Manjar Sabático
16-01-2021
Jueces 2
1 Y el Ángel de Jehová subió de Gilgal a Boquim, y dijo: Yo os saqué de Egipto, y os introduje en la tierra de la cual había jurado a vuestros padres; y dije: No invalidaré jamás mi pacto con vosotros;
2 con tal que vosotros no hagáis alianza con los moradores de esta tierra, cuyos altares habéis de derribar: mas vosotros no habéis obedecido a mi voz: ¿por qué habéis hecho esto?
3 Por tanto yo también dije: No los echaré de delante de vosotros, sino que serán [como espinas] en vuestros costados, y sus dioses os serán por tropiezo.
4 Y aconteció que cuando el Ángel de Jehová habló estas palabras a todos los hijos de Israel, el pueblo lloró en alta voz.
5 Y llamaron por nombre aquel lugar Boquim; y ofrecieron allí sacrificios a Jehová.
6 Porque ya Josué había despedido al pueblo, y los hijos de Israel se habían ido cada uno a su heredad para poseerla.
7 Y el pueblo había servido a Jehová todo el tiempo de Josué, y todo el tiempo de los ancianos que vivieron largos días después de Josué, los cuales habían visto todas las grandes obras de Jehová, que Él había hecho por Israel.
8 Y murió Josué hijo de Nun, siervo de Jehová, [siendo] de ciento diez años.
9 Y lo enterraron en el término de su heredad en Timnat-sera, en el monte de Efraín, el norte del monte de Gaas.
10 Y toda aquella generación fue también recogida con sus padres. Y se levantó después de ellos otra generación, que no conocía a Jehová, ni la obra que Él había hecho por Israel.
11 Y los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y sirvieron a los Baales:
12 Y dejaron a Jehová el Dios de sus padres, que los había sacado de la tierra de Egipto, y se fueron tras otros dioses, los dioses de los pueblos que [estaban] en sus alrededores, a los cuales adoraron; y provocaron a ira a Jehová.
13 Y dejaron a Jehová, y adoraron a Baal y a Astarot.
14 Y el furor de Jehová se encendió contra Israel, el cual los entregó en manos de robadores que los saquearon, y los vendió en manos de sus enemigos de alrededor: y ya no pudieron estar de pie delante de sus enemigos.
15 Por dondequiera que salían, la mano de Jehová era contra ellos para mal, como Jehová había dicho, y como Jehová se lo había jurado; así los afligió en gran manera.
16 Mas Jehová levantó jueces que los librasen de mano de los que los saqueaban.
17 Y tampoco oyeron a sus jueces, sino que fornicaron tras dioses ajenos, a los cuales adoraron; se apartaron pronto del camino en que anduvieron sus padres obedeciendo a los mandamientos de Jehová; pero ellos no hicieron así.
18 Y cuando Jehová les levantaba jueces, Jehová era con el juez, y los libraba de mano de los enemigos todo el tiempo de aquel juez; porque Jehová se arrepentía por sus gemidos a causa de los que los oprimían y afligían.
19 Pero acontecía que al morir el juez, ellos volvían atrás y se corrompían aun más que sus padres, siguiendo a dioses ajenos para servirles, e inclinándose delante de ellos; y no desistían de sus obras, ni de su obstinado camino.
20 Y la ira de Jehová se encendió contra Israel, y dijo: Por cuanto esta gente traspasa mi pacto que ordené a sus padres, y no obedecen mi voz,
21 tampoco yo echaré más de delante de ellos a ninguna de estas naciones que dejó Josué cuando murió;
22 para que por ellas probara yo a Israel, si guardarían o no el camino de Jehová andando por él, como sus padres [lo] guardaron.
23 Por esto dejó Jehová aquellas naciones, y no las desarraigó luego, ni las entregó en mano de Josué.
Mensajes Selectos, tomo 3, capítulo 37: "Los adventistas del séptimo día y los pleitos o juicios"
Presentando las dificultades de la iglesia a los no creyentes—Cuando surgen problemas en la iglesia no debemos buscar la ayuda de abogados que no pertenecen a nuestra fe. Dios no desea que presentemos las dificultades de la iglesia a los que no le temen. El no quiere que dependamos de la ayuda de los que no obedecen sus mandamientos. Los que confían en tales consejeros muestran que no tienen fe en Dios. Por su falta de fe, el Señor resulta grandemente deshonrado, y la conducta de esas personas le produce un gran perjuicio a ellos mismos. Al recurrir a los no creyentes para que arreglen dificultades que surgen en la iglesia se están mordiendo y devorando unos a otros, para que “os consumáis unos a otros”. Gálatas 5:15. {3MS 342.1}
Estos hombres ponen a un lado el consejo que Dios ha dado, y hacen precisamente las cosas que Dios les ha dicho que no hagan. Muestran que han escogido al mundo como su juez, y en el cielo sus nombres están registrados como uno con los incrédulos. Cristo es crucificado de nuevo, y expuesto a la vergüenza pública. Sepan estos hombres que Dios no escucha sus oraciones. Insultan su santo nombre, y él los abandonará a las bofetadas de Satanás hasta que vean su insensatez y busquen al Señor por la confesión de su pecado. {3MS 342.2}
Los asuntos relacionados con la iglesia deben mantenerse dentro de sus propios límites. Si se comete abuso contra un cristiano, él debe tomarlo pacientemente; si es defraudado, no debe acudir a las cortes de justicia; antes bien, soporte la pérdida y el perjuicio. {3MS 343.1}
Dios tratará con los miembros de iglesia que son indignos y que defraudan a su hermano o a la causa de Dios; el cristiano no necesita contender por sus derechos. Dios tratará con el que viole esos derechos. “Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor”. Romanos 12:19. Se guarda un registro de todos estos asuntos, y por todo esto el Señor declara que él vengará. El traerá toda obra a juicio. {3MS 343.2}
Consejeros inseguros
Los intereses de la causa de Dios no han de encomendarse a hombres que no tienen relación con el cielo. Los que son desleales a Dios no pueden ser consejeros seguros. No tienen la sabiduría que viene de arriba. No debe confiarse en ellos para que pronuncien juicio en asuntos relacionados con la causa de Dios, asuntos de los cuales dependen tan grandes resultados. Si seguimos su juicio, seremos puestos, sin lugar a dudas, en situaciones muy difíciles, y retardaremos la causa de Dios. {3MS 343.3}
Los que no están relacionados con Dios lo están con el enemigo de Dios, y aunque pueden ser honestos en el consejo que dan, ellos mismos pueden estar cegados y engañados. Satanás pone sugestiones en sus mentes y palabras en sus bocas, que son enteramente contrarias a la mente y la voluntad de Dios. Así trabaja por medio de ellos para inducirnos a seguir senderos falsos. El nos desviará, nos enredará y nos arruinará si puede. {3MS 343.4}
Antiguamente era un gran pecado para los hijos de Dios entregarse a los enemigos, y presentar delante de ellos sus perplejidades o su prosperidad. Bajo la economía antigua era un pecado ofrecer sacrificio sobre un altar falso. Era un pecado ofrecer incienso encendido con un fuego extraño. {3MS 344.1}
Estamos en peligro de mezclar lo sagrado con lo común. En nuestros esfuerzos debe usarse el fuego santo de Dios. El verdadero altar es Cristo; el verdadero fuego es el Espíritu Santo; éste es nuestra inspiración. Un hombre es un consejero sabio sólo cuando el Espíritu Santo lo guía y lo dirige. Si abandonamos a Dios y a sus escogidos para ir a altares extraños a buscar respuestas, se nos responderá según nuestras obras. {3MS 344.2}
Manifestemos perfecta confianza en nuestro Dirigente. Busquemos sabiduría de la Fuente de sabiduría. En toda situación que cause perplejidad o prueba, que los hijos de Dios se pongan de acuerdo en cuanto al asunto que desean, y entonces únanse para ofrecer una oración a Dios, y perseveren pidiendo la ayuda que necesitan. Debemos reconocer a Dios en todos nuestros consejos, y cuando le pedimos algo, creamos precisamente la bendición solicitada.—Manuscrito 196, 1898. {3MS 344.3}
Consejo a un creyente que amenazaba con entablar juicio
Cuando Ud. inició ese juicio contra R, yo dije: “Si S ha ido hasta el punto de entrar en ese negocio, será una mancha sobre su vida”. Me entristecí por su conducta en este asunto. Yo sé que no está bien, y que no aliviará en nada la situación de Ud. Es sólo una manifestación de la sabiduría que no viene de arriba. {3MS 344.4}
Se me informó que Ud. intentaba iniciar un juicio contra mí, demandándome porque Ud. ha sido perjudicado por los testimonios dados con relación a su caso. Recibí una carta en la cual me amenazaba con entablarme juicio si yo no reconocía que lo he perjudicado. Ahora bien, yo apenas podía creer que Ud. había ido tan decididamente al terreno del enemigo, conociendo la obra de mi vida tan bien como Ud. la conoce. {3MS 344.5}
Todo lo que yo le he escrito, toda palabra del consejo, era verdad. No necesito retractarme de nada. He hecho sólo lo que sé que era mi deber hacer. Mi único motivo al publicar el asunto era la esperanza de salvarlo. No tenía otro pensamiento que el de sincera piedad y amor por su alma. Ud. mismo sabe que tengo gran interés en su alma… {3MS 345.1}
Si alguien trata de ponerme obstáculos en mi obra recurriendo a la ley, no suprimiré ni una sola jota de los testimonios dados. La obra en la cual yo estoy empeñada no es mi propia obra. Es la obra de Dios, que él me ha dado para hacer. Yo no creí que Ud. haría una cosa tan terrible como levantar su mano finita contra el Dios del cielo. Quienquiera haga una obra tal; pero no permita que sea Ud… {3MS 345.2}
Quiero decirle: No exija sin derecho dinero de nadie, debido a palabras habladas contra Ud. o los suyos. Si lo hace, Ud. mismo se perjudica. Si miramos a Jesús, Autor y Consumador de nuestra fe, nos será posible orar: “Señor, perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores”. Mateo 6:12. Jesús no se valió de la ley para lograr reparaciones cuando fue injuriado, no contestó con injurias; cuando fue amenazado, no ejerció represalias.—Carta 38, 1891. {3MS 345.3}
Precisamente aquello que Dios les dijo que no hicieran—He escrito extensamente en cuanto a cristianos que creen en la verdad y que llevan sus casos a las cortes de justicia para obtener compensaciones. Al hacerlo se están mordiendo y devorando unos a otros, en todo el sentido de la palabra: para que “os consumáis unos a otros”. Se apartan del consejo inspirado que Dios ha dado, y frente al mensaje que él da, hacen precisamente aquello que Dios les ha dicho que no hicieran. Tales hombres harían bien en dejar de orar a Dios, porque no oirá sus plegarias. Insultan a Jehová, y él los abandonará para que lleguen a ser los súbditos de Satanás hasta que vean su insensatez y busquen al Señor por medio de la confesión de sus pecados… {3MS 345.4}
Qué cosa revela el recurrir a las cortes de justicia—El mundo y los miembros de iglesia no convertidos simpatizan mutuamente. Algunos, cuando el Señor los reprende porque quieren salir con las suyas, hacen del mundo su conficente, y llevan los asuntos de la iglesia ante el mundo para lograr una decisión. Entonces hay choques y luchas, y Cristo es crucificado de nuevo y expuesto a la vergüenza pública. Los miembros de iglesia que acuden a las cortes del mundo demuestran que han escogido al mundo como su juez, y sus nombres son registrados en el cielo como unidos con los incrédulos. ¡Cuán ávidamente utiliza el mundo las declaraciones de los que traicionan un cometido sagrado! {3MS 346.1}
Esta acción, la de recurrir a las cortes humanas, que nunca antes fue utilizada por los adventistas del séptimo día, es la que se comete ahora. El Señor ha permitido esto para que los que habéis sido engañados entendáis qué poder está controlando a las personas a quienes se han confiado grandes responsabilidades. ¿Dónde están los centinelas de Dios? ¿Dónde están los hombres que estarán en pie hombro a hombro, corazón a corazón, teniendo la verdad, la verdad presente para este tiempo, en posesión de sus corazones?—Manuscrito 64, 1898. {3MS 346.2}
Los santos han de juzgar al mundo
Los santos han de juzgar al mundo. ¿Deben entonces depender ellos del mundo, y de los abogados del mundo para decidir sus dificultades? Dios no quiere que lleven sus problemas a los súbditos del enemigo para lograr una decisión. Tengamos confianza los unos en los otros.—Manuscrito 71, 1903. {3MS 346.3}
Los abogados y los laodicenses
Depender del brazo de la ley es una desgracia para los cristianos; sin embargo, este mal se ha introducido y ha sido utilizado entre el pueblo escogido del Señor. Principios mundanos han sido subrepticiamente introducidos, hasta que en la práctica muchos de nuestros obreros están llegando a ser como los laodicenses:—indiferentes—, porque se confía tanto en los abogados y en los documentos y contratos legales. Esta condición es aborrecible para Dios.—Manuscrito 128, 1903. {3MS 347.1}
Un pleito contra la casa publicadora
“¿Osa alguno de vosotros, cuando tiene algo contra otro, ir a juicio delante de los injustos, y no delante de los santos? ¿O no sabéis que los santos han de juzgar al mundo? Y si el mundo ha de ser juzgado por vosotros, ¿sois indignos de juzgar cosas muy pequeñas? ¿O no sabéis que hemos de juzgar a los ángeles? ¿Cuánto más las cosas de esta vida? Si, pues, tenéis juicios sobre cosas de esta vida, ¿ponéis para juzgar a los que son de menor estima en la iglesia? Para avergonzaros lo digo. ¿Pues qué, no hay entre vosotros sabio, ni aun uno, que pueda juzgar entre sus hermanos, sino que el hermano con el hermano pleitea en juicio, y esto ante los incrédulos? Así que, por cierto es ya una falta en vosotros que tengáis pleitos entre vosotros mismos. ¿Por qué no sufrís más bien el agravio? ¿Por qué no sufrís más bien el ser defraudados? Pero vosotros cometéis el agravio, y defraudáis, y esto a los hermanos. ¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios?” 1 Corintios 6:1-9. Cuando los miembros de iglesia tengan este conocimiento, su conducta será de un carácter que recomendará su fe. Revelarán a Cristo mediante una fe bien ordenada y una conversación piadosa. No habrá pleitos entre vecinos o hermanos. {3MS 347.2}
Le insto en el nombre de Cristo a retirar el pleito que ha iniciado y a no llevar ningún otro a los tribunales. No permita Dios que Ud. deshonre de esa manera su nombre. Ud. ha tenido mucha luz y muchas oportunidades, y no debe unirse con los mundanos y seguir sus métodos. Recuerde que el Señor lo tratará según la posición que adopte en esta vida… {3MS 348.1}
Le digo solemnemente que si toma el paso que ahora se propone tomar, nunca se recuperará de los resultados del mismo. Si presenta delante del mundo los males que supone que sus hermanos le han hecho, habrá algunas cosas que tendrán que decirse del otro lado [sus oponentes]. Tengo una advertencia que darle. {3MS 348.2}
Con respecto al caso de los que compartieron grandes responsabilidades con Uds. en la Review and Herald, y que se han convertido en enemigos de la obra: no querréis escuchar el veredicto que se pronunciará con respecto a ellos cuando el juez se siente y se abran los libros, y cada hombre sea juzgado según las cosas escritas en los registros celestiales. Quiero salvarlo de seguir una conducta que lo una con aquellos que se han ligado con los ángeles caídos, para hacer todo el daño que puedan a los que aman a Dios y que, bajo grandes dificultades, están esforzándose para proclamar al mundo la verdad presente. {3MS 348.3}
La casa publicadora no está sin culpa—Aquellos contra quienes Ud. hace cargos saben que yo no he aprobado su manera de tratarlo, y que los he reprendido por su falta de sensibilidad al tratar su caso. Algunas personas no lo han tratado honradamente. No lo han tratado como ellos quisieran ser tratados. Pero a pesar de esto, ¿debiera Ud., en vista de las advertencias dadas, actuar tan manifiestamente contra la instrucción recibida? Le ruego que no se separe de la confianza de sus hermanos y de tomar parte en la obra de las publicaciones. {3MS 348.4}
Quisiera más bien compartir su pérdida antes que seguir adelante con este asunto para perjuicio de su alma, dándole a Satanás una oportunidad de presentar su caso delante de los no creyentes bajo el aspecto más ridículo, y presentar la oficina de publicaciones de una manera degradante… {3MS 349.1}
La causa de Dios perjudicada
Quite este caso de manos de los abogados. Me parece terrible que Ud. proceda directamente en contra de la clara Palabra de Dios, y que presente al mundo su obra cruel contra el pueblo que guarda los mandamientos de Dios. Si esta acción suya fuera dirigida exclusivamente contra los que han hecho la injusticia, el daño no sería tan extenso; ¿pero no se da cuenta que despertará prejuicio contra el pueblo de Dios como cuerpo? Así herirá y dañará a Cristo en la persona de sus santos, y hará que Satanás se alegre porque por medio de Ud. podrá obrar contra el pueblo de Dios y contra sus instituciones, haciéndoles un gran daño.—Carta 301, 1905. {3MS 349.2}
