Manjar Sabático
06-03-2021
Jeremías 9
1 ¡Oh si mi cabeza se hiciese aguas, y mis ojos fuentes de lágrimas, para que llore día y noche los muertos de la hija de mi pueblo!
2 ¡Oh quién me diese en el desierto un mesón de caminantes, para que dejase a mi pueblo, y de ellos me apartase! Porque todos ellos son adúlteros, congregación de prevaricadores.
3 Tensan su lengua [como] su arco, [para lanzar] mentiras; pero no son valientes para la verdad en la tierra; porque de mal en mal procedieron, y me han desconocido, dice Jehová.
4 Guárdese cada uno de su compañero, y en ningún hermano tenga confianza: porque todo hermano engaña con falacia, y todo compañero anda con calumniadores.
5 Y cada uno engaña a su compañero, y no habla verdad: enseñaron su lengua a hablar mentira y se ocupan de hacer perversamente.
6 Tu morada [es] en medio de engaño; de muy engañadores no quisieron conocerme, dice Jehová.
7 Por tanto, así dice Jehová de los ejércitos: He aquí que yo los fundiré, y los probaré; porque ¿cómo he de hacer por la hija de mi pueblo?
8 Saeta afilada [es] la lengua de ellos; engaño habla; con su boca habla paz con su amigo, pero dentro de sí pone sus asechanzas.
9 ¿No habré de castigarles por estas cosas? dice Jehová. ¿No ha de vengarse mi alma de una gente como ésta?
10 Sobre los montes levantaré lloro y lamentación, y llanto sobre los pastos del desierto; porque desolados fueron hasta no quedar quien pase, ni oyeron bramido de ganado; desde las aves del cielo hasta las bestias de la tierra huyeron, y se fueron.
11 Y convertiré a Jerusalén en un montón de ruinas, en guarida de dragones; y de las ciudades de Judá haré asolamiento, que no quede morador.
12 ¿Quién [es] varón sabio que entienda esto? ¿y a quién habló la boca de Jehová, para que pueda declararlo? ¿Por qué causa la tierra ha perecido, ha sido asolada como desierto, que no hay quien pase?
13 Y dijo Jehová: Porque dejaron mi ley, la cual di delante de ellos, y no obedecieron a mi voz, ni caminaron conforme a ella;
14 antes se fueron tras la imaginación de su corazón, y en pos de los Baales que les enseñaron sus padres.
15 Por tanto así dice Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí que a este pueblo yo les daré a comer ajenjo, y les daré a beber aguas de hiel.
16 Y los esparciré entre gentes que ni ellos ni sus padres conocieron; y enviaré espada en pos de ellos, hasta que yo los acabe.
17 Así dice Jehová de los ejércitos: Considerad, y llamad plañideras que vengan; y enviad por las [mujeres] hábiles, que vengan;
18 que se den prisa y hagan lamento sobre nosotros, para que nuestros ojos derramen lágrimas, y nuestros párpados destilen aguas.
19 Porque voz de endecha fue oída de Sión: ¡Cómo hemos sido destruidos! en gran manera hemos sido confundidos. ¿Por qué dejamos la tierra? ¿Por qué nos han echado de sí nuestras moradas?
20 Oíd pues, oh mujeres, palabra de Jehová, y vuestro oído reciba la palabra de su boca; y enseñad endechas a vuestras hijas, y cada una a su amiga, lamentación.
21 Porque la muerte ha subido por nuestras ventanas, ha entrado en nuestros palacios; para talar a los niños de las calles y a los jóvenes de las plazas.
22 Habla: Así dice Jehová: Los cuerpos de los hombres muertos caerán como estiércol sobre la faz del campo, y como manojo tras el segador, que no hay quien lo recoja.
23 Así dice Jehová: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en su riqueza.
24 Mas el que se hubiere de alabar, alábese en esto, en entenderme y en conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque en estas cosas me complazco, dice Jehová.
25 He aquí que vienen días, dice Jehová, y visitaré sobre todo circuncidado, y sobre todo incircunciso:
26 A Egipto y a Judá, a Edom, a los hijos de Amón y de Moab, y a todos los arrinconados en el postrer rincón, que moran en el desierto; porque todas las naciones son incircuncisas, y toda la casa de Israel es incircuncisa de corazón.
Testimonios para la Iglesia, Tomo 1. Número 8: ''La religión en la familia''
Me fue mostrada la posición elevada e importante que los hijos de Dios deben ocupar. Son la sal de la tierra y la luz del mundo, y deben andar como Cristo anduvo. Saldrán vencedores de la gran tribulación. El tiempo actual es un tiempo de guerra y prueba. Nuestro Salvador dice en Apocalipsis 3:21: “Al que venciere, yo le daré que se siente conmigo en mi trono; así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono”. La recompensa no se da a todos los que profesan seguir a Cristo, sino a los que vencen como él venció. Debemos estudiar la vida de Cristo, y aprender lo que significa confesarle delante del mundo. {1TI 273.1}
A fin de confesar a Cristo, debemos tenerlo en nosotros. Nadie puede confesar verdaderamente a Cristo a menos que posea el ánimo y el espíritu de Cristo. Si la forma de piedad, o el reconocimiento de la verdad fuesen siempre una confesión de Cristo, podríamos decir: “Ancho es el camino que conduce a la vida, y muchos son los que lo hallan”. Debemos comprender lo que significa confesar a Cristo, y en qué le negamos. Puede suceder que nuestros labios confiesen a Cristo, y que nuestras obras le nieguen. Los frutos del Espíritu, manifestados en la vida, son una confesión de Cristo. Si lo hemos abandonado todo por Cristo, nuestra vida será humilde, nuestra conversación sana y nuestra conducta intachable. La poderosa y purificadora influencia de la verdad en el alma, y el carácter de Cristo manifestado en la vida, son una confesión de Cristo. Si se han sembrado en nuestro corazón las palabras de vida eterna, el fruto será justicia y paz. Podemos negar a Cristo en nuestra vida, entregándonos al amor de la comodidad y del yo, bromeando y buscando los honores del mundo. {1TI 273.2}
Podemos negarle en nuestro aspecto exterior, conformándonos al mundo, o mediante un porte orgulloso o atavíos costosos. Únicamente por la vigilancia constante y tenaz y la oración perseverante y casi incesante podremos manifestar en nuestra vida el carácter de Cristo y la influencia santificadora de la verdad. Muchos ahuyentan a Cristo de sus familias por abrigar un espíritu impaciente e irascible. Los tales deben vencer en este sentido. {1TI 273.3}
Me fue presentado el actual debilitamiento de la familia humana. Cada generación se ha estado debilitando más y la enfermedad, bajo todas sus formas, aflige a la humanidad. Miles de pobres mortales, con cuerpos enfermizos, deformados, con nervios destrozados y mentes sombrías, arrastran una mísera existencia. El poder de Satanás sobre la familia humana aumenta. Si el Señor no viniese pronto a quebrantar su poder, la tierra quedaría despoblada antes de mucho. {1TI 274.1}
Se me reveló que el poder de Satanás se ejerce especialmente sobre los hijos de Dios. Muchos me fueron presentados en condición de duda y desesperación. Las enfermedades del cuerpo afectan la mente. Un enemigo astuto y poderoso acompaña nuestros pasos, y dedica su fuerza y habilidad a tratar de apartarnos del camino recto. Y demasiado a menudo sucede que los hijos de Dios no están en guardia y por lo tanto ignoran sus designios. Satanás obra por los medios que mejor le permiten ocultarse, y a menudo alcanza su objeto. {1TI 274.2}
Ciertos hermanos han invertido recursos en derechos de patentes y otras empresas, y han inducido a interesarse por estas cosas a otros que no pueden soportar la incertidumbre y la preocupación de tales negocios. Sus mentes ansiosas y recargadas afectan gravemente sus cuerpos ya enfermizos y ceden al abatimiento, el cual crece hasta llegar a la desesperación. Pierden toda confianza en sí mismos, piensan que Dios los ha abandonado y no se atreven a creer que será misericordioso con ellos. Estas pobres almas no serán dejadas bajo el dominio de Satanás. Se abrirán paso a través de la lobreguez, volverá a aferrar su fe temblorosa las promesas de Dios; él las librará, trocará su pesar y tristeza en paz y alegría. Pero se me mostró que los tales deben aprender, por las cosas que sufren, a dejar de lado estos derechos de patentes y diversas empresas. No deben permitir siquiera que sus hermanos los halaguen para enredarlos en tales empresas; porque sus deseos no se materializarán, y luego serán arrojados sobre el campo de batalla del enemigo desarmados para el conflicto. {1TI 274.3}
Los recursos que debieran haberse puesto en la tesorería de Dios para hacer progresar su causa, se pierden al ser invertidos en algunos de estos perfeccionamientos modernos. Si algunos de los que profesan la verdad se sienten libres y capaces para dedicarse a estos derechos de patentes e inventos, no deben ir entre sus hermanos y hacer de ellos su campo de operación, sino ir entre los incrédulos. No se valgan de su nombre y profesión de adventistas para seducir a sus hermanos que desean consagrar sus recursos a Dios. Vayan más bien al mundo, y den oportunidad de invertir sus recursos a la clase de personas que no se interesan en el progreso de la causa de Dios. {1TI 274.4}
Me fue mostrada la necesidad de abrir las puertas de nuestras casas y corazones al Señor. Cuando empecemos a trabajar en serio por nosotros mismos y nuestras familias, entonces recibiremos ayuda de Dios. Vi que la mera observancia del sábado, y el orar mañana y noche, no son evidencias positivas de que somos cristianos. Se pueden observar estrictamente estas formas externas y, sin embargo, carecer de verdadera piedad. “Que se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad, y limpiar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras” Tito 2:14. Todos los que profesan seguir a Cristo deben dominar su propio genio, y no permitirse hablar nerviosa e impacientemente. El esposo y padre debe refrenar la palabra impaciente que está por pronunciar. Debe estudiar el efecto de sus palabras, no sea que produzcan tristeza y heridas. {1TI 275.1}
Las enfermedades y dolencias afectan especialmente a las mujeres. La felicidad de la familia depende en gran manera de la esposa y madre. Si ella es débil y nerviosa, y se le permite cargarse de trabajo, su mente se deprime, porque ésta siente la influencia del cansancio físico y además de eso, la esposa encuentra demasiado a menudo una fría reserva de parte de su cónyuge. Si no marcha todo tan agradablemente como él quisiera, culpa a la esposa y madre. El se desentiende completamente de sus congojas y cargas, y no siempre sabe simpatizar con ella. No se percata de que está ayudando al gran enemigo en su obra destructiva. Por fe debiera levantar un estandarte contra Satanás; pero parece no ver sus propios intereses ni los de su esposa. La trata con indiferencia. No sabe lo que está haciendo. Obra directamente contra su propia felicidad, y destruye la de su familia. La esposa se desalienta y abate. Desaparecen la esperanza y alegría. Ella atiende mecánicamente a sus tareas diarias porque ve que su trabajo debe ser hecho. Su falta de alegría y ánimo se siente en todo el círculo de la familia. Hay muchas familias desdichadas en las filas de los observadores del sábado. Los ángeles llevan las vergonzosas nuevas al cielo, el ángel registrador lo anota todo. {1TI 275.2}
El esposo debe manifestar gran interés en su familia. Debe ser especialmente cuidadoso de los sentimientos de su esposa, si ésta es débil. Puede evitarle muchas enfermedades. Las palabras bondadosas, alegres y alentadoras resultarán mucho más eficaces que las medicinas más poderosas. Infundirán ánimo al corazón de la abatida y desanimada esposa, y la alegría infundida a la familia por los actos y las palabras de bondad, recompensará diez veces el esfuerzo hecho. El esposo debiera recordar que gran parte de la carga de educar a sus hijos recae sobre la madre, y que ella ejerce una gran influencia para modelar sus mentes. Esto debe inducirle a manifestar los sentimientos más tiernos, y a aliviar con solicitud sus cargas. Debe alentarla a apoyarse en su afecto, y a dirigir sus pensamientos hacia el cielo, donde hay fuerza, paz y descanso final para los cansados. No debe volver a la casa con la frente ceñuda, sino que su presencia debiera brindar alegría a la familia y estimular a la esposa a mirar hacia arriba y creer en Dios. Unidos, pueden aferrarse a las promesas de Dios y atraer su rica bendición sobre la familia. La falta de bondad, el espíritu de queja y la ira, apartan a Jesús de la morada. Vi que los ángeles de Dios huirán de una casa donde se pronuncian palabras desagradables y se manifiesta inquietud y disensión. {1TI 276.1}
También se me ha mostrado que muchas veces la esposa comete un grave error. Ella no realiza esfuerzos decididos para dominar su propio genio y hacer feliz el hogar. Manifiesta a menudo inquietud y profiere quejas innecesarias. El esposo llega de su trabajo cansado y perplejo, y encuentra un rostro ceñudo en vez de palabras alegres y alentadoras. El es humano y sus afectos se apartan de su esposa. Pierde el amor al hogar, su senda se oscurece y se desvanece su valor. Pierde el respeto propio y la dignidad que Dios le exige que mantenga. El esposo es la cabeza de la familia, como Cristo es la cabeza de la iglesia, y cualquier actitud asumida por la esposa que pueda disminuir la influencia y degradar su posición digna y responsable, desagrada a Dios. Es deber de la esposa renunciar a sus deseos y voluntad, en favor de su esposo. Ambos deben saber renunciar a sus gustos, pero la Palabra de Dios da la preferencia al criterio del esposo. Y la esposa no perderá dignidad al ceder así a aquel a quien ella eligió por consejero y protector. El esposo debe mantener su posición en la familia, con toda mansedumbre, y sin embargo con decisión. Algunos han preguntado: ¿Debo estar siempre en guardia y ejercer constantemente alguna clase de restricción sobre mí mismo? Me ha sido mostrado que tenemos delante de nosotros una gran obra que hacer para escudriñar nuestros corazones y velar sobre nosotros mismos con celosa vigilancia. Debemos aprender cuáles son los puntos en que fallamos, y luego precavernos al respecto. Debiéramos dominar nuestro genio a la perfección. “Si alguno no ofende en palabra, éste es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo”. Santiago 3:2. La luz que resplandece sobre nuestra senda, la verdad que se recomienda a nuestra conciencia, condenará y destruirá el alma, o la santificará y transformará. Estamos viviendo demasiado cerca del fin del tiempo de gracia para conformarnos con una obra superficial. La misma gracia que hasta aquí hemos considerado como suficiente, no nos sostendrá ya. Nuestra fe debe aumentar y debemos ser más semejantes a Cristo en conducta y disposición a fin de subsistir y resistir con éxito las tentaciones de Satanás. La gracia de Dios es suficiente para todo el que sigue a Cristo. {1TI 276.2}
Nuestros esfuerzos para resistir los ataques de Satanás deben ser fervientes y perseverantes. El dedica su fuerza y habilidad a tratar de apartarnos del camino recto. El vigila nuestras salidas y entradas, a fin de hallar oportunidad de perjudicarnos o destruirnos. El obra con muchísimo éxito en las tinieblas, perjudicando a aquellos que ignoran sus designios. No podría conseguir ventajas si su método de ataque fuese comprendido. Los instrumentos que emplea para lograr sus propósitos y arrojar sus dardos encendidos, son a menudo los miembros de nuestras propias familias. {1TI 277.1}
Aquellos a quienes amamos pueden hablar y obrar con descuido y herirnos profundamente. Tal no era su intención, pero Satanás magnifica sus palabras y actos ante la mente y así arroja un dardo de su aljaba para atravesarnos. Nos erguimos para resistir a la persona que pensamos nos hirió, y al hacerlo estimulamos las tentaciones de Satanás. En vez de pedir a Dios fuerza para resistir a Satanás, permitimos que nuestra felicidad quede empañada tratando de defender lo que llamamos “nuestros derechos”. Así concedemos una doble ventaja a Satanás. Obramos de acuerdo a nuestros sentimientos agraviados, y Satanás nos emplea como agentes suyos para herir y angustiar a aquellos que no se proponían perjudicarnos. Puede ser que a veces las exigencias del esposo parezcan irrazonables a la esposa; pero si ella echara serena y sinceramente una segunda mirada al asunto, y lo considerara en una luz tan favorable como fuese posible para el esposo, vería que, renunciando a su propia idea y sometiendo su juicio al del esposo aun cuando ello contrariase sus sentimientos, salvaría a ambos de la desdicha y les daría una gran victoria sobre las tentaciones de Satanás. {1TI 277.2}
Vi que el enemigo luchará tanto para inutilizar a los piadosos como para quitarles la vida, y tratará de destruir su paz mientras ellos vivan en este mundo. Pero su poder es limitado. Puede hacer calentar el horno, pero Jesús y sus ángeles velarán sobre el cristiano que confía para que sólo la escoria sea consumida. El fuego encendido por Satanás no tiene poder para destruir o perjudicar el metal noble. Es importante cerrar toda puerta posible que dé acceso a Satanás. Es privilegio de cada familia vivir de tal manera que Satanás no pueda aprovecharse de nada que digan o hagan sus miembros para hacer que se hieran mutuamente. Cada miembro de la familia debe tener presente que cada uno de ellos tiene tanto que hacer como los demás para resistir a nuestro astuto enemigo, y con fervientes oraciones y fe inquebrantable cada uno debe confiar en los méritos de la sangre de Cristo y pedir su fuerza salvadora. {1TI 278.1}
