada lugar. Pero, en lo más que se pueda—, eliminar los refinados, las grasas saturadas, los dulces. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p15}
Como pueblo ya sabemos que no debemos estar consumiendo ningún tipo de animal, incluyendo el pescado, que también es carne de animal, es carne de animal marino. Nada de esto debe estar en nosotros, en nuestro sistema: ni el huevo, ni el queso, ni el té con cafeína, ni el café, ni el chocolate, todas estas cosas. El SEÑOR está llamando a que su pueblo, no nada más [que] se prepare en los aspectos espirituales, sino también en el aspecto físico. Y no podemos alcanzar una espiritualidad como el SEÑOR requiere de su pueblo en esta hora, si nosotros no le estamos dando a este cuerpo, realmente, el combustible que necesita, con comidas —que no son [alimenticias]; bueno, no se les puede llamar ni comidas—, con chatarra, que el mundo pues ha puesto y nos hemos acostumbrado [a comer]. E, inclusive, muchas veces cuando estábamos en la iglesia, en el sistema de la iglesia, muchas personas oficiaban sabiendo que tomaban café, que tomaban coca-cola, que tomaban pepsi-cola, que eran comedores de chocolate. De hecho, en esta fiesta pagana del día de los enamorados, pues, traían chocolates a los niños en los departamentales. Era una guerra que se tuvo, con mucho disgusto, mientras se estuvo guerreando dentro del sistema. Pero, gracias a Dios, el SEÑOR nos ha apartado para que podamos tener paz, podamos tener tranquilidad y podamos estar lejos de todas estas cosas. Porque el SEÑOR está educando un pueblo, el SEÑOR ha tomado el control de la educación de su verdadero pueblo en estos días, amados hermanos, y nosotros no nos podemos dar el lujo de no hacerle caso al Rey de reyes y SEÑOR de SEÑORes, porque Él, mejor que nadie, sabe lo que cada uno de nosotros vamos a tener que afrontar y por eso Él nos está llamando a esto. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p16}
Todo lo que contenga cafeína, todo lo que contenga el whey, que es la proteína de la leche animal, lácteos, todo esto, llena nuestros pulmones de flema, creando, así, crisis respiratorias como asma, bronquitis, pulmonía, sinusitis, alergias, etcétera, etcétera, amados hermanos. Y vemos que las personas que han estado padeciendo de este coronavirus, y de otras enfermedades que han surgido —como dije anteriormente, no todo es coronavirus bajo esta situación pandémica que han creado en el mundo; pero sí hay personas que han perecido, pero—, es porque tenían esta mala alimentación y su sistema ya estaba taponado con todo esto. Entonces, ha sido muy difícil para ellos, pues, poder subsistir en esta situación de este problema o de estos problemas que vienen con el tiempo de invierno. Porque realmente, a donde atacan los problemas de invierno es a las vías respiratorias. Entonces, debemos tener nuestras vías respiratorias limpias porque sabemos y entendemos, amados hermanos, que esto ha sido solamente un ensayo de lo que está por venir. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p17}
Así que otra de las cosas [a las] que el SEÑOR llamó mi atención, para compartir con ustedes, amados, es en el cuidado con el pan comprado. Usen su propio pan, hecho en la casa. Hay una receta que el SEÑOR dio a mi esposo cuando yo estaba con el cáncer, según yo había sido diagnosticada que no podía comer nada de trigo porque era alérgica a él. Pero, cuando el SEÑOR dio esta receta, [a] mi esposo —que fue la primaria, [la primera]—, fue llevándonos poco a poco hasta, ya, hacerlo completamente íntegro, integral, 100% de harina integral. Pues, cuando lo hacemos 100% de harina integral tiene que ser de una harina que no se recibe aquí, en la isla, sino que algunos hermanos en EEUU, el SEÑOR los ha tocado para que nos envíen harinas que ellos han conseguido allá, que sí son 100% integrales. Entonces, yo comencé a comer este pan y nunca más tuve ninguna reacción a lo que era el trigo. Así que, el SEÑOR nos llevó poco a poco a darnos cuenta que son todas las cosas adicionales, los preservativos y todas estas cosas que le echan al trigo, lo que hace que este pan nos dé alergias. También sabemos que hay trigo que está adulterado. Y, bueno, el SEÑOR nos va llevando poco a poco porque Él sabe lo que necesitamos y cómo llevarnos a cada uno. Yo les voy a dar la primera receta que el SEÑOR me dejó saber que debía compartir, para que comiencen. Es la voluntad del SEÑOR que se haga pan casero en cada casa de sus hijos. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p18}
* 1 taza de harina de trigo entero
* 1 taza de trigo sin cáscara y sin blanqueador
* ¼ taza de semillas enteras, o puede, si usted desea, molerlas en el momento.
* 2 cucharadas de aceite de oliva prensado en frío, bien pudiera utilizar aceite de uva prensado en frío, o aceite de aguacate prensado en frío. O puede utilizar la linaza, la babita [mucílago] de la linaza, puede poner dos cucharadas de semilla en una taza de agua a remojar desde la noche anterior.
* 1 cucharadita de levadura
* 1 cucharadita de sal
* Entonces, usted, va incorporando al pan, junto con una y media a dos tazas de agua, usted va a mezclar, va a hacer ahí un nivel [una consistencia], de que no le quede muy empapada la masa, sino que usted pueda trabajarla y la pueda amasar bien. No tenemos una medida exacta de cuánto líquido se necesita [para] el pan, porque le voy a explicar que no todas las harinas que se consiguen en todos los lugares tienen el mismo método de absorción. Hay unas que absorben más líquido que otras. Entonces, tenemos que jugar con esto hasta que le llegue el punto, y usted lo va a apuntar, entonces usted sabe que con la harina que usted consiguió, [esa] es la cantidad de agua que se necesita; cada quien tiene que darse a la tarea de hacer esto, porque yo no lo puedo hacer. La harina que nosotros conseguimos acá requiere mucha más agua que las harinas que son completas, que se consiguen en algunos lugares. Entonces, esa, la que es completa, necesita menos líquido.
* Hay otras variaciones que se pueden hacer con esta receta que les acabo de compartir. La taza de trigo entero la puede cambiar por una taza de harina de maíz, o también puede cambiarla por una taza de harina de avena, o de harina de centeno, o harina de millo [mijo], o harina de quínoa, la harina que usted consiga en ese momento. El cuarto de taza de semilla, que le hablé, de la receta, puede cambiarla por hierbas u otras cosas como frutas secas, pero si le echa frutas secas, échele en el agua que va a usar cuatro cucharadas de miel pura o stevia o agave o maple, menciono todas estas porque en diferentes áreas, pues, se consiguen diferentes endulzantes. Si es que usted así lo prefiere, no es necesario, pero si usted lo desea, puede utilizar uno de estos endulzantes.