Mensajes Selectos, tomo 3, capítulo 54: "El caso de los hnos. Mackin"
El jueves 12 de noviembre de 1908, por la mañana, Elena de White estaba en su hogar en Elmshaven [California] ocupada, escribiendo. Su hijo W. C. White la buscó y le dijo que había dos personas que deseaban hablar con ella. Bajó en compañía de su hijo, y se encontró con Ralph Mackin y su esposa. Era una pareja bien vestida y aparentemente muy sincera, ambos de treinta y tantos años. La Sra. White pronto supo que sus visitantes eran fervorosos estudiantes de la Biblia y los Testimonios, y que habían venido a California desde el Estado de Ohio con el expreso propósito de saber si su extraordinaria experiencia sucedida pocos meses antes sería aprobada por el Señor. {3MS 414.1}
La conversación con los Mackin fue tomada taquigráficamente por Clarence C. Crisler, principal secretaria de Elena G. de White.—Los compiladores. {3MS 414.2}
Informe de la entrevista
El Hno. Mackin y su esposa declararon que se habían sentido impresionados por el Espíritu Santo a hacer un viaje especial al Oeste, con el fin de entrevistar a la Hna. White con respecto a ciertas experiencias raras que habían tenido, durante la Semana de Oración, unos tres años antes que se hubieran unido con la pequeña iglesia de Findlay, Ohio, en una ocasión especial en que se oraba por el derramamiento del Espíritu Santo. {3MS 414.3}
Ralph Mackin: En la lectura de la Semana de Oración de ese año, todos los artículos instaban al pueblo a buscar el Espíritu Santo. En nuestra pequeña iglesia dedicamos tres días para ayunar y orar; y ayunamos y oramos por tres días, esto es, no constantemente juntos; pero sentimos la necesidad de una obra más profunda y de llegar a poseer más del Espíritu de Dios. Desde ese tiempo en adelante empezamos a estudiar la obra del Espíritu Santo, en la Biblia y en los Testimonios, y especialmente en los tomos 8 y 7, y en Primeros escritos, y también en el pequeño libro compuesto de una colección de folletos, titulado, Special Testimonies to Ministers and Workers. Hallamos que éste era un precioso volumen para nosotros. En él se muestra cómo eran tratados antiguamente los hombres que fueron llamados por Dios, etc. {3MS 415.1}
El mensaje que el Señor me dio particularmente a mí era que siguiera la vida de los apóstoles… {3MS 415.2}
Entonces se leyeron varios pasajes bíblicos, incluyendo Lucas 24 hasta el final del capítulo, terminando con estas palabras: {3MS 415.3}
“Ellos, después de haberle adorado, volvieron a Jerusalén con gran gozo; y estaban siempre en el templo, alabando y bendiciendo a Dios. Amén”. {3MS 415.4}
Ahora bien, yo enseñó que esta bendición que ellos recibieron es la bendición de la santificación que el Señor les otorgó; y cuando buscamos a Dios, somos pecadores, hasta que nos convertimos a él; y si somos convertidos, elevamos nuestras oraciones con el poder de la santificación para vivir vidas limpias y sanas. Esto no es la obra de un instante; no es que “una vez santificados, siempre santificados”; eso no es cierto. Pero debemos elevar nuestras peticiones tan intensa y firmemente que recibamos la bendición. Ella tiene sobre nosotros el mismo efecto fisiológico [que sobre los apóstoles]. ¡Oh, sólo queremos alabar a Jesús, y esto nos hace tan amables y bondadosos y suaves! Pero notamos que los discípulos no estaban listos aún para salir con esa bendición a fin de hacer la obra por el Maestro. El les dijo que se quedaran hasta que fueran investidos de poder de lo alto. Entonces elevamos nuestra petición y proseguimos con fe, y lo que nos animó fue el capítulo “El tiempo del zarandeo”, de Primeros escritos. Proseguimos por fe, hasta que grandes gotas de sudor corrían por nuestra frente. Creyendo que el mismo poder que tuvieron los discípulos era para nosotros hoy, nos sentimos animados a perseverar. {3MS 415.5}
La experiencia registrada en Hechos 2 se repite—Cuando esa bendición prometida vino sobre nosotros mientras elevábamos nuestras peticiones a Dios, tuvimos la misma experiencia que se registra en Hechos 2 en el caso de los apóstoles. Cuando ese poder prometido vino sobre nosotros, hablamos en otras lenguas como el Espíritu nos daba que habláramos. {3MS 416.1}
En Toledo, cuando estábamos presentando nuestro mensaje en la calle, un hombre, que era un polaco católico, se detuvo en la calle mientras la Sra. Mackin estaba hablando; y cuando el Espíritu de Dios vino sobre ella, y les habló por su medio en un idioma que ella no podía entender, este caballero polaco exclamó: “Yo sé lo que esta señora está hablando. Ella está hablando en mi propio idioma, acerca de una gran calamidad que pronto ha de acontecer a esta ciudad”. {3MS 416.2}
Un supuesto idioma extranjero—En otros casos, cuando uno recibe esta bendición de hablar en lenguas, el Señor puede darme la misma lengua, y podemos sostener una conversación en el idioma que el Espíritu de Dios puede habernos dado que habláramos. Aun tres o cuatro personas pueden tomar parte en la conversación, y sin embargo es un idioma extraño para ellos, y uno espera hasta que el otro termina, y todo se hace en orden. Esta es la experiencia que recibimos de acuerdo con la bendición prometida… {3MS 416.3}
Si estamos engañados, lo estamos honradamente; pero si esto es del Espíritu de Dios, queremos seguirlo… {3MS 417.1}
El Espíritu nos dice que escudriñemos la Palabra: nos dice que seamos fervientes, y que seamos cuidadosos acerca de nuestro régimen de alimentación; infórmenos exactamente de lo que Ud. ha dicho. {3MS 417.2}
Se reclama la posesión del don de profecía—Ahora bien, en cuanto a mi esposa, el Espíritu obra por medio de ella, y nosotros creemos que éste es el don de profecía que ha de ser derramado sobre toda carne. Este Espíritu nos guía a la bondad y a la pureza de vida, y no podemos entenderlo. Sabemos sólo lo que la Palabra de Dios ha dicho: que estas experiencias vienen como resultado de recibir la bendición del Espíritu de Dios… {3MS 417.3}
La experiencia del congreso campestre—Antes de que fuéramos al campamento donde se celebraba el congreso—no fuimos hasta el viernes—, mi esposa y otras dos señoras (mi madre y otra señora, la Hna. Edwards, una cuñada del presidente de la asociación); antes de llegar al campamento este último año, las tres buscaban al Señor. Yo había ido a la ciudad para una diligencia; y el Espíritu de Dios le dijo a ella (la Sra. Mackin) que fuera al campamento, y cantara; y que allí le diría qué cantar. {3MS 417.4}
Y ella lloró como un niño, y parecía que no podía soportarlo, porque el Señor le mostró la condición de nuestro pueblo, que pronto caerían las plagas y ellos no estaban listos. No se celebraba en ese momento ninguna reunión, y el Espíritu del Señor vino sobre ella cuando iba al campamento. Y (volviéndose a la Sra. Mackin) tú puedes contarle qué palabras cantaste. {3MS 417.5}
Sra. Mackin: El Señor puso esta carga sobre mí. Yo no podía resistirla. ¡Yo tenía tanto deseo de relatarlo, y tantos deseos de cantar ese himno! Y no pude deshacerme de ella hasta que lo hice. “¡Oh, ore!, le dije a la Hna. Edwards. Y me detuve en el campamento y canté precisamente lo que el Señor me inspiró. El Señor—esto es lo que yo canté—: {3MS 418.1}
“El viene; él viene; preparaos, preparaos”. {3MS 418.2}
Y entonces esa declaración de Primeros escritos [p. 71]: {3MS 418.3}
“A cuántos vi llegar al tiempo de las plagas sin un refugio. Recibid el Espíritu Santo”. Estas son las palabras que canté. Las canté una y otra vez. Por todo el campamento podían escucharlas, y se reunieron; pero antes de esto el Señor me mostró cómo se retorcerían las manos mientras las plagas estuvieran cayendo. El Señor puede mostrar cualquier cosa en sólo un momento, mejor de lo que él puede decírnoslo. Y así me mostró cómo se retorcerán las manos, y eso puso sobre mí una carga mayor que nunca. Bueno, eso ocurría cuando nos detuvieron… {3MS 418.4}
Cuando el canto es improvisado—dictado por el Espíritu—es cuando resulta más maravilloso. {3MS 418.5}
Si Ud. tiene alguna luz para nosotros… {3MS 418.6}
Elena G. de White: Ignoro que tenga alguna cosa especial que pueda decir. Hay algunas cosas que ocurrirán justamente al final de la historia de esta tierra, según lo que me ha sido presentado, similares a algunas de las cosas que Ud. ha expuesto; pero no puedo decir nada sobre estos puntos por ahora. {3MS 418.7}
R. Mackin: ¿Hay alguna pregunta, Hno. White, o algo ahora? {3MS 418.8}
W. C. White: No sé que haya otra cosa que orar para que el Señor le dé a mi madre alguna palabra, y entonces tomarse el tiempo para que las cosas se desarrollen. Es mejor, al presentarle algo a ella, explicar el asunto en forma breve y clara, y entonces tal vez tener otra entrevista más tarde. {3MS 418.9}
R. Mackin: Estamos ayunando y orando. Si estamos en un engaño queremos saberlo, tanto como si estamos en lo recto. {3MS 419.1}
Sra. Mackin: Nuestros hermanos piensan que ciertamente estamos en un engaño. {3MS 419.2}
Elena G. de White: ¿Qué lugar es ése del cual Ud. habla, donde ocurrió el canto? {3MS 419.3}
R. Mackin: Mansfield, Ohio, en el congreso campestre. {3MS 419.4}
Elena de White: ¿Nuestro pueblo, el pueblo que guarda el sábado? {3MS 419.5}
R. Mackin: Sí, nuestro propio pueblo. {3MS 419.6}
W. C. White: ¿Era esa estrofa que la Sra. Mackin cantó improvisada o era un himno conocido? [En la reunión de oración en la capilla del sanatorio el Hno. Mackin había dado su testimonio de alabanza y fue seguido por la Sra. Mackin, que cantó.] {3MS 419.7}
Sra. R. Mackin: Oh, ése era uno de nuestros himnos publicados. Se halla en el nuevo himnario Christ in Song. {3MS 419.8}
R. Mackin: Ud. la oyó cantar, pero apenas tiene una vaga idea de lo que es su canto cuando las palabras le son dadas por el Espíritu Santo. Lo más maravilloso es cuando ella canta: “¡Gloria!” Dice que cuando lo canta le parece estar con los ángeles en la presencia de Jesús. Repite la palabra “¡Gloria!” una y otra vez. Ella ha sido probada con el piano, y los músicos dicen que es algo extraordinario como canta en tono bajo y alto. No puede hacerlo a menos que ore en el Espíritu y un poder especial venga sobre ella. {3MS 419.9}
Sra. Mackin: Nosotros no tenemos este poder; solamente lo recibimos cuando buscamos a Jesús. {3MS 419.10}
Echando fuera demonios—R. Mackin: El Señor nos ha dado poder, Hna. White, para echar fuera demonios. Muchas personas están poseídas de demonios. Yo recuerdo una declaración que Ud. escribió hace pocos años, que muchos estaban poseídos por demonios tan ciertamente como en los días de Cristo. Cuando nosotros estamos en una reunión, y estos demonios están en la reunión, ellos pueden hacer que la gente haga cosas raras. He leído en la Biblia que cuando Jesús estaba en el templo los demonios salieron en seguida. “¡Cállate, y sal de él!” Marcos 1:25. El Señor nos instruye a que mantengamos a la gente acostada, no sea que los demonios los arrojen al suelo cuando salen de ellos. Nos dimos cuenta al principio, cuando empezamos a reprender a estos demonios, que a menudo cierran los ojos de las personas, y a veces las hacen ladrar como un perro, y que saquen la lengua; pero al continuar reprendiéndolos, los ojos se abren, se calman, y los demonios… {3MS 419.11}
Ahora bien, es por el don del Espíritu como el Señor nos dice que los demonios se han ido, que se han ido todos. Una señora en particular tenía seis demonios, y decía que ella sintió cuando salieron; parecía que la tiraban de todas partes del cuerpo. {3MS 420.1}
Pero nuestros hermanos dicen que no podemos estar en los últimos días; nosotros, en cambio, hallamos que esto coincide precisamente con lo que el Salvador dijo en el último capítulo de Marcos, en esa gran comisión: “Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas” (Marcos 16:17), etc. {3MS 420.2}
Sra. Mackin: Nosotros tampoco recibimos todas estas cosas de una vez. {3MS 420.3}
R. Mackin: Lea los últimos versículos de Marcos: “Y estas señales seguirán a los que creen: En mi nombre echarán fuera demonios; hablarán nuevas lenguas; tomarán en las manos serpientes, y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño; sobre los enfermos pondrán sus manos, y sanarán. Y el Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, y se sentó a la diestra de Dios. Y ellos, saliendo, predicaron en todas partes, ayudándoles el Señor y confirmando la palabra con las señales que la seguían. Amén”. Nuestra experiencia, según lo podemos discernir, está corroborada por la Biblia. Aquí hay algo que quisiera leer [el Hno. Mackin leyó párrafos, incluyendo el siguiente, de un artículo de la (The Review and Herald, publicado en el número del 11 de abril de 1899), y titulado: “El congreso campestre de Newcastle”]:] {3MS 420.4}
“Durante la noche del primer sábado de la reunión de Newcastle, yo parecía estar en la reunión, presentando la necesidad y la importancia de que recibamos el Espíritu. Esta era la preocupación de mi labor: la apertura de nuestros corazones al Espíritu Santo”. {3MS 421.1}
[La taquígrafa no tomó ninguna nota acerca del lugar exacto donde el Hno. Mackin comenzó a leer este artículo, y dónde dejó de leer; pero por lo menos fue leída una porción considerable del mismo.] {3MS 421.2}
¿Cuál es la evidencia?—R. Mackin: En relación con la recepción del poder de lo alto, hay una pregunta que me parece tan pertinente ahora como en los días de los apóstoles: ¿Cuál es la evidencia? Si lo recibimos, ¿no tendrá los mismos efectos fisiológicos sobre nosotros que tuvo en aquel tiempo? Puede esperarse que hablemos como el Espíritu nos dé capacidad de hacerlo. {3MS 421.3}
Elena G. de White: En lo futuro tendremos muestras especiales de la influencia del Espíritu de Dios, especialmente en ocasiones cuando nuestros enemigos sean más poderosos contra nosotros. Vendrá el tiempo cuando veremos algunas cosas extrañas; pero precisamente de qué manera—si similares a algunas de las experiencias de los discípulos después de recibir el Espíritu Santo después de la ascensión de Cristo—, no puedo decirlo. {3MS 421.4}
R. Mackin: Oraremos continuamente al Señor acerca de esto, y le pediremos que le dé luz al respecto de manera que le dejo nuestra dirección, y si Ud. tiene algo para nosotros después de esto, nos alegraremos de recibirlo. {3MS 422.1}
W. C. White: Uds. probablemente pasarán aquí unos pocos días, ¿no es así? {3MS 422.2}
R. Mackin: Si el Espíritu Santo nos dice que nuestra obra ya está hecha, seguiremos viaje; si él nos dice que nos quedemos, nos quedaremos. El nos dirige. Al presentar yo este mensaje a diferentes congregaciones, el Espíritu de Dios ha testificado en favor de él, y muchos lloraban y decían: “Oh, necesitamos poder, necesitamos ayuda, y éste es el poder prometido, y busquemos a Dios”. {3MS 422.3}
Sra. Mackin: La verdadera prueba es amor. 1 Corintios 13. {3MS 422.4}
R. Mackin: Satanás quiere obstaculizar esta obra. Estamos sellados por el Espíritu Santo de la promesa. Yo lo tomo de.—Primeros Escritos, 37-38. Cuando los ángeles están por soltar los cuatro vientos, Jesús mira con misericordia al remanente, y con las manos elevadas exclama: “¡Mi sangre, Padre, mi sangre, mi sangre, mi sangre!” El lo repite cuatro veces; pues su pueblo está todavía sin sellar. El comisiona entonces a un ángel para que vuele rápidamente hacia los cuatro ángeles que sostienen los cuatro vientos con el mensaje: “¡Retened! ¡Retened! ¡Retened! hasta que los siervos de Dios estén sellados en la frente”. Y cuando yo presento esto delante de la congregación, los más fervientes y consagrados son los que mayormente parecen quedar afectados. {3MS 422.5}
Elena de White vuelve a relatar las primeras experiencias—La Hna. White entonces comenzó a hablar, y continuó durante una media hora. Relató un incidente tras otro relacionado con sus primeras labores poco después que pasó la fecha de 1844. Sus experiencias con formas desacostumbradas de error en aquellos días, la indujeron años más tarde a sentir temor de cualquier manifestación que tuviera sabor a espíritu de fanatismo. {3MS 422.6}
Mientras la Hna. White continuaba, contó de algunas personas que hacían extraños movimientos con el cuerpo, y de otros que eran gobernados mayormente por sus propias impresiones. Algunos pensaban que era malo trabajar. Otros aun creían que los justos muertos habían resucitado para vida eterna. Unos pocos trataban de cultivar un espíritu de humildad arrastrándose sobre el suelo como niñitos. Algunos danzaban y cantaban “Gloria, gloria, gloria, gloria”, en forma repetida. A veces una persona solía saltar reiteradamente sobre el piso, con las manos levantadas, alabando a Dios; y esto seguía haciéndose por una media hora seguida. {3MS 423.1}