Las potestades de las tinieblas rodean el alma y ocultan a Jesús de nuestra vista, y a veces no podemos hacer otra cosa sino esperar entristecidos y asombrados hasta que pase la nube. A veces estos momentos son terribles. Parece faltar la esperanza, y la desesperación se apodera de nosotros. En estas horas angustiosas debemos aprender a confiar, a depender únicamente de los méritos de la expiación, y en toda nuestra impotente indignidad confiar enteramente en los méritos del Salvador crucificado y resucitado. Nunca pereceremos mientras hagamos eso, nunca. Cuando la luz resplandece sobre nuestra senda, no es difícil ser fuertes con el poder de la gracia. Pero para aguardar con paciencia y esperanza cuando las nubes nos rodean y todo está oscuro, se requieren una fe y una sumisión que unan nuestra voluntad con la de Dios. Nos desalentamos demasiado pronto, y pedimos ardientemente que la prueba sea apartada de nosotros, cuando debiéramos pedir paciencia para soportarla y gracia para vencerla. {1TI 278.2}
Sin fe es imposible agradar a Dios. Podemos tener la salvación de Dios en nuestras familias, pero debemos creer para obtenerla, vivir por ella y ejercer de continuo fe y confianza permanentes en Dios. Debemos subyugar el genio violento, y dominar nuestras palabras; así obtendremos grandes victorias. A menos que dominemos nuestras palabras y genio, somos esclavos de Satanás, y estamos sujetos a él como cautivos suyos. Cada palabra discordante, desagradable, impaciente o malhumorada, es una ofrenda presentada a su majestad satánica. Y es una ofrenda costosa, más costosa que cualquier sacrificio que podamos hacer para Dios; porque destruye la paz y felicidad de familias enteras, destruye la salud, y puede hacernos perder finalmente una vida eterna de felicidad. {1TI 278.3}
La Palabra de Dios nos impone restricción para nuestro propio interés. Aumenta la felicidad de nuestras familias y de cuantos nos rodean. Refina nuestro gusto, santifica nuestro criterio y nos reporta paz mental, y al fin, la vida eterna. Bajo esta restricción santa, creceremos en gracia y humildad, y nos resultará fácil hablar lo recto. El carácter natural e irascible será mantenido en sujeción. El Salvador, al morar en nosotros, nos fortalecerá en todo momento. Los ángeles ministradores permanecerán en nuestras moradas, y con gozo llevarán al cielo las nuevas de nuestro progreso en la vida divina, y el ángel registrador tendrá para anotar un informe gozoso y feliz. {1TI 279.1}
Testimonios para la Iglesia, Tomo 1. Número 8: ''Los celos y la crítica''
Hermano G: En _____, usted me hizo algunas preguntas acerca de las que he estado pensando mucho. Por mi conversación con usted, he quedado convencida de que no comprende la parte que ha desempeñado y la herida que ha infligido a la causa de Dios. Lo que se me ha mostrado concerniente a su caso, me fue presentado en forma vivida, y he comparado lo que se me ha mostrado recientemente con el testimonio publicado concerniente a usted en el Testimonio número 6, y no he podido ver que usted haya pedido la menor disculpa por su comportamiento. Antes de su participación en la última ola de fanatismo en Wisconsin, y de prestar su apoyo con su influencia, no andaba rectamente ante la vista de Dios. {1TI 279.2}
Hermano G, si usted hubiera seguido honradamente la luz, nunca se hubiera embarcado en el rumbo que ha seguido. Usted ha seguido su propio curso en forma caprichosa y obcecada, y ha confiado en su juicio personal, rehusando dejarse guiar. El Señor le envió ayuda, pero la rechazó. ¿Qué más pudo haber hecho el cielo por usted? Cuando ha juzgado que otras personas eran consideradas más altamente que usted, se ha sentido insatisfecho e irritado, y se ha puesto displicente y reservado, como un niño malcriado. Ha deseado ser tenido en alta estima, pero ha adoptado un comportamiento que lo rebaja notablemente ante la estima de las personas cuya aprobación busca. {1TI 279.3}
Antes de su comportamiento fanático, sentía usted celos de los de Battle Creek, y ha hecho observaciones que han suscitado sospechas. Ha sentido celos de mi esposo y de mí misma, y ha supuesto la existencia de algún mal. La envidia y la sospecha se han unido. Bajo una apariencia de rectitud, usted ha sugerido dudas con respecto a las acciones de los que soportan la carga de la obra en Battle Creek, y ha hecho observaciones indirectas con respecto a asuntos que usted ignoraba completamente y que era totalmente incapaz de juzgar objetivamente. No se ha colocado sobre usted la carga de la responsabilidad. Se me mostró que Dios no elegiría a una persona con una mente constituida como la suya, ni le encomendaría grandes responsabilidades; y tampoco lo llamaría a ocupar posiciones de mayor responsabilidad, porque el amor propio sería tan grande que resultaría ruinoso para sí mismo y el pueblo de Dios. Si usted hubiera sentido menos estima por sí mismo, habría tenido menos celos y sospechas. {1TI 280.1}
Hermano G, si usted se hubiera unido plenamente con el cuerpo y se hubiera mantenido en unión y simpatía con las personas a quienes Dios ha considerado apropiado colocar a la cabeza de la obra, si hubiera aceptado los dones que Dios ha colocado en la iglesia, si se hubiera dedicado plenamente a su servicio, si se hubiera afirmado definidamente en todos los puntos de la verdad presente y si hubiera trabajado al unísono con las personas que tienen experiencia en la causa, usted y los suyos se habrían mantenido perfectamente libres y a salvo de este engaño. Usted hubiera contado con un ancla que lo habría mantenido firme. Pero usted ha adoptado una posición indefinida, temiendo que proporcionaría agrado y satisfacción a aquellos cuya alma se encontraba dedicada a la obra y a la causa de Dios. Dios requiere que usted se mantenga firme y decididamente sobre la plataforma con sus hermanos. Dios y los santos ángeles experimentaron desagrado debido a su comportamiento, y no soportarán su necedad durante más tiempo. Usted fue dejado solo para que siguiera su propio juicio que había tenido en tan alta estima, hasta que desee ser enseñado, y sin celos ni obstinación, sin quejarse ni censurar a otros, aprenda de los que han sentido el peso de la responsabilidad en la causa de Dios. Usted ha estado tratando de alcanzar una posición original para sí mismo, y ha procurado mostrar el camino independientemente del cuerpo, para que lo aprueben y alaben, hasta que vi que Dios lo había dejado abandonado para que usted manifestara esa sabiduría que había considerado superior a la de los demás, y fue dejado para que actuara en su propia ceguera en el fanatismo más irrazonable, necio y descontrolado que alguna vez haya azotado a Wisconsin. {1TI 280.2}
Y sin embargo se me mostró que usted no había comprendido la influencia de su conducta pasada sobre la causa, y su posición y deber actuales con respecto a ese fanatismo. En vez de trabajar con toda su energía para libertarse y contrarrestar la influencia que había ejercido, usted ha salido de todo esto excusándose y censurando a quienes Dios envió a usted, y listo para dictaminar, y aun sugerir un plan mediante el cual el Señor hubiera podido impedir que usted tuviera la conducta que ha tenido, haciendo que sus siervos tuvieran un comportamiento diferente del que han tenido. Su juicio ha quedado pervertido por el poder de Satanás, y mientras se encontraba envuelto en tinieblas, usted era un juez incompetente del comportamiento más adecuado que debía tenerse con respecto a usted. Si sabía cuál era el comportamiento que los siervos de Dios debían tener a fin de ayudarle, usted sabía lo suficiente para salir del problema por su propia cuenta. Dios le dio su elección, la posibilidad de ser enseñado, de ser instruido por medio de sus siervos en la forma que él había designado, o de continuar adelante manteniendo su conducta caprichosa y caer en un fanatismo que llenaba de confusión. {1TI 281.1}
Usted eligió seguir su propio camino y ahora puede culparse únicamente a usted mismo. Profesa ser un vigía en las torres de Sion, un pastor del rebaño, y sin embargo vio a las pobres ovejas magulladas y esparcidas y no dio la voz de advertencia. “Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte. Cuando yo dijere al impío: De cierto morirás; y tú no le amonestares ni le hablares, para que el impío sea apercibido de su mal camino a fin de que viva, el impío morirá por su maldad, pero su sangre demandaré de tu mano. Pero si tú amonestares al impío, y él no se convirtiere de su impiedad y de su mal camino, él morirá por su maldad, pero tú habrás librado tu alma… Pero si al justo amonestares para que no peque, y no pecare, de cierto vivirá, porque fue amonestado; y tú habrás librado tu alma”. Ezequiel 3:17-19, 21. {1TI 281.2}
El pecado de los que están en Wisconsin que cayeron en el fanatismo, reposa más pesadamente sobre usted, hermano G, que sobre cualquiera otra persona. Usted fue un vigía infiel. No distinguió el mal porque usted era infiel. Dios envió a su fiel atalaya, quien se mantuvo en la luz y pudo discernir el mal para amonestarlo a usted y al rebaño errante. Si entonces hubiera escuchado la advertencia, se habría ahorrado una gran cantidad de mal. Su influencia se habría mantenido. No se habría convertido en un estorbo para que el testimonio de los siervos de Dios alcanzara el rebaño distraído. Las personas que se encontraban descarriadas no quisieron escuchar la voz de Dios a través de sus siervos elegidos. Se afirmaron contra las advertencias de los atalayas que les fueron enviados, y se fortalecieron en su comportamiento irrazonable e iluso. El pastor no quiso escuchar. Se ofendió porque se encaró su fanatismo en forma tan decidida. No percibió el peligro. No captó la urgencia de este asunto. Tenía luz suficiente para decidir, pero fue muy terco y sospechó demasiado de los siervos de Dios para someterse a su testimonio. {1TI 282.1}
El hermano G deseaba esperar hasta que el fanatismo se desarrollara, y éste avanzó justamente en la forma como Satanás deseaba hasta que produjo resultados terribles. No había manifestaciones razonables ni sensatez para caracterizar esa obra como la obra de Dios. Los siervos de Dios llevaron a cabo su misión, libraron su ropa de la sangre de las almas, y se mantuvieron alejados de la influencia maldita, mientras que usted soporta el temible peso del pecado de este terrible fanatismo. Usted lo ha lamentado profundamente, pero a pesar de eso no ve sus propios errores en relación con ello. Usted censura y culpa a las ovejas débiles y errantes por hacerlo apartarse del camino. ¿Para qué sirve un vigía, a no ser para vigilar y detectar el mal y hacer sonar la alarma? ¿Para qué sirve un pastor, a no ser para vigilar a fin de descubrir cualquier peligro y evitar que las ovejas reciban daño y sean destruidas por los lobos? ¿Qué excusa podría ofrecer un pastor por permitir que el rebaño se aparte del verdadero apacentadero, y sea magullado, esparcido y devorado por los lobos? ¿Cómo podría aceptarse una excusa hecha por el pastor de que las ovejas lo hicieron descarriar a él? ¿Abandonaron el apacentadero verdadero y lo hicieron apartarse del camino? Ese pretexto sería un poderoso argumento contra la habilidad de ese pastor para cuidar el rebaño. No podría depositarse más confianza sobre él como un fiel pastor para que se ocupara del rebaño, y lo trajera de vuelta al camino correcto cuando se apartara de él. {1TI 282.2}
El oprobio que gravita sobre la causa debido al caso de la hermana A, también descansa pesadamente sobre usted. Usted es el cau sante de gran parte de sus preocupaciones y experiencias. Aunque ella estaba debilitada, podía en cierta medida ocupar su lugar en la familia y mantener juntos a sus hijos; pero perdió la razón cuando había estado fuera de su hogar tan sólo poco tiempo. El estado de apostasía de los profesos observadores del sábado de _____ lo indujo a usted a influir en la hermana A para que abandonara a su familia que necesitaba su cuidado, y se trasladara a _____ para que su influencia ayudara a los observadores del sábado de ese lugar. Su comportamiento estuvo marcado por una agitación malsana. Algunos que no tenían experiencia fueron engañados. La mente débil de la hermana A quedó sobrecargada, y la enfermedad prendió en su cerebro. Y la causa de Dios ha experimentado profundo daño y oprobio debido a esto. El hermano A ha quedado mal; ahora debe sufrir bajo un problema viviente, y sus hijos deben ser sacados del hogar. Aquellos cuya influencia ha conducido a estos tristes resultados, tienen una obra que hacer para aliviar la mente del hermano A, y por medio de un pleno reconocimiento ante él del pecado que había en el comportamiento adoptado y del mal que causaron, contrarrestar el mal hasta donde sea posible. {1TI 283.1}
Si usted hubiera permanecido en el consejo de Dios, reconociendo que los dones de su Espíritu ocupan su lugar debido en la iglesia; si hubiera estado de corazón y por principio de parte de la Review, establecido sobre las poderosas verdades que tienen aplicación para este tiempo; si hubiera estado proporcionando alimento en el tiempo debido para el pueblo de Dios, su influencia en _____ y alrededores habría sido muy diferente. Hubiera podido presentar un testimonio definido en armonía con los que dirigen esta grandiosa obra. Los males individuales habrían sido reprochados. El trabajo fiel habría afirmado a los observadores del sábado en ese lugar, de manera que no hubieran ido a la zaga de otras iglesias. Pero tienen que aprender casi todo. Usted debiera haber presentado un testimonio definido, impresionando sobre ellos la necesidad de sacrificarse y de llevar todos una parte de la carga de la causa. Debiera haberlos instruido acerca de la dadivosidad sistemática, induciéndolos a todos a desempeñar una parte y a esforzarse por hacer algo a fin de hacer progresar la causa de la verdad. Su posición vacilante y el hecho de haber dejado las cosas tan indefinidas en _____ ha ejercido una mala influencia sobre la causa en ese lugar. La oposición que usted sintió y de la que habló con respecto a la organización y el avance del pueblo de Dios, ha dado fruto que se puede ver en muchos lugares en la parte norte de Wisconsin. {1TI 283.2}
Si usted hubiera sido un obrero diligente y concienzudo, y si se hubiera mantenido al mismo paso de las oportunidades presentadas por la providencia de Dios, el fruto que ahora se manifiesta sería de un carácter enteramente diferente. Las almas se decidirían, ya sea completamente a favor o en contra de los mandamientos de Dios y de otras verdades relacionadas con el mensaje del tercer ángel. No permanecerían en los alrededores de Sión para afligir a los que desean andar con rectitud. Pero usted no ha manifestado fidelidad. No ha llevado a cabo la obra recta. En la Iglesia, mediante la aplicación directa de la verdad no ha fomentado la necesidad de que todos vivan su profesión de fe en forma práctica y armoniosa; y muchos no están dispuestos a llevar a cabo lo que sea necesario para hacer progresar la verdad, porque se complacen únicamente con escucharla. Aman la causa de palabra y profesión, pero no de hecho y en verdad. {1TI 284.1}
Su posición ha hecho que muchas personas en la localidad de _____, y alrededor de ella, piensen menos favorablemente de la Review de lo que de otro modo hubieran pensado, y han considerado muy livianamente las verdades que se encuentran en ella. Debido a eso, la Review no ha ejercido sobre ellos la influencia que Dios se proponía que tuviera. Y cada uno ha seguido su propio camino y ha hecho lo que le parecía bien ante sus propios ojos; debido a eso todos se encuentran muy a la retaguardia, y a menos que se efectúen cambios completos en ellos, serán pesados en la balanza y hallados faltos. {1TI 284.2}
Se me mostró que usted trata de echar sobre otros los resultados de sus errores, pero Dios que lo vigila todo, lo considera a usted responsable. Tiene que efectuar humildes confesiones en _____, _____, _____, y en otros lugares donde ha ejercido su influencia en oposición a los siervos de Dios. El hermano y la hermana D han sido grandemente perjudicados por este fanatismo. Han sido confundidos temporalmente tanto como espiritualmente, y casi han quedado arruinados por este engaño de Satanás. Hermano G, usted se ha adentrado demasiado en este triste fanatismo; su cuerpo ha sido afectado tanto como su mente, y ahora trata de echarlo todo sobre otros. Usted no conoce con claridad cuál ha sido su posición y su conducta en el pasado. Usted se siente libre de confesar lo que otros han hecho y también lo que usted no ha hecho; pero no ha confesado lo que usted ha hecho. {1TI 284.3}
Su influencia en _____ ha sido perjudicial. Usted se opuso a la organización y predicó contra ella en forma ambigua, no en forma tan directa como otros lo hubieran hecho, pero usted llegó hasta donde se atrevió. En esta forma, numerosas veces ha gratificado sus sentimientos envidiosos y ha creado desconfianza e incertidumbre en las mentes de muchas personas, cuando si hubiera actuado abiertamente habría sido comprendido con claridad y no habría causado mucho daño. Cuando se lo ha acusado de tener sentimientos contrarios a la fe del cuerpo, usted no lo ha reconocido, sino que ha tergiversado su posición, y ha hecho aparecer como si los hermanos lo hubieran tomado en sentido erróneo, en circunstancias que usted sabe que la acusación era correcta. Como están las cosas ahora, la iglesia no puede confiar en usted. Cuando manifieste los frutos de una reforma completa, y presente evidencia de que se ha convertido y ha vencido sus celos, entonces Dios volverá a confiarle su rebaño a su cuidado. Pero hasta tanto efectúe una completa restitución, ejercerá la mejor influencia si se queda en casa y presta atención al consejo que dice: “En lo que requiere diligencia, no perezosos”. Romanos 12:11. {1TI 285.1}