* Es bien importante que usted amase este pan, y cuando esté bien amasado, que ya no quede nada alrededor del bowl, o de la vasija, o de la mesa donde usted está amasando esto. Que ya no quede pegado a sus manos tampoco, entonces, usted lo pone a reposar, por media hora [a] 45 minutos, en un lugar que esté un tanto caliente, tibio.
* Ya, luego de esto, usted va a sacar esa masa, la va a amasar nuevamente, bastante, y ya, luego, entonces, usted va a ponerle el engrasado que le va a poner al molde donde usted lo va a poner. Siempre trate de utilizar el aceite de coco o el aceite de aguacate o el aceite de uva que son los que más resisten los calores, antes de que se oxiden. Entonces, usted lo que le va a poner ahí con un papelito o algo, es nada más pasarle un chispitito [poquito], así, al molde. Usted lo va a poner ahí, al pan que amasó, ya, por segunda vez, y lo va a dejar que eleve 45 minutos o una hora más.
* Ya, luego, entonces, usted va a poner este pan en el horno a 350 grados por media hora, y luego, va a bajar a 200 grados, por media hora más. Y así usted va a tener un buen pan que va a estar cocinado, tanto por dentro como por fuera. Es bien importante dejarles saber que, cuando el pan está recién hecho, no es el momento para comer. Si usted lo puede picar en rodajitas y ponerlo otra vez en el horno y ponerlo un poquito más tostado y dejarlo 2, 3 días antes de comerlo, es lo ideal para el sistema. Así debiera ser para que todo rastro de levadura que está en él pueda salir, pueda morir, y ya usted no esté expuesto a esto.
* Muchas personas me han preguntado: ¿y qué con la levadura? Esto es algo que es vivo, tiene que estar en refrigeración. Y si no tenemos, ¿qué vamos a hacer? Pues, entonces, ahí trabajamos con lo que es la levadura madre. Si usted tiene un sobrecito de levadura, y usted sabe que es lo último que tiene, que ya no va a poder conseguir más, usted elabora su pan y de esa masa que usted elaboró, pues, usted va a guardar un poco de esta levadura. Puede conseguir un recipiente de barro, enterrarlo en la tierra, en un lugar que sea muy fresco, [en el] lugar donde usted esté. Entonces, usted lo va a llenar de agua hasta la mitad, y va a poner esa levadura dentro de una bolsita plástica bien cerrada, que el agua no entre, y usted la va a dejar ahí dentro, lo va a tapar, y así ese pedazo de masa con levadura, usted lo va a tener disponible día tras día para hacer su pan. Mezcla todos los ingredientes y ya, luego, cuando va a echar el agua para hacer la masa, entonces, usted incorpora bien incorporado este pedazo que usted guardó de masa leudada, pues entonces, el resto de la masa se va a leudar.
No solamente tenemos que hacer pan leudado, están los panes sin levadura, lo vemos en la fiesta de los panes ázimos. Podemos coger los mismos ingredientes que les dije, sin la levadura, y podemos hacer un rico pan. Ya no va a crecer, es un pan aplastadito, es como si fueran unas tortillas; pero también lo podemos hacer, de igual manera. Lo único que, cuando las entremos al horno, si es que quiere hacerlas horneadas, pues, entonces, las vamos a poner a 250 grados por unos 15-20 minutos, entonces luego lo vamos a bajar a 150 grados por unos 15 o 20 minutos más, ¡y ya tenemos nuestro pan sin levadura. O, también, podemos hacerlo encima de la estufa, es otra forma de hacerlo. Sé que el SEÑOR le va a dar sabiduría a cada uno de sus hijos en la ancha faz de la tierra, porque él prometió que, en el fin del tiempo, iba a dar recetas muy sencillas pero muy beneficiosas y sabrosas a los diferentes lugares, para que estuviéramos listos para estas situaciones que se avecinan. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p19}
Otra de las cosas que el SEÑOR llamó mi atención es a que tengamos granos enteros como cereales y leguminosas, aceites enteros como les acabo de hablar anteriormente de aguacate, de linaza, de uva, de oliva, de coco, el que usted consiga. La sal entera, que les dije anteriormente, la miel o azúcar de coco. Hay en algunos lugares. Aquí, en Puerto Rico, es muy cara; pero hay otros lugares que me han reportado que ese es el azúcar que tienen ahí, que es muy barata. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p20}
Así que todas estas cosas, amados hermanos, tengamos provisión, tengamos provisión. ¿Por qué? porque ya estamos viendo, ya no nos tienen que decir: “mira, porque esto va a pasar”; ya estamos viendo lo que está pasando en el mundo. Yo sé que, ahora mismo, cada lugar del planeta ha sido impactado por algo, por alguna situación, y lo más que vemos es la hambruna, la hambruna viene y viene rápido, amados hermanos, así que tenemos que tener en cuenta esto. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p21}
Hace ya casi dos años, un poco más, que nosotros, acá, como familia, no consumimos ningún tipo de azúcar, solo frutas. Así que usted puede, también, tener un poco de reserva de frutas disecadas. Puede hacer un deshidratador casero para que usted pueda disecar frutas, o bien, usted si aún, todavía, puede en el lugar donde está, entrar por internet y comprar uno, o si en el lugar donde usted está usted sabe dónde los venden, hágase de uno, es bien importante esto en esta hora. Hay frutas secas, como les dije anteriormente, como cranberries [arándanos], pasas, los peaches [melocotón, durazno], todas estas cosas. Siempre, cuando consuman frutas secas, especialmente de las que ya las consiguen así, secas, usted sabe que le echan bastante azúcar para la preservación —en algunos casos, no en todos—. Así que usted puede ponerlas a remojar de un día para otro, para sacar el exceso de azúcar e hidratarlas, y, así, usted las puede consumir; es mucho mejor para su sistema. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p22}
En semillas trate de tener linaza, ajonjolí, la semilla de la calabaza, la semilla de girasol, la semilla de amapola y otras semillas que, bien sé, que puede haber en su lugar —que son comestibles—, y que, yo sé, que el SEÑOR le va a iluminar para que usted pueda tener. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p23}
El SEÑOR también llamó mi atención a desparasitar el sistema. ¡La semilla de la papaya es tremenda para esto! Hay un aderezo que se prepara muy rico y, a la misma vez, pues, sirve —en el uso correcto del mismo—, para desparasitar tanto adultos como niños. El aderezo se prepara de la siguiente manera: {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p24}
– media taza de semilla de papaya,
– una taza de aceite de oliva,
– 2 granos de ajo;
– un octavo de cebolla, si es lila mucho mejor, pero usted le echa la que usted tenga en ese momento;
– y un poco de sal, un chin [poquito] de sal entera.