Entre los que tomaban parte en estas formas extraordinarias de fanatismo, se hallaban algunos que una vez habían sido fieles, hermanos y hermanas temerosos de Dios. Las contorsiones extrañas del cuerpo y la mente eran ejecutadas hasta un grado tal, que en unos pocos lugares los representantes de la ley se veían obligados a contenerlos llevándolos a la cárcel. En esta forma la causa de Dios caía en desprestigio, y se requerían años para deshacer la influencia que tales exhibiciones de fanatismo tenían sobre el público en general. {3MS 423.2}
La Hna. White contó además cómo ella era llamada repetidamente a hacer frente en forma directa, a este fanatismo y a reprenderlo severamente en el nombre del Señor. Destacó el hecho de que nosotros tenemos una gran obra que hacer en el mundo, que nuestra fuerza ante la gente descansa en el poder que acompaña a una clara presentación de la Palabra del Dios vivo. La ley de Jehová debe ser exaltada y hecha honorable, y los diversos rasgos del mensaje del tercer ángel deben ser claramente presentados ante el pueblo para que todos tengan la oportunidad de escuchar la verdad para este tiempo y decidir si obedecen a Dios antes que a los hombres. {3MS 423.3}
Si como iglesia diéramos lugar a alguna forma de fanatismo, las mentes de los no creyentes se desviarían de la Palabra viva a las acciones de los hombres mortales, y aparecería más de lo humano que de lo divino. Además, muchos se disgustarían por aquello que para sus mentes sería antinatural y próximo al fanatismo. La proclamación del mensaje para este tiempo resultaría así tristemente obstaculizada. El Espíritu Santo obra de una manera que se recomienda a sí mismo ante el buen juicio de la gente. {3MS 424.1}
Una propuesta interesante—En medio del relato que la Hna. White hacía de sus primeras experiencias con el fanatismo, el Hno. Mackin hizo la siguiente propuesta: {3MS 424.2}
R. Mackin: Si tuviéramos ahora el espíritu de oración, y este poder viniera sobre mi esposa, ¿podría Ud. discernir si esto es del Señor o no? {3MS 424.3}
Elena de White: Yo no podría decirle nada al respecto. Pero le estoy contando estos incidentes para que Ud. sepa las cosas por las cuales hemos pasado. Hemos tratado de eliminar de la iglesia este mal en toda forma posible. Hemos declarado en nombre del Señor Dios de Israel, que Dios no obra mediante sus hijos de tal forma que traiga desprestigio a la verdad, y que fomente innecesariamente profundo prejuicio y amarga oposición. En nuestra obra debemos seguir un camino directo y tratar de alcanzar a la gente donde está. {3MS 424.4}
Reprendiendo al fanatismo—R. Mackin: Yo recuerdo haber leído mucho en Testimonies for the Church, t. 1, acerca de su experiencia en reprender el fanatismo, y acerca de la causa [obra] en el este, cuando trataron de fijar el tiempo, en 1855, me parece. {3MS 424.5}
Elena de White: Algunos danzaban saltando y cantando: “Gloria, gloria, gloria, gloria, gloria”. A veces yo quedaba sentada en silencio hasta que habían terminado, y entonces me levantaba y decía: “Esta no es la forma en que obra el Señor. El no hace impresiones de esta manera. Debemos dirigir la mente de la gente a la Palabra como fundamento de nuestra fe”. {3MS 424.6}
Yo era sólo una niña en ese tiempo; y sin embargo tenía que presentar mi testimonio repetidamente contra estas formas extrañas. Y desde ese tiempo he tratado de ser sumamente cuidadosa para que nada de esta especie se produzca de nuevo entre nuestro pueblo. Cualquier manifestación de fanatismo aparta la mente de la evidencia de la verdad: la Palabra misma. {3MS 425.1}
Ud. puede seguir una conducta consecuente, pero los que sean influenciados por Ud. pueden seguir una conducta muy inconsecuente, y como resultado tendríamos bien pronto nuestras manos llenas de algo que haría casi imposible dar a los no creyentes la debida impresión de nuestro mensaje y nuestra obra. Debemos ir a la gente con la sólida Palabra de Dios; y cuando ellos reciban esa Palabra, el Espíritu Santo puede venir; pero siempre viene, como lo dije antes, en una forma que se recomienda a sí mismo al juicio de la gente. En nuestra forma de hablar, de cantar, y en todos nuestros ejercicios espirituales, debemos revelar esa calma, dignidad y piadoso temor que mueve a todo verdadero hijo de Dios. {3MS 425.2}
Peligros que amenazan ahora—Hay constante peligro de permitir que algo llegue a nuestro medio y que lo consideremos como la obra del Espíritu Santo, pero que en realidad sea el fruto de un espíritu de fanatismo. Mientras permitamos al enemigo de la verdad que nos induzca a un método equivocado, no podremos esperar que alcanzaremos a los honestos de corazón con el mensaje del tercer ángel. Debemos ser santificados por medio de la obediencia a la verdad. {3MS 425.3}
Tengo miedo de cualquier cosa que tenga la tendencia de desviar la mente de las sólidas evidencias de la verdad como ésta se revela en la Palabra de Dios. Lo temo; lo temo. Debemos colocar nuestras mentes dentro de los límites de la razón, para que el enemigo no entre de tal manera que introduzca el desorden en todas las cosas. Hay personas de temperamento excitable que son conducidas fácilmente al fanatismo; y si permitiéramos que entre en nuestras iglesias cualquier cosa que conduzca a tales personas al error, pronto veríamos estos errores llevados a grandes extremos; y entonces, debido a la conducta de estos elementos desordenados, descansaría una afrenta sobre todo el cuerpo de los adventistas del séptimo día. {3MS 425.4}
He estado estudiando cómo dar a publicidad de nuevo por la prensa, algunas de estas primeras experiencias, de manera que un mayor número de nuestro pueblo esté informado; porque por mucho tiempo he sabido que el fanatismo se manifestará de nuevo en diferentes formas. Debemos fortalecer nuestra posición extendiéndonos en la Palabra, y evitando todas las rarezas y extrañas genuflexiones que algunos captarían muy pronto y practicarían. Si permitiéramos que la confusión entrara en nuestras filas, no podríamos organizar nuestra obra como debiéramos. Estamos tratando de unirla y organizarla ahora de la mejor forma posible. {3MS 426.1}
Pensé que debía relatarle estas cosas a Ud. {3MS 426.2}
R. Mackin: Bueno, lo que Ud. ha declarado no corresponde con nuestra experiencia. Nosotros hemos sido muy cuidadosos en este asunto, y hallamos que la experiencia por la cual pasamos, y que hemos tratado esta mañana de bosquejar brevemente para su conocimiento, cuadra exactamente con la experiencia de los siervos de Dios de antaño como se da en la Palabra. {3MS 426.3}
Elena G. de White: Durante los años del ministerio de Cristo sobre la tierra, mujeres piadosas ayudaron en la obra que el Salvador y sus discípulos hacían. Si los que se oponían a esta obra pudieran haber encontrado alguna cosa fuera del orden regular en la conducta de estas mujeres, ello habría cancelado la obra en el acto. Pero aunque las mujeres estaban trabajando con Cristo y los apóstoles, toda la obra era conducida sobre un plano tan elevado como para estar por encima de las sombras de la sospecha. No podía encontrarse ninguna ocasión para hacer una acusación. Las mentes de todos estaban dirigidas a las Escrituras más bien que a los individuos. La verdad era proclamada inteligentemente, y en forma tan sencilla que todos podían entenderla. {3MS 426.4}
Yo estoy temerosa de que cualquier cosa de naturaleza fanática sea introducida entre nuestro pueblo. Hay muchos, muchos, que deben ser santificados; pero deben ser santificados por medio de la obediencia al mensaje de verdad. Justamente hoy estoy escribiendo sobre este asunto. En este mensaje hay una hermosa consistencia que apela al juicio. No podemos permitir que elementos excitables entre nosotros se exhiban a sí mismos de una manera tal que destruyan nuestra influencia sobre los que queremos alcanzar con la verdad. Nos tomó años corregir las impresiones desfavorables que los no creyentes recibieron de los adventistas al conocer la forma extraña y malvada de obrar de elementos fanáticos que teníamos en nuestro medio durante los primeros años de nuestra existencia como pueblo separado. {3MS 427.1}
Estad en guardia—R. Mackin: Ahora bien, esto que nos está dando ¿sería considerado como un testimonio dado por la inspiración del Espíritu, o es simplemente un consejo relacionado con su experiencia? {3MS 427.2}
Elena de White: Estoy dándoles algo de historia. {3MS 427.3}
R. Mackin: Pero Ud. no dice que eso se aplica a nuestro caso ahora, hasta que no tenga mayor luz sobre ello, ¿no es así? {3MS 427.4}
Elena de White: Yo no podría decirlo, pero temo que lo de Uds. esté en esa línea, algo con lo cual me he encontrado repetidamente. {3MS 428.1}
W. C. White: Son ahora las doce. ¿No les gustaría descansar antes de comer? {3MS 428.2}
Elena de White: Bueno, yo no podía dejarlos que se fueran sin decir lo que he dicho. Yo diría: tengan cuidado. No permitan que aparezca nada que sepa a fanatismo, y que otros representarían dramáticamente. Hay algunos que están ansiosos de exhibirse, y ellos harán algo dramático con cualquier cosa que Uds. hagan, ya sea del mismo tenor o no. Yo he sido muy cuidadosa de no suscitar cualquier cosa que sea extraña entre la gente. {3MS 428.3}
R. Mackin: ¿Pero no es cierto que cuando el Espíritu Santo venga, como se declara en sus libros, muchos se volverán contra él y declararán que es fanatismo? {3MS 428.4}
Elena de White: Por supuesto que lo harán; y por esta razón debemos ser muy cuidadosos. Es por medio de la Palabra—no por sentimientos ni excitación—como queremos influenciar a la gente a obedecer la verdad. Sobre la plataforma de la Palabra de Dios podemos estar en pie con seguridad. La Palabra viva está repleta de evidencia, y un poder maravilloso acompaña su proclamación en nuestro mundo. {3MS 428.5}
R. Mackin: Bien, no debemos cansarla a Ud. {3MS 428.6}
Sra. Mackin: ¡Alabado sea Dios! {3MS 428.7}
Elena de White (mientras se pone de pie y estrecha las manos): Deseo que el Espíritu de Dios esté con Ud., y con Ud., y conmigo. Debemos ser como niñitos delante de Dios. El poder de su gracia no debe ser malentendido. Debemos tenerlo con toda mansedumbre y humildad de mente, para que Dios mismo pueda impresionar las mentes de la gente. Espero que el Señor los bendiga y les dé un sólido fundamento, y ese fundamento es la Palabra del Dios vivo Manuscrito 115, 1908, publicado en The Review and Herald, 10, 17 y 24 de agosto de 1972. {3MS 428.8}
El señor dio luz
Sr. Ralph Mackin y Sra.,
Querido hermano y hermana,
Hace poco, en visiones de la noche [diciembre 10] se me presentaron algunos asuntos que debo comunicarles. Se me mostró que Uds. están haciendo algunos errores lamentables. En el estudio que Uds. hacen de las Escrituras y los Testimonios han llegado a conclusiones erróneas. La obra del Señor sería grandemente malentendida si Uds. continuaran trabajando como han empezado a hacerlo, pues le dan una falsa interpretación a la Palabra de Dios y a los Testimonios impresos; y entonces tratan de llevar a cabo una obra extraña de acuerdo con la concepción que Uds. tienen de su significado. Suponen que todo lo que hacen es para la gloria de Dios, pero se están engañando a sí mismos y están engañando a otros. {3MS 429.1}
Su esposa, en discursos, en cantos y en extrañas exhibiciones que no están de acuerdo con la obra genuina del Espíritu Santo, está ayudando a introducir una fase de fanatismo que haría un gran perjuicio a la causa de Dios si se le permitiera tener lugar en nuestras iglesias. {3MS 429.2}
El echar fuera demonios—Uds. aun han supuesto que han recibido poder para echar fuera demonios. Por la influencia de Uds. sobre las mentes humanas, hombres y mujeres son inducidos a creer que están poseídos por demonios, y que el Señor los ha señalado a Uds. como sus agentes para arrojar fuera a esos malos espíritus. {3MS 429.3}
Se me ha mostrado que precisamente la clase de error a la cual me vi obligada a hacer frente entre los creyentes adventistas después de que pasó el tiempo en 1844, se repetirá en estos últimos días. En nuestra experiencia temprana tuve que ir de lugar en lugar y presentar mensaje tras mensaje a grupos de creyentes desanimados. Las evidencias que acompañaban mis mensajes eran tan grandes, que los de corazón honesto recibían como verdad las palabras que se hablaban. El poder de Dios se revelaba de una manera señalada, y hombres y mujeres eran liberados de la funesta influencia del fanatismo y el desorden, y eran traídos a la unidad de la fe. {3MS 429.4}
Un pedido para que se detengan—Hermano y hermana, tengo un mensaje para Uds.: Uds. están partiendo de una falsa suposición. Hay mucho del yo entretejido en sus exhibiciones. Ya es tiempo de que se detengan. Si Dios les hubiera dado un mensaje especial para su pueblo, Uds. andarían y obrarían con toda humildad, no como si estuvieran en el escenario de un teatro, sino con la mansedumbre de un seguidor del humilde Jesús de Nazaret. Ejercerían una influencia totalmente diferente de la que han estado ejerciendo. Estarían anclados en la Roca, Cristo Jesús. {3MS 430.1}
Mis queridos jóvenes amigos, las almas de Uds. son preciosas a la vista del cielo. Cristo los ha comprado con su propia sangre preciosa, y yo no quisiera que estuvieran albergando una falsa esperanza y trabajando con métodos falsos. No hay duda de que Uds. están ahora en un falso camino, y les ruego, por sus almas, que no pongan por más tiempo en peligro la causa de la verdad para estos últimos días. Por amor de sus propias almas, consideren que la manera en la cual están trabajando no es la forma en que se hará avanzar la obra de Dios. El sincero deseo de hacer bien a otros inducirá al obrero cristiano a apartar todo pensamiento de introducir en el mensaje de la verdad presente cualquier enseñanza extraña que induzca a los hombres y mujeres al fanatismo. En esta época de la historia del mundo, debemos ejercer el mayor cuidado en este respecto. {3MS 430.2}
Algunas de las fases de la experiencia por la cual Uds. están pasando, no sólo ponen en peligro sus propias almas, sino las de muchos otros, porque Uds. echan mano de las preciosas palabras de Cristo como se registran en las Escrituras, y a los Testimonios, para atestiguar el carácter genuino del mensaje de Uds. Al suponer que la preciosa Palabra, que es veracidad y verdad, y los Testimonios, que el Señor ha dado a su pueblo, son la autoridad de Uds., están engañados. Uds. son movidos por impulsos equivocados, y están animándose a sí mismos con declaraciones que guían a error. Intentan hacer que la verdad de Dios sostenga falsos sentimientos y acciones incorrectas, que son inconsecuentes y fanáticas. Esto hace diez veces más difícil, aun veinte veces más difícil la obra que la iglesia tiene que hacer para familiarizar a la gente con las verdades del mensaje del tercer ángel Carta 358a, 1908, publicada parcialmente en Mensajes Selectos 2:51-52.1 {3MS 430.3}
Otra referencia a la posesión de demonios
Anoche se me dio instrucción para nuestro pueblo. Me parecía estar en una reunión donde se representaba la obra extraña del Hno. Mackin y su esposa. Se me dijo que era una obra similar a la que se había llevado a cabo en Orrington, en el Estado de Maine, y en varios otros lugares después del cumplimiento de la fecha de 1844. Se me pidió que hablara decididamente contra esta actividad fanática. {3MS 431.1}
Se me mostró que no era el Espíritu del Señor el que inspiraba al Hno. y a la Hna. Mackin, sino el mismo espíritu de fanatismo que siempre intenta penetrar en la iglesia remanente. Están errados en la forma como aplican las Escrituras a sus prácticas peculiares. El hecho de declarar a las personas como poseídas por el demonio, y luego orar por ellas y afirmar que expulsan los malos espíritus, constituye un fanatismo que hará caer en el descrédito a cualquier iglesia que apruebe tal obra. {3MS 431.2}
Se me dijo que no debemos estimular tales demostraciones, sino que deberíamos proteger al pueblo mediante resueltas expresiones de censura contra aquello que podría manchar el nombre de adventistas del séptimo día, y destruir la confianza del pueblo en el mensaje de verdad que ellos deben presentar al mundo2—Pacific Union Recorder, 31 de diciembre de 1908; Mensajes Selectos 2:53. {3MS 432.1}