Debido a su posición evasiva y su comportamiento con relación a ese fanatismo, usted ha causado más perjuicio a la obra de Dios en Wisconsin que todo el bien que ha realizado durante su vida. Debido a esto, los no creyentes han considerado con disgusto nuestra fe, y como resultado, la obra de Dios ha recibido una herida, una herida incurable, y a pesar de eso muchos, incluyéndolo a usted mismo, manifiestan asombro de que se diga tanto de este fanatismo. Una mala semilla sembrada echa raíces, crece y da fruto, y se produce una cosecha abundante. El mal florece sin necesidad de que se lo cultive, mientras la semilla del bien después de sembrada necesita que se la riegue, que se la cuide con esmero y que se le nutra continuamente, porque en caso contrario, las preciosas plantas morirán. Satanás, los ángeles malignos y los hombres impíos están tratando de desarraigar y destruir el bien, y se requiere la mayor vigilancia y el cuidado más constante para que éste viva y prospere. Una mala semilla sembrada no se puede desarraigar fácilmente. Se propaga y brota en todas las direcciones, para ahogar la preciosa simiente, y si se la deja por su cuenta crecerá vigorosamente y obstruirá los rayos del sol para que no iluminen las preciosas plantas. {1TI 285.2}
Hicimos frente a su influencia en la localidad de _____. La división en ese lugar no se hubiera producido si usted hubiera adoptado la posición debida y recibido la palabra de Dios enviada mediante sus siervos. Pero usted no quiso hacerlo. Los siervos de Dios tuvieron que tratar directamente con su mal proceder. Si hubieran adoptado una posición más firme y si lo hubieran tratado con más severidad, Dios los habría aprobado. Hubiera sido preferible que usted permaneciera completamente alejado de _____, porque cada vez que los siervos de Dios exponían ese fanatismo, el reproche afectaba al hermano G, y usted se volvía taciturno, se sentía insultado y descuidado, etc. Usted continuó su insensato proceder entre diferentes familias en la localidad de_____; usted trató de obtener simpatía y creó oposición contra los hermanos C, D y E. Se sintió ofendido y menospreciado. Expresó sus sentimientos de palabra y acción, y en esa forma creó celos y desconfianza en muchas mentes con respecto a los siervos de Dios a quienes él había enviado especialmente para que trataran con usted. Su comportamiento destruyó el poder de su testimonio en algunas mentes; pero algunos se sintieron agradecidos porque había llegado luz, y porque se había desbaratado la trampa de Satanás y ellos habían escapado. Otros manifestaron obstinación y se opusieron al testimonio que se había dado, y así se produjo una división en el cuerpo de la iglesia. Usted es el responsable de esto. Tuvimos que trabajar en favor de la iglesia en la localidad de _____ con aflicción de espíritu a fin de apartar la influencia y las impresiones negativas que usted había creado. Usted tiene que llevar a cabo una obra en ese lugar. {1TI 286.1}
Vi que algunas personas habían sentido mucha preocupación por usted, porque temían que sus hermanos en el ministerio no lo tratarían debidamente y no le harían justicia. Esas personas debieran apartarse del camino y confesar fielmente sus propios errores y dejar que todo el peso de la censura y de los errores que usted ha cometido descanse sobre su propia cabeza. Dios se propone que ese peso permanezca sobre usted hasta que usted lo quite enteramente mediante el arrepentimiento y la confesión sincera. Los que sienten una simpatía extraviada por usted no pueden ayudarle. Debieran más bien manifestar su celo arrepintiéndose de sus propios descarríos y dejándolo a usted solo. Usted ha perdido completamente el camino correcto y a menos que cambie su curso, que se arrepienta de sus errores sin censurar a sus hermanos y que esté dispuesto a ser instruido, no podrá formar parte del pueblo de Dios. {1TI 286.2}
Usted se ha mantenido alejado de las personas sobre quienes Dios ha colocado la pesada carga de su obra. Mientras mi esposo ya tiene trabajo y cargas que debiera haber compartido con tres hombres, usted lo ha perjudicado con sus observaciones e indirectas, y ha ayudado a otros a que acrecentaran sus preocupaciones. Debe comprender esto. Usted no ha tenido responsabilidades especiales, pero ha tenido tiempo para reflexionar y estudiar, para descansar y dormir, mientras mi esposo se ha visto obligado a trabajar día tras día, y a veces hasta tarde en la noche; en algunas ocasiones, cuando ha querido descansar no ha podido dormir, y tan sólo ha llorado y se ha afligido por causa de la verdad y por la injusticia con que sus hermanos lo han tratado, porque todos sus intereses y su vida los ha dedicado a la causa. {1TI 287.1}
El ha tenido a su cargo el cuidado y la responsabilidad de los negocios en la oficina, la atención de la revista y mucha preocupación por las iglesias en diferentes Estados. Y sin embargo algunos de sus hermanos en el ministerio han contribuido a confundirlo y preocuparlo con su comportamiento insensato. Usted y otras personas han considerado al hermano White como un hombre de negocios que no disfruta mucho con la religión. Los tales no lo conocen. Satanás engaña a muchos con respecto a él. Dios ha considerado conveniente colocar sobre él la carga de su obra, elegirlo para que ocupe una posición directiva en diferentes empresas, y ha escogido a uno que tiene gran sensibilidad y que puede simpatizar con los desafortunados; que es concienzudo y sin embargo independiente; que no disimulará el pecado sino que detectará rápidamente el mal y lo reprochará sin darle lugar, aunque tenga que soportar solo las consecuencias. Por eso es que sufre tanto. Sus hermanos generalmente no conocen nada de sus preocupaciones, y a algunos éstas ni siquiera les interesan, y debido a su comportamiento insensato y torcido, acrecientan sus preocupaciones y su incertidumbre. El cielo toma nota de estas cosas. Hombres que no tienen responsabilidades ni preocupaciones, que pueden pasar horas de ocio sin tener nada en particular que hacer, que pueden reflexionar y estudiar y mejorar sus mentes, pueden manifestar gran moderación. No hay nada que los urja a manifestar un celo especial y están listos a pasar horas en conversación privada. Algunos los consideran los hombres mejores y más elevados del mundo. Pero Dios no ve como el hombre ve. Dios mira el corazón. Los que tienen una posición tan fácil serán recompensados de acuerdo con sus obras. {1TI 287.2}
La posición ocupada por mi esposo no es envidiable. Requiere estrecha atención, cuidado y trabajo mental, requiere el ejercicio de juicio sólido y sabiduría. Requiere abnegación, un corazón dispuesto y una voluntad firme para hacer avanzar las cosas. En esa importante posición Dios desea tener a un hombre que esté dispuesto a aventurarse y arriesgar algo; que avance firmemente en favor del bien, no importa cuáles sean las consecuencias; que luche contra los obstáculos sin vacilar aunque su vida esté en juego. {1TI 288.1}
El peso y la responsabilidad de esta obra hace actuar con gran cuidado, causa noches insomnes y exige oración sincera, ferviente y angustiosa. El Señor ha conducido a mi esposo para que tome una responsabilidad tras otra. La censura de sus hermanos le causa profunda aflicción, y sin embargo no debe vacilar en la obra. Compañeros en la obra que tienen una apariencia de piedad, se oponen a todos los movimientos de avance que Dios le induce a realizar, y su tiempo precioso debe ocuparlo en viajar de un lugar a otro, en trabajar con angustia de mente entre las iglesias a fin de deshacer lo que esos hermanos fingidos han estado haciendo. ¡Pobres mortales! Confunden las cosas; no saben con claridad en qué consiste ser cristiano. Los que han sido enviados a dar un testimonio claro y directo, y a reprochar el mal en el temor de Dios, a trabajar con todas sus energías en la edificación del pueblo de Dios y afirmarlos en puntos importantes de la verdad presente, con mucha frecuencia han sido censurados en lugar de recibir simpatía y ayuda, mientras los que, como usted mismo, han adoptado una posición sin compromiso, se los considera dedicados y se cree que tienen un espíritu apacible. Pero Dios no los considera en esa forma. El precursor de la primera venida de Cristo era un hombre que hablaba con llaneza. Reprochaba el pecado y llamaba a las cosas por su nombre. Colocó el hacha en la raíz del árbol. En esta forma se dirigió a una clase de conversos fingidos que vinieron a él para ser bautizados en el Jordán: “¡Generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera? Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento… Y ya también el hacha está puesta a la raíz de los árboles; por tanto todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado en el fuego”. Mateo 3:7-11. {1TI 288.2}
En estos días solemnes, justamente antes de que Cristo vuelva por segunda vez, los fieles predicadores de Dios tendrán que dar un testimonio todavía más directo que el que fue dado por Juan el Bautista. Tienen ante sí una obra de responsabilidad e importancia; y Dios no reconocerá como sus pastores a los que hablan únicamente cosas agradables. Pesa sobre ellos una temible aflicción. {1TI 289.1}
Este extraño fanatismo que se ha manifestado en Wisconsin surgió de la falsa teoría de la santidad propuesta por el hermano K, una santidad que no depende del mensaje del tercer ángel, sino que está fuera de la verdad presente. La hermana G recibió esta falsa teoría de parte de él. Creyó en ella y la enseñó celosamente a otros. Esto casi destruyó su amor por las verdades sagradas tan importantes para este tiempo, que si ella las hubiera amado y obedecido, se habrían convertido en un ancla que la habría mantenido sobre el fundamento correcto. Pero ella, juntamente con muchos otros, convirtió esta teoría de la santidad o la consagración en algo predominante, y las importantes verdades de la palabra de Dios llegaron a tener poca importancia, “con tal que el corazón fuera recto”. Y las pobres almas fueron dejadas sin un ancla, impulsadas solamente por sentimientos, y Satanás se introdujo y controló las mentes y dio impresiones y sentimientos de acuerdo con sus conveniencias. Se despreciaron la razón y el juicio, y la causa de Dios fue cruelmente criticada. {1TI 289.2}
El fanatismo en el que ha caído debiera inducirlo a usted, y también a otros, a investigar antes de tomar una decisión concerniente a la apariencia de consagración. La apariencia no es una evidencia positiva del carácter cristiano. Usted y otras personas temen recibir un poquito más de censura de la que merecen, y buscan afanosamente un supuesto error o equivocación en otras personas, o bien procuran encontrar un descuido de ellas por lo cual sentirse perjudicadas. Son demasiado exigentes. Usted ha estado equivocado y se ha engañado a sí mismo. Si otros lo han juzgado mal en algunas cosas, no es más de lo que podría esperarse, considerando las circunstancias. Usted debiera, con la más profunda aflicción y humildad, lamentar su triste separación de lo recto, que ha dado ocasión a una variedad de sentimientos y de puntos de vista y expresiones con respecto a su persona; y si usted no los considera correctos en todos sus detalles, debiera pasarlo por alto sin censurar a otras personas. Debe confesar sus faltas sin censurar a nadie y dejar de quejarse diciendo que sus hermanos lo han descuidado. En realidad le han prestado más atención de la que usted merece, considerando la posición que ha ocupado durante años. Si pudiera ver estas cosas en la forma como Dios las considera, despreciaría las quejas que ha presentado y se humillaría bajo la mano de Dios. “Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los carneros. Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e idolatría la obstinación”. 1 Samuel 15:22-23. {1TI 289.3}
Testimonios para la Iglesia, Tomo 1. Número 8: ''La unidad en la fe''
Los cristianos profesos de la localidad de _____ y de sus alrededores no están a la altura de la obra, ni practican las verdades que profesan creer. Una influencia agostadora afecta la causa en la parte norte de Wisconsin. Si todos hubieran sentido la responsabilidad hacia la Review que Dios se proponía que sintieran, se habrían beneficiado y habrían sido instruidos por las verdades que presenta. Hubieran tenido una fe correcta, una posición firme con respecto a la verdad aplicable a este tiempo, y hubieran estado protegidos y a salvo de este fanatismo. Las sensibilidades de muchos se han atenuado, un falso entusiamo ha destruido su discernimiento y su agudeza espiritual. Es de la mayor importancia que ellos ahora actúen con sensatez, para que no se cumpla plenamente el objetivo satánico de hacer caer a los que el diablo tiene poder para engañar. {1TI 290.1}
Cuando los que han presenciado y experimentado falsas manifestaciones quedan convencidos de su equivocación, Satanás saca ventaja de su error, y se lo recuerda constantemente, para inspirarles temor a toda manifestación espiritual; y de esta manera procura destruir su fe en la verdadera piedad. Debido a que estuvieron una vez engañados, temen hacer cualquier esfuerzo por medio de la oración ferviente a Dios en busca de ayuda especial y victoria. Los tales no deben permitir que Satanás consiga su objeto y los arroje en el frío formalismo y la incredulidad. Deben recordar que el fundamento de Dios permanece firme. Sea Dios veraz y todo hombre mentiroso. Su única seguridad consiste en asentar los pies en la plataforma firme; en ver y comprender el mensaje del tercer ángel, en apreciar, amar y obedecer la verdad. {1TI 290.2}
Cristo está conduciendo a un pueblo y llevándolo a la unidad de la fe, para que sea uno, así como él lo es con su Padre. Hay que abandonar las diferencias de opinión para que todos se unan con el cuerpo, a fin de que estén unánimes y sean todos de un mismo parecer. 1 Corintios 1:10: “Os ruego pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer”. Romanos 15:5-6: “Pero el Dios de la paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús, para que unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo”. Filipenses 2:2: “Completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa”. {1TI 291.1}
Todo el pueblo de Dios debiera manifestar interés en su causa. Ha habido falta de interés entre los hermanos de Wisconsin. También ha habido falta de energía. Algunos piensan que perder el tiempo no es pecado, mientras otros que aman la preciosa causa de Dios economizan su tiempo, y con la fortaleza de Dios se esfuerzan y trabajan duramente para que sus familias estén bien y disfruten de comodidad, y además de eso todavía les sobra tiempo para invertir en la causa de Dios, para hacer su parte a fin de mantener la obra de Dios en progreso y hacerse tesoro en el cielo. No es conveniente que algunos estén ociosos y otros sobrecargados. Dios requiere que los que disfrutan de salud y fuerza corporal hagan todo lo que puedan y usen su fortaleza para su gloria, porque no se pertenecen a sí mismos. Son responsables delante de Dios por el uso que hacen de su tiempo y de sus fuerzas que reciben del cielo. {1TI 291.2}
El deber de contribuir al progreso de la verdad no corresponde únicamente a los ricos. Todos tienen que desempeñar una parte. El hombre que ha empleado su tiempo y sus fuerzas para acumular propiedades es responsable de la forma como dispone de esos bienes. Si uno tiene salud y fuerzas, ése es su capital, de modo que debe usarlo adecuadamente. Si pasa horas en ociosidad y hablando de cosas innecesarias, es negligente en su negocio, lo cual la Palabra de Dios prohíbe. Tales personas tienen una obra que hacer a fin de proveer lo necesario para sus familias y con el propósito de ahorrar lo necesario para dedicarlo a fines caritativos, en la medida en que Dios los ha prosperado. {1TI 291.3}
No hemos sido puestos en este mundo nada más que para preocuparnos de nosotros mismos, sino que se requiere que participemos en la gran obra de salvación, imitando así a Cristo, quien llevó una vida abnegada, de renunciamiento y de utilidad para el prójimo. Los que aman su propia comodidad más que la palabra de Dios, no sentirán ninguna preocupación por emplear su tiempo y su fuerza sabiamente, a fin de tener una parte en la difusión de la verdad. Muchos de los jóvenes de Wisconsin no han sentido el peso de la causa ni la necesidad de hacer algún sacrificio para promoverla. No podrán adquirir fortaleza hasta tanto cambien su manera de actuar y realicen esfuerzos especiales para promover la verdad, a fin de que las almas puedan salvarse. Algunos se niegan a sí mismos y manifiestan interés y trabajan intensamente porque aman la causa y se esfuerzan por sostenerla. Convierten la causa de Dios en una parte de sí mismos; y si ésta sufre, también ellos sufren; y cuando ésta prospera, ellos se sienten felices. {1TI 292.1}
Proverbios 3:9-10: “Honra a Jehová con tus bienes, y con las primicias de todos tus frutos; y serán llenos tus graneros con abundancia y tus lagares rebosarán de mosto”. Los que son indolentes y haraganes pueden tranquilizarse con el pensamiento de que Dios no requiere nada de ellos, porque no tienen ganancias. Esto no les servirá de excusa, porque si hubieran empleado diligentemente su tiempo, si no hubieran sido indolentes en los negocios, hubieran tenido ganancias. Si se hubieran esforzado resueltamente para ganar algo que depositar en la tesorería de Dios, se les habrían presentado oportunidades y habrían dispuesto de dinero para dedicarlo a la causa de Dios, haciéndose en esa forma tesoros en el cielo. {1TI 292.2}
Testimonios para la Iglesia, Tomo 1. Número 8: ''El norte de Wisconsin''