Entonces, usted mezcla todo esto y hace un buen aderezo [para poner] encima de las ensaladas, encima de cualquier cosa que usted vaya a comer. Pero, cuando la vamos a utilizar como desparasitante, pues entonces, la vamos a tomar en las noches, dos cucharadas de esto en las noches, como le dije anteriormente. Pero le va a poner unas gotitas, a estas cucharadas, le va a poner unas gotitas de miel —porque el parásito le encanta el azúcar, entonces, buscando la miel va a llegar a esto que usted está ingiriendo y lo va a consumir, y va a morir—. Debe tomarlo por veintiuna noches, tanto adultos como niños, para que pueda ser muy efectivo en el sistema. Esto, lo debemos hacer cada tres o cada seis meses. Por eso es importante [tener árboles de papaya]. Acá, nosotros, aquí, en el caribe, en Puerto Rico, el SEÑOR nos mandó a sembrar muchos arbolitos o arbustos de papaya, y estamos trabajando en eso por dirección de Dios. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p25}
Otra de las plantas que sirve, también, para desparasitar es el té de la artemisa o altemisa [artemisia vulgaris]. En algunos lugares no tienen la artemisa o altemisa, sino ajenjo; también lo pueden utilizar. Usted va a coger: {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p26}
– dos ramitas de esta artemisa o ajenjo,
– y va a poner una taza de agua a hervir.
Y lo va a hacer como infusión. Sabemos que, cuando hierve, apaga el fuego. Usted tapa, usted echa ahí la ramita, y le va a echar —cuando usted ya lo cuela y lo pone en su taza—, dos o tres gotitas de miel. Y, esto, también lo podemos tomar en las noches, por 21 días, tanto adultos como niños. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p27}
Una de las cosas que también el SEÑOR me llamó la atención es a hacer nuestro propio jabón para bañarse, para lavarse, para lavar la ropa, para champú de cabello. Me gusta mucho el jabón [de] cuaba de república dominicana [fabricado en base a resina de pinus occidentalis], porque corre todas estas bases, tanto en humanos como animales, y también es medicinal para la piel. Sé que, en todos los lugares, el SEÑOR ha puesto algo semejante, o el SEÑOR va a dar la sabiduría para que usted lo pueda hacer. Próximamente, vamos a estar pasando una receta, por el grupo, para que puedan comenzar a confeccionar su propio jabón. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p28}
En las pastas de dientes, podemos utilizar el carbón solo, podemos también hacer una mezcla de un poquito de baking soda [bicarbonato] con un poquito de aceite de coco y agua oxigenada. Usted va a mezclar esto [hasta] que quede una pasta, y usted se puede cepillar con esto. También, para enjuague bucal, puede utilizar el té de menta, el té de artemisa, el té de poleo, el té de la hoja de los cítricos, también lo puede utilizar, y esto le va a ayudar mucho para mantener su dentadura al día —muy importante en este tiempo—. Aquí, en Puerto Rico, y en otros lugares también, me han reportado, dentro de lo que es el territorio americano, si usted quiere ir al dentista y usted no pasa por el protocolo de esta situación del coronavirus con chequeos y pruebas y todas esas cosas, pues, usted no puede tener acceso a un dentista, así que sabemos que todas estas cosas se van a seguir apretando, y tenemos que cuidarnos. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p29}
También, el SEÑOR llamó mi atención a lo que es la cándida, es un hongo. Hay muchas personas que, por no decir la mayoría de las personas, este hongo está en el sistema. Aquellos que tienen problemas de evacuación tienen más en su intestino grueso; pero esto es algo que, normalmente, existe dentro del sistema en el intestino, es parte de lo que se llama el proceso de descomposición de las heces fecales. No voy a tocar mucho de eso porque, ya, creo que anteriormente hemos hablado de esto, pero, cuando comemos cosas enlatadas, azúcares refinados, comida chatarra, en fin, esto va creciendo y creciendo, se sale de control. Se sale del intestino, invade nuestro sistema, especialmente, el cerebro, y comenzamos, entonces, a padecer de muchas cosas, en especial, lo que es la demencia. Y, tenemos que tener cuenta [cuidado] con esto. Por eso es que el SEÑOR nos ha mandado a que comamos hierbas amargas, que consumamos bastante la fruta de los cítricos, y si no tiene el cítrico como tal, la fruta en el árbol, utilice el té de las hojas de los cítricos. Y evite consumir todo lo que es alimento chatarra, colorantes, emulsificantes. Hay unas siglas, que debemos cuidarnos de ellas, que es el BHT y BTA, espesantes, preservativos, aditivos, todas estas cosas deben salir [de nuestra dieta]. Mientras más nos vayamos a comer de la tierra, mucho mejor para todos nosotros, mucho más el sistema va a estar apto para todas las cosas que se nos aproximan. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p30}
Vele, siempre, que vaya bien de vientre: todos los días al baño en buena cantidad. Si come dos veces, debe ir dos veces, si come tres veces, debe ir tres veces, esto es lo normal. Tome, también, agua, en la cantidad necesaria, suficiente. Y, si vive en un lugar cálido, pues, va a tomar un poco más. Usted puede pesarse, ese peso —de usted—, usted lo va a dividir en dos, y ese resultado que le [da] es la cantidad de líquido que usted debe consumir en el día. Claro está que, si usted toma tés en el día, eso también usted lo va a sumar a ese líquido. Si usted es una persona que se ejercita, está trabajando en el campo, está sudando más, está en construcción, está sudando más, pues, entonces, usted sabe que debe tomar más cantidad de líquido. Tomar el líquido cuando usted siente sed, no es el punto para tomar, porque ya el cuerpo entró en una deshidratación. Así que es importante que tomemos líquido a conciencia, no cuando el cuerpo ya nos lo está pidiendo. Esto es bien importante. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p31}