2 Perjurar, mentir, matar, hurtar y adulterar prevalecen, y derramamiento de sangre tras derramamiento de sangre.
3 Por lo cual, se enlutará la tierra, y se extenuará todo morador de ella, con las bestias del campo, y las aves del cielo: y aun los peces del mar fallecerán.
4 Ciertamente hombre no contienda ni reprenda a hombre, porque tu pueblo [es] como los que resisten al sacerdote.
5 Caerás por tanto en el día, y caerá también contigo el profeta de noche; y a tu madre talaré.
6 Mi pueblo fue destruido porque le faltó conocimiento. Porque tú desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.
7 Conforme a su grandeza así pecaron contra mí; [por tanto], cambiaré su honra en afrenta.
8 Comen del pecado de mi pueblo, y en su maldad levantan su alma.
9 Tal será el pueblo como el sacerdote: y visitaré sobre él sus caminos, y le pagaré conforme a sus obras.
10 Y comerán, mas no se saciarán; fornicarán, mas no se aumentarán; porque dejaron de escuchar a Jehová.
11 Fornicación, vino, y mosto quitan el corazón.
12 Mi pueblo a su ídolo de madera consulta, y su vara le responde; porque el espíritu de fornicaciones los ha engañado, y se han dado a la fornicación dejando a su Dios.
13 Sobre las cabezas de los montes sacrificaron, e incensaron sobre los collados, debajo de encinas, y álamos, y olmos que tuviesen buena sombra; por tanto, vuestras hijas fornicarán, y adulterarán vuestras nueras.
14 No visitaré sobre vuestras hijas cuando fornicaren, y sobre vuestras nueras cuando adulteraren: porque ellos ofrecen sacrificios con las rameras, y con las malas mujeres sacrifican; por tanto, el pueblo sin entendimiento caerá.
15 Si fornicares tú, Israel, a lo menos no peque Judá; y no entréis en Gilgal, ni subáis a Betaven; ni juréis: Vive Jehová.
16 Porque como becerra rebelde se apartó Israel: ¿los apacentará ahora Jehová como a carneros en lugar espacioso?
17 Efraín [es] dado a ídolos; déjalo.
18 Su bebida se corrompió; fornicaron pertinazmente; sus príncipes amaron lo que avergüenza.
19 La ató el viento en sus alas, y se avergonzarán de sus sacrificios.
Himno 162: Viene otra vez nuestro Salvador
Himno 164: Abre tu corazón
Testimonio: 29-07-2017 #01
Queridos hermanos, hoy es 29 de julio, sábado 29 de julio del 2017. Quiero compartir un sueño que tuve en la madrugada de hoy.
Estaba en un lugar con mi familia, y otros hermanos. Era la cima de una montaña, había tres estadios, y estos estadios estaban unidos como por puentes, que podíamos pasar de un lado al otro. Era sábado a mi entender, porque en los diferentes lugares, en los diferentes estadios, estos que eran tres, se estaban llevando actividades de sábado como: la escuela sabática, culto divino, y otros. Así que, pude apreciar que era un día de sábado. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p1}
En el primer estadio, estaban dando la escuela sabática. Había mucha controversia por diferentes ideas impuestas por los de la jerarquía y otras personas que debatían. Entonces, como vimos esa manifestación, en ese lugar, no nos pareció. Entonces, comenzamos a caminar por uno de los puentes, mi familia y otros hermanos que estaban con nosotros, y nos dirigimos al segundo estadio. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p2}
Allí comenzamos a ver que había jóvenes y jóvenes adultos. Entonces, cuando nos quedamos un momento para ver qué era lo que se estaba llevando allí a cabo, comenzamos a escuchar una música estridente. La letra hablaba de Dios, pero la música era total y absolutamente mundana. Así que dijimos: “aquí no nos podemos quedar”. Entonces, salimos por la puerta y caminamos hacia el siguiente puente para llegar al tercer estadio. Allí vimos una persona que estaba predicando. Cuando me percaté, vi que era un pastor. Estaba predicando, estaba hablando como cosas incoherentes, como: ‘estamos bien’, ‘Dios está con nosotros’, ‘estamos en victoria’, cosas así. Y yo decía: “pero, ¿cómo puede estar diciendo eso si hemos salido de los dos estadios anteriores? Y, ¡miren lo que vimos! Y, ¡mira lo que él está predicando!” {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p3}
Entonces, de repente, mientras yo estaba diciéndole esto a las personas que estaban con nosotros, las ropas de aquel pastor que estaba predicando se le cayeron y quedó en paños menores. Y salimos corriendo de allí, y buscamos rápido la salida, y como esto estaba como en la loma, así arriba, comenzamos a bajar. Entonces al bajar la montaña vimos una lancha, y le pedimos al capitán que, por favor, nos llevara al otro lado del río pues ya no deseábamos estar más allí en aquel lugar. Así que él nos dijo: “¡claro, pero apúrense! Pues, siempre que bajan personas de esos estadios, unos soldados los siguen y si los atrapan, pues, ya no vuelven, y, ¡apúrense porque ahí vienen!” Entonces, cuando nos dijo así, nos señaló en la montaña, arriba, de donde habíamos bajado, y allí vimos a tres soldados que venían tras nosotros. Así que corrimos a la embarcación y ésta comenzó a girar para retirarse de la orilla, cuando vimos los soldados saltar al agua, y empezaron a nadar fuertemente hacia la embarcación, y vi cuando la abordaron. Entonces nos comenzamos a llenar de miedo. Yo sentía mucho miedo y buscamos donde escondernos. Y yo me fui detrás de una mesa que había, allá, en la embarcación, y cuando me agaché, vi uno de estos soldados. Vi cómo, uno de ellos, entraba en la cabina del capitán y tomó el mando, y otro se dirigía hacia donde yo estaba, así que me asusté mucho. Pero, de repente, me di cuenta que detrás de mí había como algo que estaba respirando, sentí un aliento muy cerca de mí, en mis espaldas. Entonces, al voltear, veo un león, un león adulto, ¡era hermoso! Estaba sentado. Entonces, sus ojos me miraron fijamente, y yo también lo miré a los ojos fijamente. Pero sus ojos no eran como ojos de animal, eran como ojos de humano y estaba mirándome con ternura. Entonces, al principio, me asusté cuando lo vi, por la impresión, pero luego, cuando le vi sus ojos que emanaban ternura, comencé a sentir paz. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p4}
Entonces, el león se paró, y cayó sobre el soldado que venía hacia mí, lo tiró al suelo y éste dejó de moverse, no lo vi que se movió más. Entonces, luego, vi cómo, este león también, pasó hacia la cabina de control y embistió al soldado que había hecho girar el barco, y le pasó el mando al capitán que ya lo habían sacado de aquel lugar. Entonces luego, fue donde el otro grupo que estaba asustado, porque estaba, allí, instigándolo otro soldado. Embistió, también, a este soldado y así pudimos continuar a salvo hacia el otro lado del río. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p5}
Entonces, al mirar, allí en aquel lugar, vi cómo pudimos llegar al otro lado del río y, cuando llegamos allí, al otro lado del río, nos despidieron amablemente. Y nos dijeron: “sigan por ese camino y no se salgan de él”. Así que seguimos subiendo, y así lo hicimos. Comenzamos a subir. De repente, yo me volteo para atrás y digo: “déjame ver por dónde va el barco”. Entonces, cuando miro hacia atrás para ver la embarcación, veo el león que viene detrás de nosotros. Entonces, como que me desesperé y le dije a mi familia y a los hermanos que venían con nosotros: “¡debemos regresar, el león se vino con nosotros! ¡Él es de la embarcación, van a pensar que nos lo estamos llevando, vamos a regresarlo!” Pero entonces, mientras yo estaba hablándole eso a las personas que iban conmigo, de repente, una persona frente a nosotros comenzó a saludarnos y nos decía: “¡hola, bienvenidos, vengan, vengan!” Entonces, vimos unos grupos de personas allí en aquel lugar cuando nos recibieron. Algunos estaban, sólo, sentados en el suelo, pero estaban llorando. Unos estaban solitos, también, en unas esquinas, allí sentados; y estaban llorando muy fuerte, llorando sin parar. Aunque tenían sus manos en la cara, yo veía cómo sus lágrimas caían al suelo. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p6}
Entonces, pregunté a la persona que nos saludó, a la que nos recibió, que por qué ellos lloraban. Entonces él me contestó: “ellos saben que deben estar aquí, pero haberlo dejado todo es muy duro para ellos, esta es la fase uno, es la fase más difícil”. Entonces vi, en ese lugar, campos dispuestos para ararlos, pero nadie lo hacía porque todos estaban sufriendo, todos estaban llorando. Además de eso, en aquel lugar precioso, vi unas cabañitas pequeñas, pero nadie en ellas, pues todos estaban afuera y estaban con este dolor llorando. Y al mirar en ese lugar, veía en diferentes lugares letreros que decían: “estación número uno”. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p7}
Entonces, al llegar donde el señor que nos recibió, le dije: “el león vino con nosotros y él pertenece al barco, así que yo quiero devolverlo, tenemos que volver para llevarlo al barco”. Pero el señor me sonrió y me dijo: “el león siempre acompaña a los de la estación 4. Siempre que vemos al león bajar con personas, o alguien que baja, y va para la estación 4, pues, el león va con ellos”. Entonces le pregunté: “¿y qué es eso de la estación 4?” Y él me dijo: “ven y ve”. Entonces me llevó al recorrido de la estación donde estábamos ahí, la estación número 1. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p8}
Entonces, cuando vi todo lo que había en esa estación, me pude dar cuenta que era un lugar que era muy bonito, un lugar muy tranquilo, pero las personas a pesar de que aquel lugar estaba tranquilo, estaban llorando. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p9}
Pero nos dijo: “no se preocupen, tienen que seguir su camino”. Entonces nos dio agua a tomar y nos indicó el camino por donde teníamos que seguir y nos despedimos y nos fuimos camino arriba. Así que mientras salíamos de aquel lugar yo pude escuchar a alguien que dijo: “miren, el león va con ellos, son de la estación 4”. Así que, por alguna razón, todos allí sabían lo que simbolizaba el león, menos nosotros. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p10}
Así que seguimos nuestro camino y pronto otro personaje nos comenzó a saludar. Al lado de él había un letrero que decía: “estación número 2”, lo podía apreciar en aquel momento. Y llegamos. Y él, con mucha amabilidad, procedió a mostrarnos el área de aquel campamento. Muy amable, nos llevó al recorrido del lugar y, entonces, comenzamos a ver que allí había cosas que yo no había podido apreciar en el campamento anterior. Vi las cabañitas otra vez, eran iguales, y vimos, ya, el campo. Estaba arado, era muy diferente al campo anterior, y personas sembrando. Estas estaban, ya, más calmadas, pero se veían como un tanto preocupadas. Entonces, todos quedaron asombrados al ver el león con nosotros, y el guía me dijo: “ya se están aclimatando y pronto serán felices”. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p11}
Así que, después de esto, nos dieron agua otra vez y nos llevaron para continuar el camino. Nos despidió y continuamos camino arriba. Cada vez el camino era más angosto y más elevado, y ya, cerca de la próxima estación, también nos salió a recibir otro señor. Muy amable el señor, y nos llevó al recorrido de aquel lugar, igual que nos hacían en las estaciones anteriores. Así que pasé otra vez por el letrero que decía, esta vez: “estación número 3”. Había las mismas cabañas, los mismos campos, pero noté que ahora las personas allí, que estaban sembrando, estaban gozosos. Y nos mostraban ellos mismos las plantitas que ellos mismos habían cultivado, lo que habían crecido, y que estaban en el proceso ellos de seguir sembrando, sembrando. Entonces nos comenzaron a decir cómo ellos sembraban, a explicarnos cómo ellos lo hacían. Yo vi que en sus caras había paz y seguridad, y todos eran muy trabajadores. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p12}
Así que nuestro guía nos dijo: “vengan a ver las cabañitas”. Esta vez fuimos a ver las cabañas, pero esta vez no nada más las vimos de lejos, sino que pude entrar a ellas. Y, cuando entramos, vi que dentro de la puerta, en la entrada, había un cántaro de cristal y uno de barro, estaban llenos de agua. Y dentro de las cabañas, ya, vi un matre [colchón] de tela que estaba como enrollado. El guía nos dijo que, en la noche, pues, esto se desenrolla para que las personas pudieran dormir y, en el día, pues, las volvían a enrollar y permanecían enrolladas. Además, vi una mesita pequeña y había allí tres libros. Entonces, me acerqué rápido a verlos y pude apreciar que eran: la Biblia, el Espíritu de la Profecía y el Himnario Antiguo; ¡yo estaba contenta!, y los cogí para verlos. También me pude dar cuenta que había una bandeja con pan en un extremo de la choza y, al salir afuera de la cabaña, cuando nos llevaron, pude ver que cada cabaña, al lado, tenía tres piedras, simulaba como un fogón y una pequeña pila de leña. Así que las cabañitas eran pequeñas y con solo eso, que era lo único que ellos tenían, aparte de las siembras, se veían felices. Entonces le pregunté al personaje que nos estaba guiando que qué comían a diario, y él me dijo: “pronto lo sabrás”. Entonces nos dirigió al camino y nos dijo que sigamos porque pronto iba a terminar nuestra jornada porque la próxima estación era la de nosotros. Así que nos despidió gozoso y así mismo, pues, continuamos nuestro camino. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p13}