Mientras me encontraba en Roosevelt, Nueva York, el 3 de agosto de 1861, me fueron presentadas varias iglesias y familias. Se me mostraron también las diferentes influencias que se habían ejercido y sus resultados desanimadores. Satanás ha usado como sus agentes a personas que profesaban creer una parte de la verdad presente, mientras luchaban contra otra parte. El puede utilizar con más éxito a esas personas que a los que se oponen totalmente a nuestra fe. Su forma artera de introducir el error por medio de creyentes que creen parcialmente en la verdad, ha engañado a muchos y ha confundido y dispersado su fe. Esta es la causa de las divisiones que han ocurrido en la parte norte de Wisconsin. Algunos reciben una parte del mensaje y rechazan otra. Algunos aceptan el sábado y rechazan el mensaje del tercer ángel; sin embargo, debido a que han recibido el sábado sostienen que tienen derecho a la comunión con los que creen plenamente en la verdad presente. Luego se esfuerzan por llevar a otros a la misma posición confusa en la que ellos se encuentran. No se consideran responsables ante nadie. Tienen una fe propia e independiente. Se permite que tales personas ejerzan influencia, cuando no debiera dárseles ningún lugar, a pesar de sus pretensiones de honradez. {1TI 292.3}
Las personas honradas lograrán percibir la recta cadena de la verdad presente. Verán sus conexiones armoniosas, eslabón tras eslabón, que conforman un grandioso panorama, y se aferrarán a ella. La verdad presente no es difícil de entender, y el pueblo que Dios guía está unido en esta amplia y firme plataforma. Dios no usará personas de fe, opinión y conceptos diferentes para esparcir y dividir. El Cielo y los santos ángeles están trabajando para unir, para producir unidad de fe, en un solo cuerpo. Satanás se opone a esto, y está decidido a esparcir, a dividir y a introducir diferentes sentimientos, para que la oración de Cristo quede sin contestar: “Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste”. Juan 17:20-21. Jesús estableció que la fe de su pueblo debía ser una sola. Si uno comienza a predicar algo distinto, ¿cómo podrían ser una sola cosa los que creen mediante su palabra? Habrá diferencia de sentimientos. {1TI 293.1}
Vi que si el pueblo de Dios en Wisconsin quería prosperar, debía adoptar una posición definida con respecto a estas cosas, y en esa forma cortar la influencia de los que están causando distracción y división al enseñar sentimientos que son contrarios al cuerpo. Los tales son estrellas errantes. Emiten un poco de luz; creen una pequeña parte de la verdad y en esa forma engañan a los inexperimentados. Satanás les da su espíritu, pero Dios no está con ellos; el Espíritu de Dios no mora en ellos. Jesús oró que sus discípulos fueran una sola cosa, como él y el Padre, “para que el mundo crea que tú me enviaste”. La unidad del pueblo remanente que cree en Dios produce una poderosa convicción en el mundo de que tiene la verdad y de que es un pueblo diferente, elegido por Dios. Esta unidad desconcierta al enemigo, por lo que está decidido a eliminar su existencia. La verdad presente, creída en el corazón y puesta en práctica en la vida proporciona unidad al pueblo de Dios y le da una poderosa influencia. {1TI 293.2}
Si los profesos observadores del sábado de Wisconsin hubiesen procurado fervientemente mantenerse unidos conforme a la oración de Cristo, para ser una sola cosa, así como Jesús es uno con el Padre, Satanás habría sido derrotado. Si todos hubieran procurado mantenerse unidos con el cuerpo, no habría surgido el fanatismo que ha producido una mancha tan profunda en la causa de la verdad presente en el norte de Wisconsin; ha sido el resultado de alejarse del cuerpo y procurar tener una fe original e independiente, sin tomar en cuenta la fe del cuerpo. {1TI 294.1}
En la última visión que recibí en Battle Creek se me mostró que en la localidad de _____ se había adoptado un proceder imprudente con respecto a las visiones, cuando se organizó la iglesia en ese lugar. Había algunos en _____ que eran hijos de Dios y sin embargo dudaban de las visiones. Otras personas no manifestaban oposición, pero no se atrevían a adoptar una posición definida con respecto a ellas. Algunos eran escépticos y tenían causa suficiente para serlo. Las falsas visiones y manifestaciones fanáticas y los lastimosos frutos producidos, influyeron en la causa en Wisconsin e hicieron que la gente considerara con recelo todo lo que tuviera que ver con visiones. Todas estas cosas debieran haberse considerado y debió haberse manifestado sabiduría. No debiera mortificarse a los que nunca han visto a una persona que se encuentra en visión, y que no han tenido conocimiento personal de la influencia de las visiones. A tales personas no se las debiera privar de los beneficios y privilegios de la iglesia si su conducta cristiana en general es correcta, y si han formado un sólido carácter cristiano. {1TI 294.2}
Se me mostró que algunos pueden aceptar las visiones publicadas, juzgando el árbol por sus frutos. En cambio otros manifiestan dudas, como Tomás; no pueden creer los Testimonios publicados, ni
recibir evidencia mediante testimonio de otras personas; sino que deben ver y comprobar por sí mismos. No hay que descartar a tales personas, sino que es necesario ejercer mucha paciencia y amor fraternal hasta que encuentren su lugar y adopten una posición en favor o en contra. Si luchan contra las visiones, de las que no tienen conocimiento; si llevan su oposición hasta el punto de oponerse contra lo que no conocen por experiencia, y se sienten ofendidos cuando los que creen que las visiones proceden de Dios hablan en las reuniones y se fortalecen con las instrucciones dadas en visión, la iglesia podrá saber que no están en lo correcto. El pueblo de Dios no debiera retraerse y ceder, abandonando su libertad para complacer a esas personas que no están satisfechas. Dios ha dado sus dones a la iglesia para que la iglesia se beneficie con ellos; y cuando los creyentes profesos en la verdad se oponen a esos dones, y luchan contra las visiones, las almas corren peligro. Ese es el momento cuando se debe encararlos para que los débiles no se descarríen debido a su influencia. {1TI 295.3}
Ha sido muy difícil para los siervos de Dios trabajar en la localidad de _____, porque allí ha habido un grupo de personas que se creen muy justas y buenas, que hablan mucho y que son indisciplinadas, que han sido obstáculos para la obra de Dios. Si se las recibe en la iglesia la harán pedazos. No se sujetarán al cuerpo, y nunca estarán satisfechas a menos que manejen la iglesia ellas mismas. {1TI 295.1}
El hermano G procuró actuar con mucha precaución. Sabía que el grupo que se oponía a las visiones estaba equivocado, que no eran creyentes genuinos en la verdad; de modo que para desembarazarse de esos obstáculos, propuso que no se recibiera en la iglesia a nadie que no creyera en el mensaje del tercer ángel y en las visiones. Esto dejó fuera de la iglesia a algunas almas sinceras que no se habían opuesto a las visiones. No se atrevieron a unirse a la iglesia por temor a aceptar lo que no comprendían ni creían plenamente. Y había algunos que estaban muy dispuestos a criticar a estas personas concienzudas y a presentarles los asuntos en la peor forma posible. Algunos se han sentido afligidos y ofendidos debido a las condiciones puestas para ser miembros, y desde la organización de la iglesia han aumentado notablemente sus sentimientos de insatisfacción. Han estado dirigidos por un fuerte prejuicio. {1TI 295.2}
Se me mostró el caso de la hermana H. Se me presentó en conexión con una hermana profesa que sentía un fuerte prejuicio contra mi esposo y contra mí, y se oponía a las visiones. Este espíritu la indujo a amar y a retener todo informe falso concerniente a nosotros y a las visiones, y ella comunicó todo eso a la hermana H. Ha manifestado un enconado espíritu de oposición contra mí, a pesar de no conocerme personalmente. Aunque ella no conoce mi trabajo, ha alimentado sentimientos malignos de prejuicio contra mí, y ha influído en la hermana H, y se han unido para hacer duras observaciones y para hablar descomedidamente. La persona que se me mostró en relación con la hermana H era una mujer resuelta, optimista y con un elevado concepto de sí misma. Ella ha pensado que sus puntos de vista son correctos y que otros deben confiar en su palabra, cuando en realidad lo único que ella hacía era oscurecer el consejo con su palabrerío y manifestar el espíritu del dragón para luchar contra los que desean permanecer unidos en los mandamientos de Dios y en el testimonio de Jesús. {1TI 295.3}
Desde que la hermana H estuvo en _____, ha despreciado las visiones y ha divulgado rumores, como si supiera que son verdaderos. Ha cedido a toda influencia posible calculada para perjudicarme. No sabía que las visiones procedían de Dios; no conocía personalmente al humilde instrumento portador de las visiones; y sin embargo se ha unido con personas no consagradas en la localidad de _____ para ejercer una poderosa influencia contra mí. Se han fortalecido mutuamente recibiendo con avidez, y propagando, falsas historias que procedían de diversas fuentes, y en esta forma han alimentado su prejuicio. No puede existir unión entre su espíritu y el espíritu de los mensajes que el Señor considera apropiado enviar para el beneficio de su humilde pueblo. El espíritu que mora en sus corazones no puede armonizar con la luz dada por Dios. {1TI 296.1}
Muchas pobres almas no saben lo que están haciendo. Unen su influencia con las fuerzas satánicas y las ayudan en su obra. Manifiestan gran celo y fervor en su ciega oposición, como si en realidad estuvieran haciendo un servicio a Dios al luchar contra las visiones. Todos los que deseen hacerlo pueden conocer personalmente los frutos de estas visiones. Durante diecisiete años Dios ha considerado conveniente dejarlas sobrevivir y fortalecerse contra la oposición de las fuerzas de Satanás, y la influencia de los instrumentos humanos que han ayudado a Satanás en su obra. {1TI 296.2}
Se me mostraron otras mujeres en la localidad de _____ que luchaban contra la verdad. Se me mostró una que había aceptado unos pocos puntos de la verdad, y luego no había continuado con el pueblo remanente de Dios. Tenía un elevado concepto de sí misma y pensaba entenderlo todo. Era sabia según su propia opinión, y se me mostró que constantemente miraba hacia atrás y se refería a una experiencia del pasado; debido a que había recibido cierto grado de luz, se había ensalzado y había pensado que tenía luz y conocimiento suficientes para instruir a todo el cuerpo. Tiene una fe debilitada y desconectada. Muchas de sus ideas acerca de la verdad son erróneas; sin embargo, es egoísta y justa ante sus propios ojos. Está muy dispuesta a instruir pero no quiere que se le enseñe. Ha despreciado la instrucción y ha desechado las enseñanzas que Dios ha enviado mediante sus siervos. Vi que ella hacía referencia a su justicia, su devoción y su vida de oración. Lo mismo que el fariseo, enumera sus buenas obras: “Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aún como este publicano, ayuno dos veces a la semana, doy diezmo de todo lo que gano”. Lucas 18:11-12. La oración del fariseo no fue tomada en cuenta; fue la oración del pobre publicano, quien únicamente pudo decir: “Dios, sé propicio a mí, pecador”, la que suscitó la misericordia del Señor. Su oración fue aceptada, mientras la oración del fariseo engreído fue rechazada. “Porque cualquiera que se enaltece, será humillado; y el que se humille será enaltecido”. Lucas 18:14. {1TI 296.3}
Apocalipsis 3:17-18: “Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo. Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio para que veas”. {1TI 297.1}
Esta persona, cuya cara reconocí cuando la ví, se me dijo que era la señora I. Ví que su vida no tenía la humildad que siempre debiera caracterizar a los seguidores de Cristo. Cuando los pobres mortales, por muy elevada que sea su profesión, se tornan justos a sus propios ojos, entonces Jesús los deja para que sean engañados con respecto a sí mismos. Se me mostró que esta mujer había ejercido influencia sobre otros, y algunos se habían unido con ella para ridiculizar las visiones. Deberán responder ante Dios de todo esto, porque toda palabra de desprecio pronunciada contra la luz que Dios ha considerado conveniente comunicar en la forma que él ha elegido queda registrada. {1TI 297.2}
También se me mostró otra mujer que no se encuentra en unidad con el pueblo que Dios está conduciendo. El espíritu de verdad no mora en su corazón, y ella ha estado ocupada haciendo la obra que mucho complace al enemigo de todo bien, para distraer y confundir las mentes. (Reconocí a esta mujer el último día de reunión, y ella se fue antes de haber terminado). Habla mucho y está dispuesta a escuchar novedades y repetirlas, y describe detalladamente lo que ella llama los errores de los demás; y a sus propias conjeturas malignas las llama discernimiento. Coloca la luz como tinieblas y las tinieblas como luz, y hace fingidamente largas oraciones. Le gusta que la aprueben y la consideren justa, y ha engañado a algunos. Desea enseñar a otros, y piensa que Dios le enseña a ella por encima de todos los demás, pero la verdad no tiene lugar en su corazón. {1TI 298.1}
Me fueron mostradas algunas personas más que unían su influencia a la de los individuos ya mencionados, y juntos hacen todo lo posible por apartarse del cuerpo y causar confusión; y su influencia acarrea oprobio sobre la verdad de Dios. Jesús y los santos ángeles están constituyendo y uniendo al pueblo de Dios, para que sea unánime y sienta una misma cosa. Y mientras se los trae a la unidad de fe, para que estén completamente de acuerdo en su consideración de las verdades solemnes e importantes para este tiempo, Satanás trabaja para oponerse a sus progresos. Jesús obra mediante sus instrumentos para reunir y unir. Satanás obra mediante sus instrumentos para esparcir y dividir. “Porque he aquí yo mandaré y haré que la casa de Israel sea zarandeada entre todas las naciones, como se zarandea el grano en una criba, y no cae un granito en la tierra” Amós 9:9. {1TI 298.2}
Dios está ahora probando a su pueblo. Está desarrollando su carácter. Los ángeles están pesando el valor moral, y llevando un registro fiel de todos los actos de los hijos de los hombres. Entre los que profesan ser hijos de Dios hay corazones corrompidos; pero serán probados. El Dios que lee lo que hay en el corazón de cada uno, sacará a la luz cosas ocultas de las tinieblas donde con frecuencia menos se sospechan, para eliminar las piedras de tropiezo que han estorbado el progreso de la verdad, a fin de que Dios tenga un pueblo limpio y santo que declare sus estatutos y juicios. {1TI 298.3}
El capitán de nuestra salvación conduce a su pueblo hacia adelante paso a paso, purificándolo y haciéndolo idóneo para la traslación, y dejando en la retaguardia a aquellos que estén dispuestos a apartarse del cuerpo, que no quieran ser guiados, y se contenten con su propia justicia. “Así que, si la luz que en ti hay es tinieblas, ¿cuántas no serán las mismas tinieblas?” Mateo 6:23. No podría seducir a la mente humana un engaño mayor que el que induce a los hombres a tener un espíritu de confianza propia, a creer que están en lo cierto y en la luz, cuando se están apartando del pueblo de Dios, y la luz que acarician es en verdad tinieblas. {1TI 298.4}
El grupo de _____ que se ha estado alejando del cuerpo, ha manifestado un espíritu duro y enconado contra las personas a quienes Dios está usando como sus instrumentos para reunir a su pueblo y unirlo sobre la única plataforma verdadera. Su espíritu se opone a la obra de Dios, su influencia ha producido oprobio a la causa de Dios, y ha hecho que nuestra fe resulte desagradable para los incrédulos, lo cual ha alegrado a Satanás. Los que actúan en la iglesia y tratan de servir a Dios, durante un tiempo pueden sentirse molestos con los que estando en su medio no andan rectamente, y que se me han mostrado como personas farisaicas que se creen muy justas y buenas; pero si tienen paciencia y andan humildemente delante de Dios, si oran fervorosamente para recibir el poder de su Espíritu, progresarán, y los que no están firmes en la fe serán dejados atrás. {1TI 299.1}
Se me presentó al hermano J, y vi que su proceder no agradaba a Dios. Era inestable. Ha estado confundido por la teoría de la “Epoca del Futuro”, y como no existe ni la menor armonía entre esta teoría y el mensaje del tercer ángel, perdió su amor por la fe en el mensaje, y se sintió irritado porque se había dicho tanto acerca de él. El tercer ángel está proclamando un mensaje muy solemne a los habitantes del mundo; ¿será el pueblo de Dios indiferente a él, y no unirá su voz para hacer resonar esta solemne advertencia? El hermano J está engañando a otros. Su tema ha sido la consagración, cuando su corazón no estaba en lo recto. Su mente ha estado dividida. No ha tenido un ancla que lo sostenga, debido a lo cual ha ido a la deriva sin una fe que lo mantenga firme. Ha pasado buena parte de su tiempo refiriendo a otras personas informes e historias calculados para distraer y hacer vacilar las mentes. Ha tenido mucho que decir acerca de mi esposo y de mí misma, y contra las visiones. Ha adoptado la posición de “Infórmenos… y nosotros lo daremos a conocer”. Dios no le ha encomendado esa misión. No ha sabido a quién ha estado sirviendo. Satanás lo ha utilizado para confundir las mentes. La poca influencia que ha tenido la ha utilizado para introducir prejuicio contra el mensaje del tercer ángel. Mediante informes falsos ha presentado las visiones en una luz equivocada, y las almas débiles que no estaban establecidas en la verdad presente se han alimentado de esas cosas en lugar de recibir comida limpia y bien seleccionada. Ha estado engañado en lo que concierne a la santificación. A menos que ahora cambie su proceder, y se disponga a dejarse instruir, y aprecie la luz recibida, será dejado afuera por Dios para que siga su propio camino y sus propios juicios imperfectos hasta que naufrague su fe, y debido a su proceder insensato se convierta en una señal de advertencia para los que deciden independizarse del cuerpo. Dios abrirá los ojos de las almas más honradas para que comprendan la obra impía de los que esparcen y dividen. El marcará a los que causan divisiones, para que todas las personas honradas puedan escapar de las trampas de Satanás. {1TI 299.2}