Otra de las cosas que el SEÑOR llamó mi atención es a que preparemos filtros para filtrar las aguas. Hemos pasado esto, también, por los grupos, anteriormente. Que, con algodón, con piedra, arena y carbón podemos preparar filtros, para que tengamos un agua potable, muy buena, para nosotros consumir. Sabemos que todo, por el enemigo, instigado por el enemigo de las almas, va a ser trastocado, y Dios está preparando un pueblo para que no sufra en medio de esta adversidad. Y sabemos que Él tiene poder para limpiar todo alimento, que, claro, sea aprobado por Él. Sabemos que, en muchos lugares, pues, hay personas que nos reportan y nos dicen: “hermana, pero Levítico habla acerca, allí, de que se pueden comer algunas carnes, algunas no”. Amados hermanos, el SEÑOR está llevando a su pueblo de vuelta al plan original, ahí no existían carnes. Así que, amados hermanos, limítense. En el nombre del SEÑOR se los pido. Si no quiere sufrir estragos en su vida física y espiritual, no toque nada que provenga de animal en esta hora, amados hermanos. Obedezca al SEÑOR, y el SEÑOR le va a proveer para que usted pueda seguirse sustentando. Así que, es bien importante, amados hermanos, que entendamos esto. El SEÑOR tiene poder de limpiar las aguas donde quiera que nosotros estemos, para que tomemos; pero, amados hermanos, recordemos que lo que nosotros podemos hacer, el SEÑOR no lo va a hacer por nosotros. Si el SEÑOR nos está llamando la atención a que nosotros hagamos filtros, o tengamos filtros, para que nosotros podamos tener agua buena para tomar, para cocinar, amados hermanos, hagámoslo. Seamos obedientes, porque Él sabe por qué lo dice, porque Él ve el fin desde el principio. Por eso estoy compartiendo esto con ustedes, amados hermanos, porque el SEÑOR me dejó saber todas estas cosas. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p32}
Hágase una pregunta, como me dijo el SEÑOR a mí: “¿puedo yo prescindir de ir a la ciudad, si no tengo que hacerlo? ¿puedo yo prescindir de ir a la ciudad, si no tengo que hacerlo? ¿tengo yo lo que necesito en el lugar donde estoy, de tal manera que yo no tenga que ir a nada a la ciudad?” Hagámonos esta pregunta, y, si la podemos contestar satisfactoriamente, ¡gloria sea al SEÑOR! Vienen tiempos muy tremendos en los próximos meses frente a nosotros, amados hermanos, y va a ser muy peligroso estar yendo a las ciudades. Ahora que podemos, amados, y tenemos, [en] alguna medida, que todavía el correo llega —a veces—, a algunos lugares cercanos de donde estamos, amados hermanos, [consideremos], ¿qué necesitamos? Olvídense de todo lo que corra con energía, aún la solar, por qué, pues, los que tienen sistemas solares, o los que tenemos sistemas solares pequeñitos —no como esos que son bien caros, no, algo casero que hemos hecho este—, pues sabemos que a lo mejor va a llegar el momento en que ese sistema no [va a] funcionar por algún cable, alguna situación que pase, no sé, y yo necesito cosas para moler, para mezclar, todas estas cosas. Entonces, tengo que pensar un poquito más allá, [para] no depender de ese sistema solar. Aquellos que tienen plantas eléctricas, ¡cuando no haya diesel, cuando no haya gasolina, amados hermanos! Siempre les he dicho a las personas —por muchos años dimos clases de supervivencia a las personas, y—, siempre les poníamos el escenario más difícil, porque, ¡gloria a Dios si no llegamos a ese escenario más difícil! pero si llegamos, estamos, ya, listos. Así que corramos todas las bases en el nombre del SEÑOR. Pidamos sabiduría al SEÑOR, de lo que necesitamos, y preparémonos con lo que podamos, lo que, ya, nosotros no podemos hacer, a conciencia que no podemos hacer —no por dejadez, sino porque realmente podemos ir delante del SEÑOR con manos limpias y decir: “SEÑOR no lo pude hacer porque no podía, y Tú sabes que es así”—, el SEÑOR lo va a hacer por nosotros. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p33}
También otra pregunta: “¿a qué voy a la ciudad? ¿a conseguir qué?” Pues, eso que yo voy a la ciudad para conseguir es en lo que yo tengo que trabajar, para poder ser auto sostenible de eso. Eso es en lo que tenemos que trabajar, amados hermanos. Haga una lista en base a esto y trabaje en esta preparación. Aprendamos, como me dijo el SEÑOR, a tomar agua del río, de manantial, de lluvia, el SEÑOR me dio una advertencia muy grande, amados hermanos, ¡que no tomemos agua de la ciudad! Y, si Él dice esto, es porque Él sabe. Ya Él lo ha dicho, anteriormente nos lo ha dejado saber; pero nos lo vuelve a recalcar, amados hermanos. ¡Qué Dios tan amoroso, que corre todas las bases para que su pueblo esté bien! ¡Quiera Dios que ninguno tenga que sufrir por ser desobediente, sino que todos caminemos en obediencia en Cristo Jesús! Es mi ruego, es mi anhelo y es mi oración en esta hora. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p34}
Busquemos al SEÑOR de todo corazón. Sembremos como Él nos lo ha especificado. Aprendamos de sus plantas medicinales. Pongamos nuestras manos a trabajar, a hacer un buen pan para nuestros hijos, para nosotros mismos, en nuestros hogares, amados hermanos. Hay muchas personas que saben hacer unas granolas buenas, preciosas, ricas, con muy poco. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p35}
Amados hermanos, el SEÑOR ha llamado mi atención a que debemos abrir rápidamente en estos próximos días, otro canal por la vía de telegram. Y no sé si algunos pudieran participar, pero los que no, pueden pasarlo a algunas personas que no van a poder tener telegram; por whatsapp pueden pasarlo. O si no, cuando se suban a youtube, ahí pueden cogerlo. Amados hermanos, en muchos lugares habemos muchas personas que podemos hacer cosas, podemos compartir recetas, no tienen que hacer un vídeo, sencillamente compártalo por audio, por escrito, y su pueblo se va a beneficiar de esto para que estemos todos listos. Un canal donde pasemos puras recetas, recetas que nos han ayudado para poder subsistir, verdad, ante una economía débil, o cero economía, en el hogar. Así que, amados hermanos, vamos a estar trabajando en esto, en los próximos días, con la ayuda del SEÑOR. Y yo sé que, por gracia del SEÑOR, todos vamos a poder ser bendecidos, todos aquellos que compartan sus recetas, sabemos que nada que tenga leche, huevo, queso, nada que venga proveniente de animal va a ser aceptado, así que trabajemos en esto para que estas recetas sean como al SEÑOR le agrada. Para un pueblo que se está preparando para tener una mente despierta, para poder, así, recibir su ley, sus mandamientos, sus estatutos, sus fundamentos de fe, y que, así, podamos ir caminando de vuelta a este plan original que el SEÑOR quiere para cada uno de nosotros. Quiera Dios que así sea, amados hermanos, sigamos orando unos por los otros, y que podamos en el nombre del SEÑOR poder ser bendecidos en Él. Bendiciones para todos. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #01, es.p36}
Testimonio: 16-08-2020 #02
Agosto 16, 2020; 3:30 de la tarde. El SEÑOR me dijo: “haz inventario, no desperdicies nada, pues el hambre arrecia. ¡Prepárense!”