Así que llegamos un tanto fatigados, pues cada vez la cuesta era más angosta y más difícil la subida, y nos recibieron como antes, y también pude apreciar allí amados hermanos un letrero que decía: “estación número 4”. Tanto el que nos recibió como los demás que estaban allí, se mostraron que estaban felices al vernos y rápidamente nos llevaron a las cabañas que debíamos ocupar por familias, porque cada familia tenía su cabaña. Entonces, al entrar a la cabaña que nos tocaba a mi familia y a mí, vi las mismas cosas que en la estación anterior, sólo existían unas leves variantes: sólo había un cántaro grande de barro en la entrada y un cántaro de barro también pequeño. El cántaro grande estaba lleno de agua, pero el pequeño estaba vacío. Entonces, al ver esto nuestro guía, en ese campamento nos dio unas instrucciones, y nos dijo: “estén bien atentos, tomad esta bolsa de semillas, y cada mañana debéis sembrar en aquel lado del campo, y nos señaló el lugar donde nos tocaba por las familias”. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p14}
Entonces nos dijo que cada quien tenía su siembra ya estipulada y que, según la trabajasen y la sembrasen, así, de esa forma, era que iban a segar. Entonces nos siguió diciendo que debíamos recordar que cada día, cada día, nosotros teníamos que comer de lo que nosotros sembrábamos y que, si no sembrábamos, pues, no íbamos a tener qué comer. Así que me acordé, en ese momento, cuando él dijo eso, de la mesa de pan que vi en la estación anterior, pero, cuando miré a mis alrededores allí, no la vi, no la pude apreciar. Pero cuando terminé de mirar, para ver si veía la mesa de pan, el guía nos siguió diciendo: “cada mañana, las familias hacen su culto familiar en sus cabañas, y luego salen al campo. Pero en la tarde, todas se reúnen en aquel lugar”, y nos señaló, y cuando nos señaló el lugar, vi un llano. Era de tierra y grama y los asientos eran troncos, troncos de árboles que habían cortado y estaban en aquel lugar. Entonces él nos dijo que en esos troncos era que nos sentábamos para el culto vespertino de agradecimiento a Dios, allí era donde nos íbamos a reunir. Así que al salir y caminar un poco por el campamento pude apreciar otra variante: las cabañas estaban mucho más separadas que en la estación anterior, no estaban, ya, tan juntas. Así que llegó la noche, todas las familias fuimos a aquel lugar donde él nos había dicho que nos íbamos a reunir para tener el culto vespertino, el culto de agradecimiento, y pude ver allí, en aquel lugar que se oraba, que se leía la palabra de Dios, el espíritu de la profecía, se cantaban himnos, y se recitaban de memoria grandes partes de los Salmos, y otras partes de la Biblia. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p15}
Entonces, cada uno de nosotros, dábamos gracias a Dios por los cuidados y la provisión de cada día. Y, antes de acabar todo esto, y de orar para que cada quien se fuera a sus cabañas, un señor se paró y nos dijo: “hermanos recuerden la señal, al verla, alistémonos”. Entonces yo pregunté asombrada: “¿qué señal? ¿qué señal? ¿de qué están hablando? No sé”. Entonces, allí, en aquel momento, me dijeron que, cuando viéramos luces bajando del cielo a las llanuras, debíamos alistarnos para salir. Así que me quedé con eso, pensando en eso, pero nos fuimos a dormir. Y entonces yo decía, meditando: “¿qué será eso? ¿qué serán esas palabras? ¿qué querrán decir?” Entonces, pues, nada, me quedé dormida. Y al otro día temprano, luego del culto familiar, salimos a sembrar y vimos en nuestro campo que había espiguitas con semillas. ¡Estábamos contentos y comenzamos a comer! Y dijimos: “¿quién habrá sembrado esto? ¡Si ayer cuando nos mostraron el lugar no había nada sembrado! Pero, ¡gracias Señor!” Estábamos agradecidos, ahí, espigando las semillas y comiendo. Entonces, también, fuimos al río en busca de agua con el cántaro pequeño y también sembramos una parte de la parcela que se nos había asignado. Entonces yo pensé: “esto que estoy sembrando ahora va a pasar mucho tiempo en germinar”, pero, por alguna razón, la paz y la armonía y la felicidad era tanta y tanta en aquel lugar, que yo dejé de preocuparme. Así que terminó el día con el culto vespertino y, otra vez, escuchando [sobre] la señal, y fuimos a la cama. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p16}
Entonces nos levantamos al otro día y luego del culto, al salir al campo, vimos allí que todo lo sembrado el día anterior ya tenía fruto. Y así, cada día sembrábamos el día anterior, y eso que sembrábamos era la comida del día siguiente. ¡Estábamos tan maravillados y tan contentos por lo que Dios hacía por nosotros día tras día en aquel lugar! Allí pude ver que no había espacio para la ociosidad, todos laborábamos todo el día y sólo de tarde, para el culto, era que nos reuníamos, para alabar y glorificar el nombre de Dios. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p17}
Así que nos fuimos a dormir y, cuando era ya tarde, aparecieron unos personajes vestidos de blanco a la puerta de cada cabaña, y nos dijeron: “¡es hora, alístense!” Entonces, todos salimos y pude ver, cuando salí de la cabaña, que otros salían también, e íbamos montaña arriba en fila y nos dijeron: “es hora”, entonces yo pregunté: “¿es hora de qué?” “Es que les espera el campamento 5”. Entonces yo decía: “pero, ¿cómo? Todo lo que hemos sembrado y todo, todo se está quedando aquí, ¿qué va a pasar?” Pero todos seguían ese camino, así que yo también comencé a seguirlo. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p18}
Fuimos llevados toda la noche, casi amaneciendo llegamos al campamento 5. Pude divisar el letrero que decía: “campamento 5”. Y, allí, pude ver otra variante: allí, las cabañas eran aún más pequeñas, y eran aún más retiradas una de las otras, al punto que, si no las buscábamos, no veíamos las cabañas del vecino. Entonces, allí, el primer día se nos proveyó alimento, pero del segundo día en adelante todo fue muy parecido al campamento 4. Sólo por unas variantes: el agua estaba más lejos, el campo de siembra era más duro, más hostil, no crecía tanto como en el anterior, la tierra era más difícil y teníamos que trabajar más por el alimento diario. Así que esto nos llevó a orar más y a buscar más de Dios porque era más difícil aquel lugar. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p19}
Así pues, pasaban los días y las noches, cuando una noche, luego del culto e irnos a nuestras chozas, vimos las luces del cielo que bajaban a las llanuras, entonces inmediatamente escuchamos una voz: “¡es hora, salgan! ¡es hora, salgan!” Entonces, por alguna razón, ya sabíamos qué hacer. Así que, todos corrimos montaña abajo y fuimos a las llanuras. Vimos, allí, muchas personas y comenzamos, a voz en cuello, a proclamar el último mensaje de amonestación a este mundo, ¡sin rodeos! Algunos escuchaban y se venían al grupo y comenzaban a proclamar, igual que nosotros, el mismo mensaje, pero la mayoría nos miraba y se ponían airados. Entonces, pronto, escuchamos una voz que dijo, bien fuerte: “¡basta, salid!” Entonces, todos corrimos otra vez de vuelta a la montaña. Ahora el grupo era más grande, pues se le sumaban los que escucharon y aceptaron el último mensaje, y todos corríamos con fuerza. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p20}
Cuando, de repente, pude mirar atrás de mí, para ver yo, según yo, para mirar todos los que venían detrás de mí, también corriendo en mi misma dirección, de los de nuestro grupo. Pero, cuando miré, lo que me percaté fue que vi hombres que estaban enfurecidos, y nos seguían montaña arriba, entonces ya los veía muy cerca, ¡muy cerca de nosotros! Y dije: “¡Señor, por favor ayúdanos, ayúdanos, porque nos van a agarrar! ¡esta montaña está muy difícil de subir, y ya yo siento que no tengo fuerzas!” Entonces, de repente, cuando estábamos ahí, en ese lugar, pues, ya, entonces, vimos cómo se comenzó a alumbrar la montaña. La montaña comenzó a tener luces por diferentes lugares. Entonces, cuando yo me fijé para ver bien aquellas luces, comencé a ver que eran ángeles, entonces muchos de estos ángeles pasaban corriendo por el lado de nosotros, montaña abajo, y embestían a estas personas que venían a hacernos daño. Pero, otros, nos iban dirigiendo montaña hacia arriba para lugares donde solamente ellos sabían a dónde iban. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p21}
Así que seguimos subiendo con los que nos iban dirigiendo y, pronto, llegamos a ciertos lugares bien escarpados, bien difíciles de llegar. Llegamos como a unas cuevas. Entonces yo podía ver cómo, en las diferentes montañas, alrededor de donde yo estaba, había diferentes cuevas. Entonces, por grupos, nos entraban ahí, y cuando nos entraron ahí, pues, ya, nos sentíamos seguros. Un poco cansados, un poco agitados, pero seguros, porque dos ángeles se ponían al frente de la puerta de las cuevas y ya sentíamos que nada, ni nadie, podía llegar ahí para hacernos daño. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p22}
De repente mientras estábamos ahí, que ya nos sentíamos seguros, en medio de la noche, se oyó un estruendo y una luz bien brillante y bien fuerte, entonces yo corrí a la puerta de la cueva y le pregunté a uno de los ángeles: “¡ya viene! ¿verdad? ¿Es Jesús el que viene?” Entonces él me contestó: “¡sí, sí ya viene nuestro Rey de reyes y Señor de señores!” Entonces comencé a llorar, sabía que ya todo había acabado, ¡no más dolor, no más muerte, no más persecución! Ya estábamos ahí, ¡sellados y custodiados por nuestro gran Dios y su maravilloso reino! ¡Entonces me sentía tan feliz, tan feliz! Todos, allí, comenzamos a llorar, ¡sentíamos que el corazón se nos salía! Todos nos miramos cuando los ángeles dijeron que tenían que irse. Entonces les dijimos: “pero, ¿cómo? ¡¿cómo que se van?!” Entonces nos dijeron: “sí, tenemos que ir, tenemos que ir a formar parte del coro angelical. Tenemos que estar ahí cuando Jesús venga. Ya Él viene y nosotros tenemos que ser parte de ese coro angelical. ¡Pero ya mismo nos vemos, no se preocupen, ya mismo nos vemos!”. Entonces, nos sonrieron y nos dijeron: “paz, ya todo acabó”. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p23}
¡Estábamos tan contentos, amados hermanos! Vimos cuando fueron al cielo a ser parte del gran coro que se oía, y se veía, en las nubes. ¡Esto tan maravilloso! ¡todos estábamos felices y nos arrodillábamos y alabábamos al que vive por los siglos de los siglos! En ese momento, mientras estábamos ahí en esa adoración, en ese momento tan solemne, viendo que nuestro Dios venía en las nubes de los cielos ya, y que todo iba a acabar ya, todo el sufrimiento, todo el llanto, todo el dolor, escuché una voz que nos decía a todos nosotros: “voy breve, voy en breve”. Entonces cuando escuché eso, dije: “voy breve, voy breve, ¿qué quiere decir esto?” Y volví a escuchar la voz aún más fuerte y con más claridad y la voz me dijo: “diles que todo está listo, que se preparen pues regreso muy pronto”. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p24}
En ese momento, amados, desperté. Con un gozo de la bendita esperanza de salvación, y con el deseo ardiente en mi corazón de que todos, y cada uno de, nosotros podamos ser parte de esta maravillosa salvación. ¡Dios nos ayude a todos a llegar! Dios nos ayude a todos a pasar por el proceso por el cual Dios desea que cada uno de nosotros pasemos para que podamos perfeccionar este carácter para encontrarnos con Cristo Jesús en las nubes de los cielos. Que Dios me los bendiga a todos. {Daisy Escalante: 29-07-2017 #01, es.p25}
Testimonio: 10-10-2017
Amados, octubre 10, 2017, 6:45 de la mañana. Vino a mi palabra de Dios y me dijo:
“¡Ay de los que tuercen la verdad para sentirse tranquilos! Pues, ellos, sólo recibirán escarnios. ¡Dichoso aquel que confíe en Mí! Hay camino que al hombre parece derecho pero su fin es camino de muerte. Pronto llorará Israel, pues confió en sus adivinos y falsos profetas que presagiaron el bien cuando Yo, el Eterno, he declarado el mal. ¿Por qué dudáis de mis palabras y tenéis por especulación mis dichos?” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p1}
“¡Ay de ti que pones tus sentimientos por encima de un Escrito Está, y luego, clamas por protección que no tendrás! Porque has usurpado, con tus razonamientos, mis mandatos y no divulgas lo enseñado.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p2}
“¡Ay que vendrá sobre ti y no escaparás! Porque aún los niños reconocen el verano. ¿De qué te vale,” seguía diciendo, “explicaciones y evidencias si tu razonamiento es lo único que cuenta?” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p3}
“¡Ay de ti,” seguía diciendo la voz, “pues en un momento sólo será tu lamento! Y, ¿quién te consolará? Desechaste los profetas y ni aún mi propia voz quisiste oír. Sólo oirás agoreros que decían paz, y paz, cuando Yo he hablado de guerra. Más, como no te arrepentiste”, seguía diciendo, “aun así, un espíritu de error vendrá sobre ti y no sabrás ni cuándo naciste. Por cuanto has desechado al Santo de Israel, así, el Santo de Israel te ha desechado.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p4}
“No hay entendimiento en Israel”, seguía diciendo, “porque me desecharon y no quisieron mi consejo. Y ahora, ¿quién te guiará? ¡Dichoso el que confía en Mí y hace de Mí su consejo y [de] mis mandatos su regla de acción! He aquí que: fuego, azufre, humo y pestilencia están al acecho, pues mi mano está alzada. ¿Por qué ignoran mis palabras y luego por Mí claman?”, —seguía diciendo. Entonces, hizo una pausa y dijo: “¿habrá salvador en Sodoma y podrá librarse por sí sola Gomorra? Vendrá sobre ti Asiria, y Egipto te esclavizará por cuanto desechaste el consejo y pisoteaste el derecho. Babilonia reinará y cree que nada le sucederá, y sus súbditos la alaban.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p5}
“¡Ay de las naves de Quitim! ¡Ay de Adma, y Zeboim! ¡Ay de los que te siguen sin saber a dónde van! Porque la destrucción les seguirá.”