El hermano J. recibió del pastor K una falsa teoría de la santificación, que es extraña al mensaje del tercer ángel. Dondequiera que se la recibe, destruye el amor por el mensaje. Me fue mostrado que el pastor K se hallaba en terreno peligroso. No está unido con el tercer ángel. Disfrutó una vez de la bendición de Dios, pero no así ahora, porque no apreció la luz de la verdad que resplandeció sobre su senda. Conservó una teoría metodista de la santificación y la recalca, dándole la mayor importancia. Considera de poca consecuencia las verdades sagradas aplicables a este tiempo. Siguió su propia luz, y quedó cada vez más sumido en tinieblas. Se alejó paulatinamente de la verdad, hasta un punto en que ésta tiene ya poca influencia sobre él. Satanás dominó su mente y ocasionó graves daños a la causa de la verdad en el norte de Wisconsin. {1TI 300.1}
Esta teoría de la santificación que la hermana G recibió del pastor K, y que ella procuró seguir, es la que la ha arrastrado a este terrible fanatismo. El pastor K ha aturdido y confundido a muchos con esta teoría de la santificación. Todos los que la abrazan pierden en extenso grado su interés por el mensaje del tercer ángel y su amor hacia él. Esta opinión de la santificación es una teoría que parece muy hermosa. Blanquea las pobres almas que están en las tinieblas del error y del orgullo. Les da apariencia de buenos cristianos, dotados de santidad, cuando sus corazones están corrompidos. Es una teoría que proclama paz y seguridad, que no saca a la luz el mal, ni reprende los yerros. Cura superficialmente las heridas de la hija del pueblo de Dios, proclamando paz, paz, cuando no hay paz. Hombres y mujeres de corazones corruptos se arropan con el manto de la santificación y son considerados como ejemplos del rebaño cuando son agentes de Satanás, que él usa para engañar a las almas sinceras y atraerlas a una senda desviada, de modo que no sientan la fuerza y la importancia de las verdades solemnes proclamadas por el tercer ángel. {1TI 300.2}
El pastor K ha sido considerado como un ejemplo, mientras que perjudicaba a la causa de Dios. Su vida no ha sido sin culpa; sus caminos no han estado de acuerdo con la santa ley de Dios, ni con la vida inmaculada de Cristo. Su naturaleza corrompida no está subyugada; y sin embargo, se espacia mucho en la santificación, y con ello engaña a muchos. Me fueron mostradas sus labores pasadas. No hizo entrar a las almas en la verdad, ni las estableció en el mensaje del tercer ángel. Presenta una teoría de la santificación como asunto de la mayor importancia, mientras que da poca importancia al conducto por el cual se recibe la bendición de Dios. “Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad”. Juan 17:17. No considera la verdad presente, que es el conducto, sino que la pisotea. Los hombres pueden clamar: “Santidad, santidad; santificación, santificación; consagración, consagración”, y sin embargo, no tener más experiencia de lo que mencionan que el pecador con sus propensiones corruptas. Dios no tardará en arrancar este manto blanqueado de profesa santificación con que algunas personas de mente carnal se han revestido para ocultar la deformidad de su alma. {1TI 301.1}
Se lleva un registro fiel de los actos de los hijos de los hombres. Nada se puede ocultar a los ojos del Santo y Sublime. Algunos siguen una conducta que contraría directamente la ley de Dios, y luego, para cubrir esta conducta pecaminosa, profesan estar consagrados a Dios. Esta profesión de santidad no se manifiesta en su vida diaria. No tiende a elevar sus espíritus ni los induce a apartarse de “toda especie de mal”. 1 Tesalonicenses 5:22 (VM). Somos espectáculo para el mundo, los ángeles y los hombres. Se blasfema de nuestra fe como consecuencia de la conducta tortuosa de los de ánimo carnal. Estos profesan una parte de la verdad, con lo cual adquieren influencia, mientras que no se unen con aquellos que creen toda la verdad y están unidos con ella. ¿Cuál ha sido la influencia del pastor K? ¿Cuáles han sido los frutos de su labor? ¿A cuántos ganó y estableció en la verdad presente? ¿A cuántos ha traído a la unidad de la fe? El no ha recogido con Cristo. Ha utilizado su influencia para esparcir. Su predicación carece de algo y sus conversos carecen de lo que podría ser su roca y defensa en el día de la ira de Dios. Sus predicaciones carecen de sal y de sabor. No trae almas completamente convertidas a la verdad, separadas del mundo y unidas con el pueblo peculiar de Dios. Sus conversos carecen de un ancla que los sostenga; por lo que derivan de un lado para otro, hasta que muchos de ellos se confunden y se pierden en el mundo. {1TI 301.2}
El hermano K no sabe a qué espíritu pertenece. Está uniendo su influencia con la hueste del dragón para oponerse a los que guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesús. Tiene una dura lucha ante él. En lo que concierne al sábado, él ocupa la misma posición que los bautistas del séptimo día. Si se separa el sábado de los mensajes, perderá su poder; pero cuando se lo relaciona con el mensaje del tercer ángel, adquiere un poder que convence a los incrédulos y los infieles, y les proporciona fuerza para mantenerse, vivir, crecer y prosperar en el Señor. Ya es tiempo que el pueblo de Dios que está en Wisconsin encuentre su lugar. “¿Quién está por Jehová?”” debiera ser la pregunta hecha en todas partes por los fieles experimentados. Dios requiere que salgan y se alejen de las diversas influencias que los separan unos de otros y de la gran plataforma de la verdad sobre la cual Dios está reuniendo a su pueblo. {1TI 302.1}
Me fue mostrado el caso del señor L. El habla mucho acerca de la santificación, pero se engaña a sí mismo, y otros se engañan respecto a él. Su santificación tal vez le dure mientras está en la reunión; pero no puede soportar la prueba. La santidad bíblica purifica la vida; pero el corazón de L no ha sido purificado. Hay mal en su corazón y en su vida, y los enemigos de nuestra fe han tenido ocasión de arrojar oprobio sobre los observadores del sábado. Juzgan el árbol por sus frutos. {1TI 302.2}
“Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios”. 2 Corintios 4:2. {1TI 302.3}
Muchos obran directamente contra el pasaje citado. Andan con astucia, y manejan engañosamente la Palabra de Dios. No ejemplifican la verdad en su vida. Sienten preocupación especial por la santificación, pero desechan la Palabra de Dios. Oran, cantan y gritan acerca de la santificación. Hombres de corazón corrupto asumen aire de inocencia y profesan ser consagrados; pero esto no evidencia que lo sean. Sus acciones testifican acerca de ellos. Sus conciencias están cauterizadas; pero llegará el día del juicio de Dios y la obra de cada uno será manifiesta, según lo que haya sido. Cada uno recibirá de acuerdo con sus acciones. {1TI 302.4}
Dijo el ángel, mientras señalaba a L: “¿Qué tienes tú que hablar de mis leyes, y que tomar mi pacto en tu boca? Pues tú aborreces la corrección, y echas a tu espalda mis palabras. Si veías al ladrón, tú corrías con él, y con los adúlteros era tu parte. Tu boca metías en mal, y tu lengua componía engaño”. Salmos 50:16-19. Dios dispersará y sacudirá estas influencias divisorias, y librará a su pueblo, si los que profesan toda verdad acuden en auxilio del Señor. {1TI 303.1}
No hay santificación bíblica para los que desechan una parte de la verdad. La Palabra de Dios es bastante luz para que nadie necesite errar. La verdad es tan sublime que admira a los intelectos más elevados, y sin embargo, tan sencilla que puede comprenderla y ser instruido por ella el más humilde y débil hijo de Dios. Los que no vean la belleza de la verdad, ni le den importancia al mensaje del tercer ángel, quedarán sin excusa; porque la verdad es clara. {1TI 303.2}
“Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, entre los que se pierden está encubierto; en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios”. 2 Corintios 4:3-4. {1TI 303.3}
“Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad”. “Y por ellos yo me santifico a mí mismo para que también ellos sean santificados en la verdad”. Juan 17:17, 19. {1TI 303.4}
“Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro”. 1 Pedro 1:22. {1TI 303.5}
“Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de Dios”. 2 Corintios 7:1. {1TI 303.6}
“Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor; porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad. Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo”. Filipenses 2:12-15. {1TI 303.7}
“Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado”. Juan 15:3. {1TI 304.1}
“Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentársela gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga, ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha”. Efesios 5:25-27. {1TI 304.2}
Tal es la santificación bíblica. No es simplemente ostentación u obra exterior. Es la santificación recibida por el conducto de la verdad. Es la verdad recibida en el corazón y puesta en práctica en la vida. {1TI 304.3}
Jesús considerado como hombre era perfecto, y sin embargo, crecía en gracia. “Y Jesús crecía en sabiduría, en estatura y en edad, y en gracia para con Dios y los hombres”. Lucas 2:52. Aun el cristiano más perfecto puede crecer continuamente en el conocimiento y en el amor de Dios. {1TI 304.4}
“Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz”. “Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén”. 2 Pedro 3:14, 18. {1TI 304.5}
La santificación no es obra de un momento, una hora o un día. Es un crecimiento continuo en la gracia. No sabemos un día cuán intenso será nuestro conflicto al día siguiente. Satanás vive, y está activo, y cada día necesitamos clamar fervorosamente a Dios por ayuda y fortaleza para resistirle. Mientras reine Satanás tendremos que subyugar el yo, tendremos asedios que vencer, y no habrá punto en que detenerse, donde podamos decir que hemos alcanzado la plena victoria. {1TI 304.6}
“No que lo haya alcanzado ya, ni que sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús”. Filipenses 3:12. {1TI 304.7}
La vida cristiana es una marcha constante hacia adelante. Jesús está sentado para refinar y purificar a sus hijos; y cuando su imagen se refleja perfectamente en ellos, son perfectos y santos, preparados para la traslación. Se requiere del cristiano una obra grande. Se nos exhorta a purificarnos de toda inmundicia de la carne y del espíritu, y a perfeccionar la santidad en el temor de Dios. En esto vemos en qué estriba la gran labor. Hay trabajo constante para el cristiano. Todo sarmiento de la cepa debe obtener de ella vida y fuerza a fin de dar fruto. {1TI 305.1}
Testimonios para la Iglesia, Tomo 1. Número 8: ''El poder de Satanás''
El hombre caído es el cautivo legítimo de Satanás. La misión de Cristo consistió en rescatarlo del poder de su gran adversario. El hombre se inclina por naturaleza a seguir las sugestiones de Satanás, y no puede resistir con éxito a un enemigo tan terrible, a menos que Cristo, el poderoso Conquistador, more en él, guíe sus deseos y le fortalezca. Únicamente Dios puede limitar el poder de Satanás. Este va de aquí para allá por la tierra, recorriéndola de un lado al otro. Ni por un solo instante está desprevenido, por temor a perder una oportunidad de destruir las almas. Es importante que los hijos de Dios entiendan esto a fin de poder evitar sus trampas. {1TI 305.2}
Satanás está preparando sus engaños, para que en su última campaña contra el pueblo de Dios, éste no entienda que se trata de él. “Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se transfigura en ángel de luz”. 2 Corintios 11:14. Mientras que algunas almas engañadas sostienen que él no existe, las está llevando cautivas y trabaja extensamente por su medio. Satanás conoce mejor que los hijos de Dios el poder que ellos pueden tener sobre él cuando su fuerza está en Cristo. Cuando el más débil creyente en la verdad solicita humildemente ayuda al poderoso Conquistador, confiando firmemente en Cristo, puede repeler con éxito a Satanás y toda su hueste. El diablo es demasiado astuto para presentar abierta y audazmente sus tentaciones, porque entonces se despertarían las soñolientas energías del cristiano, y éste confiaría en el poderoso Libertador. Pero se presenta inadvertido, y obra por engaño mediante los hijos de desobediencia que profesan la piedad. {1TI 305.3}
Satanás recurrirá a todo su poder para acosar, tentar y desviar al pueblo de Dios. El que se atrevió a enfrentarse con nuestro Señor para tentarlo y desafiarlo, y que tuvo poder para tomarlo en sus brazos y llevarlo al pináculo del templo, y hasta la cumbre de una altísima montaña, ejercerá su poder hasta un grado asombroso sobre la presente generación, que dista mucho de tener la sabiduría de su Señor, y que ignora casi completamente la sutileza y fuerza de Satanás. De manera maravillosa afectará el cuerpo de los que están por naturaleza inclinados a hacer su voluntad. Satanás se regocija cuando se lo considera como un mito. Cuando es objeto de burlas y representado por alguna ilustración infantil, o como algún animal, ello le conviene perfectamente. Como se le cree tan inferior, las mentes humanas están completamente desprevenidas ante sus planes sabiamente trazados, y él tiene casi siempre éxito. Si su poder y sutileza fuesen comprendidos, muchos estarían preparados para resistirle victoriosamente. {1TI 305.4}
Todos debieran entender que Satanás fue una vez un ángel muy exaltado. Su rebelión hizo que fuera echado del cielo, pero no destruyó sus facultades ni hizo de él una bestia. Desde su caída dirigió su poderosa fuerza contra el gobierno del cielo. Se ha estado volviendo más astuto, y ha aprendido de qué manera puede triunfar más completamente al presentar sus tentaciones a los hijos de los hombres. {1TI 306.1}
Satanás ha inventado fábulas a fin de engañar. Principió en el cielo a guerrear contra el fundamento del gobierno de Dios, y desde su caída ha persistido en su rebelión contra la ley de Dios, y ha inducido a la mayoría de los que profesan el cristianismo a hollar el cuarto mandamiento, que presenta al Dios viviente. Arrancó el sábado original del Decálogo, y puso en su lugar uno de los días de trabajo de la semana. {1TI 306.2}
La gran mentira original que le dijo a Eva en el Edén: “De seguro que no moriréis” (Génesis 3:4 (VM)), fue el primer sermón que se predicó sobre la inmortalidad del alma. Fue coronado de éxito, y le siguieron resultados desastrosos. Satanás ha logrado que muchas mentes acepten ese sermón como si fuera verdad, y los predicadores lo proclaman, lo cantan y lo mencionan en sus oraciones. {1TI 306.3}
Se están popularizando rápidamente las fábulas de que el diablo no existe y de que habrá un tiempo de prueba después de la venida de Cristo. Las Escrituras aseveran claramente que el destino de toda persona quedará fijado para siempre al momento de la venida del Señor. “El que es injusto, sea injusto todavía: y el que es sucio, ensúciese todavía: y el que es justo sea todavía justificado: y el santo sea santificado todavía. Y he aquí, yo vengo presto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según fuere su obra” Apocalipsis 22:11, 12. {1TI 306.4}
Satanás se ha aprovechado de las fábulas populares para ocultarse. Se presenta a los pobres y engañados mortales mediante el espiritismo moderno, el cual no impone limitaciones a los de ánimo carnal, y cuando se sigue, separa las familias, crea celos y odio, y concede libertad a las más degradantes propensiones. El mundo sabe muy poco todavía de la influencia corruptora del espiritismo. Se levantó el telón, y se me reveló gran parte de su obra devastadora. Vi a algunas personas que habían tenido experiencia en el espiritismo, y renunciado después a él, que se estremecen al considerar cuán cerca se hallaron de la ruina completa. Habían perdido el dominio propio, y Satanás las obligaba a hacer lo que detestaban. Pero aun dichas personas tienen tan sólo una débil idea de lo que es el espiritismo. Los ministros inspirados por Satanás pueden vestir con elocuencia ese monstruo abominable, ocultar su deformidad y hacerlo aparecer hermoso ante muchos. Pero proviene tan directamente de su majestad satánica, que él reclama el derecho de dominar a cuantos tengan algo que ver con él, porque se han aventurado sobre terreno prohibido y han perdido todo derecho a ser protegidos por su Hacedor. {1TI 307.1}
Algunas pobres almas que, habiendo sido fascinadas por las palabras elocuentes de los maestros del espiritismo, se entregan a su influencia, más tarde descubren su carácter mortífero y quisieran renunciar a él y huir, pero no pueden. Satanás las retiene por su poder, y no quiere dejarlas en libertad. El sabe que le pertenecen seguramente mientras se hallan bajo su dominio especial, pero que una vez libres de su poder, nunca las podría inducir a creer ya en el espiritismo, ni a colocarse tan directamente bajo su dominio. La única manera en que estas pobres almas pueden vencer a Satanás, consiste en discernir entre la pura verdad de la Biblia y las fábulas. Al reconocer las exigencias de la verdad, se sitúan donde pueden ser ayudadas. Debieran rogar a aquellos que han tenido experiencia religiosa, y tienen fe en las promesas de Dios, que intercedan en su favor ante el poderoso Libertador. Ello representará un conflicto reñido. Satanás reforzará su contingente de ángeles malos que han dominado a esas personas; pero si los santos de Dios, con profunda humildad, oran y ayunan, sus oraciones prevalecerán. Jesús comisionará a ángeles santos para resistir a Satanás, y éste será ahuyentado y su poder sobre los afligidos, quebrantado. “Y les dijo: Este género con nada puede salir, sino con oración y ayuno”. Marcos 9:29. {1TI 307.2}