Amados hermanos, trabajemos en esto, no lo dejemos al azar, no lo dejemos a —como muchos he escuchado por años—: “no nos preocupemos, Dios proveerá”. Dios no le va a proveer, amados hermanos, a nadie que no sea diligente. Si nosotros caemos en negligencia, en presunción, no vamos a recibir ayuda del SEÑOR. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #02, es.p1}
Amados hermanos, preparémonos, porque si el SEÑOR nos está diciendo esto, es porque es muy necesario. Que el SEÑOR nos bendiga. {Daisy Escalante: 16-08-2020 #02, es.p2}
Testimonio: 17-08-2020 #01
Agosto 17, 2020. Me vi que llegué a un lugar donde nunca [me] había visto antes. Yo llegué a ese lugar y había un plantel. Allí habían muchas personas que estaban sentadas, como recibiendo una orientación, una charla, por una persona que estaba totalmente vestido de blanco. Todo era vestido de blanco, hasta sus zapatos, sus medias, todo era vestido de blanco. Yo llegué allí porque se me dejó saber que yo debía alojarme allí, en aquel lugar, porque tenía que subir a unas montañas cercanas de ahí. Así que yo llegué ahí y, cuando entré a la sala y vi lo que se estaba llevando a cabo, vi que en los bordes de las personas que estaban sentadas —los bordes que daban hacia las paredes—, había camino [por] donde yo podía pasar y llegar al lugar donde ya me estaban dirigiendo, para yo alojarme ahí. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p1}
Prontamente, escuché al SEÑOR que estaba vestido de blanco, el hombre que estaba vestido de blanco, que dio una señal, dijo algo —yo no entendí muy bien lo que él dijo, estaba bastante lejos—, y pusieron cosas en el camino por donde yo iba a pasar, para que yo no pasase. Así que, cuando llegué ahí, pedí permiso para pasar porque habían cosas en el medio. Y las personas no me ayudaban, no movían sus cosas. Así que yo procedí a brincar por encima de una de ellas, para llegar y seguir mi curso a donde se supone que tenía que ir a alojarme. Y, pronto, escuché el hombre que me dijo: “nosotros aquí estamos estériles y tú nos vas a contaminar. ¡Vete, no te acerques a nosotros, no te nos acerques!” {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p2}
Así que yo lo miré a él, a todos los que estaban con él. Vi que todos compartían su opinión en aquel lugar de esta gran llanura. Había muchas personas allí que, aunque el lugar yo no lo reconocía, yo conocía a muchas de las personas que estaban allí, de diferentes lugares del caribe, de islas, de continentes [en] que yo he estado. Y yo reconocí a aquellas personas, pero todos compartían el mismo pensar de este hombre. Así que, pronto, [después] que me alojé allí [y] puse mis cosas, se me indicó ir a ver a los necesitados, a las montañas. Comenzamos, allí, a pasar por un camino, [a] un lugar que me llevaron en carro. Pasamos por una casa. Me dijeron, antes de comenzar a subir la montaña: “porque el carro tiene que llegar hasta un lugar, y luego de ahí vamos a continuar a pie. Vamos, entonces, a pasar por esta casa”. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p3}
Cuando vi la casa, tenía un pequeño letrero, donde decía: “se venden tés de plantas”. Pronto, me preguntó la persona que me guiaba, que si los que iban conmigo y yo queríamos tés de plantas. Así que yo le dije que sí, y vi que el letrero decía: “té de hoja de papaya, té de hoja de tamarindo, té de hoja de parcha, y té de hoja de ajenjo”. Me quedé mirando aquello, así que yo pedí un té de hojas de parcha [pasiflora quadrangularis], y luego comenzamos. Luego, salido de ahí me di cuenta que el té era un té frío. Y salimos de ahí hasta dejar el carro hasta el lugar donde era, porque ya, de ahí, íbamos a tener que subir a pie. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p4}
Llegamos, entonces, al lugar donde íbamos a comenzar a subir hacia la montaña, a pie. Y un hombre necesitado, pero feliz, me dijo: “venga, la estaba esperando. Venga, le mostraré dónde vivo y la vista desde aquel lugar”. Así que fui con él, subí, por unas escaleras, a su apartamento. Las escaleras no eran dentro de la casa, sino que eran por fuera y, al subirlas, él abrió la puerta, y vi que su apartamento era muy angosto, era como cuatro pies de profundo [aprox. 1,20 metros] por ocho pies de ancho [aprox. 2,40 metros]. Pero, allí, él tenía todo lo que necesitaba: tenía una pequeña neverita como de oficina, pequeña, una estufa, también, muy pequeñita, un lugar donde se bañaba, una pequeña bañerita, un baño, o sea un inodoro, y tenía un columpio que él al sentarse se echaba hacia atrás y se acostaba con sus piernas enganchadas en otros columpios que habían al frente. Él me dijo: “mire como yo le hago”. Y, en ese momento él, de las rodillas hacia abajo, yo no me había percatado, pero eran prótesis lo que tenía. Así que, se las quitó, y se enganchó en esos columpios pequeños, y ahí dormía, suspendido del techo. Y, entonces, yo le pregunté: “¿desde cuándo usted está aquí?” Entonces, él me contestó que desde el 2017. Me quedé así, pensando, y vi cuando él se bajó de los columpios, se puso otra vez sus prótesis, y me dijo: “venga que le voy a mostrar”. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p5}
Entonces, salimos al pequeño balcón de la entrada de su casa, y me dijo: “observe toda esta tierra, observe”. Entonces, yo me puse a ver, y cuando vi, vi urbanizaciones, vi ciudades, que estaban completamente inundadas de agua. El agua, la veía que, era así —en algunos lugares—, como marrón oscuro; en otros lugares, como marrón claro; pero veía otros lugares que, también, estaba como azul. Y yo lo veía todo así. Yo veía que las casas estaban en columnas dentro de esta agua, y el agua seguía subiendo, pero ya todos estaban, ahí, acostumbrados, ¡y no veían peligro alguno! Entonces, yo le pregunté al hombre: “¿qué moneda ustedes usan aquí?” Y él me contestó: “meso, el yuan”. Y yo me quedé así, cuando él me dijo eso: “meso, el yuan”. Y me dijo: “este es el mar pacífico, y ya nos ha dejado sin llanura. Pero no le detengo más”. Me siguió diciendo: “así que, siga subiendo por la montaña; allá, la esperan”. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p6}
Así que yo me uní a los demás. Continué mi camino y, al llegar a una estructura amplia que había allí, vi personas que se cuidaban entre ellos. Había mucha necesidad, mucha hambre en aquel lugar. Vi una persona que se encargaba, también, de los animalitos de aquellas personas, porque los animalitos también estaban enfermos. Era como que algo había llegado ahí y, tanto las personas como los animales, estaban enfermos. Y una persona que estaba allí me dijo: “firme, firme aquí, porque necesitamos su firma para ayudar a estas personas, y a estos animalitos”. Así que yo dije: “bueno, si lo que necesitan es una firma mía para ayudarlos, ¡claro que sí, claro que se las doy!” Así que le firmé. ¡La SEÑORa se puso muy contenta! Comenzaron, entonces, a ayudar tanto a las personas como a los animalitos. Tenían un lugar donde estaban las personas necesitadas; pero también tenían un lugar, que es lo que le dicen acá en Puerto Rico, un santuario de animales, es como un lugar, una clínica, donde cuidan —ahí—, a los animalitos hasta que se recuperan, y luego los pueden dar en adopción. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p7}