Entonces, otra vez, hizo una pausa y continuó diciendo:
“¡Ay de ti, Jerusalén, que te congregas con Babilonia! Estás junto con ella para sentirte aceptada. ¿Acaso no he sido Yo un buen esposo que debes ir tras tus amantes? Si aun cuando cayere fuego del cielo ante tus ojos, no me buscarás porque tus deleites amaste más que la rectitud y tu poder más que la verdad.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p6}
“¡Ay de los que trabajan en ti por precio y venden su libertad por precio! ¿Acaso no podré Yo arremeter en una hora contra ellos? Y lo que tienen, ¿de quién será?” preguntaba. “Vivo Yo,” dice el Eterno, “que juicio tras juicio, y castigo tras castigo vendrán sobre ti, y no escaparás, porque no fuiste guardador ni celador de Mi verdad”. “¡Sal de ella, pueblo mío! Ve a tus aposentos, cierra tras ti tus puertas mientras pasa la indignación. Porque Jerusalén será desolada y sus seguidores, de precio y cohecho, serán barridos. Porque, para esto, hay plazo. Porque desecharon el consejo y se apartaron de la rectitud y pisotearon la causa y la verdad y no buscaron al Santo de Israel.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p7}
Seguía diciendo: “Yo”, dice el Eterno, “declaro sobre ti: destrucción, temor y tormento. Y tu gloria, ¿para quién será?”—preguntaba. “Ensuciaste mi verdad, decretaste maldad al recto y te regocijaste con el impío, llegaste a ser cueva de toda ave aborrecible porque lo desechaste y lo deseaste. Yo te preservé con Mi verdad, pura y santa, más no quisiste y ahora tu disfraz es caído y tu maldad abiertamente será conocida; porque dices ser la guardadora de mis mandamientos, más los pisoteas.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p8}
“¡Ay de ti! Vivo Yo”, dice el Eterno, “que no te sufriré más. No protestaré ya más por Mí, porque tus protestas han sido compradas por precio y has desechado al Santo de Israel y te has vuelto a ser hermana consentida de una ramera. ¿Acaso te protegerá ella? ¿y no te escarnecerá?” —preguntaba. “¿Acaso serás para ella la niña de sus ojos como lo has sido para Mí?” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p9}
“Vivo Yo”, dice el Eterno, “que harán de ti despojo. Y, [por] cuanto diste la espalda al que te guiaba y sustentaba, el Santo de Israel, Yo no seré más tú guiador. Y sólo serán ciegos guiando ciegos. Y sabrás que Yo Soy un Dios celoso que visito la maldad y abomino la iniquidad. Tu aliada te alabará y te engrandecerá. Y, en un momento, pero de repente, caerás, y no [habrá] quién te ayude. Porque pisoteaste al Justo y detuviste la verdad y no anduviste en integridad. Todos te verán, y harán fiesta por ti pensando que la unión es cumplida, pero pronto verán que hay un puñado que me sigue y vive escondido en Mí. Te unirás a las leyes opresoras, y tratarás de someterlo y de destruirlo, pero no te darás cuenta que mi mano los protege y ellos viven bajo la sombra del Altísimo.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p10}
“¡Ay de tí, pues cosa grande es caer bajo la mano del Altísimo! Ellos huirán primero con Mi protección. Pero, cuando te toque a ti, ¿quién te protegerá? Les di mis sábados por señal y, ¿qué habéis hecho con ellos? No hay en ti quién enseñe el derecho y la justicia que no sea pisoteado. Esta es tu hora, pero tu recompensa te aguarda.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p11}
“Mi pueblo real no está en ti, pues Mi guía los lleva lejos de tí por tus abominaciones. Desechaste la profecía y tuerces el derecho, y no llevas mi nombre. ¿Cómo pensaste en ser mi amada bajo tal traición? Vivo Yo,”—dice El Eterno—, “que todo está escrito para tu destrucción.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p12}
Entonces, amados, hizo otra pausa y dijo: “¡pueblo mío, desamparado y perseguido! Hoy te recojo en mis aposentos y te redimiré y te sustentaré con la diestra de mi justicia. Y, aunque son muy pocos, junto a Mí, serás fuerte. Tras la penuria, estarás por un momento, y, al fin, mi Espíritu reposará en vosotros a plenitud, y saldrás de tus aposentos, que Yo te he llevado, y serás un heraldo de fe y verdad. Te verá la gran ramera, y sus seguidoras, y te verá la que llevaba mi verdad y la torció, y fue desechada. Y, luego de ser espantada, te odiará y tratará de echarte mano, más no prevalecerá. Porque en Mí, es la hora de alumbrar con gran luz, luz final a este mundo de oscuridad. Muchos vendrán, y a muchos rescatarán. Más, culminado el conteo, la luz será escondida por Mí; y tus perseguidores no escaparán de mi mano. Por siete veces los heriré y, en su agonía, buscarán solución. Más aún para esto hay plazo. Más, cuando deseen arremeter a sangre contra ti y comience su cacería, Yo me levantaré de mi lugar y vendrá sobre ellos lo que he hablado. Y no habrá escapatoria [de] mi mano. Y todos sabrán que Yo Soy Dios y que no hay ninguno como Yo. Pero mis verdaderos hijos están escondidos bajo mis alas y verán a los lejos tu tormento. Más no perecerán, pues su alimento y su agua estarán seguros. ¿Acaso no lo estipulé por mis siervos los profetas? — decía el Eterno, “¿acaso lo he olvidado?” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p13}
“Yo Soy el Alfa y la Omega”, seguía diciendo, “el Principio y el Final. Y mi dicho se cumplirá como está estipulado. ¡Avanza, pueblo mío, no te detengas!” —decía, “pues vuestro adversario, el diablo, trama contra ustedes para destruirlos. ¡Entra en tus aposentos!” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p14}
“Mis castigos con misericordia están en todo lugar y, ni aun así, los malos se arrepienten. Corren por su vida de aquí para allá, más no prevalecerán.”
“Pero tú, mi pueblo, mantén la calma, pues Yo seré tu sustentador en medio de esto. Confía en mí”, decía, “y avanza por fe y no por vista. Y serás recompensado por tu fe. No te afanes,” seguía diciendo, “ni [te creas en] desamparo, ni te desesperes, pues estás esculpido en la palma de mis manos y, aunque ruja la tempestad, mis alas te guardarán. ¿Acaso te he fallado?” Y Él mismo contestó: “¡de ninguna manera!” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p15}
Entonces, siguió diciendo: “¡vivo Yo!”, dice el Eterno, “que mis ojos están sobre los que me buscan y obedecen, y mi paz estará con ellos. He aquí Yo he revelado lo que ha de acontecer rápidamente, pues el plazo está por cumplirse. Lleva este mensaje” —me dijo, “y no te detengas, pues los entendidos entenderán; y, todos aquellos que están escritos en el Libro de la Vida, sabrán lo que estoy diciendo.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p16}
“Mis escogidos los recogeré Yo y ya no estarán más dispersos, porque me siguieron, aún, en la tribulación. Y guardaron mis mandamientos, por lo cual, Yo les aumenté su fe. Dichoso el que en Mí confía y guarda todas estas cosas porque vuestra redención está cerca,” —decía. “¡A la ley y al testimonio, si no dicen conforme a esto es porque no les ha amanecido! Avanza, diles” —me decían, “que se apresuren a ubicarse y que no olviden mis instrucciones: casa pequeña”, me repitió, “terreno donde puedan sembrar, agua, agua propia —río, manantial, pozo—, que tenga agua.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p17}
“Buscadme y viviréis decía, desechadme y moriréis. Es hora de clamar por la unción total del Espíritu Santo, pues si no lo recibes no podrás soportar la gran tempestad que se avecina. Entonces, habiendo dicho esto, ¿en qué otra cosa estaréis ocupados?”, dijo. “Procurad mi aprobación, con temor y temblor, para que en esta hora puedan vivir. Dejad a un lado el afán del mundo y procurad vuestra salvación, pues no hay en mi mudanza, y la hora final ya está avanzada. Temblad y no pequéis, meditad en vuestras camas, y callad, y confiad en Jehová. Estoy a la puerta y llamo, todo aquel cuya alma es recta, va a oír mi voz, mi voz, y va a entender. Sé, pues, vigilante,” me decía, “¡y apresúrate! Pues todo esto pasará, más mi Palabra, no pasará. Corre y di estas palabras para que mi deseo en ellos esté cumplido.” {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p18}
Entonces, terminó con estas palabras: “sé fiel hasta la muerte y Yo te daré la corona de la vida.” Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 10-10-2017 , es.p19}
Testimonio: 24-06-2018
Amados, junio 24, 2018. Estaba yo meditando en muchas cosas. Muchas cosas que el Señor me ha dicho, que me ha mostrado, muchas interrogantes de muchas personas, muchas cosas que están pasando a nivel mundial. En fin, estaba extasiada en todas estas cosas y rogándole al Señor, realmente, pidiéndole al Señor de todo corazón, por su pueblo. [Para] que cuide [a] su pueblo en la ancha faz de la tierra, [los] que están saliendo a las montañas, que están queriendo hacer la voluntad de Dios y que el enemigo está, de una manera u otra, ensañado con ellos para que no puedan lograr el objetivo que Dios quiere para cada uno de nosotros. {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p1}
Entonces, en ese momento, mientras estaba yo en todo esto, vino palabra de Dios a mí diciendo de esta manera: He aquí hablo al guía mayor de mi rebaño: lo has saqueado y te has llenado en tus manjares con su grosura, y en huesos y despojos le has dejado. No hay ninguno que guíes que no disfrute de tus grosuras y tus deleites. Ahora pues, ¿qué dirás, que es el inminente postrer día? Y, ¿de dónde te vendrá la misericordia si has usurpado mi lugar, en mi rebaño, y de tus deleites no te privaste, aunque veías la aflicción del rebaño? He aquí, Yo tomo el control de mi verdadero rebaño y a ninguna de ellas perderé, ni se descarrilará ninguna. La levadura de vuestro corazón minó vuestra mente y no hubo discernimiento entre lo santo y lo común. Fuego extraño entró en vuestras manos, fuego que Yo no conozco; y con él estáis mancillando mi rebaño”. {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p2}
“Hoy, (de) los que te siguen, [son] con envidias, calumnias, desagradecidos, sin afecto natural, pues estos están picados por la serpiente antigua. Sabed, pues, que Yo Jehová no cambio, y a cada uno daré su justo precio. ¡Apartaos de la inmundicia! Y acercaos a Mí con un corazón recto y humillado. Alzad manos limpias hacia Mí; buscadme mientras pueda ser hallado. ¿No veis cómo el mundo gime y convulsa a mi postrer llegada? ¿Acaso otros te dirán: “aún no es el tiempo señalado y la hora aún, ya, de su venida, no es”, y engañarás a tu corazón? Y, ¿traicionarás tu corazón creyendo tal falsedad? No hay generación que haya visto estas cosas que, dentro de sí, no sepa que el tiempo es, ya, casi cumplido. ¿Qué comerás y qué beberás? ¿Acaso vestirás de gala en guerra y dormirás al son de la bocina? Vivo Yo el Eterno, que no pasará mucho sin que el mundo vea al príncipe de pecado hacerse pasar por Dios y muchos, aún de los que me conocen, le adorarán pues amaron sus deleites más que a Mí. Pronto, mi pueblo estará listo y a una proclamarán el mensaje final. Y, cuando veas esto, tú que duermes, ¿tendrás tiempo de despertar? Vestíos de luto porque día grande y presuroso es el día de Jehová y pronto está, a las puertas. La tierra se estremece y gime, el mar brama y los cielos lo denuncian. ¿Acaso será que todos reconocen mi proximidad menos los seres pensantes? {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p3}
¡Ay del que busca excusa para seguir sus propios caminos y se burla del que, humildemente, me busca! Pues allí será el lloro y el crujir de dientes. Ten, en sobremanera, vergüenza de tu condición y arrepiéntete pues, si no, vendré contra ti y serás estopa en medio del sequedal”. {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p4}
“¡Jóvenes insensatos, que vais tras la vanidad del mundo! ¿no sabéis que el Santo de Israel pesa vuestros corazones? ¿A dónde escaparéis en el día de aflicción? ¿y qué ídolo vuestro será [vuestro] defensor?” {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p5}
“¡Mujeres insensatas, que vivís la vida sin desear al Amado de los amados!”
“¡Hombres, vivís deseando el fuego de la perdición y pensáis que este no os llegará! ¿Acaso seguir el consejo juvenil, y sus deseos, será vuestra escapatoria? ¿acaso estrechar los pechos adúlteros te ayudará? ¡Miserables sois con miseria vuestra, pues habéis elegido el camino de la perdición! Y, ¿quién te seguirá? El falto de entendimiento”, contestó, “y apartado de la verdad”. {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p6}
“Vendiste la verdad por precio; y, ¿de qué te servirá? ¿de qué te servirá perder la verdad por precio? ¿acaso a Judas le sirvió? ¿acaso a Ananías y a Safira les sirvió? He aquí Yo pongo ante ti la balanza y mido tu camino, ¿qué, pues, veré?” {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p7}
“El hombre insensato paga votos por su salvación más el justo descansa en Dios, su Dios, confiado. ‘Porque caerán a tu lado mil y diez mil a tu diestra más a ti no llegarán’, ‘más no así con los malos que los arrebata el viento, por tanto, no se levantarán los malos en el día del juicio’. Dices en tu corazón: ‘no veré mal sino bien’. Más, he aquí, Yo salgo a ti con escarnio por cuanto has puesto a un lado al Santo de Israel”. {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p8}
Terminó de decir estas palabras, amados, y me dijo: “Oseas 4:6-10”. Quiera Dios, quiera Dios, y es mi ruego y oración, que cada uno de nosotros escuchemos la voz de Dios antes de que sea demasiado tarde para todos. Que el Señor me los bendiga. {Daisy Escalante: 24-06-2018, es.p9}
Oseas 4:6-10
6 Mi pueblo fue destruido porque le faltó conocimiento. Porque tú desechaste el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus hijos.