Los predicadores populares no pueden resistir con éxito al espiritismo. No tienen nada con que proteger a sus rebaños de su influencia nefasta. Gran parte de los tristes resultados del espiritismo recaerá sobre los ministros de esta época, porque han pisoteado la verdad, y preferido las fábulas. El sermón que Satanás predicó a Eva con referencia a la inmortalidad del alma: “No moriréis”, lo han reiterado desde el púlpito, y la gente lo recibe como pura verdad bíblica. Tal es el fundamento del espiritismo. En ninguna parte enseña la Palabra de Dios que el hombre es inmortal. La inmortalidad es atributo exclusivo de Dios, “el único que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver: al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén”. 1 Timoteo 6:16. {1TI 308.1}
La Palabra de Dios, debidamente comprendida y aplicada, es una salvaguardia contra el espiritismo. La teoría de un infierno que arde eternamente, predicada desde el púlpito y presentada constantemente a la gente, representa una injusticia para el carácter benevolente de Dios. Lo presenta como el mayor tirano del universo. Este difundido dogma ha hecho volver a millares hacia el universalismo, la incredulidad y el ateísmo. La Palabra de Dios es clara. Es una recta cadena de verdad, y resultará un ancla para aquellos que estén dispuestos a recibirla, aun cuando hayan de sacrificar sus apreciadas fábulas. Ella los salvará de los terribles engaños de estos tiempos peligrosos. Satanás ha inducido a los predicadores de las diferentes iglesias a aferrarse tenazmente a sus errores populares, como indujo a los judíos a aferrarse en su ceguera a sus sacrificios y a crucificar a Cristo. El rechazo de la luz y la verdad deja a los hombres cautivos, sujetos a los engaños de Satanás. Cuanto mayor sea la luz que rechazan, tanto mayor será el poder del engaño y de las tinieblas que los sobrecogerán. {1TI 308.2}
Me fue mostrado que el verdadero pueblo de Dios es la sal de la tierra y la luz del mundo. Dios requiere de él que progrese continuamente en el conocimiento de la verdad, y en el camino de la santidad. Entonces comprenderá cómo llega Satanás y con la fuerza de Jesús, le resistirá. Satanás llamará en su ayuda legiones de sus ángeles para oponerse a los progresos hasta de un alma, y si posible fuese, la arrebataría de las manos de Cristo. {1TI 308.3}
Vi a los malos ángeles contender por las almas, y a los ángeles de Dios resistirles. El conflicto era intenso. Los malos ángeles estaban corrompiendo la atmósfera con su influencia venenosa, y se cernían en tropel alrededor de aquellas almas para embotar su sensibilidad. Los ángeles santos estaban mirando con ansiedad, y esperando para rechazar las huestes de Satanás. Pero no es obra de los ángeles buenos dominar las mentes de los hombres contra su voluntad. Si ellos se entregan al enemigo y no hacen esfuerzo para resistirle, entonces los ángeles de Dios no pueden hacer mucho más que mantener en jaque a la hueste de Satanás, para que no destruya a los que están en peligro, hasta que se les haya dado mayor luz con el fin de despertarlos y hacerlos mirar al Cielo en procura de ayuda. Jesús no comisionará a los ángeles santos para que libren a los que no se esfuerzan por ayudarse a sí mismos. {1TI 309.1}
Si Satanás ve que corre peligro de perder un alma, hace cuanto puede para conservarla. Y cuando la persona llega a darse cuenta del peligro que corre, y con angustia y fervor busca fortaleza en Jesús, Satanás teme perder un cautivo, y llama un refuerzo de sus ángeles para rodear a la pobre alma y formar una muralla de tinieblas en derredor de ella con el propósito de que la luz del cielo no la alcance. Pero si el que está en peligro persevera, y en su impotencia se aferra a los méritos de la sangre de Cristo, nuestro Salvador escucha la ferviente oración de fe, y envía refuerzos de ángeles poderosos en fortaleza para que lo libren. {1TI 309.2}
Satanás no puede soportar que se recurra a su poderoso rival, porque teme y tiembla ante su fuerza y majestad. Al sonido de la oración ferviente, toda la hueste de Satanás tiembla. El continúa llamando legiones de malos ángeles, para lograr su objeto. Cuando los ángeles todopoderosos, revestidos de la armadura del cielo, acuden en auxilio del alma perseguida y desfalleciente, Satanás y su hueste retroceden, sabiendo perfectamente que han perdido la batalla. Los súbditos voluntarios de Satanás son fieles, activos y unidos en un propósito, y aunque se aborrecen y se hacen guerra mutuamente, aprovechan toda oportunidad para fomentar su interés común. Pero el gran General del cielo y de la tierra ha limitado el poder de Satanás. {1TI 309.3}
Lo que he experimentado ha sido singular, y durante años he sufrido pruebas mentales peculiares. La condición del pueblo de Dios y mi relación con la obra de Dios, me han abrumado a menudo con un peso de tristeza y desaliento indecible. Durante años he considerado el sepulcro como un dulce lugar de reposo. En mi última visión, pregunté a mi ángel acompañante por qué se me dejaba sufrir tal perplejidad mental, y por qué era tan a menudo arrojada al campo de batalla de Satanás. Rogué que si había de estar tan íntimamente relacionada con la causa de la verdad, fuese librada de estas pruebas severas. Hay poder y fuerza en los ángeles de Dios, y yo rogué que ellos me escudasen. {1TI 310.1}
Entonces se me presentó nuestra vida pasada, y se me mostró que de diversas maneras Satanás había tratado de destruir nuestra utilidad; que muchas veces había hecho sus planes para apartarnos de la obra de Dios; se había presentado de diferentes maneras y por medio de diversos expedientes, para lograr sus propósitos; pero el ministerio de los santos ángeles le había derrotado. Vi que, en nuestros viajes de lugar en lugar, con frecuencia había colocado a sus malos ángeles en nuestra senda para causar un accidente que nos ocasionase la muerte; pero los santos ángeles fueron enviados al lugar para librarnos. Diversos accidentes nos pusieron a mi esposo y a mí misma en grave peligro, y nuestra salvación ha sido maravillosa. Vi que habíamos sido objeto especial de los ataques de Satanás, por causa de nuestro interés en la obra de Dios y nuestra relación con ella; y al ver el gran cuidado que Dios ejerce en todo momento en favor de quienes le aman y le temen cobré confianza en Dios, y me sentí reprendida por mi falta de fe. {1TI 310.2}
Testimonios para la Iglesia, Tomo 1. Número 8: ''Las dos coronas"
En una visión que tuve en Battle Creek (Míchigan), el 25 de octubre de 1861, se me mostró esta tierra oscura y melancólica. Dijo el ángel: “¡Mira cuidadosamente!” Se me mostró entonces a los pobladores de la tierra. Los ángeles de Dios rodeaban a algunos; otros estaban en tinieblas completas, rodeados por ángeles malos. Vi bajar del cielo un brazo que sostenía un cetro de oro, en cuyo extremo había una corona cuajada de diamantes, cada uno de los cuales despedía una viva y hermosa luz. En la corona se leía: “Todos los que me ganen serán felices y tendrán vida eterna”. {1TI 310.3}
Debajo de esa corona había otro cetro, y sobre él otra corona, en cuyo centro había joyas, oro y plata, que reflejaban algo de luz. La inscripción de esta corona era: “Tesoros terrenos. La riqueza es poder. Todos los que me ganen tendrán honor y fama”. Vi una gran multitud que porfiaba por obtener esta corona. Todos clamaban por ella, y algunos, con tal ahinco, que parecían enloquecidos. Se herían unos a otros, empujaban para atrás a los más débiles y pisoteaban a quienes caían en su apresuramiento. Algunos se apoderaban ansiosamente de los tesoros de la corona y los retenían con vigoroso empeño. Otros tenían los cabellos blancos como plata y los rostros surcados de arrugas causadas por la inquietud y la ansiedad. No hacían caso ni de sus propios parientes, carne de su carne y hueso de sus huesos; y cuando alguno de ellos los miraba anhelosamente, se asían con más firmeza a sus tesoros como si temieran que en un momento de descuido fuesen a perder parte de ellos, o se les obligara a compartirlos con los reclamantes. Sus ansiosos ojos se clavaban en la corona terrenal, y contaban y recontaban sus tesoros. {1TI 311.1}
Aparecieron entre la multitud figuras que personificaban la penuria y la miseria; miraban anhelosamente los tesoros y se apartaban desesperadas porque el fuerte se sobreponía y rechazaba al débil. Sin embargo, no cejaban en su empeño y con una multitud de contrahechos, enfermizos y viejos, trataban de abrirse paso hacia la corona terrenal. Algunos morían mientras intentaban alcanzarla. Otros sucumbían en el momento de asirla, y otros, después de tenerla un instante en las manos. El suelo estaba sembrado de cadáveres, y no obstante, la multitud se apretujaba y avanzaba pisoteando los cadáveres de sus compañeros. Todos los que alcanzaban la corona poseían parte de ella y eran aplaudidos calurosamente por la interesada compañía que anhelante rodeaba la corona. {1TI 311.2}
Una numerosa hueste de ángeles malos estaba muy atareada. Satanás permanecía en medio de ellos, y todos miraban con extremada satisfacción a la multitud que luchaba por la corona. {1TI 311.3}
Satanás parecía lanzar un peculiar ensalmo sobre quienes más afanosamente la apetecían. Muchos de los que buscaban esa corona terrenal eran cristianos de nombre y algunos parecían tener un poco de luz; pero, si bien miraban deseosos la corona celestial y a veces parecían encantados de su hermosura, no tenían verdadero concepto de su valía y belleza. Mientras con una lánguida mano trataban de alcanzar la celestial, con la otra se esforzaban con afán en lograr la terrena, resueltos a poseerla, y perdían de vista la celestial. Quedaban en tinieblas; sin embargo iban a tientas, ansiosos de asegurarse la corona terrena. {1TI 311.4}
Otros se disgustaban de seguir con quienes tan afanosamente buscaban esa corona, y recelando de los peligros que implicaba, se apartaban de ella para ir en busca de la celestial. El aspecto de éstos se transmutaba muy pronto de tinieblas a luz y de melancolía a placidez y santo júbilo. {1TI 312.1}
Después vi una hueste que, con la vista decididamente fija en la corona del cielo, se abría paso a través de la multitud. Y mientras avanzaba presurosa por entre la desordenada muchedumbre, los ángeles la asistían y le daban espacio para avanzar. Al acercarse a la corona celeste, la luz que ésta despedía brilló sobre los miembros de dicha compañía y alrededor de ellos disipó las tinieblas, y aumentó su fulgor hasta transformarlos a semejanza de los ángeles. No echaron ni una sola mirada para atrás, sobre la corona terrenal. Los que iban en busca de ésta se mofaban de ellos y les arrojaban pelotillas negras que por cierto no les producían daño alguno mientras sus ojos estaban fijos en la corona celestial; pero quienes prestaban atención a las pelotillas negras quedaban manchados por ellas. Entonces se me presentó a la vista el siguiente pasaje de la Escritura: {1TI 312.2}
“No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; mas haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan; porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón. La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz; pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas. Así que, si la luz que hay en ti es tinieblas, ¿cuántas no serán las mismas tinieblas? Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas”. Mateo 6:19-24. {1TI 312.3}
Después, todo lo que yo había visto se me explicó como sigue: La multitud que tan afanosamente porfiaba por la corona terrenal estaba compuesta por los que aman los tesoros de este mundo y se dejan engañar y lisonjear por sus efímeras atracciones. Vi algunos que, a pesar de llamarse discípulos de Jesús, son tan ambiciosos de tesoros terrenales que pierden el amor por los del cielo, obran según el mundo y Dios los tiene por mundanos. Dicen que buscan una corona inmortal, un tesoro en los cielos; pero su interés y su preocupación mayor está en adquirir tesoros terrenales. Quienes tienen sus tesoros en este mundo y aman sus riquezas, no pueden amar a Jesús. Podrán pensar que son justos, y aunque se aferran como avaros a sus posesiones, no se les puede convencer de ello; no son capaces de reconocer que aman más el dinero que la causa de la verdad o los tesoros celestiales. {1TI 312.4}
“Así que, si la lumbre que en ti hay son tinieblas, ¿cuántas serán las mismas tinieblas?” Mateo 6:23. En la experiencia de los tales llega un punto en que, por no apreciar la luz que se les dio, ésta se convierte en tinieblas. El ángel dijo: “No podéis amar y adorar los tesoros de la tierra y al mismo tiempo poseer verdaderas riquezas”. Cuando vino a Jesús el joven que le dijo: “Maestro bueno, ¿qué haré para poseer la vida eterna?” (Mateo 19:16), Jesús le dio a elegir entre dos cosas: o se separaba de sus posesiones y obtenía la vida eterna, o guardaba aquéllas y perdía ésta. El apreció sus riquezas más que el tesoro celestial. La condición de separarse de sus tesoros y darlos a los pobres, a fin de hacerse seguidor de Cristo y tener la vida eterna, ahogó su buen deseo, y se fue triste. {1TI 313.1}
Aquellos que vi afanarse por la corona terrenal eran los que recurren a toda clase de medios para adquirir posesiones. En este punto llegan hasta la locura. Todos sus pensamientos y energías se enfocan en el logro de riquezas terrenas. Pisotean el derecho ajeno, oprimen al pobre y al jornalero en su salario. Si pueden, se valen de los que son más pobres y menos astutos que ellos, para acrecentar sus riquezas, sin vacilar un momento en oprimirlos aunque los arrastren a la mendicidad. {1TI 313.2}
Los de cabellos canos y semblante arrugado por la inquietud, eran los ancianos que, a pesar de quedarles pocos años de vida, se afanaban en asegurar sus tesoros terrenales. Cuanto más cerca estaban del sepulcro, tanto mayor era su afán de aferrarse a ellos. Sus propios parientes no recibían beneficio alguno. Para ahorrar algo de dinero, dejaban a los miembros de sus familias que trabajasen más allá de sus fuerzas. Y no empleaban ese dinero para el bien ajeno ni para el propio. Les bastaba saber que lo poseían. Cuando se les presenta a estas personas su deber de aliviar las necesidades de los pobres y sostener la causa de Dios, se entristecen. Aceptarían gustosos el don de la vida eterna, pero no quieren que les cueste algo. Las condiciones son demasiado duras. Pero Abraham no retuvo a su hijo unigénito. En obediencia a Dios hubiera podido sacrificar a este hijo de la promesa más fácilmente de lo que muchos sacrificarían algunos de sus bienes terrenales. {1TI 313.3}
Era penoso ver a quienes hubieran podido madurar gloriosamente y prepararse día tras día para la inmortalidad, emplear todas sus fuerzas en retener sus tesoros terrenales. Vi que no eran capaces de estimar el tesoro celestial. Su intenso afecto a lo terreno, les impelía a demostrar en sus actos que no estimaban bastante la herencia celestial como para sacrificarse por ella. El “joven” manifestaba disposición a guardar los mandamientos, y sin embargo, nuestro Señor le dijo que una cosa le faltaba. Deseaba la vida eterna, pero amaba más sus bienes. Muchos se engañan a sí mismos. No han buscado la verdad como a tesoro escondido. No sacan el mejor partido posible de sus facultades. Su mente, que podría ser iluminada por la luz celestial, está perturbada y perpleja. “Los cuidados de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias que hay en las otras cosas, entrando ahogan la palabra, y se hace infructuosa” Marcos 4:19. “Los tales —dijo el ángel—, están sin excusa”. Vi que la luz se apartaba de ellos. No deseaban comprender las solemnes e importantes verdades para este tiempo, y pensaban que estaban bien sin comprenderlas. Su luz se apagó y quedaron andando a tientas en las tinieblas. {1TI 314.1}
La multitud de contrahechos y enfermizos que porfiaban por la corona terrenal eran aquellos que tienen sus intereses y tesoros en este mundo. Aunque por todas partes los hiera el desengaño, no pondrán sus afectos en el cielo para asegurarse allí una morada y un tesoro. Por más que fracasan en lo terrenal, prosiguen apegados a ello y pierden lo celestial. No obstante los desengaños y la desdichada vida y muerte de quienes pusieron todo su empeño en el logro de riquezas materiales, otros siguen el mismo camino. Se precipitan locamente, sin reparar en el miserable fin de aquellos cuyo ejemplo siguen. {1TI 314.2}
Los que alcanzaban la corona y lograban una participación en ella y eran aplaudidos, son los que obtienen el único anhelo de su vida: las riquezas materiales. Reciben la honra que el mundo tributa a los ricos. Tienen influencia en el mundo. Satanás y sus malignos ángeles quedan satisfechos, porque saben que los tales son seguramente suyos, y que, mientras vivan en rebelión contra Dios, serán poderosos agentes de Satanás. {1TI 314.3}
Los que acaban por disgustarse con quienes se afanan por la corona terrenal, son los que han reparado en la vida y muerte de quienes luchan por las riquezas terrenas, pues ven que éstos nunca están satisfechos sino que son desgraciados. Por esto se ponen en guardia y, apartándose de los egoístas, buscan las riquezas verdaderas y perdurables. {1TI 315.1}
Se me mostró que quienes, asistidos por los santos ángeles, se abren paso a través de la multitud hacia la corona celeste, son los fieles hijos de Dios. Los ángeles los guían y les infunden celo para avanzar en busca del tesoro celestial. {1TI 315.2}
Las pelotillas negras que se arrojaban contra los santos eran las maledicencias y falsedades difundidas contra el pueblo de Dios por quienes mienten y gustan de la mentira. Hemos de tener mucho cuidado de observar irreprensible conducta y abstenernos de toda apariencia de mal, a fin de marchar airosamente hacia adelante sin hacer caso de los falsos vituperios de los malvados. Cuando la vista de los justos se fija en los inestimables tesoros del cielo, se acrecienta más y más su semejanza con Cristo, con lo que quedarán así transformados y dispuestos para la traslación al cielo. {1TI 315.3}