Entonces, mientras yo estaba viendo todo aquello, los que me acompañaban exploraban el lugar y ayudaban a todo el que podían. Así que yo salí de allí porque me dijeron que tenía que ir por un camino, donde iba a haber un guardia, y que él me iba a decir que hacer. Así que yo caminé hacia él, y él me dijo: “muéstreme su identificación”. Y yo la busqué y no la hallé. Entonces, recordé que, luego que dejamos el camino —el carro—, porque íbamos a comenzar un camino, tuvimos que coger un trecho donde era pura agua. Entonces, nos tuvimos que montar en una pequeña lancha, y ahí nos pidieron unos documentos. Y yo me acordé que, en ese momento, yo entregué mi identificación, pero no recordaba que me la hubieran entregado [de regreso]. Entonces, cuando me la pidieron ahí, yo no la tenía. Así que yo le dije a la persona que yo no la tenía en ese momento, pero sabía dónde la podía encontrar. Así que le dije: “voy, entonces, a buscarla”. Entonces, yo bajé rápidamente. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p8}
Los demás quedaron arriba, esperando por mí. Fui a ver a la persona que estaba en la pequeña embarcación, le pregunté. Me dijo: “sí, yo ya estaba pensando llevársela, pues al pedirle los papeles me quedé con ella sin darme cuenta”. Y se puso contento de que la fui a buscar. Me la dio, le di las gracias. Me dirigí, otra vez, montaña hacia arriba. Pero pronto, mientras estaba subiendo a la montaña, otra vez, frente a mí, se paró el hombre vestido de blanco, aquel que me acosaba en la llanura; y no me dejaba marchar. Y dije: “¡Oh, SEÑOR! Ahora, ¿qué hago?” Entonces, pronto, escuché una voz que me dijo: “sube por el otro camino, por dentro del bosque”. Así que, corrí hacia donde me dijeron. Comencé a subir como por algo que era parecido al caño de una montaña, pero era muy ancha. Allí, en un momento dado, encontré frente a mí unos tres escalones bien anchos y bien profundos, y rápido escuché la voz de personas acercándose a allí, a aquel lugar. Y cuando miré, vi a tres jóvenes, dos de ellos conocidos y uno que no le conocía. Así que les pregunté que qué hacían por allí, pero uno me miró sonriente sin contestarme, y rápidamente volteó la vista y siguió, entonces, con los demás que iba. Así que miré, otra vez, los escalones, el alto del primero me llegaba a mi pecho. Así que me impulsé para subir y me agarré a unos matojos [arbusto o renuevo de árbol] de hierba que estaban en él. Y, al hacerlo, pude notar que éste se movía hacia mí, pues estaba anclado como en una tela que flotaba encima del escalón, así que hice rápidos movimientos y pude subir. Y noté que, por las esquinas de cada escalón, bajaba un fino chorro de agua. Yo miraba el segundo escalón y estaba buscando la forma de cómo subir cuando vi que uno de los jóvenes se lanzó sobre el primer escalón y se quedó guindando [colgando]. Así que lo agarré por su camisa y con fuerza sobrenatural, fuerza que jamás en la vida puedo tener si no es de esta manera, lo levanté y lo puse encima de mí y él cayó en el escalón donde yo estaba, ¡lo pude pasar por encima de mí! En ese momento, escuché un ruido y miré hacia donde estaban los otros jóvenes, ¡y ya no estaban! El suelo ya era un abismo, y todo era un hueco, yo no los vi más. Y el joven que ayudé a subir se asustó y retrocedió por otro camino, y tampoco yo lo vi más. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p9}
Así que yo proseguí mi camino hacia los otros dos escalones, con mucha dificultad los subí y llegué al claro de la montaña. Y comencé a apurar el paso para llegar con los que me estaban esperando. Así que, llegué donde ellos, ¡ya había pasado mucho tiempo! Ellos estaban preocupados, les expliqué lo que pasó, y avancé [hacia] donde estaba el policía que me esperaba para que le entregara mi identificación. Éste la revisó y me dijo: “hace cientos de años atrás, estoy custodio de esta asta y esta bandera, esperando que usted llegara, más ya la hora llegó. Vaya por lo que es suyo”. Entonces, en ese momento, yo me quedé pensando en esas palabras, cómo es que hacía tanto tiempo que él estaba ahí esperando hasta que yo llegara, yo no podía concebir una cosa así. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p10}
Entonces llegué hasta la bandera. Allí, cuando miré hacia arriba, hacia la asta, y veo eso que está flotando, que de lejos se veía como una bandera, cuando llego, no es una bandera como tal, sino que era como una cartera. Y era de un color como crema, casi blanco, y, allí, ésta flotaba con el viento como una bandera cuando le da el viento normalmente. Así que, yo comencé a bajarla y, al tenerla frente a mí, en mis manos, leí que esta cartera tenía encima unas letras. Y decía mi nombre en letras de color oro. Pronto, cuando la tenía así, en mis manos, escuché una voz que me dijo: “guárdala, pues, se te dirá cuándo abrirla. El tiempo está cerca”. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p11}
En ese momento, amados, ahí desperté. Y se me refirió: “Apocalipsis 11”. Hay muchas cosas que yo, cuando despierto de estos sueños, no puedo entenderlas. Pido al SEÑOR discernimiento, pido al SEÑOR su dirección para que me haga entender todas estas cosas, pero, ciertamente, todo lo que el SEÑOR nos deja saber tiene algún propósito. Pido al SEÑOR que me dé su sabiduría para poderlo entender. Espero en el SEÑOR que, muchos, podamos darnos cuenta que, a pesar de las dificultades y de las vicisitudes que vamos a tener en el camino frente a los diferentes designios que el SEÑOR tiene para cada uno de nosotros, no nos intimidemos, sino que avancemos. Van a venir obstáculos fuertes, unos más que otros, gente que nos va a desanimar, gente que va a hacer hasta lo imposible por sacarnos de nuestro camino. Pero, si tenemos una conexión directa con Dios, el SEÑOR nos va a dejar saber por dónde ir y qué hacer. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p12}
Quiera Dios que así sea, es mi ruego y oración por cada uno de ustedes. Que el SEÑOR nos bendiga. {Daisy Escalante: 17-08-2020 #01, es.p13}
Apocalipsis 11
1 Y me fue dada una caña semejante a una vara, y el ángel se puso en pie diciendo: Levántate, y mide el templo de Dios, y el altar, y a los que adoran en él.