7 Conforme a su grandeza así pecaron contra mí; [por tanto], cambiaré su honra en afrenta.
8 Comen del pecado de mi pueblo, y en su maldad levantan su alma.
9 Tal será el pueblo como el sacerdote: y visitaré sobre él sus caminos, y le pagaré conforme a sus obras.
10 Y comerán, mas no se saciarán; fornicarán, mas no se aumentarán; porque dejaron de escuchar a Jehová.
Testimonio: 08-10-2018
Amados, octubre 8 del 2018. Seguía yo preguntándole al Señor: Señor, ¿qué más? ¿qué más Tú quieres decir a tu pueblo en este congreso?” Y el Señor me dio otro título. No puedo decir que es más interesante que los anteriores, más es de mucha igual importancia porque todo lo que viene del Señor es sumamente importante y el título fue: “¿Quién rige tu vida frente a la línea de fuego?” Y me dijo: “si pues coméis o bebéis o hacéis otra cosa, hacedlo para gloria y honra de Dios. El Señor dice: “A la ley y al testimonio, si no dijeren conforme a esto, es porque no les ha amanecido. Pues el tal es mentiroso y no hay verdad en él. Sé pues celoso y arrepiéntete”. Me siguió diciendo que sólo hay dos potestades, una menor que otra. Todos tenemos el deber de decidir, si por la vida o vacilar, y automáticamente, tener la muerte. {Daisy Escalante: 08-10-2018, es.p1}
“Todos, muy pronto, estaremos poseídos permanentemente ya sea por Dios o por el enemigo, y no hay término medio”, me siguió diciendo, “¿cómo pues estáis tranquilos y pensáis que vosotros regís vuestra vida cuando estáis frente a una decisión de vida o muerte? ¿Acaso no comprendéis los tiempos? Mirad la tierra, temblando como ebrio, y el mar, desquiciado, y los gigantes, despertando. Humo, fuego y azufre, revoloteando. ¿Acaso no os hablé de estas cosas? Y, ¿cómo decís: ‘mi Señor tarda en venir’? ¡Oh, siervo malo, indolente! ¿Acaso tus esfuerzos te salvarán sin seguir el plan perfecto de Dios? ¿acaso podréis vencer con vuestro propio razonamiento? Ved mi estrategia, procurad por ella y vividla en gozo y agradecimiento, pues os digo que, en la batalla terrenal, unos, aunque se preparen, perecerán. Más en mi batalla, mi ejército: aquel que siga todas mis estrategias de guerra, oyendo Mi voz y poniéndola por obra, ninguno caerá a muerte y será más que vencedor. Estudiad, escudriñad, aprended, haced y viviréis. ¿Acaso un soldado, en su entrenamiento, puede vacilar y no estar concentrado en él? De cierto os digo que, si así fuere, ciertamente morirá. Elegid hoy a quien servir, pues el tiempo es cumplido”. {Daisy Escalante: 08-10-2018, es.p2}
Amados, el Señor aquí me habló de muchas cosas, me habló de las etapas que debemos pasar, y estar viviendo en el campo, todas las cosas que debemos estar haciendo para que Él pueda obrar una transformación en nosotros, para que así la preparación del carácter, que es lo más importante —porque es lo que realmente vamos a llevar al cielo—, esté listo. Me habló, también, de que debemos estar listos para el tiempo de no comprar y vender para que estemos próximamente listos para un derramamiento del Espíritu Santo, para que así podamos tener la investidura necesaria para dar el Fuerte Pregón. Y, por ende, amados hermanos, vendrán las plagas y con esto [se] desatará la persecución para los verdaderos hijos de Dios. Pero ya la cosecha estará lista, completa, y ya, entonces, Él será nuestro protector. Sus ángeles poderosos lucharán por nosotros. Él ya tiene su ejército listo en pro de las almas de los que van a ser salvos. {Daisy Escalante: 08-10-2018, es.p3}
Mientras estaba yo en todas estas cosas, extasiada, mientras Dios me estaba diciendo todo esto, me dio otro título para este congreso: “¿Podré ser salvo ante la línea de fuego?” Entonces me dijo: “¿podrán, los que pueden morir, soportar este gran mal? ¿acaso Acán no sabía lo que debía hacer? ¿acaso Elí midió su destino? ¡Ojalá pudieras ver y entender cuál es tu lugar para obtener la salvación! ¿Podrá algún mortal subsistir a la lucha final sin ayuda especial? No, de ninguna manera”, contestó. “Entonces, ¿por qué me desecháis siguiendo los deseos de vuestro engañoso corazón? ¿acaso vuestros estudios os salvarán? ¿acaso vuestro dinero será de ayuda? ¿Será que vuestros bienes os serán de garantía de vida? ¿dirá la leña al fuego: no me quemes? Sólo sobre una estricta observancia a mis órdenes será que podéis ser salvos. Mi yugo es ligero y liviano, mi carga también, más vosotros vais bajo vuestro propio razonamiento y éste os será de perdición. Las huestes invisibles”, me dijo, “están listas en batalla y mi trabajo está por acabar. ¿Cómo podéis osar demorarte en tus razonamientos y pensar que saldrás ileso? ¡Amadores de sí mismos más que de Dios, que no teméis hacer vuestros propios caminos que llevan a la perdición y teméis andar por el camino que lleva a la vida eterna! ¿Acaso dejaréis a vuestro hijo caminar entre serpientes y no le advertiréis? Más Yo os digo, que no sólo vuestro razonamiento os hará caminar entre serpientes, sino que éstas os matarán por cuanto la mano del Señor está extendida y no la quisisteis y su salvación no deseaste”. He hizo una pregunta: “¿será que tus deseos, que son como estopa, serán más que mis deseos de gloria eterna para ti?” Y contestó: “avanzad en mis caminos y viviréis y hallaréis descanso para vuestras almas. ¿Cómo osaréis salvar a vuestros hijos si vosotros mismos no deseáis los requerimientos de la salvación?”, —preguntó. “Yo dejé todo por vosotros, más vosotros me dais de lo que sobra. ¿Acaso Yo no soy tu Creador y Sustentador? Decís que sí, más no confías en Mí, solo confías en lo que hacen vuestras manos. Más Yo os digo que sólo podrá ser salvo en la línea de fuego el que en Mí confía”. {Daisy Escalante: 08-10-2018, es.p4}
Amados hermanos, esto fue tremendo para mi vida, por eso fielmente se los comparto, quiera Dios que puedan calar hondo en cada uno de nosotros y podamos decidirnos por el Señor. Que el Señor les bendiga. {Daisy Escalante: 08-10-2018, es.p5}
Testimonio: 07-06-2019
Amados, 7 de junio 2019. En sueños, yo veía cómo juntaban, de todos los rincones americanos, hombres para la guerra. Mientras yo observaba esto, dijo mi acompañante: “Ven y ve”. Vi cómo grandes cañones apuntaban a lugares donde había personas y construcciones altas y bajas. Vi mucha destrucción por doquier, vi una persona, una sola, que bajaba su mano, y a su señal, muchos cañones disparaban. Este hombre vestía de blanco y, aunque hablaba de paz y la conservación del ambiente en su estado lo más natural posible, éste daba la orden para que todos estos cañones dispararan y destruyeran todo a su paso. {Daisy Escalante: 07-06-2019 , es.p1}
Vi cómo muchos jóvenes y padres de familia estaban allí formando las filas de un ejército, que, a diferencia de los ejércitos anteriores, se me dejó saber era peculiar y único en toda la historia que anteriormente se conocía. Era una batalla contra ideas y principios, contra valores y dignidad, era una batalla, se me dejó saber, contra la justicia y la verdad. Esta guerra, que se revestía de apariencia de valor monetario y riqueza territorial, su objetivo era solidificar las ideas humanas bajo el estandarte opresivo de la bestia, su imagen y el falso profeta. {Daisy Escalante: 07-06-2019 , es.p2}
La destrucción era tal que no había forma humana, ni fuerza, para restaurar lo destruido. Se me dejó saber que este desastre no lo detendría ningún humano, y como una fiera feroz, hambrienta ante su presa, así será. Mientras observaba la desolación, en gran destrucción, vi cómo personas corrían a esconderse detrás de una pared, con gran temor. Sus ojos reflejaron espanto y les oí decir: “¡Dios, ayúdanos!” Pude ver de lo que se estaban escondiendo: era un cañón listo para disparar hacia ellos. La pared de cemento donde ellos se escondían era fuerte más no para parar dicho disparo. El disparo del cañón salió y, cuando se disponía a chocar, no lo hizo con la fuerza esperada y sólo estremeció un poco la pared. Entonces mis ojos se abrieron y vi cómo un ángel, con su mano, tocaba la pared que había sido impactada. {Daisy Escalante: 07-06-2019 , es.p3}
Nos ordenó salir de aquel lugar y salimos. Algo había en los aires, que sólo de respirar ya nos sentíamos enfermos. Corrimos hasta dejar atrás de nosotros el bitumol, la brea y el cemento. Y entramos a un bello campo verde, donde se nos ordenó recoger y comer. Vi que eran leguminosas tiernas, como habichuelas verdes, eran muy suaves y un poco dulces, con bastante fibra, y esto nos sostenía y sentíamos que la enfermedad se nos iba. Vi muchos jóvenes y adultos involucrados en esa infernal guerra de relación religiosa. Unas ansias de control mental repercutían por toda la tierra. Entonces dijo mi acompañante: “la dilación fue su caída. Ahora, la mortandad está aquí entre ellos. Formaron la idea de que era largo el plazo para concretar sus expectativas. Jugaron con el tiempo real por la imaginación de sus expectativas y no echaron a pensar que su tiempo era regido por el tiempo celestial. Sus oídos no escucharon la voz de alerta y sus deseos se interpusieron para su propia perdición y la perdición de otros”. {Daisy Escalante: 07-06-2019 , es.p4}
Entonces en ese momento me dijo: “ven y ve”. Fui a ver, vi a muchos, grandes y chicos, y me dijo: “pregúntales, ustedes, ¿son cristianos adventistas del séptimo día?” Entonces les pregunté, y todos contestaron afirmativamente. Entonces en ese momento escuché una voz muy fuerte surcar todo el firmamento que dijo: “¡apartaos de Mí, obradores de maldad!” Les dije a aquellos que hicieron la afirmación: “¡han pecado contra Dios!, ustedes no son pueblo de Dios. ¿Por qué no se humillaron mientras había tiempo?” Y ellos contestaron: “¡cállate loca, fanática! ¡Nosotros somos pueblo de Dios, y tú sólo hablas instigada por el enemigo, eres una alarmista! Eso sólo fue un fuerte trueno, y ¿qué dices? ¿que una voz habló?” Se mofaron, y continuaron con sus actividades sin echar a ver que su sentencia estaba echada. Dijo mi acompañante: “aléjate de ellos”. Me alejé, escuché un grito entre ellos, miré y vi cómo, espantados, se miraban unos a los otros por las enormes llagas que salían en todo su cuerpo. Amados, ¡eso fue terrible!, aquella escena. ¡Ya todo era irrevocable!, ya no existía esperanza para ellos y, en ese justo momento, lo supieron sin equivocación y sin retorno. Lloraron amargamente, suplicaron, más su voz no fue oída porque desecharon el consejo y sus pies caminaron en la iniquidad. {Daisy Escalante: 07-06-2019 , es.p5}
En este momento amados, ahí desperté y escuché la cita: “Romanos 4:8”. Que el Señor les bendiga. {Daisy Escalante: 07-06-2019 , es.p6}
Romanos 4:8
8 Bienaventurado el varón a quien el Señor no imputará pecado.
Testimonio: 01-02-2020 #03
01 de febrero 2020. Mientras meditaba en las cosas maravillosas que el Señor me enseñaba, mis ojos se fijaron en unas flores plásticas. Entonces, vino palabra de Dios a mí diciendo: “observa. No se marchitan, ni hay que echarles agua. Más de ellas no surge ningún cambio, al punto de que llega el momento en que te cansas sólo de observarlas. Y llega el momento [en] que las ignoras por completo al punto que pasas a su lado y tu vista ni las nota. Más la flor natural requiere de cuidados. Pero ella, con su aroma, cambios y majestad no puede ser ignorada, y cada mirada que le des te alegrará y te refrescará el alma. Decidid hoy qué queréis hacer.” {Daisy Escalante: 01-02-2020 #03, es.p1}
Palabra fiel y verdadera del Señor para cada uno de vosotros. {Daisy Escalante: 01-02-2020 #03, es.p2}
Testimonio: 03-04-2020
Amados, abril, 3, del 2020. Estudiando la vida del andar de Enoc con Dios, me llamaron la atención varias cosas que quiero compartir con ustedes. El Señor me movió a compartirlas, [pues] estos requerimientos son los que Él está pidiendo de cada uno de nosotros para poder tener, en Él, la misma oportunidad que tuvo Enoc. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p1}
Enoc vivía en el cumplimiento de los deberes de su vida diaria, ese era el andar de Enoc con Dios. No esquivéis vuestro deber. Él cumplía diariamente esos deberes en su vida. Era firme, era un constante siervo de Dios y, aunque se relacionaba con amigos, familiares, [y] otras personas, su fe, su firmeza, —[la] de un siervo de Dios—, era prominente en esto y no se doblegaba porque estaba al frente de familiares, amigos u otras personas. Era transparente, lo que él era lo era frente a sus amigos, familiares, y era, también, en [la] presencia de Dios de la misma manera. Dice allí que, también, su corazón estaba en armonía con la voluntad de Dios. Antes de que su hijo naciera, su primer hijo, y ya, luego de eso, por 300 años más, él comenzó a estar más en armonía con la voluntad de Dios, era una perseverancia y una convicción, amados, que es la que nosotros debemos tener hoy día, amados hermanos. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p2}
Dice que tenía una mente poderosa, bien cultivada, y profundo conocimiento. Y, ¿por qué esto? Porque las pequeñeces, esos detalles, ese cumplimiento de los deberes de su vida diaria, ese buscar a Dios, ese escudriñamiento de su Palabra, ese buscar al Señor para saber qué es lo que Dios requería de él, hacía que su mente recibiera contacto directo de las palabras del Señor, y, así, pudiera tener esta mente poderosa. Que, en el tiempo en que él estaba —no muy diferente al que vivimos nosotros hoy, de maldad, de pecado, de confusión—, hacían que este hombre de fe pudiera seguir hacia adelante, y fuera el señalado en su tiempo no como una persona de doble ánimo y de doblez de espíritu, sino como una persona firme en las cosas de Dios. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p3}
Dios, también a este hombre le había honrado con revelaciones especiales, porque cuando nosotros comenzamos a reflejar el carácter de Dios en nuestras vidas, el Señor comienza a comunicarse. Comienza, entonces, esa comunicación directa que el cielo siempre ha querido tener con sus hijos, pero que nosotros somos los primeros [en estorbar], porque nos gusta la conveniencia. No nos gusta un: “así dice Jehová” y cumplirlo como es. Siempre nos queremos ir por la tangente, los shorcuts, los atajos. Entonces, todas estas cosas nos desvían y nos apartan de escuchar la voz de Dios. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p4}
Enoc estaba en continua comunicación con el cielo, todo el tiempo: “Señor, mira lo que estoy haciendo”, “Señor, ¿así es como tú deseas?”, “Señor, si no es así, díctame”, “Señor, yo quiero hacer tu voluntad”, “Señor, yo no quiero hacer nada en este día que no te honre, que no sea lo que tú quieres para mí”. Y, ciertamente, una persona que es así, el cielo está en continua comunicación con esta persona. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p5}
Enoc reconocía constantemente la grandeza y la perfección divinas. Ciertamente Enoc, como Moisés, —y otros héroes más de la Biblia que encontramos en la Palabra de Dios—, Enoc, reconocía constantemente la grandeza de un Dios grande, omnisapiente, poderoso, soberano, que rige el universo entero y que, ciertamente, rige en este mundo. A pesar de todas las cosas que vemos, de tanta maldad, tanta confusión, en esta actualidad, con esta mortandad de esta pandemia, ciertamente el Señor está en control de todo y nada escapa a su ojo. Él reconocía eso, al igual que como nosotros también debemos reconocerlo, y reconocer su perfección divina. No podemos culpar al Señor de que nos estén pasando calamidades y situaciones difíciles si no hemos obedecido cabalmente la Palabra de Dios. Y si, aun, obedeciendo cabalmente la Palabra de Dios pasamos por aflicción —porque ciertamente tenemos que pasar por aflicción para que nuestro carácter llegue a la perfección que es en Cristo Jesús, como Él desea—, porque aún Él mismo estuvo en este mundo y pasó por situaciones muy difíciles, más difíciles de las que usted y yo hemos pasado hasta ahora en este mundo; ciertamente, si es cumpliendo la voluntad de Dios que pasamos dificultades, ciertamente, Él estará ahí con nosotros. Y no nos probará más de lo que podamos soportar. Y, como Él mismo prometió: “con la prueba, la salida”. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p6}
Otra cosa que me llamó la atención de Enoc, fue que reconocía su propia debilidad e imperfección. A veces tenemos una idea de nosotros mismos de que somos muy grandes, muy intelectuales, muy sabelotodo. Pero, ciertamente, cuando nos acercamos al Señor y vemos quién es Él y quiénes somos nosotros, nos damos cuenta que somos nada, y sabemos nada. Todos los días, este estado de grandeza, de querer pensar que nos lo sabemos todo, cada día, debe morir en nosotros. Ante la presencia de Dios somos nada, ciertamente. Y cada uno de nosotros tenemos que reconocer que somos tan imperfectos, que no podemos vivir ni un instante sin Dios y poder preservar la vida en este mundo. Ciertamente, satanás ha salido como león rugiente [redoblando] sus esfuerzos para destruir a todo aquel que vive con doblez de ánimo, a todo aquel que dice de la boca para afuera que quiere hacer la voluntad de Dios y que ama a Dios, pero sus actos dicen todo lo contrario. Aquel que pasa predicando acerca de la Palabra de Dios, pero su carácter demuestra todo lo contrario. Todo esto es doblez de espíritu. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p7}