Testimonios para la Iglesia, Tomo 1. Número 8: ''El futuro''
En ocasión de la transfiguración, Jesús fue glorificado por su Padre. Le oímos decir: “Ahora es glorificado el Hijo del hombre, y Dios es glorificado en él”. Juan 13:31. Así, antes de su entrega y crucifixión, fue fortalecido para sus últimos terribles sufrimientos. Al acercarse los miembros del cuerpo de Cristo al período de su último conflicto, al “tiempo de angustia de Jacob”, crecerán en Cristo y participarán en amplia medida de su Espíritu. Al crecer el tercer mensaje hasta ser un fuerte pregón, cuando acompañe a la obra final gran poder y gloria, los hijos de Dios participarán de aquella gloria. La lluvia tardía será lo que los fortalecerá y reavivará para atravesar el tiempo de angustia. Sus rostros resplandecerán con la gloria de aquella luz que acompaña al tercer ángel. {1TI 315.4}
Vi que Dios preservará de manera maravillosa a su pueblo durante el tiempo de angustia. Así como Jesús oró con toda la agonía de su alma en el huerto, ellos clamarán con fervor y agonía día y noche para obtener liberación. Se proclamará el decreto de que deben despreciar el sábado del cuarto mandamiento, y honrar el primer día, o perder la vida. Pero ellos no cederán, ni pisotearán el sábado del Señor para honrar una institución del papado. Los rodearán las huestes de Satanás y los hombres perversos, para alegrarse de su suerte, porque no parecerá haber para ellos medio de escapar. Pero en medio de las orgías y el triunfo de aquéllos, se oirá el estruendo ensordecedor del trueno más formidable. Los cielos se habrán ennegrecido, y estarán iluminados únicamente por la deslumbrante y terrible gloria del cielo, cuando Dios deje oír su voz desde su santa morada. {1TI 315.5}
Los cimientos de la tierra temblarán; los edificios vacilarán y caerán con espantoso fragor. El mar hervirá como una olla, y toda la tierra será terriblemente conmovida. El cautiverio de los justos se cambiará, y con suave y solemne susurro se dirán unos a otros: “Somos librados; es la voz de Dios”. Con solemne asombro escucharán las palabras de la voz. Los malos oirán, pero no entenderán las palabras de la voz de Dios. Temerán y temblarán, mientras que los santos se regocijarán. Satanás y sus ángeles, y los hombres perversos, que habían estado regocijándose porque el pueblo de Dios estaba en su poder y podían raerlo de la faz de la tierra, presenciarán la gloria conferida a aquellos que honraron la santa ley de Dios. Verán cómo el rostro de los justos estará iluminado y reflejará la imagen de Jesús. Los que estaban tan deseosos de destruir a los santos, no podrán soportar la gloria que descansará sobre los que habrán sido libertados, y caerán como muertos al suelo. Satanás y los malos ángeles huirán de la presencia de los santos glorificados. Habrán perdido para siempre el poder de molestarlos
Testimonio: 22-02-2018 #01
Amados, febrero 22, del 2018. En sueños, yo fui llevada a un lugar donde había una reunión de muchos líderes de niños, adolescentes y jóvenes. Había un gran debate en ese lugar en cuanto a la educación de estos niños. Entonces unos decían unas cosas; otros, otras. Otros, pensaban tener la razón. Entonces una hermana comenzó a hablar, y otra hermana se le unió, y convencieron a aquella gran multitud de darle a sus hijos lo mejor en la educación para educarlos. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p1}
Entonces, ellos trajeron una enorme guagua [autobús] y montaron a todos estos niños, adolescentes, y jóvenes, y se los llevaron. Entonces, pues, en ese momento yo les decía como que no se fuesen. Pero vanos fueron mis esfuerzos en hacerles entender, pues todos los que estaban allí soltaron sus hijos, como cuando sueltas un bulto que has cargado cuesta arriba por horas. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p2}
Entonces, ellos, creyendo a unas personas, pues, soltaron sus hijos. Entonces yo les decía: “¡pero es que van a creer en estas personas en vez de [en] un Escrito Está!” Pero ellos no hacían caso. Entonces, les comencé a exhortar que recordaran a Madison, que recordaran a Jesús, a Juan el Bautista, inclusive lo que tuvo que pasar Moisés antes de estar listo para ser usado —donde todo este protocolo tuvo que ser arrancado de él, y vaciado para llenarlo, ahora, de los dones, el ministerio, y la operación que Dios le estaba dando—. Entonces se burlaron y se fueron hasta quedar yo sola en aquel lugar. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p3}
Entonces mi acompañante me dijo algo muy triste, él estaba triste. Entonces lo que me dijo fue: “vámonos. Porque vamos a un lugar y vamos a ver lo que ha pasado”. Entonces, llegamos a esta gran casa, esta casa tenía muchos cuartos, y en cada uno de ellos había una escena diferente. Entonces en una, yo entré en un cuarto y vi niñas, eran niñitas, eran bebés, estaban muy bien arregladitas, estaban en las camas con muñecas y peluches. Entonces, estos muñecos y peluches estaban dedicados a lo malo, era lo que yo podía ver, lo que me estaban mostrando. Entonces desde chiquitas, estas cosas que vivían dentro de estas muñecas y peluches, los adoctrinaban en el mal porque estos muñecos estaban poseídos. Yo lo veía así: cómo los ángeles malos vivían dentro de esos muñecos y peluches. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p4}
Entonces, pasé a otro cuarto y vi un niño más grandecito, a mí entender este niño tendría como algunos 12 o 13 años. Allí estaba frente a una pantalla de videojuegos, su vida de aprendizaje espiritual pasaba como el agua en un vaso roto. Entonces él, pues, no era empapado ni lleno por esto, sino que solamente estaba en ese cuarto hipnotizado con ese videojuego. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p5}
En otro cuarto, cuando entré, allí estaba… era un cuarto, pues, sumamente oscuro. Allí estaba una niñita descansando, era una niñita hermosa con unos ojos muy pronunciados. Al entrar y tratar de abrir, yo, las ventanas para que entrara la luz, una fuerza me cogió por los brazos para que no los abriera. Pero mi acompañante me ayudó y pude abrirlas, y muchos muñecos salieron corriendo y se escondieron bajo la cama donde estaba esta niña. Así que yo tomé la niña, la saqué de allí, y se me indicó ponerla en una sala grande donde, en aquella sala, lo que se estaba leyendo era la Biblia constantemente. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p6}
En ese momento, salimos de esa sala y entré a otro cuarto. Allí vi padres, los padres estaban abrumados porque veían a sus hijos que estaban desesperados por las tareas escolares, que no les dejaban tiempo de calidad para educar a sus hijos en la real educación: que son las cosas de Dios. Los vi esclavizados, estaban oprimidos por huestes malignas que los rodeaban y no sabían cómo escapar. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p7}
Así que salimos de ese lugar, sin más pasar. Y seguimos el recorrido y fui llevada a otro cuarto donde, ahí, había jóvenes. Eran como unos tres jóvenes y estaban absortos en películas de violencia y ciencia ficción. Entonces vi a su lado, mientras ellos estaban ahí sentados, viendo estas películas, había ángeles; pero, estos ángeles eran malignos. Entonces, ellos procuraban que no escucharan otra cosa, nada más lo que ellos, pues, allí les estaban mostrando; lo que habían, ellos, preparado para ellos. Entonces, en ese momento, yo entré más cerca de ellos, y traté de que se dieran cuenta quién los estaba controlando. Pero, sus rostros, cuando me miraban, parecían como hipnotizados; no había forma de hacerlos entrar en razón. Entonces mi acompañante me dijo algo muy triste, me dijo: “vamos, su suerte ya es echada”. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p8}
Entonces, en ese momento, yo como que entré un poquito en desesperación, y dije: “¡Señor, pero, ¿qué vamos a hacer?!” Pero me dijo: “vamos”. Entonces, fuimos a otro cuarto, éste era más grande en espacio, allí vi jóvenes, como jóvenes adultos. Estos estudiaban, cada uno, libros de su preferencia. Y todos felices y ansiosos que, al acabar ese libro, pues, ellos lo que iban a esperar era la remuneración monetaria por haber estudiado estos libros. Entonces, en un rincón estaba el Libro de los libros; allí, yo vi la Biblia. Donde, se me indicó, que era la real sabiduría, el camino de la vida eterna. Y estaba allí, olvidado; y estaba empolvado. Ni uno de aquellos que estaban en aquel cuarto tenía atención a este Libro. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p9}
Así que salimos de ahí, fuimos a otro cuarto, y allí yo veía adultos. Todos ellos en sus afanes de trabajo secular. Ellos no tenían paz y eran rodeados por huestes malignas que los animaban a continuar por la remuneración material, aunque ellos se sentían que no debían hacerlo; pero las deudas los oprimían. Y algunos y otros, pues, tenían miedo de soltarse, por miedo de [¿perder?] su estado confortable que ellos sentían cuando estaban en esta situación. Así que les comencé a hablar, pero ellos tampoco me entendían, no sé qué pasaba. Entonces dije: “Señor, ¡¿por qué?! Mis ojos no pueden seguir viendo esto más, ¡quiero ayudarlos!” Pero, en ese momento, como que mis ojos se abrieron un poco más, y yo vi los oídos de estas personas. Y vi como unas manos negras que estaban tapándoles los oídos. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p10}
Entonces pregunté: “¿será siempre esto así?” Entonces, la voz me contestó: “ellos eligieron”. Entonces exclamé con mucho, gran, dolor —porque esto es muy difícil para mí—, entonces dije: “Señor, ¿cuán cerca estamos del mundo venidero?” Entonces me contestó: “ya los preparativos están listos, pronto estaremos en casa”. Entonces exclamé: “¡oh Santo, soberano Dios! ¿y estas personas? ¿qué será de ellos?” Entonces mi acompañante me dijo: “ven, te mostraré”. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p11}
Entonces salimos fuera de la enorme casa, yo la contemplaba de lejos. Comencé a llorar por ella, por la situación que yo había experimentado, había visto, en aquel lugar. Entonces, en ese momento, cuando ya yo estaba viendo esto, en ese momento vino un viento y arreció contra ella. Y una tabla de esa casa salió volando y cayó en mis pies. Entonces, yo me agaché a recogerla, y vi algo que tenía escrito, leí aquella inscripción que decía: “Laodicea”, en letras rojas. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p12}
Entonces, al levantar mi vista, volví a ver la casa, pero ya no estaba en su lugar. Había un grupo de pocas personas, vi allí bebecitos, niños, adolescentes, jóvenes, adultos, un grupito de personas estaban siendo educadas allí —en ese mismo lugar donde aquella casa ya no estaba—, por un hermoso y bello personaje que brillaba con sumo esplendor. Mis ojos no podían fijarse mucho en él, porque su esplendor no me dejaba casi ni verlo. Entonces, pude apreciar en un momento que su mano derecha estaba levantada al cielo y con la otra sostenía un libro que también brillaba. Y él los instruía, y todos entendían lo que este personaje les estaba diciendo. Entonces, comenzaron a caminar tras él, pero ya no a nivel suelo, sino que se elevaban, sus pies en el aire, yo los veía como ellos iban como elevándose poco a poco. Entonces exclamé: “Señor, ¿cómo llegaremos a este grupo? ¿a este nivel?” Entonces vi cómo se educaban, se educaban solamente de la Palabra de Dios. Y así se me fue instruido, que para llegar a este nivel solamente debemos educarnos de la Palabra de Dios. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p13}
En ese momento la escena cambió, vi padres que estaban educando a sus hijos en el hogar con la sola Palabra de Dios en sus manos. Y de ella emanaba toda rama de fuente de sabiduría para ellos y sus hijos, y cómo los ángeles llegaban y los asistían, y la paz reinaba en ellos. También vi jóvenes renunciando a sus deseos, expectativas, que ellos deseaban y que ellos querían. Estaban allí, devorando la Palabra de Verdad como cuando van a pasar por un examen exhaustivo y no pueden darse el lujo de reprobarlo, así estaban ellos. Entonces, vi también adultos, algunos estaban solos en esquinas, en lugares; otros, en familias. Y estábamos soltando todo por amor a Dios, sólo buscando su perdón y su aprobación. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p14}
En ese momento, también vi, cómo, en las familias, se iba cuarto por cuarto, rincón tras rincón sacando fuera de su campamento todo anatema, todo aquello que impedía la presencia de Dios en sus vidas, y estas personas gemían por las abominaciones que los rodeaban, y pedían ser librados de dicha contaminación. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p15}
Entonces, en ese momento, me volteé a donde mi acompañante y pregunté: “¿qué, pues, haremos ahora?” Y se me dijo: “alivianad vuestra carga porque la hora es casi llegada y empapad vuestro ser de la Palabra santa, justa y verdadera de nuestro grande Dios, porque el cielo es casi cercano”. Entonces, en ese momento, cuando escuché estas palabras “el cielo es casi cercano”, pregunté: “¿cuándo será esta gloriosa esperanza? ¿cuánto falta? Deseo partir”, agregué. Entonces él me miró sonriente y me contestó: “está ante ti la prueba final. Sé fiel hasta la muerte y se te dará la corona de la vida”. Entonces, en ese momento, yo exclamé, me salió un suspiro, y exclamé: “¡Señor, la prueba final, ¿quién podrá soportarla?!” Entonces me contestó: “ninguno que desde ya [no] deseche sus expectativas y deseos podrá triunfar, solo una rotunda muerte al yo los ayudará a soportar y vencer”. Entonces hizo una pausa, pero continuó diciéndome: “sólo una cosa ahora es de importancia, salgan de Egipto, celebrad la Pascua conmigo en el desierto, buscadme de todo corazón y viviréis”. Entonces en ese momento exclamé: “¡Señor, perdóname!” Entonces, le dije: “perdóname porque te quiero hacer otra pregunta más”. Y le dije: “¿qué es, para Tí, la Pascua?” Y, entonces, me contestó: “dejar de vivir para este mundo, y resolver sólo vivir para Mí y mi reino, como Enoc que celebró su pascua una vez y por siempre, y vive por siempre en mi reino”. En ese momento, amados, ahí desperté, ya no se me dijo más, ya no vi más. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p16}
Espero y ruego al Señor de todo corazón, que según esto ha impactado mi vida, pueda también impactar la vida de muchas personas que realmente estén buscando del Señor y que todos nos podamos encontrar en la Patria Celestial. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #01, es.p17}
Testimonio: 22-02-2018 #02
Febrero 22, 2018. Se me dio también Isaías 26, para que lo leyera y lo escudriñara y para que lo compartiera con todos ustedes. Así que se los, por favor, de asignación para que todos sigamos escudriñando y sabiendo lo que Dios quiere y espera de cada uno de vosotros. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 22-02-2018 #02, es.p1}
Isaías 26
1 En aquel día cantarán este cántico en la tierra de Judá: Fuerte ciudad tenemos; salvación puso [Dios por] muros y antemuro.
2 Abrid las puertas, y entrará la nación justa que guarda la verdad.
3 Tú guardarás en completa paz, [a aquel] cuyo pensamiento [en ti] persevera; porque en ti ha confiado.
4 Confiad en Jehová perpetuamente; porque en el Señor Jehová [está] la fortaleza eterna.
5 Porque derribó los que moraban en lugar alto; humilló la ciudad enaltecida, la humilló hasta la tierra, la derribó hasta el polvo.
6 La hollará pie, los pies del pobre, los pasos de los menesterosos.
7 El camino del justo es rectitud: Tú [que eres] recto, pesas el camino del justo.
8 También en el camino de tus juicios, oh Jehová, te hemos esperado; tu nombre y tu memoria [son] el deseo de [nuestra] alma.
9 Con mi alma te he deseado en la noche; y con mi espíritu dentro de mí, madrugaré a buscarte; porque luego que [hay] juicios tuyos en la tierra, los moradores del mundo aprenden justicia.
10 [Aunque] se le muestre piedad al impío, no aprenderá justicia; en tierra de rectitud hará iniquidad, y no mirará a la majestad de Jehová.
11 Jehová, levantada está tu mano, [pero] ellos no ven; verán al fin, y se avergonzarán los que envidian a tu pueblo; y a tus enemigos fuego los consumirá.
12 Jehová, tú establecerás paz para nosotros; porque también has hecho en nosotros todas nuestras obras.
13 Jehová Dios nuestro, [otros] señores fuera de ti se han enseñoreado de nosotros; pero en ti solamente nos acordaremos de tu nombre.
14 Muertos [son], no vivirán; han fallecido, no se levantarán; porque los visitaste y destruiste, e hiciste que pereciera toda su memoria.
15 Tú has engrandecido la nación, oh Jehová, tú has engrandecido la nación; te hiciste glorioso; la has extendido hasta todos los términos de la tierra.
16 Jehová, en la tribulación te buscaron; derramaron oración cuando los castigaste.
17 Como la mujer encinta cuando se acerca el tiempo de dar a luz gime y da gritos en sus dolores, así hemos sido delante de ti, oh Jehová.
18 Concebimos, tuvimos dolores de parto, pero fue como si diéramos a luz viento. Ninguna liberación hicimos en la tierra, ni cayeron los moradores del mundo.
19 Tus muertos vivirán; [junto con] mi cuerpo muerto resucitarán. ¡Despertad y cantad, moradores del polvo! porque tu rocío [es] cual rocío de hortalizas; y la tierra echará los muertos.
20 Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus puertas; escóndete como por un momento, en tanto que pasa la indignación.
21 Porque he aquí que Jehová sale de su lugar, para castigar la maldad de los moradores de la tierra; y la tierra descubrirá su sangre, y no encubrirá más a sus muertos.