2 Pero el patio que está fuera del templo, déjalo aparte, y no lo midas, porque es dado a los gentiles; y ellos hollarán la ciudad santa cuarenta y dos meses.
3 Y daré [potestad] a mis dos testigos, y ellos profetizarán por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio.
4 Éstos son los dos olivos, y los dos candeleros que están en pie delante del Dios de la tierra.
5 Y si alguno quisiere dañarles, sale fuego de la boca de ellos, y devora a sus enemigos; y si alguno quisiere hacerles daño, debe de ser muerto de la misma manera.
6 Éstos tienen potestad de cerrar el cielo, para que no llueva en los días de su profecía, y tienen potestad sobre las aguas para tornarlas en sangre, y para herir la tierra con toda plaga cuantas veces quisieren.
7 Y cuando ellos hubieren acabado su testimonio, la bestia que sube del abismo hará guerra contra ellos, y los vencerá, y los matará.
8 Y sus cadáveres [yacerán] en la plaza de la gran ciudad, que espiritualmente es llamada Sodoma y Egipto, donde también nuestro Señor fue crucificado.
9 Y los de los pueblos, y tribus, y lenguas, y naciones verán los cadáveres de ellos por tres días y medio, y no permitirán que sus cadáveres sean puestos en sepulcros.
10 Y los moradores de la tierra se regocijarán sobre ellos, y se alegrarán, y se enviarán dones unos a otros; porque estos dos profetas han atormentado a los que moran sobre la tierra.
11 Y después de tres días y medio el Espíritu de vida enviado de Dios, entró en ellos, y se alzaron sobre sus pies, y vino gran temor sobre los que los vieron.
12 Y oyeron una gran voz del cielo, que les decía: Subid acá. Y subieron al cielo en una nube, y sus enemigos los vieron.
13 Y en aquella hora fue hecho gran terremoto, y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y siete mil hombres murieron en el terremoto; y los demás se espantaron, y dieron gloria al Dios del cielo.
14 El segundo ay es pasado; he aquí, el tercer ay viene pronto.
15 Y el séptimo ángel tocó la trompeta; y fueron hechas grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos de este mundo han venido a ser de nuestro Señor, y de su Cristo; y reinará para siempre jamás.
16 Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus sillas, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios,
17 Diciendo: Te damos gracias, oh Señor Dios Todopoderoso, que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado.
18 Y se han airado las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo para que los muertos sean juzgados, y para que des el galardón a tus siervos los profetas, y a los santos, y a los que temen tu nombre, pequeños y grandes, y para que destruyas los que destruyen la tierra.
19 Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto fue vista en su templo. Y hubo relámpagos, y voces, y truenos, y un terremoto, y grande granizo.
Testimonio: 18-08-2020
Agosto 18, 2020. Se me refirió una crisis muy aguda frente a nosotros. Se me repitió varias veces que todo aquel que tenga algo de economía, debe poner este dinero donde aprovecha. “¡Prepárense! Pues”, se me dijo, “un choque está frente a vosotros: alimento, abrigo, techo, plantas medicinales”. {Daisy Escalante: 18-08-2020, es.p1}
Vi que muchos habían escuchado la voz suplicante del SEÑOR desde hace mucho tiempo, y no se apuraron a ser diligentes, y [a] éstos les vi desprovistos de lo que realmente salvaría sus vidas y las de otros en esta hora de gran prueba. Yo veía cómo, las masas eran marginadas en sus casas, ¡y no se les permitía salir! Estos rogaban por alimento y agua, pues estaban encerrados en las ciudades. {Daisy Escalante: 18-08-2020, es.p2}
Se me dijo: “todo el que permaneció en las ciudades, decidió depender del sistema del enemigo. Les dejé saber mis designios, ya, más de tres años atrás, y éstos cerraron sus oídos, se burlaron, escarnecieron mis dichos. Y ahora, ¿qué harán? Lamento, lloro y espanto llegará a su puerta. ¿Qué beberán los que dependen del adversario para agua? Y, ¿qué comerán los que no sembraron? Yo no mudo, y no puedo premiar la negligencia. Muchos, muchos, perecerán, porque la conveniencia fue su aliada. ¡Tardos en escuchar, rápidos en desobediencia, viviendo en ciudades como Yo no mandé! ¡Endeudando sus vidas cuando di mandamiento de no hacerlo! ¡Sacrificaron sus hijos a moloc, entregándolos al fuego de la perdición en las filosofías de mi adversario! ¡Desgastan su vida en lo que no aprovecha porque el fruto de sus esfuerzos fue echar agua en cisternas rotas! Veneran la ciencia, que los aniquilará; la tecnología, que los aplastará. Aun así, creyendo ser creyentes de mis dichos, hablan a otros palabras vacías, salidas de vidas que dan testimonio de rebeldía hacia Mí. Aferrándose a lo que tienen en las ciudades, perecerán en éstas. {Daisy Escalante: 18-08-2020, es.p3}
En un momento suena una alarma; y el entendido ve el mal y se aparta, sabiendo que, lo que dejó atrás, será devastado y no le verá más. Más, el que dice ser mi pueblo, no escucha la voz de alarma, y se goza consolando su corazón [con este dicho]: “vino una ola y sobreviví; y ciertamente así será con las otras”. Oyen, pero no escuchan; miran, y no ven, porque su mente y corazón están enredados en los tentáculos del maligno. ‘Sin profecía el pueblo se desenfrena’, y esto es cumplido. {Daisy Escalante: 18-08-2020, es.p4}
Cada quien dio su opinión de los tiempos, y todos alzaron la voz referente a esto, aun viendo ante ellos que el tiempo era otro. Se ocuparon en lo que no aprovecha. Con razonamientos de mentira que hablaban a su propio corazón, rebajando la norma en vez de elevarla. Construyeron castillos sobre la arena, aun viendo que el mal salía de su asiento. Desde sus antepasados, arrastrando rebeldía, sedujeron a muchos en su camino, y hoy sufrirán, porque desecharon los ruegos del Santo de Israel. Casa pequeña, terreno amplio, agua propia, sembrar alimento y medicina, les causaba malestar y descontento. Y ahora, ¿qué harán? Eso se asemeja a un hombre que, viendo una pared de agua venir a todo vapor hacia la orilla, permanece en ésta, desafiante, gritándole a la pared de agua: “yo con mi fuerza te pararé, y de aquí no pasarás”. ¡Ésta es la locura de los tales! El entendido ve el mal y se aparta. No habrá salvación para el que practique la presunción. {Daisy Escalante: 18-08-2020, es.p5}