Así que, amados hermanos, tenemos que pensar en todas estas cosas y más que, ¡nos estamos acercando a la Pascua del Señor! Tenemos una debilidad muy grande en nuestras vidas, y es de pensar que estamos bien porque estamos en el campo, porque hicimos nuestra cabaña, porque conseguimos un lugar [que] tiene todas las cualidades que el Señor nos ha dicho que debe tener el lugar: agua propia, casa pequeña, terreno amplio [para] que sembremos, todas estas cosas. Pero esto es preparatorio para aquí, para lo que ya lo estamos viendo que está encima, y aun lo que falta. Pero, el carácter, que es lo único que vamos a llevar al cielo, ¿qué está pasando? Tenemos que analizar esto, amados hermanos, a la luz de la Palabra de Dios, frente al espejo que el Señor, Cristo Jesús, nos pone a cada uno de vosotros. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p8}
Enoc gemía y clamaba por la maldad creciente de los impíos de su época, ciertamente los hijos de Dios, en esta época, debemos estar haciendo lo mismo. No decir: “estas cosas tenían que pasar”, “oh, mira lo que está pasando acá, allá”. No, sencillamente debemos llamar al pecado por su nombre, y clamar y gemir por estas situaciones, estas abominaciones que están pasando. [Por] el homosexualismo que está metido en las filas del que dice ser el pueblo de Dios, todas las cosas terribles que están pasando tras puertas escondidas de hombres, porque de Dios nadie se puede esconder. Amados hermanos, no nos engañemos, Dios no puede ser burlado, Dios nos ve transparentes, conoce nuestros motivos, conoce nuestros caminos, aun mientras estamos acostados, lo que estamos soñando, lo que estamos albergando en nuestro corazón, todo lo conoce, no podemos escondernos. El que vive en doble ánimo piensa que puede esconderse de Dios, piensa que por conveniencia ahora lo hace y ahorita se arrodilla y pide perdón. No, amados hermanos, eso no es así. Esto es por convicción, por elección. No obedecer a hombres sino obedecer a Dios. Si hay hombres que claman, hombres de renombre, que claman al pueblo: “¡todavía no es hora de salir, quédense! No”. “Aquí los necesitamos”. “No, no hagan caso, esas personas que se están yendo al campo, allá al monte, ¿qué van a hacer? Dios necesita gente que predique su Palabra”. Sí, es cierto que Dios necesita gente que predique su Palabra, pero como Dios mismo dijo: “esto se va a acabar por testimonio a todas las naciones, entonces vendrá el fin”. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p9}
¿Cómo podemos dar testimonio de aquello, amados hermanos, que no estamos viviendo? Analicemos, ¿nos salvan los hombres? Lamentablemente, no es así. ¿Murieron los hombres por nosotros? No, no murieron por nosotros; solamente Cristo Jesús murió por nosotros. Solamente Él estuvo entre nosotros y está en el cielo. Él es el único que nos puede salvar porque somos su creación y Él nos redimió, murió en la cruz del calvario, nos compró con su sangre, pero no por eso “una vez salvo, siempre salvos”. La salvación es condicional; y es condicional, amados, a la obediencia; si obedeciendo pasamos dificultades, ¿cómo será con los que no obedecen? Mi corazón tiembla, mis ojos ya no aguantan más lágrimas de ver lo que está pasando en el mundo, y la ambivalencia del que dice ser el pueblo de Dios, cegado, en cuatro paredes, con líderes opresores que todo el tiempo se pasan repitiendo lo mismo: “si se van a los campos se van a perder, no lo hagan, esas gentes están locas”. Amados hermanos, analicemos, pensemos, el Señor está llamando a su pueblo a salir, y a salir con prontitud, porque lo que estamos viendo es nada, nada, amados hermanos, en comparación a lo que viene; yo quisiera que alguno de ustedes pudiera, por lo menos, visualizar alguna de las cosas que el Señor me ha mostrado, ¡y es terrible”. Amados hermanos, muchos, ¡muchos!, decían: “¿por qué la hermana Daisy llora?” Amados, yo les quiero preguntar: “¿lo que está pasando en el mundo hoy no es para llorar?” Ciertamente el Señor ya me había mostrado muchas cosas de estas, y muchas más que faltan que son, aún, más graves que estas, amados hermanos, no hay palabras para explicar. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p10}
He tratado, en cada testimonio, cada revelación que el Señor me ha dado, cada sueño, de poder decir con mis propias palabras, con mi poco vocabulario, poder expresar; pero ahora ustedes están pudiendo ver y entender un poco el sufrimiento [que] uno puede experimentar cuando el Señor comienza a mostrar estas cosas, amados hermanos. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p11}
Enoc también evitaba el asociarse continuamente con los impíos. Amados, esto me recordó mucho a Lot y Abraham. Salieron, estaban juntos. De repente, pleitos entre ellos. [Esto] hizo que Lot decidiera por irse a la llanura, tanto fue así que se acercó más y más a Sodoma, hasta que entró. Él pensó como piensan muchos: “es que, entre ellos, ahí es donde ellos me necesitan, porque ahí es donde voy a clamar, ahí es donde les voy a decir, ahí es donde voy a poder ayudarlos para que salgan y se puedan salvar”. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p12}
Amados, ya el Señor nos dejó la historia escrita, para que nos diéramos cuenta que Lot, a duras penas, a duras penas, se pudo salvar él y sus dos hijas. Y con todo eso, la contaminación tan grande que había en sus hijas, las llevó a que ellas se acostaran con su padre y concibieran de él. Amados, no es entre ellos, no es entre el pecado, donde vamos a levantar Palabra del Señor para que ellos escuchen. Como le dijeron los sodomitas a Lot: “has llegado aquí y has sido cobijado por nosotros y ahora te crees juez de nosotros”. Amados, pensemos, ¡pensemos!, porque no queda mucho tiempo. Pensemos, porque ciertamente si no utilizamos nuestra mente, como el Señor dice que va por toda la tierra buscando a la gente pensante. Tenemos libre albedrío de decisión. No vamos a poder decir: “por culpa de aquel, por culpa de lo otro, porque no me lo dijeron desde el púlpito, o porque la organización no lo proclamó, por eso yo no lo hice, yo era bien obediente a todos ellos”. Amados, al único que le debemos lealtad es a Aquel que murió en la cruz del calvario por cada uno de vosotros. ¿Qué estamos haciendo? ¿qué rumbo estamos llevando en nuestras vidas? Ciertamente, cada jefe de familia, ya sea el padre que esté con la esposa y los hijos, o la madre que esté sola con sus hijos, ¿qué rumbo está llevando en su familia? Amados, esto es muy serio, lo que estamos viendo en el mundo hoy, si no nos alarma y no nos llama la atención, si no levanta una alerta en nuestra mente es porque realmente estamos en un estado tan dormido, amados hermanos, que tiemblo por esos hermanos que están así. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p13}
Amados, es bien importante que podamos analizar todas estas cosas, no es entre el pecado, peleando ahí la batalla, porque pues “hay que levantar voz, y hay que, y no se puede dejar esto así”, no. Dios no nos ha llamado a eso, amados hermanos. Dios está sacando un pueblo a las montañas para que se encuentre con Él; para que, a través de los ministros silenciosos, este carácter tan dañado que tenemos, Él pueda plasmar su carácter en cada uno de nosotros, amados hermanos, para que así podamos dar la talla. Para, entonces, poder tener la autoridad del cielo. Para poder tener autoridad, amados, con la vestidura de Cristo Jesús, y poder, entonces, hablar a aquellos cuando Dios nos lo autorice. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p14}
Amados, cuando Dios le daba mensaje a Enoc, entonces, él bajaba a dárselo al pueblo, pero bajaba con un miedo terrible, porque él decía: “Señor, líbrame de, cuando esté entre ellos, ofenderte en algo”. Sin embargo, nosotros nos codeamos día a día con el pecado, y pensamos que podemos salir ilesos, y que no nos vamos a contaminar. Amados, el pecado si no lo podemos ver cómo es, ¡es terrible para nuestras vidas!, porque el pecado nos aleja de Dios y nos acarrea la muerte. ¡El pecado es muerte, amados hermanos! Y un Dios tan justiciero, tan verdadero, cuando venga en las nubes de los cielos, dondequiera que haya pecado, su fuego consumidor va a exterminarlo, y si está entre nosotros este pecado, ciertamente seremos exterminados. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p15}
Amados hermanos, pensemos, analicemos, al Señor no le falta mucho por venir, pero ciertamente Él está preparando un pueblo. Enoc pasaba mucho tiempo en soledad, en meditación, en oración, amados. El Señor ha parado este mundo en esta cuarentena antes de la Pascua para que meditemos, para que estemos en soledad en nuestras casas con nuestras familias, y aquellos que vivimos en los campos pues tenemos un poquito más la bendición de que podemos salir en los predios de nuestra tierra, poder estar bajo un árbol meditando en la Palabra de Dios, entre los pajaritos, los animales, poder ver a la creación de Dios, estar más directamente integrados con el Dios de la naturaleza, con nuestro amado Creador. ¡Amados, Él está hablando, ciertamente, a su pueblo en esta hora! Si no nos podemos dar cuenta, ¡esto es muy triste! Yo oro, yo oro, amados hermanos, cada día, para que su pueblo pueda darse cuenta, especialmente los jóvenes que tienen tantas aspiraciones en este mundo, para que puedan darse cuenta que nada de lo que pueden aspirar aquí, ni de lo que pueden desear aquí, es [algo] en comparación a lo que Dios tiene preparado para ellos allá en la Patria Celestial. A veces me gustaría saber pintar, para poder, a lo mejor, poner en un cuadro, un poco de lo que he visto, de lo que el Señor me ha mostrado. Lamentablemente, no sé, pero pido al Señor que si esa es su voluntad me lo conceda, para que muchos puedan ver, y darse cuenta vagamente, con los materiales que tenemos aquí en este mundo, y lo que conocemos, poder visualizar un poco de las maravillas que el Señor tiene para cada uno de nosotros. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p16}
¡Es momento de oración, es momento de soledad, es momento de meditación, amados hermanos! No tomemos esto a la carrera, lo que está pasando en este mundo no es cosa de casualidad, ciertamente el enemigo, usando entidades humanas ha hecho todo esto, y no es nada en comparación a las cosas más que tiene planeadas hacer, especialmente a los que queremos ser fieles a Dios hasta el fin. Pero el Señor, ciertamente, dice que va a estar con sus hijos hasta el final del tiempo. Solamente, lo que tenemos [que hacer] es recorrer los caminos del Maestro, y, ciertamente, vamos a llegar a puerto seguro, agarrados de Él. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p17}
Enoc, así, buscaba ante el Señor un conocimiento más claro de su voluntad a fin de cumplirla. Y ésta debe ser nuestra búsqueda, amados hermanos. Hoy por hoy, día tras día, momento tras momento: “¿Señor, que tú quieres que yo haga?” Si el Señor nos dice algo, decir sinceramente: “¡oh, Señor! sí, es cansador, ¡ayúdame!”, “¡Oh Señor!, yo estaba esquivando eso porque no me gustaba de esa forma, pero si así es que tú quieres, así yo lo voy a hacer”, “¡oh, Señor, ayúdame porque no es fácil, mi cuerpo se niega, pero yo quiero hacer tu voluntad!” Seamos sinceros con el Señor, amados hermanos, porque antes de que abramos nuestra boca ya Él sabe lo que sentimos y lo que tenemos en nuestro corazón. Pero, ciertamente, eso es lo que Él busca, cuando realmente llegamos a una comunión con Dios, [a] ser amigos de ese Padre Celestial porque Él nos lo concede sin merecerlo, qué privilegio, amados hermanos, qué privilegio de que cada cosa que hacemos en nuestra vida Él nos pueda dirigir, y decirnos qué hacer y qué no hacer. ¿Cómo hacerlo? Que nosotros pensamos al principio que era tan difícil, pero sin embargo, cómo Él abre las puertas para que podamos caminar como caminó el pueblo de Israel a través de las aguas del Mar Rojo. Los milagros que el pueblo de Dios experimentará en estos días, y en los días subsiguientes, amados hermanos, son cosas maravillosas que solamente el cielo puede hacer; pero tenemos que buscar saber cuál es la voluntad de Dios, para querer de todo corazón cumplirla. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p18}
Para Enoc la oración era el aliento de su vida, y así debe ser para cada uno de nosotros, buscar al Señor en oración, hablar con Él como si fuera el aire que respiramos, amados hermanos. No hay nadie que pueda llegar al cielo sin practicar esto, sin hacer [de] esto un hábito en su vida, internalizarlo en la vida de nosotros, según necesitamos el aire para continuar, así, amados. La oración es vital para poder continuar en este mundo y ser vencedores en Cristo Jesús, amados. Por eso se dice que Enoc vivía en la atmósfera del cielo aquí en la tierra, y eso es lo que el Señor busca de cada uno de nosotros, amados hermanos. Yo espero en el Señor que cada uno de nosotros podamos entender esto, al igual que en la historia de Noé, grandes cosas maravillosas, que yo sé que todos los que la han leído en estos días han aprendido. Amados hermanos, busquemos al Señor como Él se lo merece, no sencillamente de palabras sino en hechos. Amados hermanos, quiera Dios que esto sea una realidad en la vida de cada uno de vosotros. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p19}
Y amados, es importante que en la vida de nosotros haya abnegación en vez de codicia, que haya sinceridad en vez de hipocresía, amados hermanos. Que haya misericordia en vez de crueldad, y que haya agradecimiento en vez de ingratitud. Ciertamente, si tenemos abnegación, sinceridad, misericordia y agradecimiento, vamos en camino seguro; pero si no, si es lo contrario y estamos en codicia, que es idolatría, en hipocresía, crueldad e ingratitud, tenemos el yo enaltecido. Y hasta que el yo no muera, Jesucristo no puede nacer en nuestras vidas, no podemos tener el carácter de Dios plasmado en nuestras vidas. ¿Qué importa lo que digan y lo que hagan con nosotros?, nosotros tenemos nuestra vida escondida detrás de Cristo Jesús y eso es lo único que importa. Lo único que importa es exaltar al Cordero y caminar tras sus pisadas. Amados hermanos, así, el yo comienza a morir, y el carácter de Cristo Jesús comienza a visualizarse y a crecer en nuestras vidas hasta que dejamos de ser nosotros y llega a ser Él en cada uno de nosotros. Recordemos el mensaje de la justificación por la fe, muy sencillo, por cierto: no vivo más yo, sino que vive Cristo en mí. Solamente la justicia de Cristo, imputada en mí, porque yo reflejo su carácter, es lo único que me garantiza a mí, y a cada uno de vosotros, la salvación de todas las cosas terribles en este mundo, y por sobre todo la salvación, la vida eterna en Cristo Jesús. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p20}
Quiera Dios que cada uno de nosotros en estos días que se avecinan de la Pascua, en la cena del Señor, amados, podamos encontrarnos ciertamente con Cristo Jesús, ya no más de palabras, sino tras sus pisadas caminar, y en hechos podamos decirle al mundo que: “ya no vivo más yo, sino que vive Cristo en mí”. El Señor nos bendiga a todos. {Daisy Escalante: 03-04-2020, es.p21}
Testimonio: 04-05-2020
4 de mayo, 2020. En sueños, iba caminando en una ciudad con muchas personas, y me paré a observar un cuerpo de agua que estaba allí cerca. Mientras observaba el agua vi como muchas burbujas que salían de él. Quedé allí pensando qué sería eso, cuando vi cómo, tres enormes ranas, salían de aquella agua. Éstas, abrieron su boca y, de ellas, cientos de ranas salieron y comenzaron a brincar encima de las personas. Les dije a muchos que corrieran conmigo a una esquina de la ciudad y que, por ahí, podríamos salir de ella. {Daisy Escalante: 04-05-2020, es.p1}
Algunos me hicieron caso y corrimos hacia el lugar. Las ranas brincaban por todos lados y encima de las personas. Pronto, todos los que corrimos hacia la orilla de la ciudad comenzamos a salir de ella, por un camino rural que allí se encontraba. Me paré en dicho camino y les exhortaba a avanzar. Unos avanzaron con toda su fuerza, otros con menos, y otros, con grandes quejas; más todos avanzaban. {Daisy Escalante: 04-05-2020, es.p2}
Pronto, un joven quedó atrás, y una rana lo alcanzó y le brincó en la frente. Corrí donde él y, con mi mano, cogí la rana para quitarla de su frente. Al tirar de ella el joven gritó y se agarró la frente. Vi cómo, al tirar de la rana, ésta se había fusionado con la frente del joven y la piel del joven se venía junto con la rana que le quitaba. Este comenzó a sangrar fuertemente hasta que cayó desmayado al piso por la gran pérdida de sangre. Mientras veía que este joven estaba allí, en el piso, su piel se cambió y se volvió del color de la rana. ¡Me desesperé, yo no sabía qué hacer! ¡Rogué a Dios por él! Entonces escuché estas palabras: “Mene Mene Tekel Uparsin”. Ahí desperté. {Daisy Escalante: 04-05-2020, es.p3}
¡Fue horrible presenciar esto, amados hermanos! ¡Cuidemos, velemos a la luz de la Santa Palabra de Dios, la transformación de nuestro ser! Porque, muy pronto, sólo habrá dos grupos, dos tipos de transformación: una a la semejanza de Dios y, otra, a la semejanza del padre de perdición. Quiera Dios que decidamos correctamente, y seamos transformados, con la ayuda de Dios, a su imagen y semejanza. Que el Señor nos bendiga. {Daisy Escalante: 04-05-2020, es.p4}