Testimonio: 23-06-2018
Amados, el 23 de junio 2018, a las 9:15 de la mañana, alrededor de esa hora estaba meditando en las cosas que están pasando gravemente en el pueblo que dice ser el pueblo de Dios y conocedor de sus verdades. Estaba leyendo la matutina: Maranata” [el Señor viene] cuando, en esos momentos, escuché una voz que me dijo: “no se entiende la palabra ecumenismo”. {Daisy Escalante: 23-06-2018, es.p1}
En ese momento, todos mis sentidos se pusieron alerta y seguí escuchando: “el ecumenismo es más que una unión interreligiosa, es la unión con el enemigo de Dios para llevar a cabo sus planes, y desterrar todo lo que es santo e ir en pos de lo profano. Siendo así, el primer ecuménico, el príncipe del mal, ha instigado a todos en su fatal pensar”. Y preguntó: “¿y crees tú que por esta práctica librarás tu alma? ¿crees que puedes librarte y librar a otros de tu suerte fatal? Lisonjeas a la juventud con sueños satánicos y lo envalentonas contra Mí ¿acaso no lo sabré? Risas y chistes, modas y desfiles, teatro y danza. ¿Y te atreves a decir ‘casa de Jehová es ésta’? Vivo Yo que nunca mi presencia pisará tal lugar, y mis ángeles allí no entrarán. El Espíritu Santo fue desechado y a una fue apartado, no morará allí el entendido pues quebranto tras quebranto sigue este pueblo. Cavaste hondo y enterraste mis dichos para que tus abominaciones no fueran descubiertas. ¿Acaso te olvidaste del Libro de las Memorias? ¿Acaso humano escribe en él? ¡Faltos de entendimiento y tardos en hacer lo bueno! Con mi adversario fue tu bandera y su misma suerte sobre ti ha sido echada. La verdad desfiló en medio tuyo más no la quisiste, y como a Jerusalén, ¿quién será por ti? Tus risas se volverán llanto y tus amantes correrán tras de ti cuando caigas bajo la mano del opresor y vean que mi mano se ha apartado. Los que entran en tus puertas son ciegos, y perros mudos los reciben. ¿Podrá el desnudo cubrir al que no tiene vestido? ¿Podrá el hambriento dar de comer? ¿Podrá el condenado a muerte librar a otro? ¡Pueblo ciego, falto de entendimiento, que ama la mentira y se siente seguro en la falsedad! ¿Acaso conoces el tiempo? ¿acaso sabes la hora?” {Daisy Escalante: 23-06-2018, es.p2}
“Tus seguidores te aplastarán cuando sepan que su tiempo es pasado. Y, ¿quién te ayudará? Pervertiste mi verdad, la vendiste por precio y los que te siguen en tu maldad recibirán, también, su justo precio. Calumniaron la verdad, y aman la mentira. Tu voz alzas diciendo: ‘¡Jehová está en medio de nosotros!’, ‘¡Jehová está en medio de nosotros!’ Más Yo os digo: ‘Mi presencia no está allí, como nunca ha estado en los lugares de Baal’. Te envalentonaste; pero allí correrá el valiente. Te ensalzaste, pero serás humillada. No hay dentro de tus puertas paz porque Yo he puesto guerra y los que por precio te buscan pronto, contigo, caerán. Tus hechos, todos, los conozco y conocí tus más íntimas prevaricaciones hasta hoy”. {Daisy Escalante: 23-06-2018, es.p3}
“Bueyes gordos acorneadores te dirigen, encebados en la grosura de sus fornicaciones. Pan leudado está en sus mesas y reparten vino adulterado. ¿Cuántos entraron en el arca? ¿Cuántos se salvaron en Sodoma, Gomorra, Adma, y Zeboím? Así también será en la venida del Hijo del hombre. Otros ocuparán tu lugar por cuanto no atendiste el consejo de Jehová tu Dios. Extraños entrarán y te saquearán, y en ese día sabrás que Jehová se había apartado de tus puertas y que su complacencia ya no estaba contigo. El que oiga, escuche y actúe; ese, librará su alma. Pues, ¿cómo pueden andar dos en un camino si no es del mismo pensar? Apartaos y no toquéis lo inmundo para que os vaya bien y viváis”. {Daisy Escalante: 23-06-2018, es.p4}
Estas son las palabras fieles y verdaderas que recibí en ese momento, y luego se me dio un pasaje de la Biblia: “Habacuc 2:4-20”. Quiera Dios que cada uno de los que escuchen estas palabras, puedan entender y puedan tomar bandera bajo la bandera del Príncipe Emanuel. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 23-06-2018, es.p5}
Habacuc 2:4-20
4 He aquí se enorgullece aquel cuya alma no es recta en él; mas el justo por su fe vivirá.
5 Y también, por cuanto peca por el vino, [es] un hombre soberbio, y no queda en casa; el cual ensancha como el infierno su alma, y [es] como la muerte, que no se sacia; antes reúne para sí todas las naciones, y amontona para sí todos los pueblos.
6 ¿No han de levantar todos éstos refrán sobre él, y sarcasmos contra él? Y dirán: ¡Ay del que multiplicó lo que no era suyo! Y, ¿hasta cuándo había de amontonar sobre sí barro espeso?
7 ¿No se levantarán de repente los que te han de morder, y se despertarán los que te han de quitar de tu lugar, y serás a ellos por rapiña?
8 Porque tú has despojado a muchas naciones, todos los que han quedado de los pueblos te despojarán; a causa de la sangre de los hombres, y de la violencia de la tierra, de las ciudades y de todos los que moran en ellas.
9 ¡Ay del que codicia ganancia deshonesta para su casa, para poner en alto su nido, para ser librado del poder del mal!
10 Tomaste consejo vergonzoso para tu casa, asolaste muchos pueblos, y has pecado [contra] tu alma.
11 Porque la piedra clamará desde el muro, y la tabla del enmaderado le responderá.
12 ¡Ay del que edifica la ciudad con sangre, y del que funda una ciudad con iniquidad!
13 ¿No [es] esto de Jehová de los ejércitos? Los pueblos pues, trabajarán para el fuego, y las gentes se fatigarán en vano.
14 Porque la tierra será llena del conocimiento de la gloria de Jehová, como las aguas cubren el mar.
15 ¡Ay del que da de beber a su compañero! ¡[Ay de ti] que le acercas tu odre y le embriagas, para mirar su desnudez!
16 Te has llenado de deshonra más que de honra; bebe tú también, y serás descubierto; el cáliz de la mano derecha de Jehová volverá sobre ti, y vómito de afrenta sobre tu gloria.
17 Porque la rapiña del Líbano caerá sobre ti, y la destrucción de las fieras lo quebrantará; a causa de la sangre de los hombres, y de la violencia de la tierra, de las ciudades, y de todos los que moran en ellas.
18 ¿De qué sirve la escultura que esculpió el que la hizo? ¿La estatua de fundición, que enseña mentira, para que haciendo imágenes mudas confíe el hacedor en su obra?
19 ¡Ay del que dice al palo; Despiértate; y a la piedra muda: Levántate! ¿Podrá él enseñar? He aquí él está cubierto de oro y plata, y no [hay] espíritu dentro de él.
20 Mas Jehová [está] en su santo templo; calle delante de Él toda la tierra.
Testimonio: 27-05-2019
Amados, 27 de mayo 2019. En sueños, yo estaba en un terreno amplio de campo donde había muchas casas. Había un río muy caudaloso y unas cuevas grandes donde personas entraban, ahí, para ver el atractivo de ellas. Vi entrar tres personas ahí, dos adultos y un joven. Mientras escuchaba su voz hablando de las hermosuras, allí, vistas, todo comenzó a sacudirse fuertemente. Y este movimiento aumentaba. Vi salir sólo dos personas de las tres que entraron a la cueva. Vi muchos corriendo y muchos gritos que comenzaban su sonido y terminaban, pues parte de la montaña se comenzó a deslizar llevándose todo a su paso: casas, carros, personas, animales. ¡Fue terrible aquella escena! ¡No podía concebir la magnitud del evento y de la destrucción! {Daisy Escalante: 27-05-2019 , es.p1}
Luego de tan trágica escena, vi a los pudientes aprovecharse de los damnificados. No le extendía la mano al desamparado, y se aprovechaban del moribundo. A la viuda le quitaban lo poco que quedó con ella, y al huérfano lo oprimían. Muchos de los que quedaban, aún, vivos, su vida era tan difícil que les oía desear el haber muerto. La gente se fatigaba buscando sus seres queridos desaparecidos, sin resultado. Todo [en] lo que se había trabajado en una vida ahora eran ruinas sepultadas y, muchas, con sus sueños. El sufrimiento, la escasez alimentaria, y lo más ínfimo [de] reales necesidades, no se encontraba. {Daisy Escalante: 27-05-2019 , es.p2}
Dijo mi acompañante: “Jeremías 4:9”. Y siguió diciendo: “ceñid vuestros lomos y estad apercibidos, obedeced al Santo de Israel y no prestéis oído a doctrinas de demonios”. En ese momento pregunté: “dime, por favor, ¿cómo conocer una doctrina de demonio?” Me dijo: “toda mezcla de verdad con error, y verdad incompleta, no proviene del Dios alto y sublime. Esto es doctrina de demonios. ¡Preparaos, preparaos!”, siguió diciendo, “pues una crisis estupenda, de gran mortandad, ruina, y gran calamidad, se avecina paso a paso. Paraos en la Roca Eterna y seguid minuciosamente sus instrucciones. Sólo así podréis ser librados. Ayunad, orad en todo momento, ¡no es tiempo de dormir! Que vuestro corazón se agite de dolor por el pecado, y buscad la santidad sin la cual ninguno verá al Señor. Todos los que permanezcan en las ciudades morirán irremisiblemente, evitadlas en lo más mínimo. Apresurad vuestra preparación y salid de ellas porque horror sobre horror, matanza sobre matanza les aguarda. Y, ¿quién conoce la visitación de éstas sino el Santo y Sublime? Allí llorarán los moradores de ellas, y desfallecerá el corazón de muchos, cuando entiendan que su corazón maligno alimentaba el amor por ellas”. Y así terminó diciendo: “salid de ellas, pueblo mío, porque su hora es venida. Porque si demoráis, ¿quién os podrá librar?” Y me dio otra cita: “Oseas 4:9”. {Daisy Escalante: 27-05-2019 , es.p3}
En ese momento, amados, ahí desperté, orando y pidiendo al Señor que todos nosotros podamos estar preparados ante lo que se avecina, pero no con nuestras propias fuerzas sino agarrados de Cristo Jesús, para que podamos vencer. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 27-05-2019 , es.p4}
Jeremías 4:9
9 Y será en aquel día, dice Jehová, que desfallecerá el corazón del rey, y el corazón de los príncipes, y los sacerdotes estarán atónitos, y se maravillarán los profetas.
Oseas 4:9
9 Tal será el pueblo como el sacerdote: y visitaré sobre él sus caminos, y le pagaré conforme a sus obras.
Testimonio: 18-07-2020 #01
18 de julio, 2020. En sueños, yo urgía a una dama que sacara de su casa todo lo que no era necesario; que cogía espacio, y que no servía. Ella no sabía por dónde empezar, así que comencé a ayudarla. Abrí un baúl que ella tenía, y de allí salieron cucarachas, arañas y otros insectos. Así que, cogí el baúl y, lo saqué de la casa. En la cocina, abrí el horno de la estufa y allí había un pan que estaba lleno de moho, así que lo saqué y lo boté. Y abrí su alacena y había algo podrido —que no veía muy bien que era—, pero tenía gusanos, larvas blancas. Así fuimos, por cada rincón de aquella casa quitando de ella lo que no servía o no era necesario. Ella me ayudaba, pero [a] todo lo que era inservible o innecesario, ella le buscaba una excusa para dejarlo ahí. [Más] yo le urgía a sacarlo y ella, sin mucha gana, lo hacía. {Daisy Escalante: 18-07-2020 #01, es.p1}
Fue mucha la lucha, y yo, casi estaba acabando, cuando me dijeron: “sal y déjala ahora a ella sola”. Así lo hice, y me paré a lo lejos a observar. Vi, entonces, cómo ella salió de la casa y entró todo lo que se había sacado, menos lo podrido; y se sentó en el balcón de su casa a cantar muy feliz. Dije: “pero esto está mal; ¡estas cosas hacen su casa desordenada e inservible!” Me contestó: “así es, más cada quien es responsable de su vida y de sus actos. El que no limpie su casa y se sienta cómodo en ella como está, así, perecerá. El Espíritu Santo exhorta y te dicta qué hacer. Éste te ayuda, dándote discernimiento; pero cada quien decide si desea escuchar o no”. {Daisy Escalante: 18-07-2020 #01, es.p2}
La escena cambió y vi unas damas que venían hacia mí. Me saludaron y me invitaron a una reunión. En la reunión sólo se hablaba de lo vano, de todas las cosas que se ven en este mundo: de moda, música, peinados, zapatos, muebles etcétera. Me paré de la reunión y les dije: “disculpen, pero yo no [me] puedo quedar aquí. Estos temas no son de mi agrado, no me interesan, así que les dejo”. A lo que una de ellas me contestó: “¿acaso no vistes, te peinas, te calzas y no tienes muebles en tu casa?” Le dije: “sí, pero eso no es motivo de tener una reunión cuando [en] este tiempo puede estar haciéndose otra cosa útil. Hablar de que en tal tienda compraste esos zapatos, y que tu mueble viejo lo cambiaste por uno nuevo, y que ahora cambiaste tu peinado, y que la música que te gusta es tal, y que ahora vestirás a la moda, son hablares y pensamientos fatuos. Y eso es vanidad y deshonra a Dios. Somos su creación y, cuando miro a mi alrededor con agradecimiento a Él por lo que tengo, es lo que a mí me hace feliz. Y a Él también. El descontento, y siempre estar buscando nuestra conveniencia, no hace feliz a nadie, ni a nosotros ni a Dios”. {Daisy Escalante: 18-07-2020 #01, es.p3}
Así que, así, me fui de aquel lugar. Llegué a un lugar donde habían dos damas reunidas, éstas hablaban y lloraban, y les pregunté: “¿qué ocurre?” Una de ellas me contestó: “quiero avanzar, pero me faltan cosas”. Le dije: “¿qué cosas?” “Bueno, quiero lavar y no tengo lavadora, quiero hornear y no tengo horno, quiero fregar y no tengo fregadero, quiero bañarme y no tengo ducha”. Le dije: “¡pero eso no es problema!, ven te mostraré. Un cubo y un destapador, es una lavadora; tres piedras y una olla de hierro con tapa, es un horno; una manguera y tres cortinas oscuras, es un baño; y ahí también puedes fregar”. Ella se me quedó mirando, sus ojos se pusieron rojos de enojo, y azotó todo lo que preparé para ella. Y siguió quejándose y llorando por su supuesta necesidad. {Daisy Escalante: 18-07-2020 #01, es.p4}
Así, yo fui a otro lugar. Allí, entré a una cabaña. Había una mujer allí y estaba meditando en algo que leía. Yo le pregunté: “¿qué lees?” Me dijo: “mira, aquí dice que, para el que cree, todo es posible”. Le dije: “así es”. Me contestó: “yo creo, por eso estoy aquí”. Entonces le dije: “¡cuánto me alegra esto por ti!” Ella me dijo: “¿deseas comer algo?” Y le dije: “sí”. Yo miré a su lugar de preparación de alimentos, y no había nada. Pero ella me dijo: “ven conmigo”. Fui tras su cabaña, ahí habían unas plantas con unos pepinillos y unos tomates. Luego, también, cosechamos unas mazorcas de maíz y ella encendió el fuego en tres piedras. Hizo una torta, con el maíz que molió y agua. Allí, le pusimos los tomates y los pepinillos, ¡y comimos muy rico! Para tomar agua, ella tenía que salir a buscar el agua. Dormía en un matre [colchón] plástico en el piso. Y su poca ropa estaba doblada sobre una tablilla de madera que colocó en una pared, cerca de donde dormía. Se bañaba, y lavaba su ropa, en el río. Yo le veía feliz y ella me repetía: “yo creo, yo creo”. Le dije: “mujer, por tu fe serás recompensada. Espera en Dios”. {Daisy Escalante: 18-07-2020 #01, es.p5}
Me fui de aquel lugar, y fui, yo, ahora, a un lugar donde estaban unas personas aferradas a sus cosas. Ellos estaban esclavizados. Pero una voz me dijo: “diles que lo suelten”. Le dije a viva voz: “¡suelten eso, no les servirá de nada, sólo será su desgracia!” Vanas fueron mis palabras, pues todos siguieron aferrados a sus cosas. {Daisy Escalante: 18-07-2020 #01, es.p6}
Al despertar, amados, yo meditaba en todos estos escenarios, cuando se me dijo: “el que esté buscando hacer las cosas a su forma y conveniencia, perecerá. Sólo una entrega implícita y caminar sólo bajo la dirección de ésta [entrega] es el camino a la vida eterna. A estas alturas muchos, de los que dicen ser mi pueblo, están en peligro por esto. Se creen dueños y no reconocen que son administradores. No avanzan porque todo debe estar de la forma que lo desean. Éstos, ¡están en peligro de muerte! Exhorta, pues, el que tiene oídos para oír, oirá; pues sólo los entendidos entenderán”. {Daisy Escalante: 18-07-2020 #01, es.p7}
Quiera Dios, y es mi ruego y oración, que así sea. Que el Señor nos bendiga. {Daisy Escalante: 18-07-2020 #01, es.p8}