En ese momento, amados, ahí desperté. ¡Oh, amados! quiera Dios, quiera Dios que podamos escapar de todo esto que se avecina, pero no por nuestras propias fuerzas sino siendo obedientes a lo que el SEÑOR nos ha dejado saber desde hace tiempo, para que así, amados hermanos, podamos ser victoriosos en Él. Que el SEÑOR nos bendiga. {Daisy Escalante: 18-08-2020, es.p6}
Testimonio: 21-08-2020
Agosto 21, 2020. En sueños, yo estaba en un lugar donde una confusión grande había. Allí, vi una SEÑORa treparse en una escalera de cinco escalones para, según ella, sentirse segura; pues todo, a su alrededor, era caos. Pasé a su lado y le dije: “mire, un autobús viene, venga conmigo, salgamos de aquí”. Pero ésta estaba tan estática que no se atrevía a bajar de la escalera. Mucho luché con ella hasta que logré que bajara, y, ya, la guagua había pasado de nosotras. Grité al de la guagua, y éste me oyó y se paró, dio reversa y pudimos subir. {Daisy Escalante: 21-08-2020, es.p1}
Mientras íbamos en la guagua que nos llevaría hasta las orillas de la ciudad, para, así, llevar a la SEÑORa a salvo a un refugio cercano —allí, en un campo—, vi que tres jóvenes se subieron en una parada, a la guagua. Y fueron hasta la parte de atrás de ésta y se sentaron. Estos jóvenes, no se veía que fueran buenos. Yo les escuchaba reírse a carcajadas y burlarse de los cristianos. Sentado, frente a ellos, estaba un joven cristiano, y ellos comenzaron a molestarlo y a hablarle hasta que el joven cedió y les habló y se dieron la mano en cuestión de una amistad. Vi al joven que les dio la mano, el que era cristiano, y, al darles él su mano, su rostro cambió inmediatamente y se hizo como uno de ellos. Llegando, entonces, el autobús al lugar donde nos detendríamos para bajar, la SEÑORa y yo así hicimos. Y la llevé a un lugar seguro, fuera de aquella perversa ciudad, donde las personas se mataban como fieras feroces en sentido de caza. {Daisy Escalante: 21-08-2020, es.p2}
Pronto, vi una casa muy pequeña al lado de una calle, y vi que conocía [a] los habitantes de ella, y les di voces para que salieran. Ellos salieron a escucharme y a decirme: “nos vamos ya, pero allí hay otra casa que sus habitantes duermen”. Así que fui a ella y entré, y no había por dónde caminar porque todo era un desorden. Todo estaba atestado de cosas. Allí, yo, vi tres jóvenes que estaban atemorizados y querían salir de allí, pero no sabían cómo, así que les ayudé y salimos. Mientras yo los dirigía al lugar seguro, oí unos hombres hablar. Ellos decían: “miren esa mujer que va con los niños, la buscan, y ya le han quitado hasta lo último que tenía de sus bienes, y ahora, ¿a dónde pasará? ¿a dónde quedará?”. Y otro respondió: “ya hablé con un hombre y su esposa, ellos le darán albergue, ya ellos dieron su consentimiento y allí podrá plantar su pie”. {Daisy Escalante: 21-08-2020, es.p3}
Así, pudo escapar aquella mujer, los niños y los jóvenes, y estar seguros. Yo vi que el caos reinaba en aquella ciudad. Se veían malignidades que provocaban y cabalgaban a los humanos de aquella llanura. Entonces, en ese momento, escuché una voz que dijo: “Colosenses 2:8 e Isaías 2”. En ese momento, ahí, desperté. {Daisy Escalante: 21-08-2020, es.p4}
¡Oh, amados hermanos! Quiera Dios que podamos leer la Palabra de Dios y entender lo que el Eterno nos quiere decir a cada uno en esta hora. Quiera Dios que podamos hacer caso y que podamos ser guardados de lo que, muy pronto, está por venir, es mi ruego y es mi oración. Que el SEÑOR nos bendiga. {Daisy Escalante: 21-08-2020, es.p5}
Colosenses 2:8
8 Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y vanas sutilezas, según las tradiciones de los hombres, conforme a los rudimentos del mundo, y no según Cristo.
Isaías 2
1 Lo que vio Isaías, hijo de Amoz, tocante a Judá y a Jerusalén.
2 Y acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová por cabeza de los montes, y será ensalzado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones.
3 Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y Él nos enseñará en sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sión saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.
4 Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra.
5 Venid, oh casa de Jacob, y caminemos a la luz de Jehová.
6 Ciertamente tú has dejado tu pueblo, la casa de Jacob, porque están llenos [de maldades] del oriente, y de agoreros, como los filisteos; y hacen pacto con hijos de extranjeros.
7 Su tierra está llena de plata y oro, sus tesoros no tienen fin. También está su tierra llena de caballos; sus carros [son] innumerables.
8 Además está su tierra llena de ídolos, y a la obra de sus manos se han arrodillado, a lo que fabricaron sus dedos.
9 Y el hombre vil se ha inclinado, y el hombre altivo se ha humillado; por tanto no los perdones.
10 Métete en la piedra, escóndete en el polvo, por la presencia temible de Jehová, y por el esplendor de su majestad.
11 La altivez de los ojos del hombre será abatida, y la soberbia de los hombres será humillada; y sólo Jehová será exaltado en aquel día.
12 Porque día de Jehová de los ejércitos [vendrá] sobre todo soberbio y altivo, y sobre todo enaltecido; y será abatido;
13 sobre todos los cedros del Líbano altos y erguidos, y sobre todos las encinas de Basán.
14 Y sobre todos los montes altos, y sobre todos los collados levantados;
15 Y sobre toda torre alta, y sobre todo muro fuerte;
16 Y sobre todas las naves de Tarsis, y sobre todas las pinturas preciadas.
17 Y la altivez del hombre será abatida, y la soberbia de los hombres será humillada; y sólo Jehová será exaltado en aquel día.
18 Y quitará totalmente los ídolos.
19 Y se meterán en las cavernas de las peñas, y en las aberturas de la tierra, por la temible presencia de Jehová, y por el esplendor de su majestad, cuando Él se levante para sacudir la tierra.
20 Aquel día arrojará el hombre, a los topos y murciélagos, sus ídolos de plata y sus ídolos de oro, que le hicieron para que adorase;
21 y se entrarán en las hendiduras de las rocas y en las cavernas de las peñas, por la temible presencia de Jehová, y por el esplendor de su majestad, cuando Él se levante para sacudir la tierra.
22 Dejaos del hombre, cuyo aliento [está] en su nariz; porque ¿de qué es él estimado?